\id LUK \ide UTF-8 \h Lucas \toc3 Lc \toc2 Lucas \toc1 Evangelio según Lucas \mt Lucas \c 1 \s1 Introducción \p \v 1 Puesto que muchos han tratado de poner en orden un relato de las cosas completamente ciertas entre nosotros, \v 2 como nos las transmitieron los que desde el principio fueron testigos oculares y servidores de la Palabra, \v 3 a mí también me pareció bien, después de investigar con diligencia todas las cosas desde el principio, escribírtelas en orden, excelentísimo Teófilo, \v 4 para que conozcas exactamente la verdad con respecto a las cosas en las cuales fuiste instruido. \s1 Anuncio del nacimiento de Juan el Bautista \p \v 5 Hubo en los días de Herodes, rey de Judea, un sacerdote llamado Zacarías, de la clase de Abías. Su esposa Elisabet era de la descendencia de Aarón. \v 6 Ambos eran justos delante de Dios y vivían de manera irreprochable según todos los Mandamientos y Ordenanzas del Señor. \v 7 No tenían hijos, porque Elisabet era estéril, y ambos de edad avanzada. \p \v 8 Aconteció que al ministrar él como sacerdote delante de Dios, \v 9 en el turno de su clase de oficio sacerdotal, cuando entró en el Santuario del Señor, le cayó en suerte ofrecer una ofrenda de incienso. \v 10 Todo el pueblo hablaba con Dios afuera a la hora del incienso. \p \v 11 Entonces se le apareció en pie un ángel del Señor a \add la\add* derecha del altar del incienso. \v 12 Cuando Zacarías \add lo\add* vio se perturbó y se llenó de temor. \p \v 13 Pero el ángel le dijo: No temas, Zacarías, porque fue oída tu conversación con Dios. Tu esposa Elisabet te dará a luz un hijo y lo llamarás Juan. \v 14 Será para ti gozo y alegría, y muchos se regocijarán por su nacimiento, \v 15 porque será grande delante del Señor. No beberá vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aun desde el vientre de su madre. \v 16 Y muchos de los hijos de Israel volverán al Señor su Dios. \v 17 Éste irá delante del Señor con \add el \add*espíritu y poder de Elías, para volver corazones de padres a hijos, y de desobedientes a \add la \add*prudencia de \add los \add*justos, a fin de preparar un pueblo dispuesto para \add el\add* Señor. \p \v 18 Zacarías preguntó al ángel: ¿Cómo será esto? Porque yo y mi esposa somos ancianos. \p \v 19 Y el ángel le respondió: Yo soy Gabriel, el que está en la presencia de Dios, y fui enviado para hablar contigo y anunciarte estas Buenas Noticias. \v 20 Por cierto, quedarás mudo y no podrás hablar hasta el día cuando sucedan estas cosas, por cuanto no creíste mis palabras, las cuales se cumplirán a su debido tiempo. \p \v 21 El pueblo esperaba a Zacarías y extrañaba que demoraba en el Santuario. \v 22 Cuando salió no podía hablarles. Comprendieron que había tenido una visión en el Santuario, porque les hablaba por señas y continuaba mudo. \p \v 23 Aconteció que al cumplirse los días de su ministerio, fue a su casa. \v 24 Después de estos días, su esposa Elisabet concibió. Se recluyó cinco meses y decía: \v 25 Así hizo conmigo \add el\add* Señor en los días cuando me miró para quitarme una afrenta entre \add los\add* hombres. \s1 Anuncio del nacimiento de Jesús \p \v 26 El sexto mes Dios envió al ángel Gabriel a Nazaret de Galilea, \v 27 a una virgen comprometida con un hombre cuyo nombre era José, de la casa de David. El nombre de la virgen era María. \v 28 Cuando entró adonde estaba ella, dijo: ¡Regocíjate, muy favorecida! ¡El Señor está contigo! \p \v 29 Ella se turbó mucho por esta palabra y se preguntaba de qué clase sería esta salutación. \p \v 30 Pero el ángel le dijo: ¡No temas, María, porque hallaste gracia ante Dios! \v 31 Mira, concebirás y darás a luz un Hijo. Llamarás su Nombre Jesús. \v 32 Éste será grande y será llamado Hijo del Altísimo. \add El\add* Señor Dios le dará el trono de David su antepasado. \v 33 Reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin. \p \v 34 Entonces María preguntó al ángel: ¿Cómo será esto? Porque no me he unido a un hombre. \p \v 35 El ángel le respondió: \add El\add* Espíritu Santo vendrá sobre ti, y \add el\add* poder del Altísimo te hará sombra, por lo cual también el Santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios. \v 36 Y mira, tu parienta Elisabet también concibió un hijo en su vejez, y éste es \add el\add* sexto mes para la estéril. \v 37 Porque para Dios ninguna cosa es imposible.\f + \fr 1.37 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa no será imposible toda palabra.\fqa*\f* \p \v 38 Entonces María contestó: Aquí está la esclava del Señor. Que se haga conmigo según tu palabra. Y el ángel se retiró. \s1 El misterio de la piedad \p \v 39 En aquellos días, María fue de prisa a una ciudad en la región montañosa de Judá. \v 40 Entró en la casa de Zacarías y saludó a Elisabet. \p \v 41 Aconteció que cuando Elisabet oyó el saludo de María, la criatura saltó en su vientre, y Elisabet fue llena del Espíritu Santo. \v 42 Y exclamó a gran voz: ¡Bendita tú entre \add las\add* mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! \v 43 ¿Por qué se me \add concede\add* que venga a mí la madre de mi Señor? \v 44 Porque mira, cuando la voz de tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de regocijo en mi vientre. \v 45 ¡Inmensamente feliz\f + \fr 1.45 \fr*\ft Algunas versiones traducen \ft*\fqa bienaventurada.\fqa*\f* la que creyó que se cumplirán las cosas que se le dijeron de parte del Señor! \p \v 46 Entonces María exclamó: \q Mi alma engrandece al Señor, \q \v 47 Y mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador. \q \v 48 Porque miró la humilde condición de su esclava, \q Pues ciertamente desde ahora \q Todas las generaciones me llamarán inmensamente feliz. \q \v 49 Porque me concedió grandes cosas el Poderoso. \q ¡Santo es su Nombre! \q \v 50 Su misericordia es de generación a generación \q Para los que le temen. \q \v 51 Hizo proeza con su brazo. \q Esparció a los soberbios en la intención de su corazón. \q \v 52 Derribó de \add sus\add* tronos a los poderosos, \q Y exaltó a los humildes. \q \v 53 A los que tienen hambre colmó de bienes, \q Y a los ricos envió vacíos. \q \v 54 Al recordar \add su\add* misericordia \q Ayudó a Israel su esclavo, \q \v 55 Como habló a nuestros antepasados, \q A Abraham y a su descendencia para siempre. \p \v 56 María permaneció con ella como tres meses, y regresó a su casa. \s1 Nacimiento de Juan el Bautista \p \v 57 Entonces se le cumplió a Elisabet el tiempo del parto y dio a luz un hijo. \v 58 Sus vecinos y parientes oyeron que \add el\add* Señor engrandeció su misericordia, y se gozaban con ella. \p \v 59 Sucedió que al octavo día fueron a circuncidar al niño, y lo llamaban Zacarías, con el nombre de su padre. \v 60 Pero intervino su madre: ¡No, se llamará Juan! \p \v 61 Y le dijeron: Nadie hay de tu familia que tenga ese nombre. \p \v 62 Por señas le preguntaban a su padre cómo deseaba llamarlo. \v 63 Entonces él pidió una tablilla y escribió: Juan es su nombre. Y todos se asombraron. \v 64 Al instante fue abierta su boca, y su lengua hablaba y bendecía a Dios. \p \v 65 Hubo un temor en todos los que vivían alrededor de ellos, y en toda la región montañosa de Judea se comentaban todas estas cosas. \v 66 Todos los que \add las\add* oían \add las\add* tenían en su corazón y decían: ¿Quién, pues, será este niño? Porque \add la\add* mano del Señor ciertamente estaba con él. \p \v 67 Y su padre Zacarías fue lleno del Espíritu Santo y profetizó: \q \v 68 Bendito el Señor Dios de Israel, Quien visitó y redimió a su pueblo. \q \v 69 Nos levantó un Cuerno de salvación \q En \add la\add* casa de David su esclavo. \q \v 70 Como habló por boca de sus santos profetas, desde tiempo antiguo: \q \v 71 Salvación de nuestros enemigos \q Y de \add la\add* mano de todos los que nos aborrecen, \q \v 72 Para tener misericordia con nuestros antepasados \q Y recordar su santo Pacto. \q \v 73 El juramento que hizo a nuestro antepasado Abraham \q \v 74 De librarnos de mano de \add los\add* enemigos, \q Y concedernos que le sirvamos sin temor \q \v 75 En santidad y justicia delante de Él \q Todos nuestros días. \q \v 76 ¡Y tú, niño, serás llamado profeta del Altísimo! \q Porque irás delante del Señor \q Para preparar sus caminos \q \v 77 Y dar conocimiento de salvación \q Y perdón de pecados a su pueblo, \q \v 78 A causa de \add la\add* entrañable misericordia de nuestro Dios \q Con la cual la Aurora nos visitará desde \add lo\add* alto, \q \v 79 A fin de dar luz a los que viven en oscuridad y sombra de muerte, \q Y guiar nuestros pies hacia \add el\add* camino de paz. \p \v 80 Y el niño crecía y se fortalecía en espíritu, y estuvo en los lugares despoblados hasta \add el\add* día de su manifestación a Israel. \c 2 \s1 La Natividad \p \v 1 En aquellos días aconteció que salió un edicto de parte de César Augusto, para que se empadronara toda la tierra habitada. \v 2 Este primer censo se realizó cuando Cirenio era gobernador de Siria. \v 3 Todos iban a registrar\add se\add*, cada uno a su ciudad. \p \v 4 Por tanto José subió de \add la\add* ciudad de Nazaret de Galilea, a Belén, \add la\add* ciudad de David en Judea, porque él era de \add la\add* casa y familia de David, \v 5 para registrarse con su esposa María, la cual estaba embarazada. \p \v 6 Cuando estaban allí se cumplió el tiempo de su parto y \v 7 dio a luz a su Hijo primogénito. Lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en la pensión. \s1 Visto por los ángeles \p \v 8 Había pastores en aquella misma región que posaban a campo abierto y guardaban las vigilias de la noche sobre sus rebaños. \p \v 9 Un ángel del Señor les apareció y \add la\add* gloria del Señor los rodeó de resplandor. Se llenaron de un gran temor. \v 10 Pero el ángel les dijo: ¡No teman! Porque miren, les traigo Buenas Noticias de gran gozo que será para todo el pueblo. \v 11 ¡Hoy les nació en \add la\add* ciudad de David un Salvador, Quien es Cristo \add el\add* Señor! \v 12 Esto será para ustedes la señal: Hallarán a un Niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. \p \v 13 Repentinamente apareció con el ángel una multitud de la hueste celestial que alababa a Dios, y decía: \q \v 14 ¡Gloria a Dios en las alturas, \q Y en la tierra paz entre los hombres \q Sobre quienes reposa el favor de Dios! \p \v 15 Sucedió que cuando los ángeles partieron de ellos al cielo, los pastores se decían unos a otros: Vayamos, pues, hasta Belén. Veamos esto que sucedió y que el Señor nos manifestó. \p \v 16 Y salieron aprisa, fueron y hallaron a María y José, y al Niño acostado en el pesebre. \v 17 Cuando lo vieron, anunciaron lo que les fue dicho con respecto a este Niño. \v 18 Todos los que oyeron se asombraron de lo que los pastores les decían. \p \v 19 María guardaba todas estas cosas en su corazón y meditaba en ellas. \p \v 20 Los pastores regresaron. Glorificaban y alababan a Dios por todo lo que oyeron y vieron, como se les dijo. \p \v 21 Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidarlo, lo llamaron Jesús, nombre que le fue asignado por el ángel antes de que fuera concebido en el vientre. \s1 La presentación \p \v 22 Cuando se cumplieron los días de \add la\add* purificación de ellos, según la Ley de Moisés, lo llevaron a Jerusalén para presentarlo al Señor, \v 23 como está escrito en \add la\add* Ley del Señor: \m Todo varón que abre matriz se llamará santo para el Señor, \m \v 24 y para dar la ofrenda conforme a lo dicho en la Ley del Señor: \m Un par de tórtolas o dos palominos. \s1 Simeón \p \v 25 Estaba en Jerusalén un hombre justo y devoto llamado Simeón, quien esperaba \add la\add* consolación de Israel. \p \add El\add* Espíritu Santo estaba sobre él, \v 26 Quien le reveló que no moriría antes que viera al Cristo del Señor. \v 27 El Espíritu lo movió y fue al Templo. Cuando los padres introdujeron al Niño Jesús, para hacer ellos por Él según la costumbre de la Ley, \v 28 él también lo tomó en sus brazos. Bendijo a Dios: \q \v 29 Ahora, Soberano, despide a tu esclavo en paz, según tu Palabra. \q \v 30 Porque mis ojos vieron tu salvación, \q \v 31 La cual preparaste en presencia de todos los pueblos. \q \v 32 Luz para revelación a \add los\add* gentiles, \q Y gloria de tu pueblo Israel. \p \v 33 Su padre y su madre estaban maravillados de lo que se decía con respecto a Él. \p \v 34 Simeón los bendijo. Dijo a su madre María: Mira, Éste es designado para caída y levantada de muchos en Israel, y como una señal que tiene contradicción \v 35 para que sean descubiertos los pensamientos de muchos. Y una espada traspasará tu alma. \s1 Ana \p \v 36 Estaba allí la profetiza Ana, hija de Fanuel, de \add la\add* tribu de Aser. Ella vivió con \add su\add* esposo siete años desde su virginidad y era de edad avanzada. \v 37 Era viuda durante 84 años. No se alejaba del Templo y servía noche y día con ayunos y conversaciones con Dios. \v 38 Ella se presentó en ese momento. Daba gracias a Dios y hablaba del Niño a todos los que esperaban la redención de Jerusalén. \s1 Regreso a Nazaret \p \v 39 Cuando cumplieron todo según la Ley del Señor, regresaron a Nazaret de Galilea, su ciudad. \p \v 40 El Niño crecía y se fortalecía. Se llenaba de sabiduría y \add la\add* gracia de Dios estaba sobre Él. \p \v 41 Sus padres iban cada año a Jerusalén a la fiesta de \add la\add* Pascua. \p \v 42 Cuando cumplió 12 años, ellos subieron según la costumbre de la fiesta y \v 43 regresaron al terminar los días. El Niño Jesús se quedó en Jerusalén, y sus padres no \add lo\add* supieron. \v 44 Por tanto, como supusieron que estaba en la caravana, anduvieron un día y lo buscaban entre los familiares y los conocidos. \p \v 45 Pero al no hallarlo, regresaron a Jerusalén. \v 46 Tres días después lo hallaron en el Templo, sentado en medio de los maestros. Los oía y les preguntaba. \v 47 Todos los que \add lo\add* oían se asombraban de su inteligencia y de sus respuestas. \p \v 48 Al verlo, se asombraron, y su madre le dijo: Hijo, ¿por qué nos hiciste esto? ¡Considera, tu padre y yo te buscábamos angustiados! \p \v 49 Y les preguntó: \wj ¿Por qué me buscaban? ¿No sabían que me es necesario estar en las cosas de mi Padre?\wj* \v 50 Pero ellos no entendieron la respuesta que les dio. \p \v 51 Bajó con ellos a Nazaret, y estaba sujeto a ellos. Y su madre reflexionaba en todas estas cosas. \p \v 52 Jesús crecía en sabiduría, estatura y gracia hacia Dios y \add los\add* hombres. \c 3 \s1 Ministerio de Juan el Bautista \p \v 1 En el año decimoquinto del imperio de Tiberio César, cuando Poncio Pilato era gobernador de Judea, y Herodes tetrarca de Galilea, y su hermano Felipe tetrarca de Iturea y de la provincia de Traconite, y Lisanias tetrarca de Abilinia, \v 2 en \add el\add* tiempo del sumo sacerdocio de Anás y Caifás, la Palabra de Dios vino a Juan, hijo de Zacarías, en un lugar deshabitado. \p \v 3 Salió a toda \add la\add* región alrededor del Jordán a proclamar un bautismo de cambio de mente para perdón de pecados, \v 4 como está escrito en \add el\add* rollo del profeta Isaías: \m Voz que clama en el lugar despoblado: Preparen el camino del Señor. Enderecen sus sendas. \v 5 Todo valle será rellenado, y toda montaña y colina nivelada. Lo torcido se enderezará, y los caminos ásperos serán suavizados. \v 6 Y toda persona verá la salvación de Dios. \p \v 7 Decía a la multitud que salía para ser bautizada por él: ¡Generación de víboras! ¿Quién les enseñó a huir de la ira que viene? \v 8 Produzcan, pues, frutos dignos de cambio de mente, y no comiencen a decir dentro de ustedes: Tenemos al padre Abraham. Porque les digo que Dios puede levantar hijos a Abraham de estas piedras. \v 9 Además el hacha ya está puesta a la raíz de los árboles. Por tanto todo árbol que no produce buen fruto es cortado y echado al fuego. \p \v 10 Y la multitud le preguntaba: ¿Qué, pues, \add dices\add* que hagamos? \p \v 11 Les respondía: El que tiene dos mudas de ropa, dé al que no tiene, y el que tiene comida, haga del mismo modo. \p \v 12 Unos publicanos fueron a ser bautizados y le preguntaron: Maestro, ¿qué haremos? \p \v 13 Él les contestó: No cobren más de lo que se les mandó. \p \v 14 Le preguntaron también unos soldados: Y nosotros, ¿qué haremos? \p Y les respondió: A nadie extorsionen ni denuncien falsamente, y estén satisfechos con sus salarios. \p \v 15 Cuando el pueblo estaba a la expectativa y todos se preguntaban si tal vez Juan sería el Cristo, \v 16 Juan declaró a todos: Yo en verdad los bautizo con agua. Pero viene el más poderoso que yo, de Quien no soy digno de desatar la correa de sus sandalias. Él los bautizará con Espíritu Santo y fuego. \v 17 Su aventador está en su mano para limpiar su era y recoger el trigo en su granero, pero quemará la concha del grano con fuego inextinguible. \p \v 18 Así, con estas y otras muchas exhortaciones, proclamaba las Buenas Noticias al pueblo. \p \v 19 Entonces Herodes el tetrarca, al ser reprendido por él a causa de Herodías, la esposa de su hermano, y por todas las maldades que él hizo, \v 20 añadió a todas también esto: Encerró a Juan en la cárcel. \s1 El bautismo \p \v 21 Cuando todo el pueblo era bautizado, Jesús también fue bautizado. Habló con Dios y se abrió el cielo. \v 22 Descendió el Espíritu Santo sobre Él en forma corporal como una paloma, y hubo una voz del cielo: \wj Tú eres mi Hijo amado. En Ti me deleité.\wj* \s1 La genealogía \p \v 23 Cuando Jesús comenzó su ministerio tenía como 30 años. Era hijo, según se suponía, de José, de Elí, \v 24 de Matat, de Leví, de Melqui, de Jana, de José, \v 25 de Matatías, de Amós, de Nahúm, de Hesli, de Nagai, \v 26 de Maat, de Matatías, de Semei, de José, de Judá, \v 27 de Joanán, de Resa, de Zorobabel, de Salatiel, de Neri, \v 28 de Melqui, de Adi, de Cosam, de Elmodam, de Her, \v 29 de Josué, de Eliezer, de Jorim, de Matat, de Leví, \v 30 de Simeón, de Judá, de José, de Jonán, de Eliaquim, \v 31 de Melea, de Mainán, de Matata, de Natán, de David, \v 32 de Isaí, de Obed, de Booz, de Sala, de Naasón, \v 33 de Aminadab, de Admín, de Arní, de Esrom, de Fares, de Judá, \v 34 de Jacob, de Isaac, de Abraham, de Taré, de Nacor, \v 35 de Serug, de Ragau, de Peleg, de Heber, de Sala, \v 36 de Cainán, de Arfaxad, de Sem, de Noé, de Lamec, \v 37 de Matusalén, de Enoc, de Jared, de Mahalaleel, de Cainán, \v 38 de Enós, de Set, de Adán, de Dios. \c 4 \s1 La tentación \p \v 1 Jesús regresó del Jordán lleno del Espíritu Santo y fue impulsado por el Espíritu a una región deshabitada \v 2 por 40 días para que fuera tentado por el diablo. Nada comió en aquellos días. Cuando se acabaron tuvo hambre. \p \v 3 Entonces el diablo le dijo: Ya que eres Hijo de Dios, dí a esta piedra que se convierta en pan. \p \v 4 Jesús le respondió: \wj Está escrito:\wj* \m \wj No solo de pan vivirá el hombre.\wj* \p \v 5 Lo subió y le mostró en un momento todos los reinos de la tierra habitada. \v 6 Y el diablo le dijo: Te daré toda esta autoridad y el esplendor de ellos, pues me fue entregada, y a quien quiera se la doy. \v 7 Si Tú te postras ante mí, será toda tuya. \p \v 8 Jesús respondió: \wj Está escrito: \wj* \m \wj Ante el Señor tu Dios te postrarás y a Él solo servirás. \wj* \p \v 9 Entonces lo llevó a Jerusalén, lo puso en pie sobre el pináculo del Templo y le dijo: Ya que eres Hijo de Dios, lánzate de aquí abajo, \v 10 porque está escrito: \m A sus ángeles mandará para que te guarden. \p \v 11 Y: \m En \add las\add* manos te sostendrán para que tu pie no tropiece en piedra. \p \v 12 Jesús le respondió: \wj Está dicho:\wj* \m \wj No tentarás al Señor tu Dios. \wj* \p \v 13 Y cuando acabó toda tentación, el diablo se retiró de Él hasta un tiempo oportuno. \s1 El regreso a Galilea \p \v 14 Jesús regresó a Galilea con el poder del Espíritu, y \add la\add* noticia con respecto a Él salió por toda la región alrededor. \v 15 Enseñaba en las congregaciones de ellos y era alabado por todos. \s1 En Nazaret \p \v 16 Fue a Nazaret, donde fue criado. El día sábado entró en la congregación según la costumbre y se levantó a leer. \v 17 Se le dio un rollo del profeta Isaías. Lo desenvolvió y halló el lugar donde está escrito: \m \v 18 \wj \+add El\+add* Espíritu del Señor está sobre Mí, porque me ungió para anunciar Buenas Noticias a \+add los\+add* pobres. Me envió a proclamar libertad a cautivos, y restauración de vista a ciegos, a enviar en libertad a oprimidos,\wj* \v 19 \wj A proclamar el año aceptable del Señor.\wj* \p \v 20 Envolvió el rollo, lo devolvió al asistente y se sentó. Los ojos de todos en la congregación estaban fijos en Él. \v 21 Y les dijo: \wj Hoy se cumplió esta Escritura en sus oídos.\wj* \p \v 22 Todos daban testimonio de Él y se maravillaban de las palabras de gracia que salían de su boca. Se preguntaban: ¿No es Éste \add el\add* hijo de José? \p \v 23 Y les respondió: \wj Sin duda ustedes me dirán este refrán: Médico, cúrate a ti mismo. Todas las cosas que oímos que se hicieron en Cafarnaúm, hazlas también aquí en tu tierra.\wj* \p \v 24 \wj En verdad les digo que ningún profeta es bienvenido en su tierra.\wj* \v 25 \wj Ciertamente les digo que muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses, mientras hubo una gran hambruna en toda la tierra.\wj* \v 26 \wj Pero a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón.\wj* \v 27 \wj Muchos leprosos había en Israel en \+add el \+add*tiempo del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio.\wj* \p \v 28 Al oír esto todos en la congregación se llenaron de ira. \v 29 Se levantaron, lo sacaron fuera de la ciudad y lo llevaron para despeñarlo desde \add la\add* cumbre de la montaña sobre la cual fue edificada la ciudad de ellos. \p \v 30 Pero Él pasó por en medio de ellos y salió. \s1 En Cafarnaúm \p \v 31 Descendió a la ciudad de Cafarnaúm en Galilea y los sábados les enseñaba. \v 32 Se asombraban de su enseñanza, porque su Palabra era con autoridad. \p \v 33 En la congregación estaba un hombre que tenía un espíritu demoníaco impuro, quien clamó a gran voz: \v 34 ¡Ah! ¿Qué \add nos pasa\add* a nosotros y a Ti, Jesús nazareno? ¿Viniste a destruirnos? ¡Sé Quién eres: El Santo de Dios! \p \v 35 Jesús lo reprendió: \wj ¡Enmudece y sal de él!\wj* Y cuando lo lanzó en medio, sin hacerle daño el demonio salió de él. \p \v 36 Todos se asombraron y discutían entre ellos: ¿Qué Palabra es ésta, que con autoridad y poder manda a los espíritus impuros, y salen? \v 37 Su fama se difundía por todo lugar de la región circunvecina. \s1 La suegra de Pedro \p \v 38 Cuando salió de la congregación, entró en la casa de Simón. La suegra de Simón estaba atormentada por una gran fiebre y le rogaron por ella. \v 39 Se inclinó hacia ella, reprendió la fiebre y la sanó. De inmediato, se levantó y les servía. \s1 Sanidades al ocultarse el sol \p \v 40 Cuando el sol bajaba, todos los que tenían enfermos de diversas dolencias los llevaban a Él. Imponía las manos sobre cada uno de ellos y los sanaba. \v 41 También salían demonios de muchos que gritaban: ¡Tú eres el Hijo de Dios! Pero los reprendía y no les permitía hablar esto, porque sabían que Él era el Cristo. \p \v 42 Cuando amaneció, salió a un lugar solitario, pero la multitud lo buscaba. Fueron a Él y lo detenían para que no se alejara de ellos. \p \v 43 Pero Él les dijo: \wj Me es necesario proclamar las Buenas Noticias del reino de Dios también a las otras ciudades, pues para esto fui enviado.\wj* \v 44 Y predicaba en las congregaciones de Judea. \c 5 \s1 La pesca milagrosa \p \v 1 \add Jesús\add* estaba en pie junto al lago Genesaret. La multitud se agolpó alrededor de Él para oír la Palabra de Dios. \v 2 Entonces Él vio dos barcas a la orilla del lago y a los pescadores que lavaban las redes. \v 3 Jesús entró en la barca de Simón y le pidió que \add la\add* alejara un poco de la tierra. Luego se sentó y enseñaba a la multitud desde la barca. \p \v 4 Cuando terminó de hablar, le dijo a Simón: \wj Lleva la barca a la parte honda y echen abajo sus redes para pescar.\wj* \p \v 5 Simón respondió: Maestro, hemos trabajado toda \add la\add* noche y nada pescamos, pero en tu Palabra echaré las redes. \p \v 6 Cuando hizo esto, capturaron tantos peces que las redes se desgarraban. \v 7 Llamaron a los compañeros de la otra barca para que los ayudaran. Llegaron y llenaron ambas barcas de tal modo que comenzaban a hundirse. \p \v 8 Al ver \add esto Simón\add* se postró ante Jesús y exclamó: ¡Apártate de mí, Señor, porque soy un pecador! \v 9 Pues a causa de la gran pesca, un asombro lo dominó \add a él\add* y a sus compañeros, \v 10 así como a Jacobo y Juan, hijos de Zebedeo, socios de Simón. \p Pero Jesús \add le\add* dijo a Simón: \wj No temas. Desde ahora serás pescador de hombres.\wj* \p \v 11 Después de llevar las barcas a la tierra, dejaron todo y lo siguieron. \s1 Sanidad de un leproso \p \v 12 Cuando Él estaba en una ciudad vio a un leproso. Éste miró a Jesús, se postró y le rogó: Señor, si quieres, puedes limpiarme. \p \v 13 Extendió la mano, lo tocó y le dijo: \wj ¡Quiero, sé limpiado!\wj* Al instante la lepra desapareció. \v 14 Y \add Jesús\add* le mandó: \wj A nadie se lo digas, sino vé, preséntate al sacerdote y ofrece por tu purificación lo que Moisés ordenó como testimonio para ellos.\wj* \p \v 15 La fama de Él se difundía más que nunca. Una gran multitud se reunía para oírlo y ser sanados de sus enfermedades. \v 16 Pero Él \add se\add* retiraba a lugares solitarios y hablaba con Dios. \s1 Sanidad de un paralítico \p \v 17 Un día mientras Jesús enseñaba, unos fariseos y maestros de la Ley que habían llegado de Galilea, Judea y Jerusalén, se sentaron a su alrededor. Y \add el\add* poder sanador del Señor estaba con Él. \p \v 18 Unos hombres llevaban a un paralítico, y trataron de introducirlo y colocarlo ante Él. \v 19 Pero al no hallar como llevarlo adentro a causa del gentío, subieron a la azotea y lo descolgaron en la camilla a través de las losas para ubicarlo en el medio delante de Jesús. \p \v 20 Al ver la fe de ellos dijo: \wj ¡Hombre, tus pecados te fueron perdonados!\wj* \p \v 21 Los escribas y los fariseos razonaron: ¿Quién es Éste que habla blasfemias? ¿Quién puede perdonar pecados sino Dios? \p \v 22 Pero Jesús entendió lo que pensaban y les preguntó: \wj ¿Qué razonan ustedes en secreto?\wj* \v 23 \wj ¿Qué es más fácil? ¿Decir: Tus pecados te son perdonados? ¿O decir: Levántate y anda?\wj* \v 24 \wj Pues para que sepan que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados\wj* (dijo al paralítico): \wj Te digo: ¡Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa!\wj* \p \v 25 Al instante se levantó delante de ellos, tomó \add la camilla\add* en la cual estaba acostado, se fue a su casa y glorificaba a Dios. \p \v 26 Todos se asombraron. Glorificaban a Dios, se llenaron de temor y decían: ¡Hoy vimos maravillas! \s1 El publicano Leví \p \v 27 Después de esto, salió y vio al publicano Leví sentado en el lugar de los tributos, y le dijo: \wj ¡Sígueme!\wj* \v 28 Se levantó, lo dejó todo y lo seguía. \p \v 29 Leví le ofreció un banquete en su casa. Muchos publicanos y otros que estaban reclinados con ellos comían. \v 30 Los fariseos y escribas de ellos murmuraban contra los discípulos de Jesús: ¿Por qué \add ustedes\add* comen y beben con publicanos y pecadores? \p \v 31 Jesús les respondió: \wj Los sanos no necesitan médico, sino los enfermos.\wj* \v 32 \wj No vine a llamar a justos sino a pecadores para que cambien de mente.\wj* \s1 Vino añejo y vino nuevo \p \v 33 Ellos le dijeron: Los discípulos de Juan ayunan y hablan con Dios con frecuencia, pero los tuyos solo comen y beben. \p \v 34 Jesús les preguntó: \wj ¿Pueden ayunar los que atienden al novio mientras el novio está con ellos?\wj* \v 35 \wj Pero vendrán días cuando se les quitará el novio. En aquellos días ayunarán.\wj* \p \v 36 Les decía también una parábola: \wj Nadie corta un remiendo de un traje nuevo y \+add lo\+add* pone en un traje viejo. De lo contrario, no solo rasgará lo nuevo, sino no le quedará bien a lo viejo el remiendo procedente de lo nuevo.\wj* \v 37 \wj Nadie echa vino nuevo en odres viejos. De otra manera, el vino nuevo revienta los odres y se derrama, y los odres se pierden.\wj* \v 38 \wj Pero \+add el \+add* vino nuevo se echa en odres nuevos.\wj* \v 39 \wj Nadie que bebió añejo desea uno nuevo, porque sabe que el añejo es bueno.\wj* \c 6 \s1 Señor del sábado \p \v 1 Un sábado, Él pasó por los sembrados. Los discípulos arrancaban espigas, las restregaban con las manos y comían. \v 2 Y algunos de los fariseos dijeron: ¿Por qué hacen \add ustedes\add* lo que no es lícito los sábados? \p \v 3 Jesús les preguntó: \wj ¿Ni siquiera leyeron lo que hizo David cuando él y sus hombres tuvieron hambre?\wj* \v 4 \wj Él entró en la Casa de Dios y tomó los Panes de la Presentación, de los cuales no es lícito comer sino solo a los sacerdotes. Comió y dio a los que estaban con él.\wj* \v 5 \wj El Hijo del Hombre es Señor del sábado.\wj* \s1 Restauración de una mano paralizada \p \v 6 Otro sábado Él entró en la congregación a enseñar. Estaba allí un hombre que tenía \add la\add* mano derecha paralizada. \p \v 7 Los escribas y los fariseos lo observaban atentamente para ver si sanaba en sábado, a fin de hallar de qué acusarlo. \p \v 8 Pero Él sabía lo que pensaban y mandó al hombre que tenía la mano paralizada: \wj Levántate. Ponte en medio.\wj* \p Y se puso en pie. \p \v 9 Entonces Jesús les preguntó: \wj ¿Es lícito en sábado hacer el bien o el mal? ¿Salvar una vida o quitarla?\wj* \v 10 Al mirar a todos alrededor, dijo: \wj Extiende tu mano.\wj* \p El hombre lo hizo, y su mano fue restaurada. \p \v 11 Pero ellos se llenaron de ira y discutían qué hacer a Jesús. \s1 12 apóstoles \p \v 12 En aquellos días Él subió a la montaña para hablar con Dios, y pasó toda la noche en la conversación con Dios. \v 13 Cuando amaneció llamó a sus discípulos y escogió a 12 de ellos, a quienes llamó apóstoles: \v 14 a Simón, a quien llamó Pedro, a su hermano Andrés, también a Jacobo, Juan, Felipe, Bartolomé, \v 15 Mateo, Tomás, Jacobo, \add hijo\add* de Alfeo, Simón el Zelote, \v 16 Judas, \add hijo\add* de Jacobo, y Judas Iscariote el traidor. \s1 Enseñanzas y sanidades \p \v 17 Bajó con ellos y se detuvo en un lugar plano. \p Una multitud de sus discípulos y del pueblo de Judea, Jerusalén y de la región costera de Tiro y Sidón, \v 18 acudió a oírlo y para que los sanara. Y los atormentados por espíritus impuros también eran sanados. \v 19 Toda la multitud procuraba tocarlo, porque salía poder de Él y sanaba a todos. \s1 Los inmensamente felices \p \v 20 Al levantar sus ojos hacia sus discípulos, decía: \p \wj Inmensamente felices\wj*\f + \fr 6.20 \fr*\ft Algunas versiones traducen \ft*\fqa bienaventurados.\fqa*\f* \wj los pobres, porque de ustedes es el reino de Dios.\wj* \p \v 21 \wj Inmensamente felices los que ahora tienen hambre, porque serán saciados. \wj* \p \wj Inmensamente felices ustedes, los que ahora lloran, porque reirán.\wj* \p \v 22 \wj Inmensamente felices serán cuando los hombres los aborrezcan, cuando los excluyan, insulten y rechacen su nombre por causa del Hijo del Hombre.\wj* \p \v 23 \wj Ese día regocíjense y salten, porque su recompensa será grande en el cielo, pues sus antepasados trataban así a los profetas.\wj* \s1 Ayes \p \v 24 \wj Pero ¡ay de ustedes los ricos, porque \+add ya\+add* tienen su consuelo!\wj* \p \v 25 \wj ¡Ay de ustedes, los que están saciados, porque tendrán hambre! \wj* \p \wj ¡Ay de los que ahora ríen, porque lamentarán y llorarán!\wj* \p \v 26 \wj ¡Ay, cuando todos los hombres digan bien de ustedes, porque así hacían sus antepasados con los falsos profetas!\wj* \s1 La regla de oro \p \v 27 \wj Pero a ustedes quienes me oyen \+add les\+add* digo: Amen a sus enemigos, hagan bien a los que los aborrecen,\wj* \v 28 \wj bendigan a los que los maldicen, hablen con Dios a favor de los que los maltratan.\wj* \p \v 29 \wj Al que te golpea en la mejilla, preséntale también la otra, y al que te quita la ropa externa, no \+add le\+add* retengas la interna.\wj* \p \v 30 \wj A todo el que te pide dale, y al que te quite lo tuyo no \+add le\+add* reclames.\wj* \p \v 31 \wj Traten a los demás como desean que los traten a ustedes.\wj* \s1 El amor verdadero \p \v 32 \wj Pues si aman a los que los aman, ¿qué mérito tienen? ¡Aun los pecadores aman a los que los aman!\wj* \v 33 \wj Cuando hagan bien a los que les hacen bien, ¿qué mérito tienen? Los pecadores hacen lo mismo.\wj* \v 34 \wj Cuando presten a aquellos de quienes esperan recibir, ¿qué mérito tienen? Los pecadores también se prestan entre ellos para recibir la misma cantidad.\wj* \p \v 35 \wj Pero amen a sus enemigos y hagan bien. Presten sin esperar algo \+add a cambio\+add* y su galardón será grande. Serán hijos del Altísimo, porque Él es bondadoso con los ingratos y perversos.\wj* \p \v 36 \wj Sean misericordiosos como su Padre es misericordioso.\wj* \s1 La inconveniencia de juzgar \p \v 37 \wj No juzguen, y que de ningún modo sean juzgados. No condenen, y que de ningún modo sean condenados. Perdonen y serán perdonados.\wj* \p \v 38 \wj Den y recibirán: Medida buena, apretada, sacudida y rebosada darán en su regazo.\wj*\f + \fr 6.38 \fr*\ft Regazo. Parte de la ropa externa que iba desde la cintura hasta la rodilla, en la cual se medía y se llevaba cualquier alimento seco.\ft*\f* \wj Porque con \+add la\+add* medida que miden se les medirá.\wj* \p \v 39 También les dijo una parábola: \wj ¿Puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No se caerán ambos en un hoyo?\wj* \p \v 40 \wj Un discípulo no es superior a su maestro, pero aquél que recibe el adiestramiento será como su maestro.\wj* \p \v 41 \wj ¿Por qué miras la concha de grano en el ojo de tu hermano, pero no notas la viga que está en tu propio ojo?\wj* \v 42 \wj ¿Cómo puedes decir a tu hermano: Hermano, deja que saque la concha de grano que está en tu ojo, y tú mismo no ves la viga que está en el tuyo? ¡Hipócrita, saca primero la viga de tu ojo, y entonces verás bien para sacar la concha de grano que está en el ojo de tu hermano!\wj* \s1 Reconocimiento por el fruto \p \v 43 \wj No hay árbol bueno que produzca fruto malo, ni árbol malo que produzca fruto bueno.\wj* \v 44 \wj Cada árbol es conocido por su propio fruto. No recogen higos de espinos, ni cosechan uvas de una zarza.\wj* \p \v 45 \wj El hombre bueno del tesoro bueno del corazón saca lo bueno, y el malvado saca lo malvado, porque de \+add la\+add* abundancia del corazón habla su boca.\wj* \s1 Los dos cimientos \p \v 46 \wj ¿Por qué me llaman: Señor, Señor, y no hacen lo que digo?\wj* \v 47 \wj Les mostraré a quién es semejante todo el que viene a Mí, oye \+add mis\+add* Palabras y las practica.\wj* \p \v 48 \wj Es semejante a un hombre que edificó una casa. Excavó profundamente y puso un cimiento sobre la roca. Hubo una inundación, el torrente embistió contra aquella casa, pero no pudo sacudirla porque estaba bien fundada.\wj* \p \v 49 \wj Pero el que oye y no practica, es semejante a un hombre que edificó una casa sin cimiento sobre la tierra, contra la cual irrumpió el torrente. Inmediatamente colapsó, y fue grande la ruina de aquella casa.\wj* \c 7 \s1 El esclavo de un centurión \p \v 1 Cuando terminó sus palabras para el pueblo que lo escuchaba, entró en Cafarnaúm. \p \v 2 El esclavo de un centurión, a quien éste estimaba mucho, estaba enfermo cerca de la muerte. \v 3 Al oír con respecto a Jesús, le envió unos ancianos de los judíos para rogarle que fuera y sanara a su esclavo. \v 4 Cuando ellos se presentaron ante Jesús, le rogaban con insistencia: Es digno de que se le conceda esto, \v 5 porque ama a nuestra nación, y él mismo nos edificó la congregación judía. \p \v 6 Jesús iba con ellos. \p Pero al llegar cerca de la casa, el centurión envió unos amigos para decirle: Señor, no te molestes, porque no soy digno de que entres bajo mi techo. \v 7 Por lo cual, ni siquiera me consideré digno de ir a Ti, pero da \add la\add* orden, y mi esclavo sanará. \v 8 Porque aun yo soy hombre que está bajo autoridad. Tengo soldados bajo mi mando y digo a uno: Ve, y va. Y a otro: Ven, y viene. Y a mi esclavo: Haz esto, y \add lo\add* hace. \p \v 9 Al oír esto, Jesús lo admiró, y al dar la vuelta, dijo a la gente que lo seguía: \wj ¡Ni aun en Israel hallé una fe tan grande!\wj* \p \v 10 Cuando los enviados regresaron a la casa, hallaron al esclavo sano. \s1 Una viuda de Naín \p \v 11 Después fue con sus discípulos y una gran multitud a la ciudad de Naín. \v 12 Cuando llegó cerca de la puerta de la ciudad, ocurrió que llevaban afuera un difunto, hijo único de una viuda. Mucha gente la acompañaba. \p \v 13 Al verla el Señor se compadeció de ella y le dijo: \wj No llores.\wj* \v 14 Se acercó, tocó el féretro, y se detuvieron los que lo llevaban. Y dijo: \wj Joven, te digo: ¡Levántate!\wj* \p \v 15 El muerto \add se\add* levantó y habló. Y \add Jesús\add* lo entregó a su madre. \p \v 16 Un temor dominó a todos. Glorificaban a Dios y decían: ¡Un gran profeta se levantó entre nosotros! ¡Dios visitó a su pueblo! \v 17 Esta declaración con respecto a Él se difundió por toda Judea y la región circundante. \s1 Pregunta de Juan el Bautista \p \v 18 Los discípulos de Juan le informaron todas estas cosas. \v 19 Juan llamó a dos de sus discípulos y los envió al Señor para preguntarle: ¿Eres Tú el que vendría o esperamos a otro? \p \v 20 Cuando los hombres se presentaron ante Él, dijeron: Juan el Bautista nos envió a Ti y preguntó: ¿Eres Tú el que vendría o esperamos a otro? \p \v 21 En aquella hora sanó a muchos de enfermedades y dolencias, y de espíritus malignos. A muchos ciegos dio la vista. \p \v 22 Él les respondió: \wj Vayan, informen a Juan lo que vieron y oyeron: Ciegos ven, cojos andan, leprosos son limpiados, sordos oyen, muertos son resucitados, se dan las Buenas Noticias a los pobres.\wj* \v 23 \wj Inmensamente feliz el que no se conturbe por causa de Mí.\wj* \s1 El profeta más grande \p \v 24 Cuando salieron los mensajeros de Juan, preguntó a la multitud con respecto a él: \wj ¿Qué salieron a ver en el lugar despoblado? ¿Una caña sacudida por el viento?\wj* \v 25 \wj ¿Pero qué salieron a ver? ¿A un hombre vestido con ropas finas? Saben que los que tienen ropa espléndida y viven en deleites están en los palacios reales.\wj* \p \v 26 \wj ¿Pero qué salieron a ver? ¿A un profeta? Sí, les digo, y mucho más que un profeta.\wj* \v 27 \wj Éste es \+add aquél\+add* de quien está escrito:\wj* \m \wj Envío mi mensajero delante de Ti Quien aparejará tu camino. \wj* \p \v 28 \wj Les digo que entre los nacidos de mujeres, ninguno es mayor que Juan, pero el más pequeño en el reino de Dios es mayor que él.\wj* \p \v 29 Todo el pueblo y los publicanos que oyeron y fueron bautizados por Juan reconocieron la justicia de Dios. \v 30 Pero los fariseos y los doctores de la Ley rechazaron el plan de Dios para ellos al no ser bautizados por él. \p \v 31 \wj ¿A quién, pues, compararé los hombres de esta generación, y a quién son semejantes?\wj* \v 32 \wj Son semejantes a los muchachos que se sientan en una plaza y gritan unos a otros: ¡Les tocamos la flauta y ustedes no bailaron, entonamos una lamentación y no lloraron!\wj* \p \v 33 \wj Porque vino Juan el Bautista, que no comía pan ni bebía vino, y \+add ustedes\+add* dijeron: ¡Tiene demonio!\wj* \v 34 \wj Viene el Hijo del Hombre, Quien come y bebe, y dicen: ¡Ahí está un hombre comilón y bebedor de vino, amigo de publicanos y de pecadores!\wj* \p \v 35 \wj Pero la sabiduría es defendida por todos sus hijos.\wj* \s1 Un fariseo y una pecadora \p \v 36 Uno de los fariseos le rogaba que comiera con él. Al entrar en la casa del fariseo, se reclinó. \p \v 37 Ocurrió que una mujer que era pecadora en la ciudad, al saber que estaba reclinado en la casa del fariseo, llevó un alabastro lleno de perfume. \v 38 \add Se\add* postró detrás y lloraba a sus pies, los regaba con lágrimas, \add los\add* secaba con los cabellos de su cabeza, los besaba y \add los\add* ungía con perfume. \p \v 39 Cuando el fariseo que lo invitó vio esto, se decía: Éste, si fuera un profeta sabría quién y qué clase de mujer lo toca, porque es una pecadora. \p \v 40 Jesús le dijo: \wj Simón, tengo algo que decirte.\wj* \p Y él respondió: Dí, Maestro. \p \v 41 \wj Un acreedor tenía dos deudores: Uno \+add le\+add* debía 500 denarios,\wj*\f + \fr 7.41 \fr*\ft Denario: salario de un día.\ft*\f* \wj y el otro 50.\wj* \v 42 \wj Como ellos no tenían con qué pagar, perdonó a ambos. Dí, pues, ¿cuál de ellos lo amará más?\wj* \p \v 43 Simón respondió: Pienso que aquél a quien perdonó más. \p Él le dijo: \wj Juzgaste rectamente.\wj* \p \v 44 Se volvió hacia la mujer y dijo a Simón: \wj ¿Ves a esta mujer? Entré en tu casa. No me diste agua para mis pies, pero ella riega mis pies con sus lágrimas y \+add los\+add* seca con sus cabellos \wj* \v 45 \wj No me diste un beso, pero ella, desde que entré, no ha cesado de besar mis pies.\wj* \v 46 \wj No ungiste mi cabeza con aceite, pero ella ungió mis pies con perfume.\wj* \p \v 47 \wj Por lo cual te digo que sus muchos pecados \+add le\+add* fueron perdonados, porque amó mucho. Pero al que poco se le perdona, poco ama.\wj* \p \v 48 Y a ella \add le\add* dijo: \wj Los pecados te fueron perdonados.\wj* \p \v 49 Y los que estaban reclinados con Él se dijeron: ¿Quién es Éste para que perdone pecados? \p \v 50 Y Él \add le\add* dijo a la mujer: \wj Tu fe te salvó. Vé en paz.\wj* \c 8 \s1 Unas siervas del Señor \p \v 1 Él iba por ciudades y aldeas. Predicaba y proclamaba las Buenas Noticias del reino de Dios. Lo acompañaban los 12 \v 2 y algunas mujeres que habían sido sanadas de espíritus malignos y de enfermedades: María Magdalena, de quien habían salido siete demonios, \v 3 Juana, esposa de Chuza, mayordomo de Herodes, Susana y muchas otras que les servían de sus propiedades. \s1 Parábola del sembrador \p \v 4 Cuando se reunió una gran multitud que acudió a Él de cada ciudad, les habló por medio de una parábola. \p \v 5 \wj El sembrador salió a sembrar su semilla.\wj* \p \wj Una \+add parte\+add* cayó junto al camino, fue pisoteada, y las aves del cielo la comieron.\wj* \p \v 6 \wj Otra \+add parte\+add* cayó sobre la roca, y al brotar se secó por no tener humedad.\wj* \p \v 7 \wj Otra \+add parte\+add* cayó en medio de las espinas, y cuando creció juntamente con las espinas, la ahogaron.\wj* \p \v 8 \wj Otra \+add parte\+add* cayó en la buena tierra, y cuando creció, produjo fruto a ciento por uno.\wj* \p Al decir estas cosas, exclamaba: \wj ¡El que tiene oídos para oír, escuche!\wj* \p \v 9 Sus discípulos le preguntaban el significado de esta parábola. \p \v 10 Él contestó: \wj A ustedes les fue dado conocer los misterios del reino de Dios, pero a los demás, por parábolas, para que al ver no miren y al oír no entiendan.\wj* \p \v 11 \wj Esta es, pues, la parábola: La semilla es la Palabra de Dios.\wj* \p \v 12 \wj La parte que cayó junto al camino son los que oyeron. Luego viene el diablo y quita la Palabra de sus corazones para que no crean y sean salvos.\wj* \p \v 13 \wj La parte que cayó sobre la roca son los que, cuando oyen, reciben la Palabra con gozo, pero no tienen raíz. Creen por un tiempo, pero cuando llega la prueba \+add se\+add* apartan.\wj* \p \v 14 \wj La \+add parte\+add* que cayó entre las espinas son los que oyeron, pero al seguir su camino, son ahogados por preocupaciones, riquezas y placeres de la vida, y no producen fruto.\wj* \p \v 15 \wj Pero la \+add parte\+add* que cae en la buena tierra son los que oyeron la Palabra con corazón recto y bueno, y producen fruto con perseverancia.\wj* \s1 La imposibilidad de ocultar cosas \p \v 16 \wj El que enciende una lámpara no la cubre con una vasija ni \+add la\+add* mete debajo de la cama, sino la pone sobre un candelero para que los que entran tengan luz.\wj* \v 17 \wj Porque no hay secreto que no se revele, ni \+add algo\+add* escondido que de ningún modo sea conocido y salga a la luz.\wj* \p \v 18 \wj Consideren, pues, lo que oyen, porque al que tenga, le será dado, y al que no tenga, aun lo que supone tener le será quitado.\wj* \s1 La verdadera familia de Jesús \p \v 19 Entonces llegaron la madre y los hermanos de Jesús, pero no podían acercarse a Él por causa de la multitud. \v 20 Y le informaron: Tu madre y tus hermanos están afuera y desean verte. \p \v 21 Él respondió: \wj Mi madre y mis hermanos son los que oyen y practican la Palabra de Dios.\wj* \s1 Una tempestad \p \v 22 Un día Él entró en una barca con sus discípulos y les dijo: \wj Pasemos al otro lado del lago.\wj* Y salieron al mar. \p \v 23 Pero mientras navegaban, se quedó dormido. Una tempestad de viento descendió sobre el lago. Eran anegados y tenían peligro. \p \v 24 Entonces lo despertaron y le dijeron: ¡Maestro, Maestro! ¡Perecemos! \p Y Él reprendió el viento y las olas. Cesaron y hubo calma. \p \v 25 Les preguntó: \wj ¿Dónde está su fe?\wj* \p Atemorizados y asombrados, se preguntaban unos a otros: ¿Quién es Éste que aun manda a los vientos y al agua, y le obedecen? \s1 Un endemoniado geraseno \p \v 26 Navegaron hacia la región de los gerasenos, en la ribera opuesta a Galilea. \v 27 Llegaron a la tierra. \p De la ciudad les salió al encuentro un varón que tenía demonios, y por mucho tiempo no llevaba ropa ni vivía en una casa, sino entre las tumbas. \p \v 28 Cuando vio a Jesús, se postró ante Él y clamó con gran voz: ¿Qué tienes conmigo, Jesús, Hijo del Dios Altísimo? Te ruego que no me atormentes. \p \v 29 Porque mandaba al espíritu impuro que saliera del hombre, pues por mucho tiempo se había apoderado de él violentamente. Lo ataban con cadenas y grillos, y lo mantenían bajo guardia. Al romper las cadenas era impulsado por el demonio hacia los lugares desolados. \p \v 30 Jesús le preguntó: \wj ¿Cómo te llamas?\wj* \p Y él respondió: Legión, porque muchos demonios entraron en él. \v 31 Le rogaban que no los mandara al abismo. \p \v 32 Había allí una piara de muchos cerdos que eran atendidos en la colina. Y le rogaron que les permitiera entrar en ellos, y les permitió. \p \v 33 Entonces, al salir los demonios del hombre, entraron en los cerdos. La piara salió precipitada por el despeñadero al lago y se ahogó. \p \v 34 Al ver lo sucedido, los que cuidaban los cerdos huyeron e informaron en la ciudad y por las granjas. \p \v 35 Salieron a ver lo sucedido y fueron a Jesús. Hallaron al hombre de quien salieron los demonios vestido y en su juicio cabal, sentado a los pies de Jesús. Y se llenaron de temor. \p \v 36 Los que vieron les contaron cómo el endemoniado fue sanado. \p \v 37 Pero todos los de la región de los gerasenos le rogaron a Jesús que se fuera de su región, pues estaban atemorizados. \p Él entró en la barca y regresó. \p \v 38 El hombre de quien salieron los demonios le rogaba \add que le permitiera \add*estar con Él. \p Pero lo despidió y le dijo: \v 39 \wj Regresa a tu casa y anuncia cuán grandes cosas te hizo Dios.\wj* \p Salió y proclamaba por toda la ciudad las grandes cosas que Jesús le hizo. \s1 La hija de Jairo \p \v 40 Al regresar Jesús, la multitud le dio la bienvenida, pues todos lo esperaban. \p \v 41 Llegó un hombre llamado Jairo quien era un oficial de la congregación. Se postró a los pies de Jesús y le rogaba que fuera a su casa, \v 42 porque su única hija, como de 12 años, estaba a punto de morir. \p Cuando Él iba, la multitud lo apretujaba. \s1 Una mujer con flujo de sangre \p \v 43 Una mujer que había tenido flujo de sangre por 12 años, quien no pudo ser sanada por alguno, \v 44 se acercó por detrás y tocó el borde de la ropa de Jesús. De inmediato cesó su flujo de sangre. \p \v 45 Y Jesús preguntó: \wj ¿Quién me tocó?\wj* \p Y al negar todos, Pedro dijo: Maestro, la multitud te apretuja y te oprime. \p \v 46 Pero Jesús contestó: \wj Alguien me tocó, porque Yo comprendí que salió poder de Mí.\wj* \p \v 47 Entonces la mujer, cuando entendió que la había descubierto, fue temblorosa y se postró ante Él. Confesó delante de todo el pueblo por qué lo tocó, y que fue sanada al instante. \p \v 48 Entonces Él le dijo: \wj Hija, tu fe te sanó. Vé en paz.\wj* \p \v 49 Mientras Él aún hablaba, apareció uno de parte del oficial de la congregación quien dijo: Tu hija murió. Ya no molestes al Maestro. \p \v 50 Pero al oírlo, Jesús le dijo: \wj No temas. Solo cree y será sanada.\wj* \p \v 51 Al entrar en la casa, a ninguno permitió entrar con Él, sino a Pedro, Juan, Jacobo y los padres de la joven. \p \v 52 Todos lloraban y se lamentaban por ella. \p Pero Él dijo: \wj No lloren, porque no murió, sino duerme.\wj* \p \v 53 \add Como estaban \add*convencidos de que murió, se burlaban de Él. \p \v 54 Pero Él tomó la mano de la niña y clamó: \wj ¡Niña, levántate!\wj* \p \v 55 El espíritu volvió a ella, y en seguida \add se\add* levantó. \p \add Jesús\add* ordenó que se le diera de comer. \p \v 56 Los padres de la niña quedaron asombrados, pero Él les ordenó que a nadie dijeran lo sucedido. \c 9 \s1 Ministerio de los apóstoles \p \v 1 Convocó a los 12, y les dio poder y autoridad sobre todos los demonios y para sanar. \v 2 Los envió a proclamar el reino de Dios y a sanar. \p \v 3 También les dijo: \wj Nada tomen para el camino: ni bordón, ni mochila,\wj*\f + \fr 9.3 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa alforja.\fqa*\f* \wj ni pan, ni plata, ni usen doble ropa.\wj* \v 4 \wj A la casa donde lleguen, posen allí hasta que salgan de la ciudad.\wj* \v 5 \wj Donde no los reciban, al salir de allí sacudan el polvo de sus pies, como testimonio contra ellos.\wj* \p \v 6 Cuando salieron, recorrían una por una las aldeas, anunciaban las Buenas Noticias y sanaban por todas partes. \s1 Confusión de Herodes \p \v 7 Herodes el tetrarca supo todas las cosas que pasaban y estaba muy perplejo porque algunos decían: Juan resucitó. \p \v 8 Otros \add afirmaban\add*: ¡Elías apareció! Y otros: ¡Resucitó uno de los antiguos profetas! \p \v 9 Pero Herodes decía: Yo decapité a Juan. ¿Quién es Éste de quien oigo estas cosas? Y procuraba verlo. \s1 Una multiplicación de panes y peces \p \v 10 Al regresar los apóstoles le relataron todo lo que hicieron. \p Y \add Jesús\add* los tomó consigo y salió en privado a una ciudad llamada Betsaida. \p \v 11 Cuando la multitud se enteró, lo siguieron. \p Él los recibió, les hablaba del reino de Dios y sanaba a los enfermos. \p \v 12 El día comenzó a declinar. Los 12 \add se\add* acercaron y le dijeron: Despide a la multitud para que vayan a las aldeas y granjas de alrededor y busquen alojamiento y comida, porque aquí estamos en un lugar despoblado. \p \v 13 Pero les dijo: \wj Denles ustedes de comer.\wj* \p Ellos respondieron: No tenemos sino cinco panes y dos peces, a menos que nosotros vayamos y compremos comida para todo este pueblo. \v 14 Porque eran como 5.000 hombres. \p Entonces mandó a sus discípulos: \wj Que se reclinen en grupos de 50.\wj* \p \v 15 Así \add lo\add* hicieron y reclinaron a todos. \p \v 16 \add Él\add* tomó los cinco panes y los dos peces, miró al cielo y los bendijo. Partió en pedazos y daba a los discípulos para que los sirvieran a la multitud. \p \v 17 Todos comieron y se saciaron. \p Recogieron lo que les sobró: 12 cestos de pedazos. \s1 Confesión de Pedro \p \v 18 Un día, después que \add Jesús\add* hablaba a solas con Dios, los discípulos estaban con Él y les preguntó: \wj Según la gente, ¿Quién soy Yo?\wj* \p \v 19 Ellos respondieron: \add Unos\add*, Juan el Bautista. Otros, Elías. Otros, un profeta antiguo que resucitó. \p \v 20 Les preguntó: \wj ¿Y ustedes, quién dicen que soy?\wj* \p Y respondió Pedro: El Cristo de Dios. \s1 Un anuncio de su muerte y resurrección \p \v 21 Entonces Él les ordenó rigurosamente que a nadie hablaran de esto. \p \v 22 \wj El Hijo del Hombre tiene que padecer muchas cosas. Será rechazado por los ancianos, los principales sacerdotes y los escribas. Será ejecutado y será resucitado al tercer día.\wj* \p \v 23 Y decía a todos: \wj Si alguno quiere seguirme, niéguese a sí mismo, levante su cruz cada día y sígame.\wj* \v 24 \wj El que quiera salvar su vida, la perderá, y cualquiera que pierda su vida por causa de Mí, la salvará.\wj* \p \v 25 \wj ¿Qué beneficio obtiene el hombre si gana el mundo entero y se destruye o se pierde?\wj* \p \v 26 \wj Porque el que se avergüence de Mí y de mis Palabras, el Hijo del Hombre se avergonzará de él cuando venga en su gloria, \+add la\+add* del Padre y de los santos ángeles.\wj* \s1 Transfiguración \p \v 27 \wj En verdad les digo que algunos de los que están aquí, que de ningún modo sufran muerte hasta que vean el reino de Dios.\wj* \p \v 28 Unos ocho días después de estas palabras, \add Jesús \add*tomó a Pedro, Juan y Jacobo y subió a la montaña a hablar con Dios. \p \v 29 Mientras Él hablaba con Dios, su rostro cambió y su ropa se volvió blanca y resplandeciente. \v 30 Súbitamente aparecieron Moisés y Elías, dos varones quienes le hablaban. \v 31 Aparecieron en esplendor y hablaban de la partida de Él que iba a cumplir en Jerusalén. \p \v 32 Pedro y sus compañeros estaban cargados de sueño, pero al permanecer despiertos, vieron su gloria y a los dos varones que estaban con Él. \v 33 Cuando ellos se iban, Pedro, sin saber lo que expresaba, dijo a Jesús: Maestro, bueno es que nos quedemos aquí, y \add que\add* hagamos tres enramadas: una para Ti, una para Moisés y una para Elías. \p \v 34 Mientras él hablaba, apareció una nube que los cubría. Al entrar ellos en la nube, se atemorizaron. \p \v 35 De la nube salió una voz que decía: \wj ¡Este es mi Hijo escogido! ¡Escúchenlo a Él!\wj* \p \v 36 Al cesar la voz, Jesús estaba solo. Los discípulos callaron y en aquellos días a nadie dijeron lo que vieron. \s1 Liberación de un endemoniado \p \v 37 Al día siguiente cuando bajó de la montaña, una gran multitud le salió al encuentro, \v 38 y un hombre clamó: Maestro, te suplico que veas a mi hijo unigénito. \v 39 Porque un espíritu lo toma, de repente da alaridos, lo convulsiona, le hace daño y no se aparta de él. \v 40 Rogué a tus discípulos que lo echaran fuera, pero no pudieron. \p \v 41 Jesús respondió: \wj ¡Oh generación incrédula y depravada! ¿Hasta cuándo estaré con ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Trae acá a tu hijo.\wj* \p \v 42 Cuando él llegaba, el demonio lo tiró al suelo y lo convulsionó. \p Pero Jesús reprendió al espíritu impuro, sanó al muchacho y lo devolvió a su padre. \p \v 43 Todos estaban asombrados de la grandeza de Dios. \s1 Otro anuncio de su muerte \p Mientras admiraban las cosas que hacía, Jesús dijo a sus discípulos: \v 44 \wj Penetren estas Palabras en sus oídos. Porque el Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de hombres.\wj* \p \v 45 Pero ellos no entendían esta palabra pues les estaba encubierta para que no la entendieran, y temían preguntarle acerca de esto. \s1 El más grande \p \v 46 Entonces discutieron quién de ellos sería el más grande. \p \v 47 Pero Jesús entendió lo que pensaban. Tomó un niño, lo puso a su lado \v 48 y les dijo: \wj Cualquiera que recibe a este niño en mi Nombre, me recibe. Cualquiera que me recibe, recibe al que me envió. Porque el menor entre ustedes es el mayor.\wj* \s1 Otro que echaba fuera demonios \p \v 49 Juan dijo: Maestro, vimos a uno que echaba fuera demonios en tu Nombre. Le prohibimos, porque no sigue con nosotros. \p \v 50 Jesús le respondió: \wj No \+add le\+add* prohíban, porque el que no está contra ustedes, está a favor de ustedes.\wj* \s1 El paso por Samaria \p \v 51 Al cumplirse los días de su ascensión, Él afirmó su rostro para ir a Jerusalén. \v 52 Envió mensajeros delante de Él quienes fueron a una aldea de samaritanos a preparar \add hospedaje\add* para Él. \p \v 53 Pero no lo recibieron, porque entendieron que iba a Jerusalén. \p \v 54 Cuando los discípulos vieron \add esto,\add* Jacobo y Juan preguntaron: Señor, ¿quieres que ordenemos que descienda fuego del cielo que los consuma? \p \v 55 Entonces \add Él\add* dio la vuelta y los reprendió. \p \v 56 Y fueron a otra aldea. \p \v 57 Cuando iban por el camino, uno le dijo: Te seguiré adondequiera que vayas. \p \v 58 Jesús le respondió: \wj Las zorras tienen guaridas y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza.\wj* \p \v 59 Y dijo a otro: \wj ¡Sígueme!\wj* \p Pero él respondió: Permíteme primero que vaya \add a\add* enterrar a mi padre. \p \v 60 Le dijo: \wj Deja que los muertos entierren a sus muertos. Tú, ¡vé, proclama el reino de Dios!\wj* \p \v 61 Otro le dijo: Te seguiré, Señor, pero primero permíteme despedirme de los que están en mi casa. \p \v 62 Jesús contestó: \wj Ninguno que pone la mano en un arado y mira atrás, es apto para el reino de Dios.\wj* \c 10 \s1 70 enviados \p \v 1 Después de esto, el Señor designó a otros 70, a quienes envió de dos en dos a los lugares a donde Él pensaba ir. \p \v 2 Y les decía: \wj La cosecha en verdad es mucha, y los obreros pocos. Hablen, pues, con el Señor de la cosecha para que envíe obreros a su cosecha.\wj* \p \v 3 \wj ¡Vayan! Consideren que los envío como corderos en medio de lobos.\wj* \v 4 \wj No lleven bolsa de dinero, ni mochila, ni sandalias y a ninguno saluden en el camino.\wj* \p \v 5 \wj Cuando entren a una casa primeramente digan: ¡Paz sea a esta casa!\wj* \v 6 \wj Si vive ahí un hijo de paz, la paz de ustedes reposará sobre él, y si no, regresará a ustedes.\wj* \v 7 \wj Permanezcan en esa misma casa, coman y beban lo que les den, porque el obrero es digno de su salario. No vayan de casa en casa.\wj* \p \v 8 \wj En cualquier ciudad donde entren y los reciban, coman lo que les sirvan,\wj* \v 9 \wj sanen a los enfermos que estén allí y díganles: El reino de Dios se acercó a ustedes.\wj* \p \v 10 \wj Pero en cualquier ciudad donde entren y no los reciban, salgan a sus plazas y digan:\wj* \v 11 \wj Les sacudimos aun el polvo de su ciudad que se nos pegó a los pies. Pero sepan esto: El reino de Dios se acercó.\wj* \p \v 12 \wj Les digo que en el día del juicio será más tolerable \+add el juicio\+add* para Sodoma que para aquella ciudad.\wj* \s1 Maldiciones para Corazín, Betsaida y Cafarnaúm \p \v 13 \wj ¡Ay de ti, Corazín! ¡Ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y Sidón se hubieran hecho los milagros que se hicieron en ustedes, hace tiempo habrían cambiado de mente, sentadas en tela áspera y ceniza.\wj* \v 14 \wj Por tanto el juicio será más tolerable para Tiro y Sidón que para ustedes.\wj* \p \v 15 \wj Y tú, Cafarnaúm, ¿serás exaltada hasta el cielo? ¡Hasta el infierno\wj*\f + \fr 10.15 \fr*\ft Lit. \+tl Hades\+tl* \ft*\f* \wj te hundirás!\wj* \p \v 16 \wj El que los oye a ustedes, me oye. El que los rechaza, me rechaza. El que me rechaza, rechaza al que me envió.\wj* \s1 Regreso de los 70 \p \v 17 Los 70 regresaron con gozo y decían: Señor, aun los demonios se nos someten en tu Nombre. \p \v 18 Les dijo: \wj \+add Yo\+add* veía a Satanás que cayó del cielo como un rayo.\wj* \v 19 \wj Recuerden que les di potestad de pisar serpientes y escorpiones y sobre todo el poder del enemigo, y que de ningún modo algo les haga daño.\wj* \v 20 \wj Pero no se regocijen por esto, que los espíritus se les sometan, sino regocíjense porque sus nombres están inscritos en los cielos.\wj* \s1 Alabanza por los niños \p \v 21 En aquella misma hora \add se\add* regocijó muchísimo en el Espíritu Santo y dijo: \wj Te alabo, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de sabios e inteligentes y las revelaste a niños. Sí, Padre, porque así te agradó.\wj* \v 22 \wj Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre. Nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre, ni quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera revelarse.\wj* \p \v 23 Al dar la vuelta hacia los discípulos en privado, les dijo: \wj Inmensamente felices los ojos que ven lo que \+add ustedes\+add* ven,\wj* \v 24 \wj porque les digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que ustedes ven, y no \+add lo\+add* vieron, y oír lo que escuchan, y no \+add lo\+add* escucharon.\wj* \s1 Relato sobre el buen samaritano \p \v 25 De repente un doctor de la Ley apareció para probarlo y preguntó: Maestro, ¿qué haré para heredar \add la\add* vida eterna? \p \v 26 \add Jesús\add* le preguntó: \wj ¿Qué está escrito en la Ley? ¿Cómo lees?\wj* \p \v 27 Él contestó: \m Amarás al Señor \add tu\add* Dios de todo corazón, con toda \add tu\add* alma, con todas \add tus\add* fuerzas, con todo \add tu\add* entendimiento, y a \add tu\add* prójimo como a \add ti\add* mismo. \p \v 28 Le dijo: \wj Respondiste correctamente. Haz esto y vivirás.\wj* \p \v 29 Pero él para justificarse preguntó a Jesús: ¿Quién es mi prójimo? \p \v 30 Jesús le respondió: \wj Un hombre bajaba de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de salteadores. Lo \+add desnudaron, lo\+add* golpearon, \+add lo\+add* dejaron medio muerto y huyeron.\wj* \v 31 \wj Un sacerdote bajaba por aquel camino y al verlo, pasó por el lado opuesto.\wj* \v 32 \wj Un levita llegó al lugar y cuando lo vio también pasó por el otro lado.\wj* \p \v 33 \wj Pero un samaritano que viajaba, pasó cerca de él. Lo vio y fue movido a compasión.\wj* \v 34 \wj Se acercó, le vendó las heridas, les derramó aceite y vino, y lo puso sobre su propia cabalgadura. Lo llevó a un hospedaje y cuidó de él.\wj* \v 35 \wj Cuando salió el día siguiente le dio dos denarios al hospedador y \+add le\+add* dijo: Cuídalo, y lo que gastes de más, yo te lo pagaré cuando regrese.\wj* \v 36 \wj ¿Quién de estos tres te parece que fue prójimo del que cayó entre los salteadores?\wj* \p \v 37 Y él contestó: El que hizo la misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: \wj Vé y haz tú lo mismo.\wj* \s1 En casa de Marta y María \p \v 38 Al proseguir ellos, Él entró a una aldea y una mujer llamada Marta lo hospedó. \p \v 39 Ésta tenía una hermana llamada María, que escuchaba la Palabra sentada a los pies del Señor. \v 40 Pero Marta, quien estaba atareada con muchos quehaceres, se acercó a Él y le dijo: Señor, ¿No te preocupa que mi hermana me dejó servir sola? Dile que me ayude. \p \v 41 Entonces el Señor le respondió: \wj Marta, Marta, estás afanada y distraída en muchas cosas,\wj* \v 42 \wj pero solo una es necesaria. María escogió la buena parte, la cual no se le quitará.\wj* \c 11 \s1 Cómo hablar con Dios \p \v 1 Cuando Él terminó de hablar con Dios en un lugar, uno de sus discípulos le dijo: Señor, enséñanos a hablar con Dios, como Juan enseñó a sus discípulos. \p \v 2 Les contestó: \wj Cuando hablen con Dios, digan: Padre, santificado sea tu Nombre. Venga tu reino.\wj* \v 3 \wj Danos hoy nuestro pan de cada día.\wj* \v 4 \wj Perdónanos nuestros pecados porque también nosotros \+add ya\+add* perdonamos\wj*\f + \fr 11.4 \fr*\ft En castellano, perdonamos es igual en presente y en pretérito indefinido. En el original está en pretérito indefinido.\ft*\f* \wj a todo el que nos debe, y no nos metas en prueba.\wj* \p \v 5 También les dijo: \wj ¿Quién de ustedes tiene un amigo, y va a él a media noche y le dice: Amigo, préstame tres panes,\wj* \v 6 \wj porque un amigo me llegó de camino, y no tengo qué servirle?\wj* \v 7 \wj Y aquél responde desde adentro: No me molestes. Ya cerré la puerta y mis niños están conmigo en la cama. No puedo levantarme y darte.\wj* \v 8 \wj Les digo que, si no \+add se\+add* levanta \+add y\+add* le da \+add lo que pide\+add* por ser su amigo, por su importunidad, se levanta y le da todo lo que necesite.\wj* \p \v 9 \wj Yo les digo: Pidan y se les dará, busquen y hallarán, llamen a la puerta y se les abrirá.\wj* \v 10 \wj Porque todo el que pide, recibe, y el que busca, halla, y al que llama a la puerta, se le abre.\wj* \p \v 11 \wj ¿A cuál de ustedes \+add que es\+add* padre, \+add si\+add* su hijo \+add le\+add* pide un pescado, le da una serpiente?\wj* \v 12 \wj O si pide un huevo, ¿le da un escorpión?\wj* \v 13 \wj Pues si ustedes, que son malos, saben dar buenos regalos a sus hijos, ¡Cuánto más el Padre celestial dará \+add el\+add* Espíritu Santo a los que lo piden!\wj* \s1 La casa dividida \p \v 14 \add Jesús\add* echó fuera un demonio mudo. \p Al salir el demonio, el mudo habló, y la multitud quedó asombrada. \p \v 15 Pero algunos dijeron: Echa fuera los demonios por Beelzebul, el demonio principal. \v 16 Otros demandaban de Él una señal del cielo para probarlo. \p \v 17 Pero Él conocía los pensamientos de ellos y les dijo: \wj Todo reino dividido contra él mismo es asolado y se derrumba.\wj* \v 18 \wj Si Satanás se dividió contra él mismo, ¿cómo se sostendrá su reino? Pues ustedes dicen que por Beelzebul Yo echo fuera los demonios.\wj* \v 19 \wj Si Yo echo fuera los demonios por Beelzebul, ¿sus hijos por quién los echan fuera? Por esto, ellos los juzgarán a ustedes.\wj* \v 20 \wj Pero si echo fuera los demonios con el dedo de Dios, entonces el reino de Dios vino a ustedes.\wj* \p \v 21 \wj Cuando el fuerte completamente armado custodia su casa, su propiedad está segura.\wj* \v 22 \wj Pero cuando llega uno más fuerte que él y lo vence, \+add le\+add* quita su armadura en la cual confiaba y reparte sus despojos.\wj* \p \v 23 \wj El que no está conmigo, está contra Mí, y el que no recoge conmigo, desparrama.\wj* \s1 Lo que hace el espíritu impuro \p \v 24 \wj Cuando el espíritu impuro sale del hombre, va por lugares secos y busca reposo. Al no hallarlo, dice: Regresaré a mi casa de donde salí.\wj* \v 25 \wj Cuando regresa \+add la\+add* halla barrida y ordenada.\wj* \v 26 \wj Entonces va y toma consigo otros siete espíritus peores que él, entran y habitan allí. Las últimas cosas de aquel hombre son peores que las primeras.\wj* \s1 Quiénes son inmensamente felices \p \v 27 Cuando Él hablaba estas cosas, una mujer de la multitud exclamó: ¡Inmensamente feliz el vientre que te llevó y los pechos que mamaste! \p \v 28 Pero Él replicó: \wj Más inmensamente felices son los que oyen y guardan la Palabra de Dios.\wj* \s1 Demanda de una señal \p \v 29 Mientras se aglomeraba la multitud, Él dijo: \wj Esta generación es perversa. Busca una señal, pero solo se le dará la señal de Jonás.\wj* \v 30 \wj Porque como Jonás fue una señal para los ninivitas, así también será el Hijo del Hombre para esta generación.\wj* \v 31 \wj Una reina del Sur se levantará en el juicio contra los varones de esta generación y los condenará, porque vino de los confines de la tierra a oír la sabiduría de Salomón, y aquí está Uno mayor que Salomón.\wj* \v 32 \wj Unos varones ninivitas se levantarán en el juicio contra esta generación y la condenarán, porque cambiaron de mente por la predicación de Jonás, y aquí está Uno mayor que Jonás.\wj* \s1 Ojo bueno y ojo malo \p \v 33 \wj Nadie que enciende una lámpara la pone en un lugar oculto, o debajo de una caja para medir granos, sino sobre el candelero para que los que entran vean la luz.\wj* \v 34 \wj La lámpara del cuerpo es tu ojo. Cuando tu ojo esté bien, todo tu cuerpo estará iluminado, pero cuando esté mal tu cuerpo estará oscuro.\wj* \v 35 \wj Ten cuidado, pues, no sea que la luz que hay en ti sea oscuridad.\wj* \v 36 \wj Así que, si todo tu cuerpo está iluminado y no tiene ninguna parte oscura, todo será luminoso, como cuando una lámpara te ilumina con \+add su\+add* fulgor.\wj* \s1 Censura a escribas y fariseos \p \v 37 Mientras hablaba, un fariseo le rogó que comiera con él. Entró y se reclinó. \v 38 Pero cuando el fariseo lo observó, admiró que no se purificó antes de la comida. \p \v 39 Y el Señor le dijo: \wj Ustedes los fariseos limpian lo de fuera del vaso o del plato, pero lo de dentro de ustedes está lleno de robo y perversidad.\wj* \v 40 \wj Insensatos, el que hizo lo de afuera, ¿no hizo también lo de adentro?\wj* \v 41 \wj Más bien den de lo que está adentro como obra de caridad y entonces todo les será limpio.\wj* \p \v 42 \wj Pero ¡ay de ustedes, los fariseos! Porque diezman la menta, la ruda y toda hortaliza, pero pasan por alto la justicia y el amor de Dios. Era necesario practicar esto sin descuidar aquello.\wj* \v 43 \wj ¡Ay de ustedes, los fariseos! Porque aman el puesto de honor en las congregaciones y las salutaciones en las plazas.\wj* \v 44 \wj ¡Ay de ustedes! Porque son como los sepulcros que no se ven y los hombres que caminan encima no \+add lo\+add* saben.\wj* \p \v 45 Entonces uno de los doctores de la Ley le respondió: Maestro, al decir estas cosas también nos ofendes a nosotros. \p \v 46 Y Él contestó: \wj ¡Ay de ustedes, los doctores de la Ley! Porque abruman a los hombres con cargas difíciles de llevar, pero ustedes ni siquiera las tocan con uno de sus dedos.\wj* \v 47 \wj ¡Ay de ustedes! Porque construyen sepulcros a los profetas que sus antepasados mataron.\wj* \v 48 \wj Así que son testigos y consentidores de las obras de sus antepasados. Porque ciertamente ellos los mataron, y ustedes edifican \+add sus sepulcros\+add*.\wj* \p \v 49 \wj Por esto también la sabiduría de Dios dijo: Les enviaré profetas y apóstoles. Matarán y perseguirán a algunos de ellos,\wj* \v 50 \wj para que la sangre derramada de todos los profetas desde la creación del mundo se demande de esta generación,\wj* \v 51 \wj desde \+add la\+add* sangre de Abel hasta \+add la\+add* sangre de Zacarías, quien fue asesinado entre el altar y la Casa \+add de Dios\+add*. Ciertamente les digo, será demandada de esta generación.\wj* \v 52 \wj ¡Ay de ustedes, los doctores de la Ley, porque quitaron la llave del conocimiento! Ustedes no entraron e impidieron a los que querían entrar.\wj* \p \v 53 Cuando Él salió de allí, los escribas y los fariseos actuaron de manera hostil y lo interrogaron con respecto a muchas cosas. \v 54 Lo asechaban para atrapar algo que dijera. \c 12 \s1 La hipocresía de los fariseos \p \v 1 Entretanto, al reunirse una multitud de miles y miles, hasta pisotearse unos a otros, comenzó a decir primero a sus discípulos: \wj Guárdense de la levadura de los fariseos, que es una hipocresía.\wj* \v 2 \wj Nada hay encubierto que no sea descubierto, ni oculto que no sea conocido.\wj* \v 3 \wj Por tanto lo que dijeron ustedes en la oscuridad será oído en la luz, y lo que hablaron al oído en los aposentos más secretos será pregonado en las azoteas.\wj* \s1 Un verdadero temor \p \v 4 \wj Les digo, amigos míos: No teman a los que matan el cuerpo, y después no tienen como hacer algo peor.\wj* \v 5 \wj Les advertiré a quién deben temer: Teman a Aquél que mata y tiene poder para echar en el infierno. Sí, les digo: teman a Éste.\wj* \p \v 6 \wj ¿No se venden cinco pajarillos por dos pequeñas monedas? Y ni uno de ellos está olvidado delante de Dios.\wj* \v 7 \wj Aun los cabellos de la cabeza de ustedes están contados. No teman, ustedes valen más que muchos pajarillos.\wj* \s1 La blasfemia contra el Espíritu Santo \p \v 8 \wj Les digo: Todo aquel que me confiese delante de los hombres, el Hijo del Hombre lo confesará delante de los ángeles de Dios,\wj* \v 9 \wj pero el que me niegue delante de los hombres será negado delante de los ángeles de Dios.\wj* \v 10 \wj A todo aquel que diga una palabra contra el Hijo del Hombre se le perdonará, pero el que blasfeme contra el Santo Espíritu no será perdonado.\wj* \p \v 11 \wj Cuando los arrastren a las congregaciones, a los magistrados y a las autoridades, no se preocupen de cómo defenderse o qué dirán,\wj* \v 12 \wj porque el Santo Espíritu les enseñará en aquella hora lo que deben decir.\wj* \s1 Jesús, Juez o Partidor \p \v 13 Le dijo uno de la multitud: Maestro, dí a mi hermano que comparta la herencia conmigo. \p \v 14 Él le respondió: \wj Hombre, ¿quién me nombró juez o partidor entre ustedes?\wj* \p \v 15 Y les dijo: \wj Tengan cuidado y guárdense de toda avaricia, porque aunque alguno tenga más que suficiente, su vida no depende de las cosas que posee.\wj* \s1 Parábola del insensato \p \v 16 Les narró una parábola: \wj La tierra de un hombre rico produjo mucho fruto.\wj* \p \v 17 \wj Él razonaba: ¿Qué haré? Porque no tengo donde recoger mis frutos.\wj* \v 18 \wj Esto haré: derribaré mis graneros, \+add los\+add* edificaré más grandes y allí guardaré mis granos y mis bienes.\wj* \v 19 \wj Y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes almacenados para muchos años. Repósate, come, bebe y regocíjate.\wj* \p \v 20 \wj Pero Dios le dijo: ¡Insensato! Esta noche piden tu alma, y lo que guardaste, ¿para quién será?\wj* \v 21 \wj Así es el que atesora para él y no es rico para Dios.\wj* \s1 Contra la preocupación por la vida \p \v 22 Y dijo a los discípulos: \wj Por esto les digo: No se preocupen por la vida ni por el cuerpo: qué comerán y qué vestirán.\wj* \v 23 \wj Porque la vida es \+add más\+add* que la comida, y el cuerpo más que la ropa.\wj* \p \v 24 \wj Consideren los cuervos, que no siembran ni cosechan, ni tienen despensa ni granero, y Dios los alimenta. ¡Cuánto más valen ustedes que las aves!\wj* \v 25 \wj ¿Quién de ustedes puede por la preocupación añadir unos centímetros\wj*\f + \fr 12.25 \fr*\ft Lit. un \+tl codo,\+tl* es decir, 45 centímetros.\ft*\f* \wj al trayecto de su vida?\wj* \v 26 \wj Entonces si no pueden hacer lo mínimo, ¿por qué se preocupan por lo demás?\wj* \p \v 27 \wj Consideren cómo crecen los lirios. No trabajan ni hilan. Ni Salomón con todo su esplendor se vistió como uno de éstos.\wj* \v 28 \wj Si Dios viste así la hierba que hoy está en \+add el\+add* campo y mañana se echa al horno, ¡cuánto más a ustedes, \+add los\+add* de poca fe!\wj* \p \v 29 \wj Ustedes, pues, no busquen qué comer o qué beber, ni estén ansiosos,\wj* \v 30 \wj porque la gente del mundo busca todas estas cosas, pero el Padre de ustedes sabe que las necesitan.\wj* \v 31 \wj Más bien busquen el reino de Él, y todas estas cosas se les añadirán.\wj* \p \v 32 \wj No temas, rebaño pequeño, porque tu Padre resolvió darles el reino.\wj* \v 33 \wj Vendan sus posesiones y den limosna. Háganse carteras que no envejecen, tesoro inagotable en los cielos, donde ladrón no se acerca ni polilla destruye,\wj* \v 34 \wj porque donde está tu tesoro, allí también está tu corazón.\wj* \s1 Inmensa felicidad para el que vela \p \v 35 \wj Estén atadas sus cinturas y encendidas sus lámparas.\wj* \p \v 36 \wj Sean semejantes a hombres que esperan cuando su señor regrese de las bodas, para que le abran de inmediato cuando llegue y llame a la puerta.\wj* \v 37 \wj Inmensamente felices aquellos esclavos quienes velen cuando venga el señor. En verdad les digo que se alistará, dirá que se reclinen y les servirá.\wj* \v 38 \wj Si viene en la segunda vigilia o en la tercera, si encuentra aquellos esclavos despiertos, serán inmensamente felices.\wj* \p \v 39 \wj Pero sepan que si el amo de la casa supiera a qué hora viene el ladrón, no dejaría que se le invadiera.\wj* \v 40 \wj También ustedes estén preparados, porque el Hijo del Hombre viene a una hora inesperada.\wj* \p \v 41 Entonces Pedro preguntó: Señor, ¿dices esta parábola para nosotros o para todos? \p \v 42 El Señor respondió: \wj ¿Quién es el mayordomo fiel y prudente, al cual el señor coloca sobre su casa para darles su ración a tiempo?\wj* \v 43 \wj Inmensamente feliz aquel esclavo quien esté ocupado en su labor cuando venga su señor.\wj* \v 44 \wj En verdad les digo que lo designará mayordomo de todos sus bienes. \wj* \p \v 45 \wj Pero si aquel esclavo razona: Mi señor demora en venir, y comienza a golpear a los demás esclavos, a comer, beber y embriagarse,\wj* \v 46 \wj vendrá el señor de aquel esclavo un día y a una hora cuando no lo espera. Lo castigará con severidad y lo pondrá con los infieles.\wj* \p \v 47 \wj Aquel esclavo que conoció la voluntad de su señor, y no se preparó ni hizo conforme a la voluntad de éste, será azotado mucho.\wj* \v 48 \wj Pero el que no \+add la\+add* conoció, aunque hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco. Porque a todo aquel a quien fue dado mucho, mucho se le demandará. Al que encomendaron mucho, mucho más le pedirán.\wj* \s1 Un objetivo de la primera venida de Cristo: la división \p \v 49 \wj Vine a echar fuego sobre la tierra. ¿Qué más quiero, si ya fue encendido?\wj* \p \v 50 \wj De un bautismo tengo que ser bautizado, ¡y cómo me angustio hasta que se cumpla!\wj* \p \v 51 \wj ¿Piensan ustedes que vine a establecer paz en la tierra? No, sino más bien disensión.\wj* \v 52 \wj Porque desde ahora, cinco en una casa estarán divididos: tres en contra de los otros dos.\wj* \v 53 \wj Se dividirán padre contra hijo e hijo contra padre, madre contra hija e hija contra madre, suegra contra nuera y nuera contra suegra.\wj* \s1 Reconocimiento del tiempo \p \v 54 Decía también a la multitud: \wj Cuando \+add ustedes\+add* ven una nube que sale del occidente, de inmediato dicen: Viene un aguacero, y así sucede.\wj* \v 55 \wj Y cuando sopla un viento del sur dicen: Habrá un día caliente, y sucede.\wj* \v 56 \wj ¡Hipócritas! Saben analizar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿y cómo no analizaron este tiempo?\wj* \s1 Reconciliación con el adversario \p \v 57 \wj ¿Por qué no juzgan ustedes lo justo?\wj* \v 58 \wj Cuando vas con tu adversario ante un magistrado, esfuérzate para reconciliarte con él en el camino, no sea que te arrastre ante el juez, y éste te entregue al alguacil y él te meta en una cárcel.\wj* \v 59 \wj Te digo que no saldrás de allí hasta que pagues el último centavo.\wj* \c 13 \s1 El cambio de mente \p \v 1 En la misma ocasión estaban presentes algunos que le informaron \add a Jesús\add* sobre unos galileos cuya sangre Pilato mezcló con los sacrificios de ellos. \p \v 2 \add Jesús\add* les preguntó: \wj ¿Piensan ustedes que aquellos galileos eran más pecadores que los demás galileos porque sufrieron esas cosas?\wj* \v 3 \wj No. Más bien, si ustedes no cambian de mente, todos perecerán de igual manera.\wj* \v 4 \wj O aquellos 18 sobre quienes cayó la torre en Siloé y los mató, ¿piensan que ellos eran más culpables que los demás habitantes de Jerusalén?\wj* \v 5 \wj No. Más bien, si ustedes no cambian de mente todos perecerán del mismo modo.\wj* \s1 Una higuera estéril \p \v 6 Les narró esta parábola: \wj Alguien tenía una higuera plantada en su huerto. Fue a buscar fruto en ella y no \+add lo\+add* halló.\wj* \v 7 \wj Y dijo al jardinero: Mira, hace tres años vengo a buscar fruto en esta higuera y no \+add lo\+add* hallo. ¡Córtala para que no inutilice la tierra!\wj* \p \v 8 \wj El jardinero respondió: Señor, déjala aún este año, hasta que cave alrededor de ella y \+add le\+add* eche abono.\wj* \v 9 \wj Si se ve que va a producir fruto, \+add bien\+add*, y si no, la cortas.\wj* \s1 Sanidad en un sábado \p \v 10 Un sábado enseñaba en una congregación de los judíos. \p \v 11 Una mujer que había estado enferma 18 años estaba \add allí\add* encorvada y no podía levantarse. \p \v 12 Cuando Jesús la vio, \add la\add* llamó y le dijo: \wj ¡Mujer, quedas libre de tu enfermedad!\wj* \v 13 Le impuso las manos. Al instante se enderezó y glorificaba a Dios. \p \v 14 Pero el jefe de la congregación se indignó porque Jesús sanó en sábado y decía a la multitud: Hay seis días en los cuales uno debe trabajar. En éstos vengan y sean sanados, y no en sábado. \p \v 15 Entonces el Señor le respondió: \wj ¡Hipócritas! ¿Cada uno de ustedes no desata su buey o el asno del establo en sábado y lo lleva a beber?\wj* \v 16 \wj A ésta hija de Abraham, a quien Satanás ató por 18 años, ¿no le era necesario ser liberada de esta atadura en sábado?\wj* \p \v 17 Al decir estas cosas, todos los que se le oponían quedaban humillados, pero todo el pueblo se regocijaba por las cosas espléndidas que Él hacía. \s1 Como un grano de mostaza \p \v 18 Por tanto dijo: \wj ¿A qué es semejante el reino de Dios, y a qué lo compararé?\wj* \v 19 \wj Es semejante a un grano de mostaza que un hombre sembró en su huerto. Creció y se convirtió en un árbol, y las aves del cielo anidaron en sus ramas.\wj* \s1 La levadura \p \v 20 Y otra vez dijo: \wj ¿A qué compararé el reino de Dios?\wj* \v 21 \wj Es semejante a \+add la\+add* levadura que una mujer echó en tres medidas de harina hasta que todo fue leudado.\wj* \s1 Puerta angosta \p \v 22 En su viaje a Jerusalén, \add Jesús\add* enseñaba en las ciudades y aldeas por donde pasaba. \v 23 Y alguien le preguntó: Señor, ¿son pocos los que se salvan? \p Él le contestó: \v 24 \wj Esfuércense a entrar por la puerta angosta, porque muchos procurarán entrar y no podrán.\wj* \v 25 \wj Después que el amo de casa cierre la puerta, aunque \+add algunos\+add* que estén afuera comiencen a golpearla y digan: Señor, ábrenos, les responderá: No sé quiénes son ustedes.\wj* \p \v 26 \wj Entonces dirán: Delante de Ti comimos y bebimos, y enseñaste en nuestras plazas.\wj* \p \v 27 \wj Él les contestará: No sé de dónde son. ¡Apártense de Mí todos, hacedores de injusticia!\wj* \v 28 \wj Allí será el llanto y el crujido de los dientes cuando vean a Abraham, a Isaac, a Jacob y a todos los profetas en el reino de Dios, y ustedes sean lanzados fuera.\wj* \v 29 \wj Vendrán del oriente, del occidente, del norte y del sur, y se reclinarán \+add a comer\+add* en el reino de Dios.\wj* \v 30 \wj Piensen: Hay últimos que serán primeros, y primeros que serán últimos.\wj* \s1 Queja contra Jerusalén \p \v 31 En aquella hora llegaron unos fariseos que le dijeron: Sal y escápate de aquí porque Herodes quiere matarte. \p \v 32 Les dijo: \wj Vayan, digan a aquella zorra: Mira, hoy y mañana echo fuera demonios y realizo sanidades, y al tercer \+add día\+add* termino mi obra.\wj* \v 33 \wj Pero me es necesario ir hoy, mañana y el día siguiente, porque no es posible que un profeta perezca fuera de Jerusalén.\wj* \p \v 34 \wj ¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que te son enviados! ¡Cuántas veces quise recoger a tus hijos como una gallina a sus polluelos bajo sus alas, y no quisiste!\wj* \v 35 \wj Consideren que su casa queda desolada. Les digo: Que de ningún modo me verán hasta que digan:\wj* \m \wj ¡Bendito el que viene en Nombre del Señor!\wj* \c 14 \s1 Sanidad en sábado \p \v 1 Él entró en \add la\add* casa de uno de los principales fariseos a comer pan un sábado. Ellos lo observaban detenidamente. \p \v 2 Entonces un hombre que era hidrópico estaba delante de Él. \p \v 3 Y Jesús preguntó a los doctores de la Ley y a los fariseos: \wj ¿Es lícito sanar en sábado o no?\wj* \p \v 4 Pero ellos callaron. Lo tomó, lo sanó y lo despidió. \p \v 5 Les dijo: \wj ¿A quién de ustedes se le cae un hijo o un buey en un pozo y no se apresura a sacarlo en sábado?\wj* \p \v 6 Y no pudieron responderle. \s1 Los primeros puestos \p \v 7 Al ver que ellos escogían los puestos de honor, les narró una parábola: \v 8 \wj Cuando seas invitado a una fiesta de bodas, no te reclines en el puesto de honor, no sea que otro más honorable que tú sea invitado por él,\wj* \v 9 \wj y al llegar el que te invitó \+add a ti\+add* y a él, te diga: Da lugar a éste, y entonces ocuparás avergonzado el último lugar.\wj* \p \v 10 \wj Pero cuando seas invitado, reclínate en el último lugar, para que cuando llegue el que te invitó, te diga: Amigo, pasa más adelante. Entonces serás honrado delante de todos los que se reclinan contigo.\wj* \v 11 \wj Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.\wj* \s1 A quiénes se debe invitar \p \v 12 Decía también al que lo invitó: \wj Cuando ofrezcas una comida o una cena, no invites a tus amigos, hermanos, parientes, ni vecinos ricos, no sea que también ellos a su vez te inviten y tengas recompensa.\wj* \v 13 \wj Pero cuando hagas un banquete, invita a pobres, mancos, cojos, ciegos,\wj* \v 14 \wj y serás inmensamente feliz, pues no tienen cómo retribuirte, pero te será recompensado en la resurrección de los justos.\wj* \s1 Una gran cena \p \v 15 Al oírlo, uno de los reclinados le dijo: Inmensamente feliz cualquiera que coma pan en el reino de Dios. \p \v 16 Él le contestó: \wj Un hombre preparaba una gran cena e invitó a muchos.\wj* \v 17 \wj A la hora de la cena envió a su esclavo a decir a los invitados: ¡Vengan, porque ya está preparada!\wj* \p \v 18 \wj Pero todos igualmente comenzaron a excusarse. El primero le dijo: Compré un campo y necesito ir a verlo. Te ruego que me disculpes.\wj* \v 19 \wj Otro dijo: Compré cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas. Te ruego que me disculpes.\wj* \v 20 \wj Y otro dijo: Me casé, y por esto no puedo ir.\wj* \p \v 21 \wj Cuando el esclavo regresó, informó esto a su señor. Entonces el amo de casa se enojó y dijo a su esclavo: ¡Sal pronto por las calles y callejones de la ciudad y trae acá a los pobres, mancos, ciegos y cojos!\wj* \p \v 22 \wj Luego el esclavo dijo: Señor, hice lo que ordenaste y aún hay lugar.\wj* \p \v 23 \wj Y el señor ordenó al esclavo: Vé por los caminos y senderos. Impúlsalos a entrar para que se llene mi casa.\wj* \v 24 \wj Porque les digo que ninguno de aquellos que fueron invitados probará mi cena.\wj* \s1 Condiciones para ser discípulo de Cristo \p \v 25 Iba con Él una gran multitud, y al dar la vuelta, les dijo: \v 26 \wj Si alguno viene a Mí, y no aborrece a padre y madre, esposa e hijos, hermanos y hermanas, y aun su propia vida, no puede ser mi discípulo.\wj* \v 27 \wj Cualquiera que no levanta su cruz y me sigue, no puede ser mi discípulo.\wj* \p \v 28 \wj Porque ¿quién de ustedes que quiere edificar una torre, no se sienta primero y calcula el costo, si tiene para terminarla?\wj* \v 29 \wj No sea que, después de poner el cimiento, y no poder terminarla, todos los que observan comiencen a burlarse: \wj* \v 30 \wj Este hombre comenzó a edificar, pero no pudo terminar.\wj* \p \v 31 \wj ¿O cuál rey que marcha a enfrentar en batalla a otro rey, no se sienta primero a planificar si es capaz de enfrentar con 10.000 al que viene contra él con 20.000?\wj* \v 32 \wj Y si no puede, cuando aún está lejos de él, le envía una delegación y solicita condiciones de paz.\wj* \v 33 \wj Así pues, cualquiera de ustedes que no se despoje de todas sus posesiones no puede ser mi discípulo.\wj* \s1 Una comparación con la sal \p \v 34 \wj Buena es la sal, pero si la sal se desvanece, ¿con qué será sazonada?\wj* \v 35 \wj Ni para una tierra, ni para una pila de abono es útil. La botan. El que tiene oídos para oír, escuche.\wj* \c 15 \s1 La oveja perdida \p \v 1 Entonces muchos publicanos y pecadores se acercaban para oírlo. \v 2 Los fariseos y los escribas refunfuñaban: Éste recibe a pecadores y come con ellos. \p \v 3 Entonces les presentó esta parábola: \v 4 \wj ¿Cuál hombre de ustedes que tenga 100 ovejas, y pierda una, no deja las 99 en un lugar solitario y va tras la perdida, hasta que la halle?\wj* \v 5 \wj Y después de hallarla, se regocija y \+add la\+add* pone sobre sus hombros.\wj* \v 6 \wj Al regresar a casa, reúne a los amigos y vecinos, y les dice: ¡Regocíjense conmigo, porque hallé mi oveja perdida!\wj* \p \v 7 \wj Les digo que así habrá \+add más\+add* gozo en el cielo por un pecador que cambia de mente que por 99 justos que no tienen necesidad de cambio de mente.\wj* \s1 Una dracma perdida \p \v 8 \wj ¿O cuál mujer que tiene diez dracmas,\wj*\f + \fr 15.8 \fr*\ft Moneda de plata equivalente a un denario, que era el pago por un día de trabajo.\ft*\f* \wj cuando pierda una, no enciende una lámpara, barre la casa y busca cuidadosamente hasta que \+add la\+add* halla?\wj* \v 9 \wj Cuando la halla, reúne a las amigas y vecinas y les dice: ¡Regocíjense conmigo! ¡Hallé la dracma que había perdido!\wj* \p \v 10 \wj Así les digo, habrá gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que cambia de mente.\wj* \s1 Un hijo menor perdido \p \v 11 También dijo: \wj Un hombre tenía dos hijos.\wj* \v 12 \wj El menor dijo al padre: Padre, dame la parte de la hacienda que me corresponde. Y él les repartió la propiedad.\wj* \p \v 13 \wj Unos pocos días más tarde, el hijo menor recogió sus cosas, salió hacia una región lejana y allí malgastó sus bienes en una vida perdida.\wj* \v 14 \wj Después de malgastar todo, llegó una hambruna severa en aquella región, y él comenzó a tener necesidad.\wj* \v 15 \wj Fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella región, quien \+add lo\+add* envió a sus campos a apacentar cerdos.\wj* \v 16 \wj Ansiaba saciarse con las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie se las daba.\wj* \p \v 17 \wj Entonces reflexionaba y decía: ¡Cuántos jornaleros de mi padre tienen superabundancia de pan, y yo aquí me muero de hambre!\wj* \v 18 \wj Me levantaré, iré a mi padre y le diré: Padre, pequé contra el cielo y contra ti.\wj* \v 19 \wj No soy digno de que me llames tu hijo. Recíbeme como uno de tus jornaleros.\wj* \v 20 \wj Se levantó y regresó a su padre. \wj* \p \wj Cuando él estaba aún muy distante, su padre lo vio y tuvo compasión de él. Corrió, lo abrazó y lo besó.\wj* \v 21 \wj El hijo le habló: Padre, pequé contra el cielo y contra ti. No soy digno de que me llames tu hijo.\wj* \s1 Celebración del rescate de un hijo \p \v 22 \wj Pero el padre ordenó a sus esclavos: ¡Saquen pronto la mejor ropa y vístanlo, y pongan un anillo en su mano y sandalias en sus pies!\wj* \v 23 \wj ¡Traigan el becerro gordo y mátenlo! ¡Comamos y regocijémonos!\wj* \v 24 \wj Porque este hijo mío estaba muerto y revivió. Estaba perdido y fue hallado. Y comenzaron a regocijarse.\wj* \s1 Un hijo mayor perdido \p \v 25 \wj Cuando el hijo mayor regresaba del campo, se acercó a la casa y oyó música y danza.\wj* \v 26 \wj Llamó a uno de los esclavos y le preguntó qué ocurría.\wj* \p \v 27 \wj Él le contestó: Tu hermano regresó, y tu padre sacrificó el becerro gordo, porque lo recibió sano.\wj* \p \v 28 \wj Entonces se enojó y no quería entrar. \wj* \p \wj Así que su padre salió y le rogaba.\wj* \p \v 29 \wj Él respondió: Mira, padre, te he servido muchos años como esclavo y jamás te desobedecí, y nunca me diste un cabrito para disfrutarlo con mis amigos,\wj* \v 30 \wj pero cuando vino este hijo tuyo quien consumió tu hacienda con prostitutas, le mataste el becerro gordo. \wj* \p \v 31 \wj Entonces él le contestó: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todas mis cosas son tuyas.\wj* \v 32 \wj Pero era necesario regocijarnos, porque este hermano tuyo estaba muerto y revivió, estaba perdido y se halló.\wj* \c 16 \s1 El mayordomo de la injusticia \p \v 1 Dijo también a los discípulos: \wj Un rico tenía un mayordomo quien fue acusado de malgastar los bienes de su señor.\wj* \v 2 \wj Lo llamó y le preguntó: ¿Qué es esto que oigo con respecto a ti? Rinde la cuenta de tu mayordomía, porque ya no puedes ser mayordomo.\wj* \p \v 3 \wj Entonces el mayordomo se dijo: ¿Qué haré porque mi señor me quita la mayordomía? No puedo cavar. Me da avergüenza mendigar.\wj* \v 4 \wj Sé lo que haré para que cuando se me quite la mayordomía me reciban en las casas de ellos.\wj* \p \v 5 \wj Llamó a cada uno de los deudores de su señor y preguntó al primero: ¿Cuánto debes a mi señor?\wj* \p \v 6 \wj Él contestó: 100 barriles de aceite. \wj* \p \wj Y el mayordomo le dijo: Toma las facturas, siéntate pronto y escribe 50.\wj* \p \v 7 \wj Luego preguntó a otro: ¿Y tú, cuánto debes? \wj* \p \wj Y él respondió: 100 medidas de trigo. Le dijo: Toma las facturas y escribe 80.\wj* \s1 La riqueza de la injusticia \p \v 8 \wj El señor elogió al mayordomo de la injusticia porque actuó sagazmente. Porque con respecto a su generación, los hijos de este siglo son más sagaces que los hijos de la luz.\wj* \p \v 9 \wj Yo les digo: Consigan amigos por medio de las riquezas\wj*\f + \fr 16.9 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa Mamón:\fqa*\ft En griego, dios del dinero, símbolo del poder de la riqueza.\ft*\f* \wj injustas, para que cuando falte \+add algo\+add*, los reciban en las moradas eternas.\wj* \p \v 10 \wj El que es fiel en lo muy poco, también es fiel en lo mucho, y el que en lo muy poco es injusto, también en lo mucho es injusto.\wj* \p \v 11 \wj Así que, si en la riqueza injusta no fueron fieles, ¿quién les confiará lo verdadero?\wj* \v 12 \wj Y si en lo ajeno no fueron fieles, ¿quién les dará a ustedes lo que le pertenece a él?\wj* \s1 Dios y la riqueza injusta \p \v 13 \wj Ningún esclavo doméstico puede servir como esclavo a dos señores, porque despreciará al uno y apreciará al otro, o estimará al uno y desestimará al otro. No pueden servir como esclavos a Dios y a la riqueza injusta.\wj* \p \v 14 Los fariseos, quienes eran amigos del dinero, oían todo esto y se burlaban de Él. \p \v 15 Entonces les dijo: \wj Ustedes se declaran justos delante de los hombres, pero Dios conoce sus corazones, porque lo sublime entre hombres, delante de Dios es repugnancia.\wj* \s1 La Ley y el reino \p \v 16 \wj La Ley y los profetas se proclamaron hasta Juan. Desde entonces se proclama el reino de Dios, y todos se esfuerzan por entrar en él.\wj* \v 17 \wj Pero es más fácil que desaparezcan el cielo y la tierra que caiga un trazo de \+add una\+add* letra de la Ley.\wj* \s1 Repudio y adulterio \p \v 18 \wj Todo el que repudia a su esposa y se casa con otra, adultera, y el que se casa con la repudiada, adultera.\wj* \s1 Un rico y un mendigo \p \v 19 \wj Había un hombre rico que se vestía de púrpura y lino fino y se regocijaba con esplendidez cada día.\wj* \p \v 20 \wj Un mendigo llamado Lázaro, cubierto de llagas, era colocado a su puerta.\wj* \v 21 \wj Deseaba saciarse con lo que caía de la mesa del rico. Aun los perros llegaban y le lamían las llagas. \wj* \p \v 22 \wj Sucedió que murió el mendigo y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham. \wj* \p \wj Murió también el rico y fue sepultado.\wj* \v 23 \wj Cuando estaba en tormentos en el infierno\wj*\f + \fr 16.23 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa Hades.\fqa*\f* \wj levantó sus ojos y vio a Abraham desde lejos y a Lázaro en el seno de él.\wj* \v 24 \wj Clamó: Padre Abraham, ten misericordia de mí. Envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua y refresque mi lengua, porque estoy atormentado en esta llama.\wj* \p \v 25 \wj Abraham le contestó: Hijo, recuerda que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también los males. Pero ahora es consolado aquí, y tú atormentado.\wj* \v 26 \wj Además de todo esto, entre nosotros y ustedes fue establecida una gran sima, de modo que los que quieren cruzar de aquí a ustedes no puedan, ni de allá cruzar hacia nosotros.\wj* \p \v 27 \wj Entonces exclamó: Padre, te ruego que lo envíes a la casa de mi padre,\wj* \v 28 \wj porque tengo cinco hermanos, para que les advierta a fin de que no vengan ellos a este lugar de tormento.\wj* \p \v 29 \wj Y Abraham respondió: A Moisés y a los profetas tienen. ¡Óiganlos!\wj* \p \v 30 \wj Entonces él dijo: No, padre Abraham. Pero si alguno de \+add los\+add* muertos fuera a ellos, cambiarán su mente.\wj* \p \v 31 \wj Y le contestó: Si no escuchan a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán si alguno apareciera de entre \+add los\+add* muertos.\wj* \c 17 \s1 Las conturbaciones \p \v 1 Entonces dijo a sus discípulos: \wj Es imposible que no vengan las conturbaciones, pero ¡ay de aquél por medio de quien vienen!\wj* \v 2 \wj Es mejor para él si se le cuelga una piedra de molino al cuello y se lanza al mar, que conturbar a uno de estos pequeños.\wj* \p \v 3 \wj Tengan cuidado de ustedes mismos. \wj* \p \wj Cuando peque tu hermano, repréndelo, y si cambia de mente, perdónalo.\wj* \v 4 \wj Si siete veces al día peca contra ti, y siete veces vuelve a ti y dice: Cambio de mente. Perdónalo.\wj* \s1 La dimensión de la fe \p \v 5 Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos \add la\add* fe. \p \v 6 Entonces el Señor dijo: \wj Si \+add ustedes\+add* tienen fe como un grano de mostaza, dirían al sicómoro:\wj*\f + \fr 17.6 \fr*\ft Sicómoro: árbol siempre verde que alcanza hasta 15 metros de altura y tiene mucho follaje.\ft*\f* \wj ¡Desarráigate y plántate en el mar! Y les obedecería.\wj* \s1 Esclavos inútiles \p \v 7 \wj ¿Quién de ustedes tiene un esclavo que ara o pastorea, y al llegar \+add éste\+add* del campo, le dice: Pasa de inmediato, reclínate?\wj* \v 8 \wj ¿No le dice más bien: Prepárame la cena, átate el delantal y sírveme hasta que coma y beba yo, y después de esto comerás y beberás tú?\wj* \v 9 \wj ¿Da gracias al esclavo porque hizo lo que se le ordenó?\wj* \p \v 10 \wj Así también ustedes, cuando hagan todas las cosas que se les ordenan, digan: Somos esclavos inútiles. Hicimos lo que debíamos hacer.\wj* \s1 Diez leprosos \p \v 11 Cuando iba hacia Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea. \p \v 12 Cuando Él entró en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, quienes se pararon a una distancia. \v 13 Gritaron: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros! \p \v 14 Al verlos dijo: \wj ¡Vayan, muéstrense a los sacerdotes!\wj* Sucedió que cuando iban fueron limpiados. \p \v 15 Uno de ellos, al ver que fue sanado, regresó y glorificaba a Dios a gran voz. \v 16 Se postró a sus pies y le daba gracias. Era un samaritano. \p \v 17 Jesús le preguntó: \wj ¿No fueron limpiados los diez? ¿Dónde están los nueve?\wj* \v 18 \wj ¿No regresaron a dar gloria a Dios, excepto este extranjero?\wj* \v 19 Y le dijo: \wj Levántate, vete. Tu fe te salvó.\wj* \s1 La venida del reino \p \v 20 Al ser interrogado por los fariseos sobre cuándo viene el reino de Dios, les respondió: \wj El reino de Dios no viene con advertencia\wj*, \v 21 \wj ni dirán: ¡Miren, está aquí! O: ¡Miren, está allí! Porque aquí en medio de ustedes está el reino de Dios.\wj* \s1 Como el relámpago \p \v 22 Entonces dijo a los discípulos: \wj Vendrán días cuando ustedes anhelarán ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no \+add lo\+add* verán.\wj* \v 23 \wj Y les dirán: ¡Miren, está aquí! ¡Miren, está allí! No vayan, ni persigan.\wj* \v 24 \wj Como el resplandor del relámpago brilla desde un extremo del cielo hasta el otro, así será el Hijo del Hombre.\wj* \v 25 \wj Pero primero le es necesario padecer mucho y ser rechazado por esta generación.\wj* \s1 Como en los días de Noé y de Lot \p \v 26 \wj Como sucedió en los días de Noé, así será también en los días del Hijo del Hombre: \wj* \v 27 \wj Comían, bebían, se casaban y se daban en matrimonio, hasta el día cuando Noé entró en el arca. Vino el diluvio y destruyó a todos.\wj* \v 28 \wj Asimismo, como sucedió en los días de Lot: comían, bebían, compraban, vendían, plantaban y edificaban.\wj* \v 29 \wj Pero el día cuando Lot salió de Sodoma, llovió fuego y azufre del cielo y destruyó a todos.\wj* \p \v 30 \wj Así será el día cuando el Hijo del Hombre se manifieste.\wj* \v 31 \wj En aquel día, el que esté en la azotea y sus bienes en la casa, no baje a tomarlos. El que \+add esté\+add* en el campo, igualmente, no vuelva a las cosas de atrás.\wj* \v 32 \wj Recuerden a la esposa de Lot.\wj* \p \v 33 \wj Cualquiera que procure preservar su vida, la perderá, y cualquiera que la pierda, \+add la\+add* preservará.\wj* \s1 Uno tomado y otro dejado \p \v 34 \wj Les digo: Aquella noche estarán dos en una cama: uno será tomado y otro será dejado.\wj* \v 35 \wj Dos molerán en el mismo lugar: una será tomada y otra será dejada.\wj* [[ \v 36 ]] \p \v 37 Le preguntaron: ¿Dónde, Señor? \p Él les contestó: \wj Donde esté el cadáver, allí también se reunirán los buitres.\wj* \c 18 \s1 Un juez injusto y una viuda \p \v 1 Les narró también una parábola con respecto a la necesidad de hablar ellos siempre con Dios y no desmayar: \v 2 \wj Había un juez en una ciudad que no temía a Dios ni respetaba a hombre.\wj* \p \v 3 \wj Había también una viuda en aquella ciudad que iba ante él y decía: Hazme justicia contra mi oponente.\wj* \p \v 4 \wj No quería por un tiempo, pero después de esto se dijo: Aunque no temo a Dios, ni respeto a hombre,\wj*\f + \fr 18.4 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa soy avergonzado por hombre.\fqa*\f* \v 5 \wj por cuanto esta viuda me causa molestia, le haré justicia, no sea que al venir de continuo me agote la paciencia.\wj* \p \v 6 Y dijo el Señor: \wj Oigan al juez injusto.\wj* \v 7 \wj ¿Dios de ningún modo hará la justicia a sus escogidos que claman a Él día y noche? ¿Demorará en responderles?\wj* \p \v 8 \wj Les digo que con prontitud les hará justicia. Pero cuando el Hijo del Hombre venga, ¿hallará la fe en la tierra?\wj* \s1 Un fariseo y un publicano \p \v 9 Narró esta parábola a unos que confiaban en ellos mismos como justos y menospreciaban a los demás: \v 10 \wj Dos hombres subieron al Templo a hablar con Dios: el uno fariseo y el otro publicano.\wj* \p \v 11 \wj El fariseo se puso en pie y hablaba consigo mismo: Dios, te doy gracias porque no soy como los demás hombres: ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano.\wj* \v 12 \wj Ayuno dos veces \+add por\+add* semana y doy diezmo de todo lo que me gano.\wj* \p \v 13 \wj Pero el publicano, situado lejos, no quería ni aun levantar los ojos al cielo, sino golpeaba su pecho y decía: ¡Dios, compadécete de mí, pecador!\wj* \p \v 14 \wj Les digo que éste bajó a su casa justificado y no el otro, porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido.\wj* \s1 Presentación de los niños \p \v 15 Le presentaban también los niños para que los tocara. Al ver esto, los discípulos los reprendían. \p \v 16 Pero Jesús los llamó y les dijo: \wj Dejen que los niños vengan a Mí, y no se lo impidan, porque de ellos es el reino de Dios.\wj* \v 17 \wj En verdad les digo: El que no reciba el reino de Dios como un niño, que de ningún modo entre en él.\wj* \s1 Dificultad de los ricos \p \v 18 Un dignatario le preguntó: Maestro bueno, ¿qué hago para heredar \add la\add* vida eterna? \p \v 19 Jesús le preguntó: \wj ¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino uno solo: Dios.\wj* \v 20 \wj Sabes los Mandamientos:\wj* \q \wj No adulteres, no asesines, no robes, no des falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre.\wj* \p \v 21 Y él respondió: Todo esto guardé desde \add la\add* juventud. \p \v 22 Cuando Jesús lo oyó le dijo: \wj Aún te falta uno: Vende todo lo que tienes. Repártelo a los pobres y tendrás un tesoro en \+add el\+add* cielo. Y ven, sígueme.\wj* \p \v 23 Cuando oyó esto se entristeció profundamente porque era muy rico. \p \v 24 Jesús lo miró y dijo: \wj ¡Cuán difícilmente entran los ricos en el reino de Dios!\wj* \v 25 \wj Es más fácil pasar un camello por un ojo de aguja\wj*\f + \fr 18.25 \fr*\ft Un ojo de aguja. Puerta pequeña en una pared o un muro por donde pasaba la carga.\ft*\f* \wj que entrar un rico en el reino de Dios.\wj* \p \v 26 Entonces los que lo oyeron le preguntaron: ¿Quién puede ser salvo? \p \v 27 Y Él respondió: \wj Lo imposible para \+add los\+add* hombres es posible para Dios.\wj* \p \v 28 Luego Pedro le dijo: Mira: Nosotros dejamos todo y te seguimos.\f + \fr 18.28 \fr*\ft En castellano, \ft*\fqa seguimos\fqa*\ft es igual en presente y en pretérito indefinido. Aquí, en el original está en pretérito indefinido. \ft*\f* \p \v 29 Entonces Él les contestó: \wj En verdad les digo que nadie hay que deje casa, esposa, hermanos, padres o hijos por causa del reino de Dios\wj* \v 30 \wj que no reciba muchas veces más en este tiempo, y en la era que viene, \+add la\+add* vida eterna.\wj* \s1 Tercera predicción de su muerte y resurrección \p \v 31 \add Jesús\add* tomó consigo a los 12 y les dijo: \wj Miren, subimos a Jerusalén. Se cumplirán todas las cosas que fueron escritas por los profetas con respecto al Hijo del Hombre.\wj* \v 32 \wj Porque será entregado a los gentiles, ridiculizado, maltratado, escupido,\wj* \v 33 \wj y después de azotarlo, lo asesinarán. Pero al tercer día será resucitado.\wj* \p \v 34 Ellos nada de esto entendieron. Esta Palabra era oculta de ellos. No entendían lo que se les decía. \s1 Un ciego cerca de Jericó \p \v 35 Cuando \add Él\add* se acercó a Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino y mendigaba. \p \v 36 Al oír que pasaba una multitud, preguntaba qué sería aquello, \v 37 y le informaron: Que viene Jesús el Nazareno. \p \v 38 Entonces gritó: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí! \p \v 39 Y los que iban delante lo reprendían para que callara. Pero él gritaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí! \p \v 40 Entonces Jesús se detuvo y pidió que se lo trajeran. Cuando se acercó, le preguntó: \v 41 \wj ¿Qué quieres que te haga?\wj* \p Y él contestó: Señor, que vea. \p \v 42 Jesús le ordenó: \wj Ve. Tu fe te salvó.\wj* \p \v 43 Al instante vio. Lo seguía y glorificaba a Dios. \p Cuando todo el pueblo lo vio, alabó a Dios. \c 19 \s1 El publicano Zaqueo \p \v 1 Cuando \add Jesús\add* entró en Jericó, iba por la ciudad. \p \v 2 Ocurrió que un hombre llamado Zaqueo, quien era rico y jefe de publicanos, \v 3 procuraba ver quién era Jesús, pero no podía a causa de la multitud porque era pequeño de estatura. \v 4 Entonces corrió adelante y trepó a un sicómoro para verlo, pues iba a pasar por allí. \p \v 5 Cuando llegó Jesús al lugar, miró hacia arriba y le dijo: \wj Zaqueo, baja pronto, porque voy a reposar hoy en tu casa.\wj* \p \v 6 Él \add se\add* apresuró, bajó y con gozo lo recibió. \p \v 7 Pero al ver \add esto\add*, todos refunfuñaban: Entró a reposar con un pecador. \p \v 8 Entonces Zaqueo, puesto en pie, dijo al Señor: Mira, Señor, la mitad de mis bienes doy a \add los\add* pobres, y si en algo extorsioné a alguno, \add lo\add* devuelvo cuadruplicado. \p \v 9 Jesús le dijo: \wj Hoy vino \+add la\+add* salvación a esta casa, por cuanto él también es hijo de Abraham.\wj* \v 10 \wj Porque el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar lo que estaba perdido.\wj* \s1 Parábola de las diez minas \p \v 11 Por cuanto Él estaba cerca de Jerusalén y porque ellos oían esto y pensaban que el reino de Dios ya iba a manifestarse, prosiguió y presentó una parábola: \v 12 \wj Un hombre noble salió hacia un país lejano a recibir un reino para él, y regresar.\wj* \v 13 \wj Después de llamar a diez de sus esclavos, les dio diez minas y les dijo: Negocien mientras vengo.\wj* \v 14 \wj Pero sus conciudadanos lo aborrecían, y enviaron tras él una delegación para que dijera: No deseamos que éste reine sobre nosotros.\wj* \p \v 15 \wj Al regresar después de recibir el reino, sucedió que él ordenó llamar a aquellos esclavos a quienes había entregado la plata para saber cuánto ganaron.\wj* \v 16 \wj Entonces llegó el primero y dijo: Señor, tu mina produjo diez minas.\wj* \p \v 17 \wj Le contestó: ¡Bien hecho, buen esclavo! Por cuanto en lo ínfimo fuiste fiel, ten autoridad sobre diez ciudades.\wj* \p \v 18 \wj Llegó el segundo y dijo: Señor, tu mina produjo cinco minas.\wj* \p \v 19 \wj Y dijo a éste: Tú también tendrás autoridad sobre cinco ciudades.\wj* \p \v 20 \wj El otro llegó y dijo: Señor, aquí está tu mina que tenía guardada en un pañuelo,\wj* \v 21 \wj porque temía, pues eres hombre severo que tomas lo que no pusiste y cosechas lo que no sembraste.\wj* \p \v 22 \wj Le dijo: Esclavo malo, por lo que dices te juzgo. ¿Sabías que yo soy hombre severo, que tomo lo que no puse y que cosecho lo que no sembré?\wj* \v 23 \wj ¿Entonces por qué no depositaste mi dinero en el banco, y al regresar, yo lo hubiera recibido con intereses?\wj* \p \v 24 \wj A los presentes les dijo: ¡Quiten la mina a éste y denla al que tiene las diez minas!\wj* \p \v 25 \wj Y le replicaron: Señor, ¡tiene diez minas!\wj* \p \v 26 \wj \+add Contestó\+add*: Les digo que a todo el que tiene se \+add le\+add* dará, pero \+add al\+add* que no tiene, aun lo que tiene se \+add le\+add* quitará.\wj* \v 27 \wj A aquellos enemigos míos que no quisieron que yo reinara sobre ellos, ¡tráiganlos acá y mátenlos delante de mí!\wj* \p \v 28 Después de decir estas cosas, iba hacia adelante y subía a Jerusalén. \s1 Llegada a Jerusalén \p \v 29 Cuando Jesús llegó cerca de Betfagé y Betania, a la Montaña de \add Los\add* Olivos, envió a dos discípulos \v 30 y les dijo: \wj Vayan a la aldea de enfrente. Al entrar hallarán un pollino atado sobre el cual ninguno montó. Desátenlo y tráiganlo.\wj* \v 31 \wj Si alguien les pregunta por qué lo desatan, digan que el Señor lo necesita.\wj* \p \v 32 Ellos fueron y hallaron como les dijo. \p \v 33 Cuando desataban el pollino, los dueños les preguntaron: ¿Por qué lo desatan? \p \v 34 Ellos respondieron: El Señor lo necesita. \p \v 35 Llevaron el pollino a Jesús, echaron sus ropas sobre él y montaron a Jesús. \p \v 36 Mientras Él avanzaba, ellos tendían sus ropas externas en el camino. \p \v 37 Cuando Él se acercaba a la ladera de la Montaña de Los Olivos, la multitud de discípulos comenzó a alabar a Dios a gran voz. Se regocijaba por todos los milagros que vieron \v 38 y decía: \m ¡Bendito el Rey que viene en \add el\add* Nombre del Señor! \m ¡Paz en \add el\add* cielo y gloria en \add las\add* alturas! \p \v 39 Algunos fariseos le reclamaron: Maestro, reprende a tus discípulos. \p \v 40 Él les respondió: \wj Les digo que si éstos callan, las piedras clamarían.\wj* \p \v 41 Cuando llegó cerca y vio la ciudad, lloró por ella \v 42 y dijo: \wj ¡Si tú supieras hoy lo que corresponde a \+add tu\+add* paz! Pero por ahora no puedes verlo.\wj* \v 43 \wj Porque vendrán días cuando tus enemigos levantarán cerco contra ti, te rodearán, te estrecharán por todas partes,\wj* \v 44 \wj te arrasarán con tus hijos dentro de ti y no dejarán en ti piedra sobre piedra, por cuanto no reconociste el tiempo de tu supervisión.\wj* \s1 Entrada al Templo \p \v 45 Cuando entró en el Templo, comenzó a echar fuera a los que vendían, \v 46 y les decía: \wj Está escrito: \wj* \m \wj Mi Casa será Casa de conversación con Dios, \wj* \m \wj pero ustedes la convirtieron en cueva de ladrones.\wj* \p \v 47 Enseñaba cada día en el Templo, pero los principales sacerdotes, los escribas y los más prominentes del pueblo procuraban matarlo. \v 48 No hallaban cómo hacerlo, porque todo el pueblo estaba pendiente de Él, y lo escuchaba. \c 20 \s1 Su autoridad \p \v 1 Un día mientras \add Jesús\add* enseñaba al pueblo y proclamaba las Buenas Noticias en el Templo, aparecieron los principales sacerdotes, los escribas y los ancianos \v 2 y le preguntaron: ¿Con cuál autoridad haces estas cosas? ¿Quién te dio la autoridad? \p \v 3 Les respondió: \wj Yo también les preguntaré un asunto. Díganme: \wj* \v 4 \wj El bautismo de Juan, ¿era del cielo o de \+add los\+add* hombres?\wj* \p \v 5 Entonces ellos razonaron: Si decimos del cielo, dirá: ¿por qué no le creyeron? \v 6 Si decimos, de hombres, todo el pueblo nos apedreará, porque se convencieron de que Juan era profeta. \p \v 7 Respondieron que no sabían de dónde era. \p \v 8 Jesús les dijo: \wj Tampoco Yo les digo con cuál autoridad hago estas cosas.\wj* \s1 Unos labradores perversos \p \v 9 Entonces dijo al pueblo esta parábola: \wj Un hombre plantó una viña, se la arrendó a unos labradores y salió de viaje por mucho tiempo.\wj* \p \v 10 \wj En el tiempo oportuno envió un esclavo a los labradores para que le dieran su parte de la cosecha, pero los labradores lo golpearon y lo enviaron con las manos vacías.\wj* \v 11 \wj Procedió a enviar a otro esclavo, pero ellos también lo humillaron, golpearon y lo enviaron con las manos vacías.\wj* \v 12 \wj Envió a un tercero, y ellos lo hirieron y lo expulsaron de la viña.\wj* \v 13 \wj Entonces el dueño de la viña se preguntó: ¿Qué haré? Enviaré a mi hijo amado. Tal vez éste sea respetado.\wj* \p \v 14 \wj Pero al verlo, los labradores razonaban unos con otros: Éste es el heredero. \+add Conviene\+add* que lo matemos para que la heredad sea nuestra.\wj* \v 15 \wj Lo sacaron de la viña y lo asesinaron. \wj* \p \wj ¿Qué, pues, les hará el dueño de la viña?\wj* \v 16 \wj Vendrá y destruirá a estos labradores, y dará la viña a otros.\wj* \p Al escuchar \add esto\add* dijeron: ¡Que nunca suceda! \p \v 17 Entonces Él los miró fijamente y preguntó: \wj ¿Qué significa esto que está escrito?\wj* \m \wj Una piedra que desecharon los que edifican \wj* \m \wj Fue convertida en cabeza de ángulo. \wj* \p \v 18 \wj Todo el que cae sobre esta piedra se quebrará, pero sobre aquel que caiga, lo desmenuzará. \wj* \s1 Lo de Dios y lo de César \p \v 19 En aquella hora los escribas y los principales sacerdotes trataron de arrestarlo, porque entendieron que la parábola era contra ellos, pero tuvieron temor al pueblo. \p \v 20 Después de asecharlo enviaron espías para que fingieran ser justos con el propósito de atraparlo en \add alguna\add* palabra, a fin de entregarlo a las autoridades. \p \v 21 Le preguntaron: Maestro, sabemos que hablas y enseñas rectamente y que no haces acepción de personas, sino en verdad enseñas el camino de Dios. \v 22 ¿Nos es lícito pagar tributo a César, o no? \p \v 23 Al percibir la astucia de ellos, les contestó: \v 24 \wj Muéstrenme un denario. ¿De quién es la imagen y la inscripción?\wj* \p Ellos respondieron: De César. \p \v 25 Él les dijo: \wj Den a César lo de César, y a Dios lo de Dios.\wj* \p \v 26 Y no pudieron atrapar una palabra de Él delante del pueblo, y maravillados por su respuesta, callaron. \s1 Pregunta de los saduceos \p \v 27 Entonces se acercaron unos saduceos, quienes dicen que no hay resurrección, y le preguntaron: \v 28 Maestro, Moisés nos escribió: Si un hombre muere y deja viuda sin hijos, que su hermano tome a la viuda y levante descendencia a su hermano. \p \v 29 Había siete hermanos, y el primero tomó esposa y murió sin hijos. \v 30 También el segundo \v 31 y el tercero la tomaron. Igualmente los siete. No dejaron hijos y murieron. \v 32 Finalmente, murió también la mujer. \v 33 En la resurrección, ¿de cuál de ellos será esposa? Porque los siete la tuvieron como esposa. \p \v 34 Jesús les respondió: \wj Los hijos de este siglo se casan y son dados en matrimonio. \wj* \p \v 35 \wj Pero los que son considerados dignos de llegar a aquella era, y de la resurrección de entre \+add los\+add* muertos, no se casarán ni se darán en matrimonio. \wj* \v 36 \wj Porque ni siquiera pueden morir, ya que son como ángeles. Al ser hijos de la resurrección son hijos de Dios. \wj* \p \v 37 \wj Aún Moisés reveló en \+add el pasaje de\+add* la zarza, que los muertos resucitan, cuando llama al Señor: \wj* \m \wj el Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob. \wj* \p \v 38 \wj No es Dios de muertos, sino de vivos, porque para Él todos viven. \wj* \p \v 39 Algunos escribas respondieron: Bien dicho, Maestro. \v 40 Y ya nadie tenía el valor de hacerle más preguntas. \s1 ¿De quién es Hijo? \p \v 41 Entonces les preguntó: \wj ¿Cómo dicen que el Cristo es Hijo de David?\wj* \v 42 \wj Porque el mismo David dice en un rollo de salmos: \wj* \m \wj Dijo \+add el\+add* Señor a mi Señor: \wj* \m \wj Siéntate a mi derecha \wj* \m \v 43 \wj Hasta que ponga a tus enemigos como estrado de tus pies. \wj* \p \v 44 \wj Pues si David lo llama Señor, ¿cómo, pues, es Hijo de Él?\wj* \s1 Cuidado con los escribas \p \v 45 Mientras el pueblo escuchaba, dijo a los discípulos: \v 46 \wj Tengan cuidado con los escribas, quienes desean andar con ropas externas largas. \wj* \p \wj Aman las salutaciones en las plazas y \+add los\+add* primeros asientos en las congregaciones y \+add los\+add* puestos de honor en las cenas.\wj* \v 47 \wj Pero devoran los bienes de las viudas y hacen largas conversaciones con Dios como pretexto. Éstos tendrán un juicio más severo.\wj* \c 21 \p \v 1 Él observó a los ricos que echaban sus ofrendas en el receptáculo para contribuciones. \s1 La ofrenda de una viuda \p \v 2 Vio también a una viuda pobre que echaba allí dos pequeñas monedas de cobre \v 3 y dijo: \wj En verdad les digo que esta viuda pobre echó más que todos,\wj* \v 4 \wj porque todos éstos ofrendaron de lo que les sobra, pero ésta de su pobreza ofrendó todo el sustento que tenía.\wj* \s1 Decreto sobre el Templo \p \v 5 A unos que comentaban sobre las piedras preciosas y las ofrendas votivas que adornaban el Templo, les dijo: \v 6 \wj En cuanto a estas cosas que miran, vendrán días cuando no quedará piedra sobre piedra que no sea derribada.\wj* \s1 Señales \p \v 7 Le preguntaron: Maestro, ¿cuándo sucederá esto? ¿Y cuál es la señal para saber cuando van a suceder? \p \v 8 Él respondió: \wj Cuidado, no se engañen. Porque vendrán muchos en mi Nombre y dirán: ¡Yo soy! Y: ¡El tiempo llegó! No los sigan.\wj* \v 9 \wj Cuando oigan de guerras e insurrecciones no teman, porque es necesario que suceda primero esto. Pero el fin no será de inmediato.\wj* \p \v 10 Entonces les decía: \wj Se levantará nación contra nación y reino contra reino.\wj* \v 11 \wj En varios lugares habrá grandes terremotos, pestilencias y hambrunas. Y habrá horrores y grandes señales en el cielo.\wj* \s1 Persecuciones \p \v 12 \wj Pero antes de todo esto los detendrán, perseguirán y entregarán a las congregaciones judías y cárceles. Serán llevados ante reyes y gobernadores por causa de mi Nombre.\wj* \v 13 \wj Les servirá de \+add oportunidad\+add* para el testimonio.\wj* \p \v 14 \wj Por tanto, propónganse no preparar su defensa,\wj* \v 15 \wj porque Yo les daré palabras de sabiduría que no podrán resistir ni contradecir quienes los adversen.\wj* \v 16 \wj Serán entregados aun por padres, hermanos, parientes y amigos. \+add Algunos\+add* de ustedes serán asesinados.\wj* \p \v 17 \wj Todos los aborrecerán por causa de mi Nombre,\wj* \v 18 \wj pero que de ningún modo perezca un cabello de su cabeza.\wj* \p \v 19 \wj Por su perseverancia ganarán sus vidas.\wj* \s1 La destrucción de Jerusalén \p \v 20 \wj Cuando vean a Jerusalén rodeada por ejércitos, sepan que su destrucción está cerca.\wj* \v 21 \wj Entonces los que estén en Judea huyan a las montañas, los que estén en la ciudad\wj*\f + \fr 21.21 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa en ella.\fqa*\f* \wj salgan, y los que estén en los campos no vuelvan a ella.\wj* \p \v 22 \wj Porque estos serán días de retribución para que se cumpla lo que está escrito.\wj* \v 23 \wj ¡Ay de las que estén embarazadas y de las que amamanten en aquellos días! Porque habrá gran calamidad sobre la tierra e ira para este pueblo.\wj* \v 24 \wj Caerán a filo de espada, serán esparcidos como cautivos a todas las naciones y Jerusalén será hollada por gentiles hasta que sean cumplidos los tiempos de ellos.\wj* \s1 La venida del Hijo del Hombre \p \v 25 \wj Habrá señales en el sol, la luna y las estrellas. Sobre la tierra habrá angustia de gentes en perplejidad por un rugido y oleaje del mar,\wj* \v 26 \wj tal que desfallecen los hombres por miedo y expectación de lo que viene a la tierra habitada, porque las potencias de los cielos serán sacudidas.\wj* \v 27 \wj Entonces verán al Hijo del Hombre que viene con poder y gran gloria en una nube.\wj* \v 28 \wj Cuando esto suceda, enderécense y alcen sus cabezas porque su redención está cerca.\wj* \p \v 29 Les dijo una parábola: \wj Miren la higuera y todos los árboles.\wj* \v 30 \wj Cuando ven que brotan, ustedes entienden que el verano está cerca.\wj* \v 31 \wj Así también, cuando vean que sucede esto, sepan que está cerca el reino de Dios.\wj* \v 32 \wj En verdad les digo: ¡Que de ningún modo pase este linaje hasta que suceda todo esto!\wj* \v 33 \wj El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras de ningún modo pasarán.\wj* \p \v 34 \wj Estén alerta, no sea que se carguen con relajamiento moral, embriaguez y afanes de la vida, y aquel día aparezca de repente sobre ustedes.\wj* \v 35 \wj Porque vendrá como una trampa sobre todos los habitantes de la tierra.\wj* \v 36 \wj Así que velen en todo tiempo, rueguen que tengan completa fuerza para escapar de todo esto que va a suceder y estar en pie delante del Hijo del Hombre.\wj* \p \v 37 \add Jesús\add* enseñaba de día en el Templo y pasaba las noches en la Montaña de Los Olivos. \p \v 38 En la mañana todo el pueblo acudía a Él para oírlo en el Templo. \c 22 \s1 Una confabulación \p \v 1 Se aproximaba la Pascua, la fiesta de los Panes sin Levadura. \v 2 Los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo matarlo pero temían al pueblo. \p \v 3 Entonces Satanás entró en Judas Iscariote, quien era de los 12. \v 4 Él fue y habló con los principales sacerdotes y magistrados en cuanto a cómo lo entregaría. \v 5 Se regocijaron y acordaron darle plata. \v 6 Él aceptó y buscaba una ocasión para entregárselo sin alboroto. \s1 Celebración de la Pascua \p \v 7 Entonces llegó el día de los Panes sin Levadura. Era necesario sacrificar la pascua. \p \v 8 Envió a Pedro y Juan y les dijo: \wj Vayan, prepárennos la pascua para que la comamos.\wj* \p \v 9 Y ellos le preguntaron: ¿Dónde quieres que \add la\add* preparemos? \p \v 10 Él les contestó: \wj Miren, vayan a la ciudad. Se encontrarán con un hombre que lleva un cántaro de agua. Síganlo hasta la casa donde entre\wj* \v 11 \wj y digan al dueño de \+add la\+add* casa: El Maestro te pregunta: ¿Dónde está el aposento donde comeré la pascua con mis discípulos?\wj* \v 12 \wj Él les mostrará un gran aposento alto ya listo. Preparen allí.\wj* \p \v 13 Ellos fueron y hallaron como les dijo, y prepararon la pascua. \p \v 14 Cuando llegó la hora Él \add se\add* reclinó con los apóstoles \v 15 y les dijo: \wj ¡Ardientemente deseé comer esta pascua con ustedes antes de mi padecimiento!\wj* \v 16 \wj Porque les digo: Que de ningún modo la coma \+add otra vez\+add* hasta que se cumpla en el reino de Dios.\wj* \p \v 17 Tomó una copa, dio gracias y dijo: \wj Tomen esto y repártanlo entre ustedes,\wj* \v 18 \wj porque de ahora en adelante, que de ningún modo beba del fruto de la vid hasta que venga el reino de Dios.\wj* \s1 Origen de la Cena del Señor \p \v 19 Tomó un pan, dio gracias, lo partió, les dio y les dijo: \wj Esto es mi cuerpo que es entregado por ustedes. Hagan esto en memoria de Mí.\wj* \p \v 20 Después de comerlo, \add tomó\add* también la copa y dijo: \wj Esta copa es el Nuevo Pacto en mi sangre, la cual es derramada por ustedes.\wj* \p \v 21 \wj Pero observen, la mano del que me entrega está conmigo en la mesa.\wj* \v 22 \wj Porque en verdad, el Hijo del Hombre se conduce según lo que fue determinado. Pero ¡ay de aquel hombre que lo entrega!\wj* \p \v 23 Ellos discutieron quién sería el que iba a cometer esto. \s1 El mayor \p \v 24 También discutieron entre ellos quién era el más importante. \p \v 25 Entonces Él les dijo: \wj Los reyes de las naciones ejercen señorío sobre ellas, y los que tienen autoridad son llamados benefactores.\wj* \p \v 26 \wj Pero no es así entre ustedes, sino el más importante es como el de menos importancia, y el líder como el que sirve.\wj* \v 27 \wj Porque, ¿quién es más importante, el reclinado o el que sirve? ¿No es el reclinado? Y Yo estoy entre ustedes como el que sirve.\wj* \p \v 28 \wj Pero ustedes son quienes permanecieron conmigo en mis pruebas.\wj* \p \v 29 \wj Como mi Padre me asignó un reino, Yo también lo asigno a ustedes,\wj* \v 30 \wj para que coman y beban a mi mesa en mi reino, y se sienten en tronos a juzgar a las 12 tribus de Israel.\wj* \s1 Anuncio sobre la negación de Pedro \p \v 31 \wj Simón, Simón, piensa esto: Satanás te reclamó para zarandearte como el trigo.\wj* \p \v 32 \wj Pero Yo hablé con Dios por ti para que tu fe no desfallezca. Y tú, cuando vuelvas, fortalece a tus hermanos.\wj* \p \v 33 Pero él le dijo: Señor, estoy listo a ir contigo tanto a \add la\add* cárcel como a \add la\add* muerte. \p \v 34 Él respondió: \wj Pedro, un gallo no cantará hoy hasta que me niegues tres veces.\wj* \s1 Las armas \p \v 35 Y les dijo: \wj Cuando los envié sin bolsa, ni morral, ni sandalias, ¿les faltó algo?\wj* \p Y ellos contestaron: Nada. \p \v 36 \wj Pero ahora, el que tiene bolsa, llévela, y el que tiene morral, también. El que no tiene espada, venda su ropa y compre \+add una\+add*.\wj* \v 37 \wj Porque es necesario que se cumpla en Mí lo que está escrito:\wj* \m \wj Fue contado con inicuos. Porque lo que está escrito de Mí se cumple.\wj* \p \v 38 Ellos dijeron: Señor, aquí hay dos espadas. \p Él les respondió: \wj Es suficiente.\wj* \s1 Conversación con Dios en Getsemaní \p \v 39 Como acostumbraba, fue a la Montaña de Los Olivos, y lo siguieron sus discípulos. \p \v 40 Cuando llegaron al lugar, les dijo: \wj Hablen con Dios para que no entren en tentación.\wj* \p \v 41 Y Él se apartó de ellos como \add a distancia de\add* un tiro de piedra, se arrodilló y hablaba con Dios: \v 42 \wj Padre, si quieres, aparta esta copa de Mí, pero que no se cumpla mi voluntad, sino la tuya.\wj* [[ \v 43-44 ]] \p \v 45 Y cuando terminó de hablar con Dios, fue a los discípulos y los halló dormidos por causa de la tristeza. \v 46 Y les preguntó: \wj ¿Por qué duermen? Levántense, hablen con Dios para que no entren en tentación.\wj* \s1 El arresto del Señor Jesús \p \v 47 Mientras Él hablaba, apareció Judas, uno de los 12, seguido por una turba. Se acercó a Jesús para besarlo. \p \v 48 Jesús le preguntó: \wj Judas, ¿con un beso entregas al Hijo del Hombre?\wj* \p \v 49 Entonces al ver lo que sucedía, los que estaban alrededor de Él dijeron: Señor, dinos si atacamos con espada. \v 50 Uno de ellos atacó al esclavo del sumo sacerdote y le amputó la oreja derecha. \p \v 51 Entonces Jesús dijo: \wj ¡Permitan aun esto!\wj* Y al agarrar la oreja, lo sanó. \p \v 52 Jesús dijo a los principales sacerdotes, oficiales del Templo y ancianos que llegaron contra Él: \wj ¿\+add Ustedes\+add* salieron con espadas y garrotes como contra un bandido?\wj* \v 53 \wj Cada día Yo estaba con ustedes en el Templo, y no extendieron las manos contra Mí. Pero ésta es la hora de ustedes y la potestad de la oscuridad.\wj* \s1 La negación de Pedro \p \v 54 \add Lo\add* arrestaron y \add lo\add* llevaron a la casa del sumo sacerdote. Y Pedro \add lo \add*seguía de lejos. \v 55 Encendieron un fuego en medio del patio y se sentaron alrededor. Pedro se sentó entre ellos. \p \v 56 Entonces una esclava miró fijamente a Pedro quien estaba sentado frente a la lumbre, y dijo: ¡Éste también estaba con Él! \p \v 57 Pero él negó: ¡No lo conozco, mujer! \p \v 58 Un poco después, otro de ellos lo miró y dijo: Tú también eres de ellos. \p Pedro contestó: ¡Hombre, no soy! \p \v 59 Como una hora más tarde, otro afirmaba: En verdad éste también estaba con Él, pues también es galileo. \p \v 60 Pedro respondió: ¡Hombre, no sé lo que dices! \p Y al instante, mientras aún hablaba, un gallo cantó. \p \v 61 El Señor se volvió y miró a Pedro. \p Y él recordó la Palabra que el Señor le dijo: \wj Hoy, antes que un gallo cante, me negarás tres veces\wj*. \v 62 Salió y lloró amargamente. \s1 Jesús ridiculizado y golpeado \p \v 63 Los hombres que lo custodiaban lo ridiculizaban y golpeaban, \v 64 le vendaron los ojos y le decían: Profetiza, ¿quién es el que te golpeó? \v 65 Y decían muchas otras cosas para blasfemar contra Él. \s1 Presentado al Tribunal Supremo de los judíos \p \v 66 Cuando amaneció, se reunieron el presbiterio del pueblo, los principales sacerdotes y los escribas. Lo llevaron ante su Tribunal Supremo \v 67 y le dijeron: Si tú eres el Cristo, dinos. \p Él les respondió: \wj Si les digo, de ningún modo creerían,\wj* \v 68 \wj y si les pregunto, de ningún modo responderían.\wj* \v 69 \wj Pero desde ahora el Hijo del Hombre estará sentado a \+add la\+add* derecha del poder de Dios.\wj* \p \v 70 Y le preguntaron: ¿Entonces Tú eres el Hijo de Dios? \p Él les respondió: \wj Ustedes dicen que Yo soy.\wj* \p \v 71 Entonces ellos preguntaron: ¿Qué necesidad tenemos aún de testimonio? Porque nosotros mismos \add lo\add* oímos de su boca. \c 23 \s1 El Señor Jesús ante Pilato \p \v 1 Todo el gran número de ellos se levantó, y lo llevó ante Pilato. \v 2 Entonces lo acusaron: Hallamos a Éste que descarría a nuestra nación, prohíbe dar tributo a César y dice que Él es Cristo, un Rey. \p \v 3 Entonces Pilato le preguntó: ¿Eres Tú el Rey de los Judíos? \add Jesús\add* respondió: \wj Tú \+add lo\+add* dices.\wj* \p \v 4 Entonces Pilato dijo a los principales sacerdotes y a la multitud: Ningún delito hallo en este hombre. \p \v 5 Pero ellos insistían: Alborota al pueblo. Comenzó desde Galilea y enseñó por toda Judea hasta aquí. \s1 Llevado ante Herodes \p \v 6 Al oír esto Pilato preguntó si el hombre era galileo. \v 7 Cuando supo que era de la jurisdicción de Herodes, lo remitió a éste, quien también estaba en Jerusalén en aquellos días. \p \v 8 Al ver a Jesús, Herodes se regocijó mucho porque hacía largo tiempo que deseaba verlo, pues había oído muchas cosas acerca de Él y esperaba ver algún milagro. \v 9 Le hacía muchas preguntas, pero Él nada respondía. \p \v 10 Los principales sacerdotes y los escribas lo acusaban con vehemencia. \p \v 11 Entonces Herodes junto con sus tropas lo menospreció y se burló de Él. Le puso una ropa espléndida y lo devolvió a Pilato. \v 12 Herodes y Pilato se hicieron amigos aquel día, porque habían estado enemistados. \s1 El juicio y la sentencia \p \v 13 Entonces Pilato convocó a los principales sacerdotes, a los gobernantes y al pueblo, \v 14 y les dijo: \add Ustedes\add* acusaron a este hombre de descarriar al pueblo. Y miren, yo \add lo\add* interrogué delante de ustedes y no hallé ningún delito de los que lo acusan. \v 15 Tampoco Herodes, porque nos \add lo\add* devolvió. Así que nada digno de muerte hallo en él. \v 16 Por tanto \add lo\add* castigaré y \add lo\add* dejaré libre. [[ \v 17 ]] \p \v 18 Pero todos gritaron: Quita a Éste y suéltanos a Barrabás. \v 19 Éste estaba preso por una insurrección en la ciudad y por un homicidio. \p \v 20 Y Pilato, quien quería soltar a Jesús, les volvió a gritar. \p \v 21 Pero ellos vociferaban: ¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo! \p \v 22 Entonces él les preguntó la tercera vez: ¿Qué mal hizo Éste? Ningún delito de muerte hallé en Él. Entonces lo azotaré y \add lo\add* dejaré en libertad. \p \v 23 Pero ellos porfiaban a grandes voces y demandaban que fuera crucificado. Y sus voces prevalecieron. \p \v 24 Pilato sentenció que se ejecutara la demanda de ellos. \v 25 Entonces soltó al que pedían, quien estaba preso en la cárcel por insurrección y homicidio, y entregó a Jesús a la voluntad de ellos. \s1 La crucifixión \p \v 26 Cuando lo llevaban, agarraron a Simón de Cirene, quien venía del campo, y le cargaron la cruz para que \add la\add* llevara detrás de Jesús. \p \v 27 Lo seguía una gran multitud del pueblo y de mujeres que se dolían y lo lamentaban. \p \v 28 Pero Jesús se volvió hacia ellas y les dijo: \wj Hijas de Jerusalén, no lloren por Mí, sino lloren por ustedes y por sus hijos.\wj* \p \v 29 \wj Porque vienen días en los cuales dirán: Inmensamente felices las estériles, los vientres que no concibieron y los pechos que no amamantaron.\wj* \m \v 30 \wj Entonces comenzarán a decir a las montañas: ¡Caigan sobre nosotros! Y a las colinas: ¡Cúbrannos!\wj* \p \v 31 \wj Porque si con el árbol verde hacen estas cosas, ¿qué harán con el seco?\wj* \p \v 32 También llevaban a dos malhechores para ejecutarlos con Él. \p \v 33 Cuando llegaron al lugar llamado Calavera, lo crucificaron allí, y a los malhechores, uno a \add la\add* derecha y otro a \add la\add* izquierda. \p \v 34 Echaron suertes para repartirse sus ropas. \p \v 35 El pueblo observaba. También los gobernantes lo ridiculizaban: Salvó a otros. Sálvese Él mismo, si Él es el Cristo, el Escogido de Dios. \p \v 36 También los soldados se burlaron al acercarse y ofrecerle vinagre. \v 37 Decían: Si Tú eres el Rey de los judíos, sálvate a Ti mismo. \p \v 38 Había también una inscripción encima de Él: \bd Éste es el Rey de los judíos.\bd* \s1 Los dos malhechores \p \v 39 Uno de los malhechores que fue colgado lo blasfemaba: ¿No eres Tú el Cristo? ¡Sálvate a Ti mismo y a nosotros! \p \v 40 Pero el otro lo reprendió: ¿Ni siquiera tú, que estás en la misma condena, temes a Dios? \v 41 Nosotros en verdad justamente recibimos lo que merecemos por lo que hicimos, pero Éste nada malo hizo. \v 42 Y decía: ¡Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu reino! \p \v 43 Le contestó: \wj En verdad te digo: Hoy estarás conmigo en el paraíso.\wj* \s1 Muerte del Señor Jesús \p \v 44 Desde las 12 del día hasta las tres de la tarde hubo oscuridad en toda la tierra. \p \v 45 Al oscurecer el sol, el velo del Templo fue rasgado por el medio. \p \v 46 Y Jesús clamó a gran voz: \wj ¡Padre, encomiendo mi espíritu en tus manos!\wj* Y cuando dijo esto, expiró. \p \v 47 Al ver lo que sucedió, el centurión exaltó a Dios: ¡Realmente este Hombre era justo! \p \v 48 Toda la multitud que llegó para este espectáculo, al ver lo que ocurrió, cuando regresaba se golpeaba el pecho. \p \v 49 Pero todos los conocidos de Él, y mujeres que lo seguían desde Galilea, miraban desde lejos lo que sucedía. \s1 Sepultura del Señor Jesús \p \v 50 Un varón bueno y justo llamado José, miembro del Tribunal Supremo, \v 51 de Arimatea, una ciudad de los judíos, esperaba el reino de Dios. Éste no consintió en la decisión ni en la acción de ellos. \v 52 Él se presentó ante Pilato y pidió el cuerpo de Jesús. \v 53 \add Lo\add* bajó, lo envolvió en una sábana y lo puso en un sepulcro excavado en la roca donde aún nadie había sido puesto. \v 54 Era día de Preparación y empezaba el sábado. \p \v 55 Las mujeres que habían llegado con Él desde Galilea, se fijaron en el sepulcro y cómo fue puesto su cuerpo. \v 56 Regresaron y prepararon especias aromáticas y ungüentos. Y descansaron el sábado según el Mandamiento. \c 24 \s1 Resurrección del Señor Jesús \p \v 1 Muy de mañana el primer \add día\add* de la semana \add las mujeres\add* fueron al sepulcro a llevar las especias aromáticas preparadas. \v 2 Encontraron la piedra del sepulcro rodada, \v 3 entraron y no hallaron el cuerpo del Señor Jesús. \p \v 4 Mientras ellas estaban perplejas por esto, aparecieron dos varones con ropas resplandecientes junto a ellas. \p \v 5 Ellas se atemorizaron e inclinaron su rostro hacia la tierra. Ellos les dijeron: ¿Por qué buscan entre los muertos al que vive? \p \v 6 No está aquí. Fue resucitado. Recuerden lo que les habló cuando estaba aún en Galilea: \v 7 \wj Es necesario que el Hijo del Hombre sea entregado en manos de hombres pecadores, sea crucificado y resucitado al tercer día.\wj* \p \v 8 Se acordaron de sus palabras, \v 9 y al regresar del sepulcro, anunciaron todo esto a los 11 y a los demás. \v 10 Eran María Magdalena, Juana, María, la \add madre\add* de Jacobo, y las demás \add que estaban\add* con ellas, quienes dijeron esto a los apóstoles. \p \v 11 Estas palabras les parecieron como un delirio y se negaban a creerlas. \p \v 12 Pero Pedro corrió al sepulcro, se agachó y vio los lienzos solos. Salió maravillado de lo sucedido. \s1 Una caminata hacia Emaús \p \v 13 El mismo día dos de ellos iban hacia una aldea llamada Emaús, que dista 11 kilómetros\f + \fr 24.13 \fr*\ft Lit. \ft*\fqa 60 estadios.\fqa*\ft Un estadio es igual a 180 metros.\ft*\f* de Jerusalén. \v 14 Conversaban de todas estas cosas que acontecieron. \p \v 15 Ocurrió que cuando ellos conversaban y discutían, el mismo Jesús se acercó e iba con ellos. \p \v 16 Pero los ojos de ellos estaban velados para que no lo reconocieran. \p \v 17 Entonces les preguntó: \wj ¿Cuáles son estas cosas que discuten mientras caminan?\wj* \p Y con semblantes tristes, se detuvieron. \p \v 18 Uno llamado Cleofas le respondió: ¿Eres Tú el único forastero en Jerusalén que no supo lo que sucedió estos días? \p \v 19 Les preguntó: \wj ¿Cuáles?\wj* \p Ellos le respondieron: Las cosas con respecto a Jesús el Nazareno, Quien fue Varón Profeta poderoso en obra y Palabra delante de Dios y el pueblo, \v 20 cómo los principales sacerdotes y nuestros gobernantes lo entregaron para que lo sentenciaran a muerte y lo crucificaran. \p \v 21 Nosotros esperábamos que Él era el que iba a redimir a Israel. Además de todo esto, hoy es el tercer día desde cuando sucedió. \p \v 22 Sin embargo, algunas de nuestras mujeres fueron muy temprano al sepulcro, y nos asombraron, \v 23 pues al no hallar su cuerpo, volvieron y dijeron que tuvieron una visión de ángeles, quienes dijeron que Él vive. \p \v 24 Algunos de los nuestros fueron al sepulcro y \add lo\add* hallaron tal como dijeron las mujeres, pero a Él no \add lo\add* vieron. \p \v 25 Y Él les respondió: \wj ¡Oh insensatos y lentos del corazón para creer en todo lo que dijeron los profetas!\wj* \v 26 \wj ¿No era necesario que el Cristo padeciera esto y que entrara en su gloria?\wj* \v 27 Comenzó desde Moisés y de todos los profetas y les explicó en todas las Escrituras las cosas relacionadas con Él mismo. \p \v 28 Llegaron cerca de la aldea a la cual iban, y Él actuó como si fuera más lejos. \p \v 29 Pero ellos le insistieron: Quédate con nosotros, porque es tarde y el día ya declinó. Entró para estar con ellos. \p \v 30 Al reclinarse con ellos, tomó el pan, dio gracias, lo partió y les dio. \p \v 31 Entonces los ojos de ellos fueron abiertos y lo reconocieron, pero Él se volvió invisible. \v 32 Y se dijeron el uno al otro: ¿No ardía nuestro corazón \add cuando \add*nos hablaba en el camino, cuando nos abría las Escrituras? \p \v 33 En aquella misma hora regresaron a Jerusalén. Hallaron a los 11 reunidos y a los que estaban con ellos, \v 34 quienes decían: ¡Realmente fue resucitado el Señor y fue visto por Simón! \v 35 Ellos contaron lo que \add sucedió\add* en el camino, y cómo se dio a conocer a ellos cuando partió el pan. \s1 Aparición de Jesús \p \v 36 Mientras ellos hablaban esto, Él mismo apareció en medio de ellos y les dijo: \wj Paz a ustedes.\wj* \p \v 37 Se aterrorizaron y se espantaron. Pensaban que era un espíritu. \p \v 38 Pero Él les preguntó: \wj ¿Por qué están turbados, y por qué surgen dudas en sus corazones?\wj* \v 39 \wj Miren mis manos y mis pies. ¡Yo mismo soy! Tóquenme y vean, pues un espíritu no tiene carne ni huesos, como ven que tengo Yo.\wj* \p \v 40 Cuando dijo esto les mostró las manos y los pies. \v 41 Pero como ellos no creían por causa del gozo y del asombro, les preguntó: \wj ¿Tienen aquí algo para comer?\wj* \p \v 42 Entonces ellos le dieron parte de un pescado asado. \v 43 \add Lo\add* tomó y comió delante de ellos, \v 44 y les dijo: \wj Cuando todavía estaba con ustedes les anuncié que era necesario que se cumplieran todas las cosas escritas con respecto a Mí en la Ley de Moisés, los profetas \+add y los\+add* Salmos.\wj* \p \v 45 Entonces les abrió el entendimiento para que comprendieran las Escrituras \v 46 y les dijo: \wj Así está escrito, que el Cristo padecería y sería resucitado de entre \+add los\+add* muertos al tercer día,\wj* \v 47 \wj y que, al comenzar desde Jerusalén, sería predicado en su Nombre \+add el\+add* cambio de mente para perdón de pecados a todas las naciones\wj*. \p \v 48 \wj Ustedes son testigos de esto\wj*. \v 49 \wj Yo envío la promesa de mi Padre sobre ustedes. Permanezcan en la ciudad hasta que sean investidos de poder de lo alto.\wj* \s1 Ascensión de nuestro Señor \p \v 50 Los condujo hasta Betania, alzó sus manos y los bendijo. \p \v 51 Mientras los bendecía, Él partió de ellos y fue llevado al cielo. \p \v 52 Lo adoraron y regresaron a Jerusalén con gran gozo. \p \v 53 Estaban siempre en el Templo y alababan a Dios.