\id 2KI \ide UTF-8 \h 2 Reyes \toc3 2 R \toc2 2 Reyes \toc1 Segundo libro de los Reyes \mt 2 Reyes \c 1 \s1 Ministerio de Elías para el rey Ocozías \p \v 1 Después de la muerte de Acab, Moab se rebeló contra Israel. \v 2 Ocozías cayó por la ventana de la sala en el nivel superior de su casa en Samaria. Cuando estaba enfermo envió mensajeros y les dijo: Vayan y consulten a Baal-zebub, \tl ʼelohim\tl* de Ecrón, si sanaré de esta enfermedad. \p \v 3 Entonces el Ángel de \nd Yavé\nd* dijo a Elías tisbita: \wj Levántate, sube a encontrar a los mensajeros del rey de Samaria y diles: ¿Porque no hay \+nd ʼElohim\+nd* en Israel, van a consultar a Baal-zebub, el \+tl ʼelohim\+tl* de Ecrón?\wj* \v 4 \wj Por tanto, \+nd Yavé\+nd* dice: No bajarás del lecho al que subiste. Ciertamente morirás.\wj* Y Elías se fue. \p \v 5 Cuando los mensajeros volvieron a él, les preguntó: ¿Por qué regresaron? \p \v 6 Y respondieron: Salió un hombre a encontrarse con nosotros, y nos dijo: Vayan, vuelvan al rey que los envió y díganle: \nd Yavé\nd* dice: \wj ¿Porque no hay \+nd ʼElohim\+nd* en Israel, tú mandas a consultar a Baal-zebub, \+tl ʼelohim\+tl* de Ecrón? Por tanto, no bajarás del lecho al que subiste, pues ciertamente morirás.\wj* \p \v 7 Entonces él les preguntó: ¿Cómo era aquel hombre que salió a encontrarlos y dijo estas palabras? \p \v 8 Y le respondieron: Es un hombre velludo, con un cinturón de cuero atado a su cintura. \p Y él dijo: Es Elías tisbita. \p \v 9 Entonces le envió un jefe de 50 con sus 50, quien subió a \add Elías\add*, porque estaba sentado en la cumbre de la montaña, y le dijo: ¡Varón de \nd ʼElohim\nd*, el rey ordenó quen bajes! \p \v 10 Elías respondió al jefe de 50: Si yo soy varón de \nd ʼElohim\nd*, ¡que baje fuego del cielo y te consuma, a ti y a tus 50! Y bajó fuego del cielo y los consumió a todos. \p \v 11 Y volvió a enviarle otro jefe de 50 con sus 50, quien le dijo: Varón de \nd ʼElohim\nd*, el rey dijo: ¡Apresúrate y baja! \p \v 12 Y Elías respondió: Si yo soy varón de \nd ʼElohim\nd*, ¡que baje fuego del cielo y te consuma, a ti y a tus 50! Y bajó fuego de \nd ʼElohim\nd* y los consumió a todos. \p \v 13 Volvió a enviar un tercer jefe de 50 con sus 50. Pero el tercer jefe de 50 subió, se postró de rodillas delante de Elías y le suplicó: Varón de \nd ʼElohim\nd*, te ruego que mi vida y la vida de estos 50 esclavos tuyos sea valiosa ante ti. \v 14 Ciertamente, fuego del cielo bajó y consumió a los dos anteriores jefes de 50 con sus 50. ¡Ahora pues, te ruego que mi vida sea valiosa ante ti! \p \v 15 Entonces el Ángel de \nd Yavé\nd* dijo a Elías: \wj Baja con él. No le temas.\wj* Y se levantó y bajó con él al rey \add Ocozías\add*. \p \v 16 Y le dijo: \nd Yavé\nd* dice: \wj Por cuanto enviaste mensajeros a consultar con Baal-zebub, el \+tl ʼelohim\+tl* de Ecrón, como si no hubiera \+nd ʼElohim\+nd* en Israel para consultar su Palabra, no bajarás del lecho al que subiste. Ciertamente morirás.\wj* \p \v 17 \add Ocozías\add* murió según la Palabra de \nd Yavé\nd* que Elías dijo. \p Joram reinó en su lugar el año segundo de Joram, hijo de Josafat, rey de Judá, porque Ocozías no tuvo hijo. \v 18 Los demás hechos de Ocozías, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \c 2 \s1 Arrebatamiento de Elías al cielo en presencia de Eliseo \p \v 1 Aconteció que cuando \nd Yavé\nd* iba a alzar a Elías en un remolino de viento al cielo, Elías iba de Gilgal con Eliseo. \p \v 2 Elías dijo a Eliseo: Quédate aquí, porque \nd Yavé\nd* me envió a Bet-ʼEl. \p Y Eliseo respondió: ¡Vive \nd Yavé\nd* y vive tu alma que no te dejaré! Entonces bajaron a Bet-ʼEl. \p \v 3 Los hijos de los profetas que estaban en Bet-ʼEl salieron a encontrar a Eliseo y le preguntaron: ¿Sabes que \nd Yavé\nd* arrebata hoy a tu \tl ʼadón\tl* de encima de tu cabeza? Y él respondió: Sí, lo sé, callen. \p \v 4 Elías le dijo: Eliseo, quédate aquí, porque \nd Yavé\nd* me envió a Jericó. \p Y él dijo: ¡Vive \nd Yavé\nd* y vive tu alma que no te dejaré! Y fueron a Jericó. \p \v 5 Los hijos de los profetas que estaban en Jericó llegaron a Eliseo y le preguntaron: ¿Sabes que \nd Yavé\nd* quitará hoy a tu \tl ʼadón\tl* de encima de tu cabeza? \p Y él dijo: Sí, lo sé, callen. \p \v 6 Elías le dijo: Quédate aquí, porque \nd Yavé\nd* me envió al Jordán. \p Y él dijo: ¡Vive \nd Yavé\nd* y vive tu alma, que no te dejaré! \p Y ambos fueron. \p \v 7 50 hombres de los hijos de los profetas fueron y se detuvieron a lo lejos frente a ellos. También ellos dos se detuvieron junto al Jordán. \v 8 Entonces Elías tomó su manto y lo dobló. Golpeó las aguas, y se separaron a uno y otro lado. Ambos cruzaron por tierra seca. \p \v 9 Sucedió que cuando cruzaban, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieras que haga por ti antes que sea arrebatado de tu lado. \p Y Eliseo respondió: ¡Te ruego que una doble porción de tu espíritu pose sobre mí! \p \v 10 Y él le dijo: Cosa difícil pediste. Si me ves cuando sea arrebatado de tu lado, te será concedida. Si no me ves, no. \p \v 11 Mientras ellos caminaban y hablaban, ciertamente una carroza de fuego con caballos de fuego apartó a los dos. Elías subió al cielo por medio de un remolino de viento. \v 12 Al verlo Eliseo clamaba: ¡Padre mío, padre mío! ¡Carroza y jinete de Israel! Y no lo vio más. Entonces tomó sus ropas y las rasgó en dos pedazos. \p \v 13 Recogió el manto de Elías que se le cayó. Regresó y se detuvo a la orilla del Jordán. \v 14 Al tomar el manto de Elías que se le cayó, golpeó las aguas y dijo: ¿Dónde está \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de Elías? Cuando \add Eliseo\add* golpeó las aguas, también se dividieron a uno y otro lado, y Eliseo cruzó. \p \v 15 Cuando los hijos de los profetas que estaban al otro lado en Jericó lo vieron, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre Eliseo. \p Luego fueron a encontrarlo, se postraron en tierra ante él \v 16 y le dijeron: Mira, ahora hay 50 hombres fuertes con tus esclavos. Que ellos vayan y busquen a tu \tl ʼadón\tl*, no sea que el Espíritu de \nd Yavé\nd* lo haya levantado y lo haya colocado en alguna montaña o valle. Pero él respondió: No los envíen. \p \v 17 Pero ellos le insistieron tanto que él se avergonzó y dijo: ¡Envíen! Y enviaron 50 hombres que buscaron tres días y no lo hallaron. \v 18 Volvieron cuando él estaba en Jericó. Entonces les preguntó: ¿No les dije: No vayan? \p \v 19 Luego los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: Ciertamente el sitio de esta ciudad es bueno, como ve mi \tl ʼadón\tl*, pero las aguas son malas y la tierra es estéril. \p \v 20 Entonces él dijo: Tráiganme una vasija nueva y pongan allí sal. Y se la llevaron. \p \v 21 Salió al manantial, echó allí la sal y dijo: \nd Yavé\nd* dice: \wj Yo sané estas aguas. No habrá más muerte ni esterilidad por causa de ellas.\wj* \v 22 Y las aguas fueron sanadas hasta hoy, según la Palabra que Eliseo habló. \p \v 23 De allí subió a Bet-ʼEl. \p Mientras iba por el camino, salieron unos muchachos de la ciudad que se burlaban de él y le decían: ¡Sube, calvo! ¡Sube, calvo! \v 24 Él se volvió para verlos. Los miró y los maldijo en el Nombre de \nd Yavé\nd*. Y salieron del bosque dos osas que destrozaron a 42 de aquellos muchachos. \p \v 25 De allí fue a la montaña Carmelo, y desde allí volvió a Samaria. \c 3 \s1 Joram, rey de Israel \p \v 1 El año 18 de Josafat, rey de Judá, Joram, hijo de Acab, fue rey de Israel en Samaria, y reinó 12 años. \v 2 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, aunque no tanto como su padre y su madre, pues quitó la imagen de baal que erigió su padre. \v 3 Sin embargo, persistió en los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel. No se apartó de ellos. \s1 Guerra contra Moab \p \v 4 Entonces Mesa, rey de Moab, era criador de ovejas y tributaba al rey de Israel 100.000 corderos, y la lana de 100.000 carneros. \v 5 Pero cuando Acab murió, sucedió que el rey de Moab se rebeló contra el rey de Israel. \p \v 6 Aquel día el rey Joram salió de Samaria y pasó revista a todo Israel. \p \v 7 También envió a decir a Josafat, rey de Judá: El rey de Moab se rebeló contra mí. ¿Vas conmigo a la guerra contra Moab? Y él respondió: Sí, voy. Yo soy como tú, mi pueblo como tu pueblo y mis caballos como los tuyos. \p \v 8 Y añadió: ¿Por cuál camino iremos? \p Y \add Joram\add* respondió: Por el camino del desierto de Edom. \p \v 9 El rey de Israel, el rey de Judá, y el rey de Edom salieron. Rodearon y anduvieron por el desierto siete días, hasta que no hubo agua para el campamento ni para las bestias que los seguían. \p \v 10 Entonces el rey de Israel dijo: ¡Ay! ¡\nd Yavé\nd* trajo a estos tres reyes para entregarlos en manos de Moab! \p \v 11 Pero Josafat preguntó: ¿No hay aquí un profeta de \nd Yavé\nd* para que consultemos a \nd Yavé\nd* por medio de él? \p Entonces uno de los esclavos del rey de Israel respondió: Aquí está Eliseo, hijo de Safat, quien vertía agua en las manos de Elías. \v 12 Y Josafat dijo: La Palabra de \nd Yavé\nd* está con él. Y el rey de Israel, el rey de Edom y Josafat fueron a él. \p \v 13 Eliseo preguntó al rey de Israel: ¿Qué tengo yo contigo? Vete a los profetas de tu padre y tu madre. \p Pero el rey de Israel le respondió: No, porque \nd Yavé\nd* reunió a estos tres reyes para entregarlos en manos de Moab. \p \v 14 Entonces Eliseo dijo: ¡Vive \nd Yavé\nd* de las huestes, ante Quien estoy, que si no fuera por respeto a la presencia de Josafat, rey de Judá, no te haría caso ni te miraría! \v 15 Pero, tráiganme ahora un tañedor. \p Sucedió que mientras el tañedor tañía, la mano de \nd Yavé\nd* vino sobre Eliseo \v 16 y dijo: \wj \+nd Yavé\+nd* dice: Hagan en este valle muchas zanjas,\wj* \v 17 \wj porque \+nd Yavé\+nd* dice: No verán viento ni lluvia, pero este valle se llenará de agua, y beberán ustedes, sus bestias y ganado.\wj* \v 18 \wj Si esto es poco ante \+nd Yavé\+nd*, Él también entregará a los moabitas en manos de ustedes.\wj* \v 19 \wj Destruirán toda ciudad fortificada y todo pueblo importante, talarán todo árbol bueno, cerrarán toda fuente de agua y arruinarán con piedras toda tierra fértil.\wj* \p \v 20 Sucedió que a la hora de ofrecer el sacrificio de la mañana, ciertamente llegó agua por el camino de Edom, y la tierra se llenó de agua. \p \v 21 Cuando todos los de Moab oyeron que los reyes iban a luchar contra ellos, convocaron a todos, desde los que apenas se ataban las armas en adelante, y tomaron posición en la frontera. \v 22 Cuando se levantaron por la mañana, el sol brillaba sobre las aguas. Los de Moab vieron desde lejos las aguas rojas como sangre \v 23 y dijeron: ¡Es sangre! Ciertamente los reyes se atacaron el uno al otro y se mataron unos con otros. Ahora pues, Moab: ¡Al botín! \p \v 24 Pero cuando llegaron al campamento de Israel, se levantaron los israelitas y atacaron a los de Moab, quienes huyeron de ellos. Pero los persiguieron y mataron a los moabitas. \v 25 Asolaron las ciudades. En todas las tierras fértiles cada uno echó su piedra y la llenaron. Cerraron toda fuente de agua. Talaron todos los árboles buenos. Incluso a Kir-herés solo le quedaron piedras, después que los honderos la cercaron y la destruyeron. \p \v 26 Cuando el rey de Moab vio que la batalla arreciaba contra él, tomó consigo 700 hombres que sacaban espada, para atacar al rey de Edom, pero no pudieron. \v 27 Entonces tomó a su hijo primogénito que iba a reinar en su lugar y lo ofreció en holocausto sobre el muro. Hubo una gran ira contra Israel. Ellos salieron de allí y volvieron a su tierra. \c 4 \s1 Hechos de Eliseo \s1 Provisión de aceite para una viuda \p \v 1 Cierta viuda, de las esposas de los hijos de los profetas, clamó a Eliseo: Tu esclavo, mi esposo, murió. Tú sabes que tu esclavo era temeroso de \nd Yavé\nd*. Ahora un acreedor vino a tomar a mis dos hijos como esclavos suyos. \p \v 2 Eliseo le preguntó: ¿Qué puedo hacer por ti? Dime qué tienes en casa. \p Y ella respondió: Tu esclava no tiene alguna cosa en su casa, sino una vasija de aceite. \p \v 3 Y le dijo: Vé a pedir vasijas a todas tus vecinas, vasijas vacías, no pocas. \v 4 Luego entra y enciérrate con tus hijos, y echa aceite en todas las vasijas. Pon aparte las que estén llenas. \p \v 5 Ella se alejó de él y se encerró con sus hijos. Ellos le llevaban las vasijas, y ella vertía el aceite. \v 6 Sucedió que cuando las vasijas estaban llenas, dijo a un hijo suyo: Tráeme otra vasija. \p Y él respondió: No hay más vasijas. Entonces cesó el aceite. \p \v 7 Ella fue y se lo dijo al varón de \nd ʼElohim\nd*. Y él dijo: Vé, vende el aceite y paga tu deuda. Vive con tus hijos de lo que quede. \s1 Cuidados de una sunamita para Eliseo \p \v 8 También aconteció un día, que Eliseo pasaba por Sunem. Había allí una mujer distinguida, la cual lo invitaba con insistencia a comer. Sucedió que siempre que pasaba por allí, él entraba a comer. \v 9 Y ella dijo a su esposo: Mira, ahora sé que el hombre que siempre pasa por nuestra casa es un santo varón de \nd ʼElohim\nd*. \v 10 Te ruego que hagamos un pequeño aposento de paredes en la azotea. Pongamos allí una cama, una mesa, una silla y un candelero, para que cuando venga entre allí. \p \v 11 Sucedió que un día fue allí. Se quedó en aquel aposento y allí durmió. \v 12 Luego dijo a su esclavo Giezi: Llama a esta sunamita. Cuando la llamó, ella se presentó ante él. \p \v 13 Y le dijo a Giezi: Dile: Mira, estuviste solícita por nosotros con todo este esmero. ¿Qué quieres que haga por ti? ¿Quieres que hable por ti al rey o al jefe del ejército? Pero ella respondió: Yo vivo en medio de mi pueblo. \p \v 14 Y él dijo a Giezi: ¿Qué haremos por ella? \p Y respondió Giezi: En verdad ella no tiene hijos, y su esposo es anciano. \s1 Profecía con respecto a un hijo para la sunamita \p \v 15 Y él dijo: Llámala. Así que la llamó y ella se detuvo en la puerta. \v 16 Y él dijo: El año que viene, por este tiempo, abrazarás a un hijo. \p Pero ella respondió: ¡No, \tl ʼadón\tl* mío, varón de \nd ʼElohim\nd*, no engañes a tu esclava! \p \v 17 Pero la mujer concibió y dio a luz un hijo en el tiempo que Eliseo le dijo. \s1 Muerte del hijo de la sunamita \p \v 18 El niño creció. Pero sucedió que un día, cuando salió con su padre y con los cosechadores, \v 19 dijo a su padre: ¡Ay, mi cabeza, mi cabeza! \p Y él dijo al esclavo: Llévalo a su madre. \v 20 Cuando lo llevó a su madre, se sentó en sus rodillas hasta el mediodía, y luego murió. \v 21 Ella subió y lo acostó en la cama del varón de \nd ʼElohim\nd*, cerró la puerta y salió. \p \v 22 Luego llamó a su esposo y le dijo: Mándame ahora a uno de los esclavos y una de las asnas, para que yo vaya rápido a hablar al varón de \nd ʼElohim\nd* y vuelva. \p \v 23 Pero él preguntó: ¿Por qué tienes que ir a hablar con él hoy? No es luna nueva, ni sábado. \p Ella respondió: Paz. \v 24 Aparejó el asna y dijo al esclavo: Arrea y anda sin detenerte, a menos que te lo diga. \p \v 25 Fue y llegó al varón de \nd ʼElohim\nd* en la montaña Carmelo. \p Y sucedió que cuando el varón de \nd ʼElohim\nd* la vio de lejos, dijo a su esclavo Giezi: Aquí está la sunamita. \v 26 Corre ahora a encontrarla y pregúntale: ¿Te va bien? ¿Están bien tu esposo y tu hijo? \p Ella respondió: Bien. \p \v 27 Pero al llegar a la montaña, ante el varón de \nd ʼElohim\nd*, ella se aferró a sus pies. Giezi se acercó para apartarla, pero el varón de \nd ʼElohim\nd* dijo: Déjala, porque su alma está en amargura. \nd Yavé\nd* me ocultó el asunto, y no me lo declaró. \p \v 28 Entonces ella dijo: ¿Pedí yo un hijo a mi \tl ʼadon\tl*? ¿No te dije que no me engañaras? \p \v 29 Entonces él dijo a Giezi: Ata tu cintura, toma mi bastón en tu mano y vete. Si alguno te encuentra, no lo saludes, y si alguien te saluda, no respondas. Pon mi bastón sobre la cara del niño. \p \v 30 Y la madre del niño dijo: Vive \nd Yavé\nd* y vive tu alma que no te dejaré. Y él se levantó y la siguió. \p \v 31 Giezi se adelantó a ellos y puso el bastón sobre la cara del niño, pero no hubo voz ni reacción. Así que regresó a encontrase con Eliseo y le declaró: El niño no despierta. \p \v 32 Cuando Eliseo llegó a la casa, ahí estaba el niñito muerto, tendido sobre su cama. \v 33 Entonces entró, se encerraron los dos y oró a \nd Yavé\nd*. \v 34 Después subió y se echó sobre el niño. Puso su boca sobre la de él, sus ojos sobre los de él, y sus manos sobre las de él. Se tendió sobre él, y la carne del niño se calentó. \v 35 Luego volvió, y caminó de un lado a otro de la casa. Después subió, se tendió sobre él, y el niñito estornudó siete veces y abrió sus ojos. \p \v 36 Entonces llamó a Giezi: Llama a esta sunamita. La llamó. Cuando ella llegó, él le dijo: ¡Alza a tu hijo! \v 37 Ella entonces entró y cayó a sus pies postrada en tierra. Después alzó a su hijo y salió. \s1 La muerte en la olla \p \v 38 Eliseo volvió a Gilgal. Había entonces una hambruna en la tierra. Los hijos de los profetas se sentaron delante de él, y él dijo a su esclavo: Prepara la olla grande y prepara un guiso para los hijos de los profetas. \p \v 39 Uno de ellos salió al campo a recoger hierbas. Encontró una vid silvestre y recogió de ella calabazas silvestres hasta llenar su faldón. Regresó y las echó en la olla del guiso, aunque no sabían qué eran. \v 40 Luego sirvieron a los hombres para que comieran. Pero sucedió que cuando comían el guiso, gritaron: ¡Varón de \nd ʼElohim\nd*, hay muerte en la olla! Y no pudieron comer. \p \v 41 Entonces él dijo: Tráiganme harina. Y la echó en la olla y dijo: Sirve a la gente para que coma. Y nada malo hubo en la olla. \s1 Multiplicación de panes \p \v 42 Entonces llegó un hombre de Baal-salisa, y llevó para el varón de \nd ʼElohim\nd* pan de las primicias: 20 panes de cebada con espigas de trigo nuevo. Y Eliseo dijo: Dalo a la gente para que coma. \p \v 43 Pero su esclavo preguntó: ¿Cómo serviré esto a 100 hombres? \p Y él respondió: Dalo a la gente para que coma, porque \nd Yavé\nd* dice: \wj Comerán, y sobrará.\wj* \v 44 Y lo sirvió. Comieron y les sobró, según la Palabra de \nd Yavé\nd*. \c 5 \s1 Aventuras del general Naamán \p \v 1 Naamán, general del ejército del rey de Siria, era un hombre muy estimado por su \tl ʼadón\tl* porque \nd Yavé\nd* dio victoria a Siria por medio de él. Era además muy valiente, pero leproso. \p \v 2 Los sirios salieron en incursiones, y llevaron cautiva a una muchacha de la tierra de Israel, la cual servía a la esposa de Naamán. \v 3 Y ella dijo a su \tl ʼadón\tl*: ¡Deseo que mi \tl ʼadón\tl* vaya al profeta que está en Samaria! Él lo sanaría de su lepra. \p \v 4 Naamán fue e informó a su \tl ʼadón\tl*: Así y así dijo la muchacha que es de la tierra de Israel. \v 5 Y el rey de Siria dijo: Vé allí con una carta para el rey de Israel. Salió y llevaba consigo 330 kilogramos de plata, 7.000 piezas de oro y diez mudas de ropa. \v 6 Llevó la carta al rey de Israel, la cual decía: Ahora pues, cuando esta carta llegue a ti, ciertamente te envío a mi esclavo Naamán, para que lo sanes de su lepra. \p \v 7 Sucedió que al leer la carta, el rey de Israel rasgó sus ropas y dijo: ¿Soy yo \nd ʼElohim\nd* que mata o da vida, para que éste me envíe a un hombre y espere que yo lo sane de su lepra? Consideren ahora, y vean cómo busca ocasión contra mí. \p \v 8 Pero aconteció que al oír Eliseo, el varón de \nd ʼElohim\nd*, que el rey de Israel rasgó sus ropas, envió a decir al rey: ¿Por qué rasgaste tus ropas? Que venga a mí y sabrá que hay profeta en Israel. \v 9 Entonces Naamán fue con sus caballos y sus carruajes, y se detuvo en la puerta de la casa de Eliseo. \v 10 Eliseo le envió un mensajero, quien le dijo: Vé y lávate siete veces en el Jordán. Tu carne te será restaurada y será limpia. \p \v 11 Naamán salió airado y dijo: Ciertamente yo pensaba: Él saldrá luego, en pie invocará el Nombre de \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, moverá su mano por encima del lugar y sanará la lepra. \v 12 ¿Abana y Farfar, ríos de Damasco, no son mejores que todas las aguas de Israel? ¿No puedo yo lavarme en ellos y ser limpio? Y dio la vuelta y salió airado. \p \v 13 Pero sus esclavos se le acercaron y le dijeron: Padre mío, si el profeta te mandara alguna cosa grande, ¿no la harías? ¿Cuánto más cuando te dice: Lávate y serás limpio? \v 14 Entonces bajó y se sumergió siete veces en el Jordán, según la palabra del varón de \nd ʼElohim\nd*. Y su cuerpo se volvió como el cuerpo de un niño y quedó limpiado. \p \v 15 Enseguida volvió al varón de \nd ʼElohim\nd* con toda su comitiva. Se presentó ante él y dijo: Mira, ahora reconozco que no hay \nd ʼElohim\nd* en toda la tierra, sino en Israel. ¡Te ruego que recibas algún presente de tu esclavo! \p \v 16 Pero él respondió: ¡Vive \nd Yavé\nd*, delante de Quien estoy, que no lo tomaré! E insistió que aceptara alguna cosa, pero él no quiso. \p \v 17 Naamán dijo: Pues entonces, te ruego que sea dada a tu esclavo la carga de tierra para un par de mulas, pues tu esclavo ya no ofrecerá holocausto ni sacrificio a otros \tl ʼelohim\tl*, sino a \nd Yavé\nd*. \v 18 En esto perdone \nd Yavé\nd* a tu esclavo: cuando mi \tl ʼadón\tl* entre al templo de Rimón para postrarse allí y se apoye en mi mano, y yo me incline en el templo de Rimón cuando yo tenga que hacerlo, perdone \nd Yavé\nd* a tu esclavo en esto. \p \v 19 Y él le dijo: Vé en paz. \p Se había alejado de él cierta distancia, \v 20 cuando Giezi, esclavo de Eliseo, varón de \nd ʼElohim\nd*, pensó: Ciertamente mi \tl ʼadón\tl* se inclinó a perdonar a este sirio Naamán al no recibir de su mano lo que traía. Pero, ¡vive \nd Yavé\nd*, que de seguro correré tras él para tomar algo de él! \p \v 21 Giezi siguió a Naamán. Cuando Naamán vio que corría tras él, se bajó del carruaje para recibirlo y preguntó: ¿Está todo bien? \p \v 22 Y él dijo: Todo bien. Mi \tl ʼadón\tl* me envió y dijo: Mira, en este momento llegaron a mí de la región montañosa de Efraín dos jóvenes de los hijos de los profetas: Te ruego que les des 33 kilogramos de plata y dos mudas de ropa. \p \v 23 Naamán dijo: Toma, por favor, 66 kilogramos. Le insistió, y ató los 66 kilogramos de plata en dos bolsas con dos mudas de ropa. Las entregó a dos de sus esclavos, quienes las llevaron delante de él. \v 24 Cuando llegaron a la colina las tomó de las manos de ellos y las puso en la casa, despachó a los hombres, quienes regresaron. \p \v 25 Y él entró y se detuvo ante su \tl ʼadón\tl*. Entonces Eliseo le preguntó: ¿De dónde vienes, Giezi? \p Y éste respondió: Tu esclavo no fue a alguna parte. \p \v 26 Pero él le dijo: ¿No iba mi corazón contigo cuando el hombre se volvió de su carruaje a encontrarte? ¿Es tiempo de recibir plata, de tomar ropas, olivares, viñas, ovejas, bueyes, esclavos y esclavas? \v 27 Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti, y a tu descendencia para siempre. Y salió de su presencia leproso, blanco como la nieve. \c 6 \s1 La flotación de un hacha \p \v 1 Los hijos de los profetas dijeron a Eliseo: Mira, el lugar donde vivimos delante de ti es estrecho para nosotros. \p \v 2 Te rogamos que nos permitas ir al Jordán, para que cada uno tome de allí un madero, y nos hagamos allí un lugar donde podamos vivir. Y él dijo: Vayan. \p \v 3 Y dijo uno: Te rogamos que vayas con tus esclavos. \p Y él respondió: Yo iré. \p \v 4 Así que fue con ellos, y cuando llegaron al Jordán, cortaron unos árboles. \p \v 5 Aconteció que mientras uno de ellos cortaba un árbol, se le cayó el hierro al agua, y gritó: ¡Ay, \tl ʼadón\tl* mío! ¡Era prestada! \p \v 6 Y el varón de \nd ʼElohim\nd* preguntó: ¿Dónde cayó? Y le mostró el lugar. Entonces él cortó un palo, lo echó allí e hizo flotar el hierro. \v 7 Y dijo: Tómalo. Y él extendió su mano y lo tomó. \s1 Persecución de un gran ejército de Siria contra Eliseo \p \v 8 El rey de Siria tenía guerra contra Israel. Al consultar con sus esclavos dijo: En tal lugar estará mi campamento. \p \v 9 Entonces el varón de \nd ʼElohim\nd* envió a decir al rey de Israel: Cuídate de pasar por tal lugar, porque los sirios van a bajar allí. \v 10 El rey de Israel envió gente al lugar que el varón de \nd ʼElohim\nd* le indicó. Así fue advertido y él fue vigilante allí, no una ni dos veces. \p \v 11 El corazón del rey de Siria estaba turbado por tal motivo. Llamó a sus esclavos y les preguntó: ¿No me dirán ustedes quién de los nuestros está a favor del rey de Israel? \p \v 12 Y uno de sus esclavos respondió: No, rey y \tl ʼadón\tl* mío. Es el profeta Eliseo que está en Israel, quien revela al rey de Israel las palabras que tú hablas en el interior de tu aposento. \p \v 13 Y él dijo: Vayan y averigüen dónde está, para que yo envíe a detenerlo. Y le fue dicho: Mira, está en Dotán. \v 14 Entonces el rey envió allá caballería, carruajes y un gran ejército, los cuales llegaron de noche y rodearon la ciudad. \p \v 15 Cuando el esclavo del varón de \nd ʼElohim\nd* madrugó para salir, ahí estaba un ejército con caballos y carruajes rodeando la ciudad. Entonces el esclavo le dijo: ¡Ay, \tl ʼadón\tl* mío! ¿Qué haremos? \p \v 16 Él respondió: No temas, porque más son los que están con nosotros que los que están con ellos. \v 17 Eliseo oró: ¡Oh \nd Yavé\nd*, te ruego que abras sus ojos para que mire! Y \nd Yavé\nd* abrió los ojos del esclavo, y miró. Ciertamente la montaña estaba repleta de caballos y carruajes de fuego alrededor de Eliseo. \p \v 18 Cuando bajaron contra él, Eliseo oró a \nd Yavé\nd*: Te ruego que hieras a esta gente con ceguera. Y Él los hirió con una ceguera total según la palabra de Eliseo. \p \v 19 Entonces Eliseo les dijo: Este no es el camino, ni ésta es la ciudad. Síganme y los llevaré al varón que buscan. Y los condujo a Samaria. \p \v 20 Cuando llegaron a Samaria, sucedió que Eliseo dijo: Oh \nd Yavé\nd*, abre los ojos de éstos para que puedan mirar. Y \nd Yavé\nd* abrió sus ojos, y miraron. Ciertamente estaban en medio de Samaria. \p \v 21 Y cuando el rey de Israel los vio, preguntó a Eliseo: ¿Los mato? Padre mío, ¿Los mato? \p \v 22 Y él dijo: No los mates. ¿Matarías tú a los que capturaste con tu espada y con tu arco? Sírveles pan y agua, para que coman y beban, y vuelvan a sus \tl ʼadón\tl*. \v 23 Entonces preparó una gran comida para ellos. Cuando comieron y bebieron, los dejó ir, y regresaron a sus \tl ʼadón\tl*. Nunca más volvieron bandas armadas de Siria a la tierra de Israel. \s1 Inicio del sitio a Samaria por parte del rey de Siria \p \v 24 Después de esto, sucedió que Ben-adad, rey de Siria, reunió todo su ejército, salió y sitió a Samaria. \v 25 Hubo una gran hambruna en Samaria, pues estaba sitiada, hasta el punto que la cabeza de un asno era vendida por 80 piezas de plata, y 0,3 litros de estiércol de paloma por cinco piezas de plata. \p \v 26 Sucedió que cuando el rey de Israel pasaba por el muro, una mujer clamó a él: ¡Auxilio, mi \tl ʼadón\tl*, oh rey! \p \v 27 Y él dijo: Si \nd Yavé\nd* no te salva, ¿de dónde te salvo yo? ¿Con algo del granero o del lagar? \v 28 Y el rey agregó: ¿Qué tienes? \p Y ella respondió: Esta mujer me dijo: Entrega a tu hijo para que lo comamos hoy, y mañana comeremos el mío. \v 29 Cocimos, pues, a mi hijo y lo comimos. Al día siguiente le dije: Entrega a tu hijo para que lo comamos, pero ella escondió a su hijo. \p \v 30 Cuando el rey escuchó las palabras de la mujer, mientras pasaba por el muro, rasgó sus ropas. Ciertamente llevaba ropa áspera sobre su cuerpo. \v 31 Entonces dijo: ¡Así me haga \nd ʼElohim\nd*, y aun me añada, si la cabeza de Eliseo, hijo de Safat, permanece hoy sobre él! \p \v 32 Eliseo estaba sentado en su casa. Los ancianos estaban sentados con él cuando el rey envió a uno de sus hombres. Pero antes que el mensajero llegara a él, Eliseo dijo a los ancianos: ¿Vieron como este hijo de homicida envió a cortarme la cabeza? Observen cuando llegue el emisario, cierren la puerta e impídanle la entrada. ¿No se escucha tras él el ruido de los pasos de su \tl ʼadón\tl*? \p \v 33 Aún hablaba con ellos, cuando ciertamente el mensajero bajaba hacia él, y Eliseo dijo: Reconozco que esta desgracia es de parte de \nd Yavé\nd*. ¿Para qué espero más a \nd Yavé\nd*? \c 7 \s1 Fin del sitio de Samaria \p \v 1 Eliseo dijo: Escuchen la Palabra de \nd Yavé\nd*: \wj ¡Mañana a esta hora, una medida de flor de harina \+add se venderá\+add* por 11 gramos de plata, y dos medidas de cebada por 11 gramos de plata en la puerta de Samaria!\wj* \p \v 2 Entonces, el oficial sobre el cual se apoyaba el rey, respondió al varón de \nd ʼElohim\nd*: Aun si \nd Yavé\nd* abre ventanas en el cielo, ¿podría suceder esto? \p Y él respondió: Mira, tú lo mirarás con tus propios ojos, pero no comerás de ello. \s1 Cuatro leprosos en la entrada a Samaria sitiada \p \v 3 Había cuatro leprosos en la entrada de la puerta. Se dijeron: ¿Por qué nos quedamos aquí hasta morir? \v 4 Si decidimos entrar en la ciudad, la hambruna está en ella y moriremos allí. Si nos quedamos aquí, también moriremos. Ahora pues, vayamos y pasemos al ejército de los sirios. Si nos dejan vivir, viviremos. Si nos matan, no haremos más que morir. \p \v 5 Se levantaron al alba para ir al campamento de los sirios. Cuando llegaron a la parte exterior del campamento de los sirios, nadie estaba allí. \s1 El triunfo de \nd ʼAdonay\nd* sobre los sirios \p \v 6 Porque \nd ʼAdonay\nd* produjo en el campamento de los sirios estruendo de carruajes, ruido de caballos y estrépito de un gran ejército. Cada uno dijo a su compañero: ¡Ciertamente el rey de Israel tomó a sueldo a los reyes de los hititas y a los de Egipto para que vengan contra nosotros! \v 7 Por lo cual se levantaron, huyeron al llegar la noche y abandonaron sus tiendas, caballos y asnos. Dejaron el campamento tal como estaba y huyeron para salvar sus vidas. \p \v 8 Cuando estos leprosos llegaron a la parte exterior del campamento, entraron en una tienda, comieron y bebieron. Sacaron de allí plata, oro y ropas, y fueron y los escondieron. Luego regresaron y entraron en otra tienda. También llevaron cosas de allí, fueron y las escondieron. \p \v 9 Después se dijeron el uno al otro: No es bueno lo que hacemos. Este es día de buenas noticias, pero nosotros callamos. Si nos quedamos hasta la mañana, nuestra iniquidad nos alcanzará. Vayamos, entremos e informemos en la casa del rey. \p \v 10 Fueron y llamaron al centinela de la ciudad. Le informaron: Fuimos al campamento de los sirios. Ciertamente allí no hay hombre, ni alguna voz de hombre, sino caballos y asnos atados, y las tiendas intactas. \v 11 Entonces los centinelas gritaron y lo anunciaron en la casa real. \p \v 12 El rey se levantó de noche y dijo a sus esclavos: Ahora les diré lo que planearon los sirios: Saben que estamos hambrientos. Salieron del campamento para esconderse en el campo y dijeron: Cuando salgan de la ciudad, los agarraremos vivos y entraremos en la ciudad. \p \v 13 Uno de sus esclavos dijo: \add Deja que algunos hombres \add*tomen cinco de los caballos que quedan y enviémoslos. Veamos, los \add caballos\add* que quedan en ella van a correr la misma suerte que toda la multitud de israelitas que ya pereció. \p \v 14 Entonces tomaron dos carruajes con caballos. El rey los envió tras el ejército de los sirios y dijo: Vayan y vean. \v 15 Fueron tras ellos hasta el Jordán. Ciertamente, todo el camino estaba lleno de ropas y utensilios que los sirios dejaron en su apuro. Volvieron los mensajeros e informaron al rey. \v 16 Entonces el pueblo salió y tomó el despojo del campamento de los sirios. Así, una medida de flor de harina o dos medidas de cebada fueron vendidas por 11 gramos de plata, según la Palabra de \nd Yavé\nd*. \p \v 17 El rey había colocado junto a la puerta al oficial en cuya mano se apoyaba. El pueblo lo pisoteó en la puerta, y murió, tal como habló el varón de \nd ʼElohim\nd* quien habló cuando el rey bajaba hacia él. \v 18 Sucedió como el varón de \nd ʼElohim\nd* habló al rey: \wj ¡Mañana a esta hora, una medida de flor de harina \+add se venderá\+add* por 11 gramos de plata, y dos medidas de cebada por 11 gramos de plata en la puerta de Samaria!\wj* \p \v 19 Y el oficial que respondió al varón de \nd ʼElohim\nd*: Aun si \nd Yavé\nd* abra ventanas en el cielo, ¿podría suceder esto? Y Eliseo respondió: Mira, tú lo verás con tus propios ojos, pero no comerás de ello, \v 20 le sucedió así, pues el pueblo lo atropelló en la puerta, y murió. \c 8 \s1 Eliseo en Damasco \p \v 1 Eliseo habló a aquella mujer, cuyo hijo resucitó, y le dijo: Levántate y vete, tú y tu casa, y vive donde puedas. Porque \nd Yavé\nd* llamó al hambre, la cual vendrá también sobre esta tierra por siete años. \v 2 La mujer se levantó e hizo conforme a la palabra del varón de \nd ʼElohim\nd*. Se fue con los de su casa, y vivió como extranjera en tierra de los filisteos durante siete años. \p \v 3 Sucedió al terminar los siete años que la mujer volvió de la tierra de los filisteos, y salió para implorar al rey que le entregara su casa y su tierra. \v 4 El rey habló a Giezi, esclavo del varón de \nd ʼElohim\nd*: Cuéntame ahora todos los prodigios que Eliseo hizo. \p \v 5 Sucedió que, mientras él contaba al rey cómo resucitó al muerto, llegó allí la mujer cuyo hijo resucitó, a implorar al rey que le devolviera su casa y su tierra. \p Entonces dijo Giezi: Rey, \tl ʼadón\tl* mío, ésta es la mujer y este es su hijo, al cual Eliseo dio vida. \v 6 Entonces el rey preguntó a la mujer, y ella le contó. \p Así que el rey le asignó un funcionario, y le dijo: Restituye todo lo que era de ella, y todo el producto del campo desde el día cuando salió del país hasta ahora. \p \v 7 Eliseo fue a Damasco. Ben-adad, rey de Siria, estaba enfermo y le dijeron: El varón de \nd ʼElohim\nd* vino aquí. \v 8 Y el rey dijo a Hazael: Toma en tu mano un presente, y vé a encontrar al varón de \nd ʼElohim\nd*. Consulta a \nd Yavé\nd* por medio de él y pregunta: ¿Sanaré de esta enfermedad? \p \v 9 Hazael fue a encontrarse con él y llevó consigo un presente de lo mejor de Damasco: una carga de 40 camellos. Se detuvo ante él y le dijo: Tu hijo Ben-adad, rey de Siria, me envía a ti para preguntar: ¿Sanaré de esta enfermedad? \p \v 10 Eliseo le respondió: Vé y dile: Ciertamente te recuperarás, pero \nd Yavé\nd* me mostró que realmente morirás. \v 11 El varón de \nd ʼElohim\nd* lo miró fijamente hasta que aquél se ruborizó. Entonces el varón de \nd ʼElohim\nd* lloró. \p \v 12 Y Hazael preguntó: ¿Por qué llora mi \tl ʼadon\tl*? \p Y él contestó: Porque sé el mal que harás a los hijos de Israel: pondrás fuego a sus fortalezas, matarás a espada a sus jóvenes, estrellarás a sus niños y abrirás el vientre a sus mujeres embarazadas. \p \v 13 Hazael preguntó: ¿Qué es tu esclavo, sino un perro, para que haga cosas tan grandes? \p Y Eliseo respondió: \nd Yavé\nd* me mostró que tú serás rey de Siria. \p \v 14 \add Hazael\add* se alejó de Eliseo y fue a su \tl ʼadón\tl*, quien le preguntó: ¿Qué te dijo Eliseo? Y él dijo: Me dijo que ciertamente te recuperarás. \v 15 Sucedió al día siguiente que \add Ben-adad\add* tomó un paño grueso, lo empapó en agua, lo extendió sobre su cara y murió. Y Hazael reinó en su lugar. \s1 Reinado de Joram, hijo de Josafat, en Judá \p \v 16 El año quinto de Joram, hijo de Acab, rey de Israel cuando Josafat era rey de Judá, comenzó a reinar Joram, hijo de Josafat, rey de Judá. \v 17 Tenía 32 años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén. \v 18 Anduvo en el camino de los reyes de Israel, como la casa de Acab, pues su esposa fue una hija de Acab, e hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*. \v 19 Pero \nd Yavé\nd* no quiso destruir a Judá a causa de su esclavo David, pues prometió darle a él y a sus hijos una lámpara para siempre. \p \v 20 En sus días Edom se rebeló contra el dominio de Judá y decidieron que un rey reinara sobre ellos. \v 21 Entonces Joram, \add hijo de Josafat,\add* fue a Zaír con todos los carruajes. Se levantó de noche y atacó a los de Edom, quienes lo rodearon junto con los jefes de los carruajes. La tropa huyó a sus tiendas. \v 22 Pero Edom siguió en rebelión contra el dominio de Judá hasta hoy. En aquel tiempo también se rebeló Libna. \p \v 23 Los demás hechos y cosas de Joram, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 24 Joram descansó con sus antepasados y fue sepultado con sus antepasados en la Ciudad de David. Su hijo Ocozías reinó en su lugar. \s1 Reinado de Ocozías en Judá \p \v 25 El año 12 de Joram, hijo de Acab, rey de Israel, comenzó a reinar Ocozías, hijo de Joram, rey de Judá. \v 26 Ocozías tenía 22 años cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalén. El nombre de su madre fue Atalía, hija de Omri, rey de Israel. \v 27 Anduvo en el camino de la casa de Acab e hizo lo malo ante \nd Yavé\nd* como la casa de Acab, porque era su yerno. \p \v 28 Ocozías fue a la guerra con el rey Joram, hijo de Acab, contra Hazael, rey de Siria, en Ramot de Galaad, pero los sirios derrotaron a Joram. \v 29 El rey Joram regresó a Jezreel para ser curado de las heridas que los sirios le infligieron cuando combatía contra Hazael, rey de Siria, en Ramá. \p Entonces Ocozías, hijo de Joram, rey de Judá, bajó a Jezreel para ver a Joram, hijo de Acab, porque éste estaba enfermo. \c 9 \s1 Jehú, mano vengadora de \nd Yavé\nd* \p \v 1 Entonces el profeta Eliseo llamó a uno de los hijos de los profetas y le dijo: Ata tu cintura, toma esta vasija de aceite en tu mano y vé a Ramot de Galaad. \v 2 Cuando llegues allí, visita en aquel lugar a Jehú, hijo de Josafat, hijo de Nimsi. Entonces entra, haz que se levante de entre sus hermanos, y llévalo a una habitación interior. \v 3 Toma después la vasija de aceite, derrámalo sobre su cabeza y dí: \nd Yavé\nd* dice: \wj Yo te ungí como rey de Israel.\wj* Luego abre la puerta y huye. No esperes. \p \v 4 El joven profeta fue a Ramot de Galaad. \v 5 Cuando llegó, miró a los jefes del ejército que estaban sentados y dijo: Oh jefe, tengo una palabra para ti. \p Y Jehú dijo: ¿Para quién de todos nosotros? \p Y él dijo: Para ti, oh jefe. \p \v 6 Jehú se levantó y entró en la casa. El joven derramó el aceite sobre su cabeza y le dijo: \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel dice: \wj ¡Yo te ungí como rey de Israel, pueblo de \+nd Yavé\+nd*!\wj* \v 7 \wj Tú atacarás la casa de tu \+tl ʼadón\+tl* Acab, para que Yo vengue la sangre de mis esclavos profetas y la sangre de todos los esclavos de \+nd Yavé\+nd*, derramada por mano de Jezabel.\wj* \v 8 \wj Toda la casa de Acab desaparecerá, pues extirparé todo varón de Acab, tanto al que está en esclavitud, como al que es libre en Israel.\wj* \v 9 \wj Dejaré la casa de Acab como la casa de Jeroboam, hijo de Nabat, y como la casa de Baasa, hijo de Ahías.\wj* \v 10 \wj Los perros comerán a Jezabel en la viña de Jezreel, y no habrá quien la sepulte.\wj* En seguida abrió la puerta y huyó. \p \v 11 Después Jehú salió a donde estaban los esclavos de su \tl ʼadón\tl* y le preguntaron: ¿Todo bien? ¿Por qué vino ese loco a ti? \p Y les respondió: Ustedes conocen al hombre y sus palabras. \p \v 12 Pero dijeron: No es cierto. Dinos ahora. \p Y él dijo: Así y así me habló: \nd Yavé\nd* dice: \wj ¡Te ungí como rey de Israel!\wj* \p \v 13 Entonces cada uno se apresuró a tomar su manto y los tendieron debajo de Jehú sobre las gradas desnudas. Luego tocaron la corneta y proclamaron: ¡Jehú reina! \p \v 14 Así Jehú, hijo de Josafat, hijo de Nimsi, conspiró contra Joram. Joram estaba en ese tiempo con todo Israel y defendía a Ramot de Galaad por causa de Hazael, rey de Siria, \v 15 pero el rey Joram regresó para ser curado en Jezreel de las heridas que le produjeron los sirios cuando combatía contra Hazael, rey de Siria. Entonces Jehú dijo: Si es voluntad de ustedes, que ninguno escape de la ciudad para dar las noticias en Jezreel. \v 16 Luego Jehú cabalgó y fue a Jezreel, porque Joram estaba allí enfermo. Y Ocozías, rey de Judá, también bajó para visitar a Joram. \p \v 17 Entonces el centinela que estaba en la torre de Jezreel, vio que llegaba la tropa de Jehú y dijo: Veo una tropa. Y Joram dijo: Toma un jinete, envíalo a encontrarlos y que les pregunte: ¿Hay paz? \p \v 18 Salió el jinete a encontrarlos y dijo: El rey pregunta: ¿Hay paz? \p Y Jehú respondió: ¿Qué tienes tú que ver con la paz? ¡Regresa detrás de mí! Y el centinela informó: El mensajero llegó hasta ellos, pero no regresa. \p \v 19 Entonces envió un segundo jinete que fue hacia ellos y dijo: El rey pregunta: ¿Hay paz? \p Pero Jehú preguntó: ¿Qué tienes tú que ver con la paz? ¡Regresa detrás de mí! \p \v 20 Y el centinela informó: Llegó hasta ellos pero no regresa. La manera de conducir es como la de Jehú, hijo de Nimsi, porque conduce impetuosamente. \p \v 21 Entonces Joram dijo: Apareja mi carruaje. Y le aparejaron su carruaje, y salió Joram, rey de Israel, con Ocozías, rey de Judá, cada uno en su carruaje. Salieron a encontrar a Jehú, y lo encontraron en la herencia de Nabot de Jezreel. \v 22 Y cuando Joram vio a Jehú, preguntó: ¿Hay paz, Jehú? \p Pero él respondió: ¿Cuál paz, con las prostituciones de tu madre Jezabel y sus numerosas hechicerías? \p \v 23 Entonces Joram volvió sus riendas y huyó mientras decía a Ocozías: ¡Traición, Ocozías! \p \v 24 Pero Jehú tensó su arco e hirió a Joram entre los hombros. La flecha salió por el corazón, y se desplomó en su carruaje. \v 25 Y Jehú dijo a Bidcar, uno de sus jefes: Levántalo y échalo en la viña de Nabot de Jezreel, pues recuerda que tú y yo cabalgábamos juntos tras su padre Acab cuando \nd Yavé\nd* pronunció esta sentencia contra él. \v 26 Palabra de \nd Yavé\nd*: \wj ¿No vi ayer la sangre derramada de Nabot y la sangre de sus hijos? Yo voy a retribuirte por ello en este mismo lugar, dice \+nd Yavé\+nd*.\wj* Así que, levántenlo y échenlo en esa viña, según la Palabra de \nd Yavé\nd*. \p \v 27 Cuando Ocozías, rey de Judá, vio esto, huyó por el camino de Bet-hagán, pero Jehú lo persiguió y dijo: Maten también a éste en el carruaje. Y lo hirieron en la subida de Gur, que está junto a Ibleam, pero él huyó a Meguido donde murió. \v 28 Sus esclavos lo llevaron en su carruaje a Jerusalén y lo sepultaron en su sepulcro con sus antepasados en la Ciudad de David. \v 29 Ocozías comenzó a reinar en Judá el año 11 de Joram, hijo de Acab. \p \v 30 Después Jehú fue a Jezreel. Y cuando Jezabel lo supo, se pintó los ojos, arregló su cabello y miró por la ventana. \v 31 Cuando Jehú entraba por la puerta de la ciudad, ella preguntó: ¿Hubo paz para Zimri, asesino de su \tl ʼadon\tl*? \p \v 32 Entonces él levantó su cara hacia la ventana y preguntó: ¿Quién está conmigo? ¿Quién? \p Y dos o tres funcionarios se asomaron desde arriba. \p \v 33 Y él les ordenó: ¡Échenla abajo! \p Y la echaron abajo. Parte de su sangre salpicó la pared y los caballos, y él la pisoteó. \p \v 34 Cuando él entró, comió y bebió. Después dijo: ¡Ocúpense de esa maldita y sepúltenla, pues es hija de un rey! \p \v 35 Fueron a sepultarla, pero no encontraron de ella sino la calavera, los pies, y las palmas de las manos. \p \v 36 Volvieron y le informaron. Y él dijo: Es obra de \nd Yavé\nd*, Quien habló por medio de su esclavo Elías tisbita: En la viña de Jezreel los perros comerán la carne de Jezabel. \v 37 El cadáver de Jezabel fue como abono sobre la superficie del campo en la herencia de Jezreel, de modo que nadie pueda decir: Ésta es Jezabel. \c 10 \s1 Reinado de Jehú en Israel \p \v 1 Acab tenía 70 hijos en Samaria. Jehú escribió cartas y las envió a Samaria, a los jefes de Jezreel, a los ancianos, y a los que los criaron, y decía: \v 2 Ahora, al llegar esta carta a ustedes, puesto que tienen con ustedes a los hijos de su \tl ʼadón\tl*, carruajes y caballos, y también ciudades fortificadas y armas, \v 3 elijan al mejor y más recto de los hijos de su \tl ʼadón\tl*. Pónganlo en el trono de su padre y luchen por la casa de su \tl ʼadón\tl*. \p \v 4 Pero ellos tuvieron gran temor, pues decían: Ciertamente los dos reyes no pudieron resistirlo. ¿Cómo lo resistiremos nosotros? \p \v 5 Y el administrador del palacio, el gobernador de la ciudad, los ancianos y los criadores enviaron a decir a Jehú: Somos tus esclavos y haremos todo lo que nos digas. No proclamaremos rey a alguno. Haz lo que te parezca bien. \p \v 6 Y él les escribió una segunda carta y les dijo: Si están conmigo y hacen caso a mi voz, tomen las cabezas de los hijos de su \tl ʼadón\tl* y vengan a mí mañana a esta hora a Jezreel. \p Los hijos del rey, que eran 70 hombres, estaban con los grandes hombres de la ciudad, quienes los criaron. \v 7 Cuando la carta llegó a ellos, sucedió que ellos tomaron a los 70 hijos del rey, los degollaron, pusieron sus cabezas en canastos y se las enviaron a Jehú, a Jezreel. \p \v 8 Y llegó un mensajero que le informó \add a Jehú\add*: ¡Trajeron las cabezas de los hijos del rey! \p Y él respondió: Pónganlas en dos montones en la entrada a la ciudad, hasta mañana. \p \v 9 Por la mañana sucedió que salió y al ponerse en pie dijo a todo el pueblo: Ustedes son justos. Miren, yo me levanté contra mi \tl ʼadón\tl* y lo maté. ¿Pero quién mató a todos éstos? \v 10 Por tanto, sepan que no caerá a tierra alguna de las Palabras de \nd Yavé\nd* que Él habló con respecto a la casa de Acab, porque \nd Yavé\nd* cumplió lo que dijo por medio de su esclavo Elías. \v 11 Jehú mató a todos los que quedaron de la casa de Acab en Jezreel, todos sus jefes, sus amigos y sus sacerdotes, hasta no dejarles alguno. \p \v 12 Luego se levantó de allí para ir a Samaria. En el camino llegó a una casa de esquileo de pastores. \v 13 Jehú encontró allí a los hermanos de Ocozías, rey de Judá, y les preguntó: ¿Quiénes son ustedes? \p Y respondieron: Somos los hermanos de Ocozías, y bajamos a saludar a los hijos del rey y de la reina. \p \v 14 Entonces ordenó: ¡Detéganlos vivos! Y después de detenerlos vivos, degollaron a los 42 hombres junto al pozo de la casa de esquileo, y no quedó alguno de ellos. \p \v 15 Luego salió de allí y encontró a Jonadab, hijo de Recab, quien iba a encontrarse con él. Lo saludó y le preguntó: ¿Es recto tu corazón como mi corazón es recto con el tuyo? \p Y Jonadab respondió: Sí es. \p Entonces añadió: Si es recto, dame tu mano. Y le dio la mano, lo subió al carruaje con él \v 16 y le dijo: Ven conmigo y comprueba mi celo por \nd Yavé\nd*. Lo pusieron en el carruaje de Jehú. \p \v 17 Después que Jehú llegó a Samaria mató a todos los que quedaban de Acab en Samaria hasta exterminarlos, según la Palabra de \nd Yavé\nd*, Quien habló por medio de Elías. \p \v 18 Después Jehú convocó a todo el pueblo y les dijo: Acab sirvió poco a baal, pero Jehú le servirá mucho. \v 19 Ahora pues, convóquenme a todos los profetas de baal, todos sus esclavos y todos sus sacerdotes: que no falte ninguno, pues tengo un gran sacrificio para baal. Cualquiera que falte, no vivirá. Así Jehú actuaba con astucia para exterminar a los esclavos de baal. \p \v 20 Y Jehú dijo: Proclamen una asamblea solemne para baal. Y la proclamaron. \v 21 Jehú envió \add aviso\add* por todo Israel, y vinieron todos los esclavos de baal, sin que alguno dejara de venir. Entraron en el templo de baal, el cual se llenó de un extremo a otro. \v 22 Después dijo al encargado del vestuario: Saca ropa para todos los esclavos de baal. Y sacó ropa para ellos. \p \v 23 Luego Jehú entró con Jonadab, hijo de Recab, en el templo de baal, y dijo a los esclavos de baal: Busquen para confirmar que no esté con ustedes alguno de los esclavos de \nd Yavé\nd*, sino solo los esclavos de baal. \v 24 Cuando ellos entraron para ofrecer sacrificios y holocaustos, Jehú colocó afuera a 80 hombres y les dijo: El que deje escapar a alguno de los hombres que entregué en sus manos, dará su vida por la del otro. \p \v 25 Sucedió que cuando acabaron de ofrecer el holocausto, Jehú dijo a los guardias reales y a los comandantes: Entren y mátenlos. Que no escape alguno. Los mataron a filo de espada, y los guardias reales y los comandantes los echaron fuera. Luego entraron al santuario del templo de baal, \v 26 sacaron los ídolos del templo de baal y los quemaron. \v 27 Destruyeron la columna de baal y derribaron su templo, el cual convirtieron en letrina hasta hoy. \p \v 28 Así Jehú exterminó a baal de Israel. \v 29 Sin embargo, con respecto a los pecados con que Jeroboam, hijo de Nabat, estimuló a pecar a Israel, Jehú no se apartó de ellos, es decir, de los becerros de oro que estaban en Bet-ʼEl y en Dan. \p \v 30 \nd Yavé\nd* dijo a Jehú: \wj Porque actuaste bien al hacer lo recto delante de Mí, y trataste a la casa de Acab conforme a todo lo que estaba en mi corazón, tus hijos se sentarán en el trono de Israel hasta la cuarta generación.\wj* \p \v 31 Pero Jehú no se cuidó de andar en las Enseñanzas de \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel con todo su corazón, ni se apartó de los pecados de Jeroboam, con los cuales estimuló a pecar a Israel. \p \v 32 En aquellos días \nd Yavé\nd* comenzó a disminuir a Israel. Hazael los atacó en todo el territorio de Israel: \v 33 desde el Jordán hacia el oriente, toda la tierra de Galaad, a los gaditas, los rubenitas y los manasitas, desde Aroer, junto al torrente de Arnón, hasta Galaad y Basán. \p \v 34 Los demás hechos de Jehú y todo su valor, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \p \v 35 Jehú descansó con sus antepasados y lo sepultaron en Samaria. Reinó en su lugar su hijo Joacaz. \v 36 El tiempo que reinó Jehú sobre Israel en Samaria fue 28 años. \c 11 \s1 Usurpasión del trono de Judá por Atalía \p \v 1 Cuando Atalía, madre de Ocozías, vio que su hijo murió, se levantó para destruir a toda la descendencia real. \v 2 Pero Josaba, hija del rey Joram y hermana de Ocozías, tomó a Joás, hijo de Ocozías. A escondidas lo quitó de entre los hijos del rey que eran asesinados, y lo escondió con su madre de crianza en un cuarto. Así lo escondieron de Atalía, y no fue asesinado. \v 3 Estuvo escondido con la madre de crianza en la Casa de \nd Yavé\nd* seis años, mientras Atalía reinaba en la tierra. \p \v 4 Pero el año séptimo, Joiada tomó a los jefes de centuria, capitanes y comandantes de la guardia real, los llevó consigo a la Casa de \nd Yavé\nd* e hizo un pacto con ellos. Les tomó juramento en la Casa de \nd Yavé\nd* y les mostró al hijo del rey. \v 5 Luego les ordenó: Esto es lo que harán: La tercera parte de ustedes, que tienen la guardia el sábado, se ocuparán de la guardia de la casa real. \v 6 Otra tercera parte estará en la puerta de Sur, y otra tercera parte en la puerta que está detrás de la escolta real. Harán por turno la guardia de la Casa. \v 7 Las otras dos secciones de entre ustedes, todos los que salen de servicio el sábado, montarán guardia en la Casa de \nd Yavé\nd* junto al rey. \v 8 Rodearán bien al rey, cada uno con sus armas en la mano, y quien pretenda penetrar en las filas morirá. También acompañarán al rey cuando salga y cuando entre. \p \v 9 Los jefes de centuria hicieron según todo lo que el sacerdote Joiada ordenó. Cada uno tomó a sus hombres, tanto los que entraban como los que salían el sábado, y fueron al sacerdote Joiada. \v 10 El sacerdote entregó a los jefes de centuria las lanzas y los escudos que fueron del rey David, los cuales estaban en la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 11 Los de la escolta, cada uno con sus armas en la mano, se emplazaron desde el lado sur de la Casa hasta el lado norte. Miraban hacia el altar y la Casa, alrededor del rey. \p \v 12 Sacó luego al hijo del rey, le colocó la corona, le dio el Testimonio y lo proclamó rey. Lo ungieron, aplaudieron y gritaron: ¡Viva el rey! \p \v 13 Cuando Atalía oyó el tumulto de la guardia y del pueblo, se acercó al pueblo en la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 14 Miró, y ahí estaba el rey en pie junto a la columna, conforme a lo acostumbrado, y los jefes y las trompetas junto al rey. Todo el pueblo de la tierra se regocijaba y tocaba trompetas. Entonces Atalía, rasgó sus ropas y gritó: ¡Traición! ¡Traición! \p \v 15 Y el sacerdote Joiada mandó a los jefes de centuria encargados de la tropa y les dijo: ¡Déjenla salir entre las filas, y al que la siga, mátenlo a espada! Pues el sacerdote ordenó: Que no muera en la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 16 Le dieron paso y ella salió al camino por donde entran los caballos a la casa del rey, y allí fue ejecutada. \p \v 17 Joiada hizo pacto entre \nd Yavé\nd*, el rey y el pueblo, según el cual ellos serían el pueblo de \nd Yavé\nd*, asimismo entre el rey y el pueblo. \p \v 18 Todo el pueblo de la tierra fue al templo de baal y lo destruyeron. Destrozaron completamente sus altares y sus imágenes, y mataron a Matán, sacerdote de baal, ante los altares. \p Y el sacerdote estableció la vigilancia para la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 19 Después tomó a los jefes de centuria, los cereteos, los de la escolta y todo el pueblo de la tierra, y bajaron al rey de la Casa de \nd Yavé\nd*. \p Entraron en la casa real por el camino de la entrada de la escolta, y el rey se sentó en el trono de los reyes. \v 20 Todo el pueblo de la tierra se regocijó, y la ciudad reposó, pues mataron a espada a Atalía en la casa real. \s1 Reinado de Joás, rey de Judá \p \v 21 Joás tenía siete años cuando comenzó a reinar. \c 12 \p \v 1 Joás comenzó a reinar en el año séptimo de Jehú, y reinó 40 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Sibia, de Beerseba. \v 2 Joás hizo lo recto ante \nd Yavé\nd* todos los días en los cuales el sacerdote Joiada lo instruía. \v 3 Pero no se quitaron los lugares altos, porque el pueblo aún sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos. \p \v 4 Y Joás dijo a los sacerdotes: Todo el dinero de las cosas sagradas que es traído a la Casa de \nd Yavé\nd*, tanto el dinero del rescate de cada persona, según está previsto, como el dinero que cada uno trae de su voluntad a la Casa de \nd Yavé\nd*, \v 5 que los sacerdotes lo reciban, cada uno de su administrador, y reparen ellos los daños de la Casa dondequiera que se halle cualquier daño. \p \v 6 Pero sucedió que el año 23 del rey Joás, los sacerdotes aún no habían reparado los daños del Templo. \v 7 Entonces el rey Joás llamó al sacerdote Joiada y a los demás sacerdotes y les preguntó: ¿Por qué aún no repararon los daños del Templo? Ahora, pues, no tomen el dinero de sus administradores, sino entréguenlo para reparar los daños del Templo. \v 8 Los sacerdotes consintieron en no tomar más dinero del pueblo, ni reparar los daños del Templo. \p \v 9 Pero el sumo sacerdote Joiada tomó un cofre, le hizo una abertura en su tapa y lo puso junto al altar, a la derecha, según se entra en la Casa de \nd Yavé\nd*. Los sacerdotes que cuidaban la puerta depositaban allí todo el dinero que era llevado a la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 10 Sucedió que cuando veían que había mucho dinero en el cofre, el escriba del rey y el sumo sacerdote iban y lo contaban. Lo colocaban en las bolsas para dinero que había en el Templo de \nd Yavé\nd*. \v 11 Entregaban el dinero que contaban en las manos de los que hacían la obra en el Templo de \nd Yavé\nd*, los cuales pagaban a los carpinteros y constructores que reparaban la Casa de \nd Yavé\nd*, \v 12 a los albañiles y canteros para comprar madera y piedra tallada para reparar las averías de la Casa de \nd Yavé\nd*, y para todo lo que se hacía a fin de reparar la Casa. \p \v 13 Pero con el dinero que se llevaba a la Casa de \nd Yavé\nd*, no hacían tazas de plata, ni despabiladeras, ni tazones, ni trompetas, ni algún utensilio de oro, ni de plata, \v 14 porque lo entregaban a los que hacían la obra, y reparaban con él el Templo de \nd Yavé\nd*. \v 15 Además, no exigían cuentas a los hombres en cuyas manos se entregaba el dinero para hacer los trabajos, pues actuaban con honradez. \v 16 El dinero de las ofrendas por la culpa y el dinero de las ofrendas por el pecado no ingresaba en la Casa de \nd Yavé\nd*, porque era para los sacerdotes. \p \v 17 En aquel tiempo Hazael, rey de Siria, subió y luchó contra Gat, y la conquistó. Y Hazael dispuso subir contra Jerusalén. \p \v 18 Pero Joás, rey de Judá, tomó todos los objetos consagrados que ofrecieron sus antepasados: Josafat, Joram y Ocozías, reyes de Judá, y sus propios objetos consagrados, y todo el oro que había en los tesoros de la Casa de \nd Yavé\nd* y en la casa real. Y los envió a Hazael, rey de Siria, quien se retiró de Jerusalén. \p \v 19 Todos los hechos de Joás, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \p \v 20 Se levantaron sus esclavos y tramaron una conspiración, y mataron a Joás en la casa de Milo, en el camino que baja a Silo, \v 21 pues sus esclavos Josacar, hijo de Simeat, y Jozabad, hijo de Somer, lo hirieron y murió. Lo sepultaron con sus antepasados en la Ciudad de David, y reinó en su lugar su hijo Amasías. \c 13 \s1 Reinado de Joacaz en Israel \p \v 1 El año 23 de Joás, hijo de Ocozías, rey de Judá, comenzó a reinar Joacaz, hijo de Jehú, sobre Israel en Samaria, y reinó 17 años. \v 2 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, porque siguió tras los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel, y no se apartó de ellos. \p \v 3 La ira de \nd Yavé\nd* se encendió contra Israel, y los entregó en repetidas ocasiones en mano de Hazael, rey de Siria, y en mano de Ben-adad, hijo de Hazael. \p \v 4 Pero Joacaz oró a \nd Yavé\nd*, y \nd Yavé\nd* lo escuchó, porque Él veía la aflicción de Israel, cómo los oprimía el rey de Siria. \v 5 \nd Yavé\nd* dio a Israel un libertador, y se libraron de la mano de Siria. \p Los hijos de Israel vivieron en sus tiendas como antes. \v 6 Pero no se apartaron de los pecados de la casa de Jeroboam, con los cuales estimuló a pecar a Israel, sino anduvieron en ellos. También la Asera seguía en pie en Samaria. \p \v 7 A Joacaz no le quedaban sino 50 jinetes, diez carruajes y 10.000 hombres de infantería, porque el rey de Siria los había destruido y los había dejado como el polvo de la trilla. \p \v 8 Todos los hechos de Joacaz y su valor, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \v 9 Joacaz descansó con sus antepasados y lo sepultaron en Samaria. Reinó en su lugar su hijo Jeoás. \s1 Reinado de Jeoás en Israel \p \v 10 El año 37 de Joás, rey de Judá, comenzó a reinar Jeoás, hijo de Joacaz, sobre Israel en Samaria, y reinó 16 años. \v 11 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, y no se apartó de todos los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel, sino anduvo en ellos. \p \v 12 Todos los hechos de Jeoás y su valor al luchar contra Amasías, rey de Judá, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \v 13 Jeoás descansó con sus antepasados, y Jeroboam se sentó en su trono. Jeoás fue sepultado en Samaria con los reyes de Israel. \s1 Fallecimiento del profeta Eliseo \p \v 14 Eliseo cayó enfermo con la enfermedad por la cual iba a morir. Y Jeoás, rey de Israel, bajó y lloró delante de él, y dijo: ¡Padre mío, padre mío! ¡Carroza de Israel y su jinete! \p \v 15 Eliseo le dijo: Toma un arco y unas flechas. Así que él tomó un arco y unas flechas. \v 16 Y dijo al rey de Israel: Pon tu mano sobre el arco. Y él puso su mano sobre el arco. \p Entonces Eliseo apoyó sus manos sobre las manos del rey \v 17 y dijo: Abre la ventana hacia el oriente, y él la abrió. Entonces Eliseo dijo: ¡Tira! Y al tirar él, Eliseo dijo: ¡Flecha de victoria de \nd Yavé\nd*! ¡Sí, flecha de victoria contra Siria, pues matarás a los sirios en Afec hasta acabarlos! \p \v 18 Y agregó: Toma las flechas. Y las tomó. Entonces dijo al rey de Israel: ¡Golpea la tierra! Él la golpeó tres veces y se detuvo. \v 19 Y el varón de \nd ʼElohim\nd* se airó contra él y dijo: ¡Si hubieras golpeado cinco o seis veces, entonces herirías a Siria hasta acabarla! Pero ahora vencerás a Siria solo tres veces. \p \v 20 Eliseo murió y lo sepultaron. \p El año siguiente llegaron bandas armadas de moabitas a la tierra. \v 21 Aconteció que al sepultar a un hombre, de repente vieron una banda armada, y lanzaron el muerto al sepulcro de Eliseo. Cuando el cadáver tocó los huesos de Eliseo, revivió y se levantó sobre sus pies. \p \v 22 Hazael, rey de Siria, afligió a Israel todos los días de Joacaz. \v 23 Pero \nd Yavé\nd* tuvo misericordia y se compadeció de ellos. Se volvió hacia ellos a causa de su Pacto con Abraham, Isaac y Jacob. No los destruyó, ni los echó de su Presencia hasta ahora. \p \v 24 Murió Hazael, rey de Siria, y su hijo Ben-adad reinó en su lugar. \v 25 Jeoás, hijo de Joacaz, volvió a quitar de mano de Ben-adad, hijo de Hazael, las ciudades que éste tomó en guerra de mano de su padre Joacaz. Tres veces Jeoás lo venció, y recuperó las ciudades de Israel. \c 14 \s1 Reinado de Amasías en Judá \p \v 1 El año segundo de Jeoás, hijo de Joacaz, rey de Israel, comenzó a reinar Amasías, hijo de Joás, rey de Judá. \v 2 Tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó 29 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Joadán, de Jerusalén. \v 3 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, aunque no como David, su antepasado. Hizo conforme a todo lo que hizo Joás su padre. \v 4 Sin embargo, los lugares altos no fueron quitados, porque el pueblo aún sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos. \p \v 5 Sucedió que cuando el reino se afirmó en sus manos, mató a los esclavos que asesinaron a su padre el rey. \v 6 Pero no mató a los hijos de los asesinos, según lo escrito en el Rollo de la Ley de Moisés, donde \nd Yavé\nd* mandó: No morirán los padres por los hijos, ni los hijos morirán por los padres, sino que cada cual morirá por su pecado. \p \v 7 Él mató a 10.000 de Edom en el valle de la Sal. Durante la guerra conquistó Sela y la llamó Jocteel, hasta hoy. \p \v 8 Amasías envió mensajeros a Jeoás, hijo de Joacaz, hijo de Jehú, rey de Israel, y le dijo: ¡Ven, veámonos las caras! \p \v 9 Jeoás, rey de Israel, envió a decir a Amasías, rey de Judá: El cardo del Líbano envió a decir al cedro del Líbano: Da tu hija como esposa a mi hijo. Pasó una fiera salvaje del Líbano y pisoteó el cardo. \v 10 Ciertamente derrotaste a Edom, y tu corazón se enalteció. ¡Ufánate de eso y quédate en tu casa! ¿Por qué provocas una calamidad en la que puedes caer tú y Judá contigo? \p \v 11 Pero Amasías no escuchó, por lo cual Jeoás, rey de Israel, salió y se vieron las caras, él y Amasías, rey de Judá, en Bet-semes, que es de Judá. \v 12 Judá fue derrotado por Israel, y huyeron cada uno a su tienda. \v 13 Jeoás, rey de Israel, capturó a Amasías, rey de Judá, hijo de Joás, hijo de Ocozías, en Bet-semes. Entró en Jerusalén y rompió el muro de Jerusalén desde la puerta de Efraín hasta la puerta de la esquina, 180 metros en total. \v 14 Después tomó todo el oro, la plata y todos los utensilios que estaban en la Casa de \nd Yavé\nd* y en los tesoros de la casa real. Tomó rehenes y volvió a Samaria. \p \v 15 El resto de los hechos que realizó Jeoás, su valor y cómo luchó contra Amasías, rey de Judá, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \v 16 Jeoás descansó con sus antepasados, y fue sepultado en Samaria con los reyes de Israel. Reinó en su lugar su hijo Jeroboam. \p \v 17 Amasías, hijo de Joás, rey de Judá, vivió 15 años después de la muerte de Jeoás, hijo de Joacaz, rey de Israel. \v 18 Los demás hechos de Amasías, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \p \v 19 Conspiraron contra él en Jerusalén. Él huyó a Laquis, pero lo persiguieron hasta Laquis, y allí lo mataron. \v 20 Lo llevaron a Jerusalén sobre caballos, y fue sepultado con sus antepasados en la Ciudad de David. \s1 Reinado de Azarías en Judá \p \v 21 Entonces todo el pueblo de Judá tomó a Azarías, quien tenía 16 años, y lo llevaron a reinar en lugar de su padre Amasías. \v 22 Él reedificó Elat y la restituyó a Judá, después que el rey descansó con sus antepasados. \s1 Reinado de Jeroboam II en Israel \p \v 23 El año 15 de Amasías, hijo de Joás, rey de Judá, comenzó a reinar Jeroboam, hijo de Jeoás, rey de Israel, en Samaria, y reinó 41 años. \v 24 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, y no se apartó de todos los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel. \v 25 Él restableció la frontera de Israel desde la entrada de Hamat hasta el mar del Arabá, según la Palabra de \nd Yavé\nd*, \nd ʼElohim\nd* de Israel, que dio por medio de su esclavo Jonás, hijo de Amitay, el profeta de Gat-hefer. \p \v 26 Pues \nd Yavé\nd* vio la amarga aflicción de Israel, la cual padecían tanto esclavos como libres, sin que alguien ayudara a Israel. \v 27 \nd Yavé\nd* determinó no borrar el nombre de Israel de debajo del cielo. Por eso los libró por mano de Jeroboam, hijo de Joás. \p \v 28 Todo lo que hizo Jeroboam, su valor con que luchó y cómo recuperó a Damasco y a Hamat (que fueron de Judá) para Israel, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \v 29 Jeroboam descansó con sus antepasados, con los reyes de Israel, y su hijo Zacarías reinó en su lugar. \c 15 \s1 Reinado de Azarías en Judá \p \v 1 El año 27 de Jeroboam, rey de Israel, comenzó a reinar Azarías, hijo de Amasías, rey de Judá. \v 2 Tenía 16 años cuando comenzó a reinar, y reinó 52 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Jecolía, de Jerusalén. \v 3 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, conforme a todo lo que hizo su padre Amasías. \v 4 Sin embargo, los lugares altos no fueron quitados, pues el pueblo aún sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos. \p \v 5 \nd Yavé\nd* hirió al rey, y fue leproso hasta el día de su muerte, y vivió en una casa aislada. Jotam, hijo del rey, administraba la casa del rey y gobernaba al pueblo de la tierra. \p \v 6 Todo lo que hizo Azarías, ¿no está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 7 Azarías descansó con sus antepasados, y lo sepultaron con sus antepasados en la Ciudad de David. Reinó en su lugar su hijo Jotam. \s1 Reinado de Zacarías en Israel \p \v 8 El año 38 de Azarías, rey de Judá, comenzó a reinar Zacarías, hijo de Jeroboam, y reinó seis meses sobre Israel en Samaria. \v 9 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, como hicieron sus antepasados. No se apartó de los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel. \p \v 10 Salum, hijo de Jabes, conspiró contra él. Lo hirió delante del pueblo y lo mató, y reinó en su lugar. \v 11 Los demás hechos de Zacarías ciertamente están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel. \v 12 Ésta fue la Palabra que \nd Yavé\nd* habló a Jehú: \wj Tus hijos se sentarán en el trono de Israel hasta la cuarta generación.\wj* Y sucedió así. \s1 Reinado de Salum en Israel \p \v 13 Salum, hijo de Jabes, comenzó a reinar el año 39 de Uzías, rey de Judá, y reinó un mes en Samaria. \v 14 Manahem, hijo de Gadi, subió de Tirsa a Samaria, hirió a Salum, hijo de Jabes, lo mató y reinó en su lugar. \p \v 15 Los demás hechos de Salum, y la conspiración que tramó, ciertamente están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel. \v 16 En aquel tiempo Manahem atacó a Tirsa, a todos los que estaban en ella y en sus alrededores, porque ellos no le abrieron \add las puertas\add*. Por eso la atacó y abrió el vientre a todas las mujeres embarazadas. \s1 Reinado de Manahem en Israel \p \v 17 El año 39 de Azarías, rey de Judá, comenzó a reinar Manahem, hijo de Gadi, sobre Israel, y reinó diez años en Samaria. \v 18 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, y en todo su tiempo no se apartó de los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel. \p \v 19 Pul, rey de Asiria, llegó contra la tierra, y Manahem dio a Pul 33 toneladas de plata para que la mano de él estuviera a favor de Manahem, a fin de fortalecer el reino bajo su dominio. \v 20 Manahem impuso este dinero a Israel por medio de un tributo a todos los poderosos y opulentos: 550 gramos de plata por cada uno, para entregarlos al rey de Asiria. Con eso el rey de Asiria se retiró, y no permaneció en la tierra. \p \v 21 Todo lo que hizo Manahem, ¿no está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel? \v 22 Manahem reposó con sus antepasados, y su hijo Pecaía reinó en su lugar. \s1 Reinado de Pecaía en Israel \p \v 23 El año 50 de Azarías, rey de Judá, comenzó a reinar Pecaía, hijo de Manahem, en Israel, y reinó en Samaria dos años. \v 24 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*. No se apartó de los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel. \p \v 25 Conspiró contra él su comandante Peca, hijo de Remalías, junto con Argob, Arie y 50 hombres de los hijos de los galaaditas. Lo mató en el palacio de la casa real en Samaria, y reinó en su lugar. \v 26 Todo lo que hizo Pecaía, ciertamente está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel. \s1 Reinado de Peca en Israel \p \v 27 El año 52 de Azarías, rey de Judá, Peca, hijo de Remalías, comenzó a reinar en Israel y reinó 20 años en Samaria. \v 28 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, pues no se apartó de los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, con los cuales estimuló a pecar a Israel. \s1 Deportación de gran parte de Israel a Asiria \p \v 29 En el tiempo de Peca, rey de Israel, llegó Tiglat-pileser, rey de Asiria. Tomó Ijón, Abel-bet-maaca, Janoa, Cedes, Hazor, Galaad, Galilea y toda la tierra de Neftalí, y los llevó cautivos a Asiria. \p \v 30 El año 20 de Jotam, hijo de Azarías, \add rey de Judá\add*, Oseas, hijo de Ela, tramó una conspiración contra Peca, hijo de Remalías. Lo hirió, lo mató, y reinó en su lugar. \v 31 Todo lo que hizo Peca ciertamente está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Israel. \s1 Reinado de Jotam en Judá \p \v 32 El segundo año de Peca, hijo de Remalías, rey de Israel, comenzó a reinar Jotam, hijo de Uzías, rey de Judá. \v 33 Cuando comenzó a reinar tenía 25 años, y reinó 16 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Jerusa, hija de Sadoc. \v 34 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, conforme a todo lo que hizo su padre Uzías. \v 35 Sin embargo, no se quitaron los lugares altos, porque el pueblo aún sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos. Él construyó la puerta más alta de la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 36 Todo lo que hizo Jotam, ¿no está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \p \v 37 En aquel tiempo \nd Yavé\nd* comenzó a enviar a Rezín, rey de Siria, y a Peca, hijo de Remalías, contra Judá. \v 38 Azarías descansó Jotam con sus antepasados, y fue sepultado en la ciudad de David. Su hijo Acaz reinó en su lugar. \c 16 \s1 Reinado de Acaz en Judá \p \v 1 El año 17 de Peca, hijo de Remalías, \add rey de Israel\add*, comenzó a reinar Acaz, hijo de Jotam, rey de Judá. \v 2 Acaz tenía 19 años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén 16 años. Pero no hizo lo recto ante \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, como su antepasado David, \v 3 sino anduvo en el camino de los reyes de Israel. Incluso hizo pasar a su hijo por el fuego, según las repugnancias de los pueblos que \nd Yavé\nd* expulsó de delante de los hijos de Israel. \v 4 Asimismo sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, sobre las colinas y debajo de todo árbol frondoso. \p \v 5 Entonces Rezín, rey de Siria, y Peca, hijo de Remalías, rey de Israel, subieron a Jerusalén para hacer la guerra. Sitiaron a Acaz, pero no prevalecieron. \v 6 En aquel tiempo Rezín, rey de Siria, recuperó Elat para Siria, y expulsó a los judíos de Elat. Los sirios fueron a Elat, donde viven hasta hoy. \p \v 7 Entonces Acaz envió mensajeros a Tiglat-pileser, rey de Asiria, para decirle: Soy tu esclavo y tu hijo. Sube y sálvame de la mano del rey de Siria y del rey de Israel, que se levantaron contra mí. \v 8 Acaz tomó la plata y el oro que encontró en la Casa de \nd Yavé\nd* y en los tesoros de la casa real, y envió un presente al rey de Asiria. \v 9 El rey de Asiria lo atendió, subió contra Damasco y la tomó. Llevó cautivos a sus habitantes a Kir, y mató a Rezín. \p \v 10 Cuando el rey Acaz fue a Damasco a encontrarse con Tiglat-pileser, rey de Asiria, observó el altar que estaba en Damasco. El rey Acaz envió al sacerdote Urías el diseño y el modelo del altar, según toda su hechura. \v 11 El sacerdote Urías construyó el altar según todo lo que envió el rey Acaz desde Damasco. Así lo hizo el sacerdote Urías antes que el rey Acaz regresara de Damasco. \p \v 12 Cuando el rey llegó de Damasco y vio el altar, se acercó a él y ofreció sacrificios sobre él. \v 13 Quemó su holocausto y ofrenda, derramó sus libaciones y roció la sangre de sus sacrificios de paz junto al altar. \v 14 En cuanto al altar de bronce que estaba delante de \nd Yavé\nd*, lo desplazó de delante del Lugar Santísimo, de entre el altar y el Lugar Santísimo de \nd Yavé\nd*, y lo puso en el lado norte de su altar. \p \v 15 Y el rey Acaz mandó al sacerdote Urías: Quema el holocausto de la mañana y la ofrenda cuando llega la noche, el holocausto del rey y su ofrenda sobre el gran altar. De igual manera quema el holocausto de todo el pueblo de la tierra, su ofrenda y sus libaciones. Rocía sobre él toda la sangre del holocausto y toda la sangre del sacrificio. Pero el altar de bronce será para yo consultar. \v 16 El sacerdote Urías hizo según todo lo que el rey Acaz mandó. \p \v 17 El rey Acaz cortó además los bordes de las basas y quitó las piletas de encima de ellas. Hizo bajar el mar de sobre los bueyes de bronce que estaban debajo, y lo puso sobre un pavimento de piedra. \v 18 Asimismo, a causa del rey de Asiria, quitó el patio cubierto para el sábado que construyeron en la Casa y la entrada exterior del rey. \p \v 19 Los demás hechos de Acaz, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 20 Acaz reposó con sus antepasados, y fue sepultado en la Ciudad de David. Reinó en su lugar su hijo Ezequías. \c 17 \s1 Reinado de Oseas en Israel \p \v 1 El año 12 de Acaz, rey de Judá, comenzó a reinar Oseas, hijo de Ela, sobre Israel en Samaria, y reinó nueve años. \v 2 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, aunque no como los reyes de Israel que reinaron antes de él. \p \v 3 Salmanasar, rey de Asiria, subió contra Oseas, quien se convirtió en su vasallo y le pagó tributo. \v 4 Pero el rey de Asiria descubrió que Oseas conspiraba, pues envió mensajeros a So, rey de Egipto, y porque no pagó el tributo al rey de Asiria, como lo hacía cada año. Por tanto el rey de Asiria lo detuvo y lo encerró en la cárcel. \v 5 Entonces el rey de Asiria invadió toda la tierra, subió contra Samaria y la sitió durante tres años. \s1 Caída de Samaria y cautiverio de Israel \p \v 6 El año noveno de Oseas, el rey de Asiria tomó Samaria y llevó a Israel en cautiverio a Asiria, y decidió que habitaran en Halah y Habor, junto al río Gozán, y en las ciudades de los medos. \p \v 7 Esto sucedió porque los hijos de Israel pecaron contra \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, Quien los sacó de la tierra de Egipto, del poder de Faraón, rey de Egipto. Reverenciaron a otros \tl ʼelohim\tl* \v 8 y practicaron las costumbres de las naciones que \nd Yavé\nd* expulsó de delante de ellos y las \add costumbres\add* que establecieron los reyes de Israel. \p \v 9 Los hijos de Israel hicieron secretamente cosas no rectas contra \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim.\nd* Además edificaron lugares altos en todas sus ciudades, desde torres de vigías hasta ciudades fortificadas. \v 10 Levantaron columnas e imágenes de Asera en toda colina alta y debajo de todo árbol frondoso. \v 11 Allí quemaron incienso en todos los lugares altos, como los pueblos que \nd Yavé\nd* desterró de delante de ellos. Hicieron cosas malas que provocaron la ira de \nd Yavé\nd*, \v 12 porque sirvieron a los ídolos, con respecto a los cuales \nd Yavé\nd* les dijo: \wj No harán tal cosa.\wj* \p \v 13 \nd Yavé\nd* amonestaba a Israel y a Judá por medio de todos los profetas y de todo vidente: \wj Regresen de sus malos caminos y guarden mis Mandamientos y mis Preceptos, según toda la Ley que Yo prescribí a sus antepasados y les envié por medio de mis esclavos profetas.\wj* \p \v 14 Pero ellos no obedecieron, sino fueron indómitos, como sus antepasados, quienes no permanecieron fieles a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. \v 15 Desecharon sus Preceptos, el Pacto que hizo con sus antepasados y las exhortaciones con las cuales les advirtió. Siguieron tras la vanidad y se volvieron vacíos. Fueron tras las naciones que estaban a su alrededor, con respecto a las cuales \nd Yavé\nd* les ordenó que no hicieran como ellas. \p \v 16 Repugnaron todos los Mandamientos de \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, e hicieron para ellos imágenes fundidas de dos becerros y una Asera. Se postraron ante todo el ejército del cielo y sirvieron a baal. \v 17 Pasaron a sus hijos y a sus hijas por el fuego, practicaron los encantamientos y las adivinaciones, y se dedicaron a hacer lo malo ante \nd Yavé\nd* para provocarlo a ira. \p \v 18 Por lo cual \nd Yavé\nd* se airó muchísimo contra Israel. Los apartó de su presencia, y no quedó sino solo la tribu de Judá. \v 19 Judá tampoco guardó los Mandamientos de \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, sino anduvieron en las costumbres que Israel estableció. \v 20 Entonces \nd Yavé\nd* desechó a toda la descendencia de Israel. Los afligió y los entregó en mano de saqueadores, hasta echarlos de su Presencia. \p \v 21 Cuando Él separó a Israel de la casa de David, ellos proclamaron rey a Jeroboam, hijo de Nabat. Jeroboam apartó a Israel de seguir a \nd Yavé\nd*, y los llevó a cometer un gran pecado. \v 22 Los hijos de Israel anduvieron en todos los pecados que Jeroboam cometió. No se apartaron de ellos, \v 23 hasta cuando \nd Yavé\nd* apartó a Israel de su Presencia, tal como dijo por medio de todos sus esclavos profetas. Entonces Israel fue llevado cautivo de su tierra a Asiria hasta hoy. \p \v 24 El rey de Asiria trajo gente de Babilonia, Cuta, Ava, Hamat y Sefarvaim, y los estableció en las ciudades de Samaria en lugar de los hijos de Israel. Así ocuparon Samaria y vivieron en sus ciudades. \p \v 25 Pero como no temían a \nd Yavé\nd*, sucedió que, cuando comenzaron a vivir allí, \nd Yavé\nd* envió leones contra ellos los cuales los mataban. \v 26 Entonces ellos enviaron a decir al rey de Asiria: Las gentes que trasladaste y colocaste en las ciudades de Samaria no conocen la costumbre del \nd ʼElohim\nd* de la tierra, el cual envió leones contra ellas. Ciertamente las matan, porque no conocen la costumbre del \nd ʼElohim\nd* de la tierra. \p \v 27 Y el rey de Asiria mandó a decir: Lleven allá a alguno de los sacerdotes que trajeron cautivos de allá, que vaya y viva allí, y les enseñe la costumbre del \nd ʼElohim\nd* de la tierra. \v 28 Llegó uno de los sacerdotes que deportaron de Samaria. Vivió en Bet-ʼEl y les enseñó cómo debían reverenciar a \nd Yavé\nd*. \p \v 29 Pero cada pueblo hacía sus propios \tl ʼelohim\tl* y los ponía en los santuarios de los lugares altos que los de Samaria hacían. Cada pueblo hacía esto en la ciudad donde vivía. \v 30 De esta manera los hombres de Babilonia rendían culto a Sucot-benot, los hombres de Cuta a Nergal y los hombres de Hamat a Asima. \v 31 Los aveos hicieron una imagen de Nibhaz y de Tartac. Los sefarveos quemaban a sus hijos en el fuego para adorar a Adramelec y Anamelec, \tl ʼelohim\tl* de Sefarvaim. \p \v 32 Aunque reverenciaban a \nd Yavé\nd*, designaron sacerdotes de entre ellos para los lugares altos, quienes ofrecían sacrificios a favor de ellos en los santuarios de dichos lugares. \v 33 De modo que reverenciaban a \nd Yavé\nd*, pero también servían a sus propios \tl ʼelohim\tl*, según la costumbre de las naciones de donde fueron deportados. \p \v 34 Hasta hoy obran según las costumbres antiguas: No reverencian a \nd Yavé\nd*, ni actúan según sus Preceptos, a sus Ordenanzas, a la Ley y al Mandamiento que \nd Yavé\nd* prescribió a los hijos de Jacob, al cual llamó Israel. \p \v 35 \nd Yavé\nd* hizo un Pacto con ellos y les ordenó: \wj No teman a otros \+tl ʼelohim\+tl*, ni se inclinen ante ellos, ni les sirvan, ni les ofrezcan sacrificios,\wj* \v 36 \wj sino solo a \+nd Yavé\+nd*, Quien los sacó de la tierra de Egipto con gran poder y brazo extendido. A Él temerán, ante Él se inclinarán y ofrecerán sacrificios.\wj* \p \v 37 \wj Tendrán cuidado de practicar todos los días los Preceptos, las Ordenanzas, la Ley y los Mandamientos que escribí para ustedes. \wj* \p \wj No teman a otros \+tl ʼelohim\+tl*,\wj* \v 38 \wj ni olviden el Pacto que hice con ustedes. \wj* \p \wj No teman a otros \+tl ʼelohim\+tl*,\wj* \v 39 \wj sino teman a \+nd Yavé\+nd* su \+nd ʼElohim\+nd*, y Él los librará de la mano de todos sus enemigos.\wj* \p \v 40 Pero ellos no escucharon, sino hicieron según su antigua costumbre. \v 41 Así pues, aquellas gentes reverenciaban a \nd Yavé\nd*, pero al mismo tiempo rendían culto a sus imágenes. Sus hijos y sus nietos practicaron hasta hoy lo mismo que sus antepasados. \c 18 \s1 Reinado de Ezequías en Judá \p \v 1 El año tercero de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, comenzó a reinar Ezequías, hijo de Acaz, rey de Judá. \v 2 Tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó 29 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Abi, hija de Zacarías. \v 3 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, conforme a todo lo que hizo su antepasado David. \p \v 4 \add Ezequías\add* quitó los lugares altos, quebró las estatuas y cortó los símbolos de Asera. También destrozó la serpiente de bronce que Moisés hizo, a la cual llamó Nehustán, porque hasta aquellos días los hijos de Israel le quemaban incienso. \p \v 5 Confió en \nd Yavé\nd*, \nd ʼElohim\nd* de Israel. Ni antes ni después de él hubo otro como él entre todos los reyes de Judá, \v 6 pues se apegó a \nd Yavé\nd*. No se apartó de Él, sino guardó los Mandamientos que \nd Yavé\nd* ordenó a Moisés. \v 7 \nd Yavé\nd* estaba con \add Ezequías\add* y lo prosperaba en todo lo que hacía. \p Él se rebeló contra el rey de Asiria y no le sirvió. \v 8 Derrotó también a los filisteos hasta Gaza y sus territorios, desde las torres de los centinelas hasta la ciudad fortificada. \p \v 9 En el cuarto año del rey Ezequías, que era el año séptimo de Oseas, hijo de Ela, rey de Israel, aconteció que Salmanasar, rey de Asiria, subió contra Samaria y la sitió. \v 10 Después de tres años la capturaron, es decir, el año sexto de Ezequías, que era el año noveno de Oseas, rey de Israel. \v 11 El rey de Asiria llevó cautivos a los israelitas a Asiria, y los ubicó en Halah y Habor, junto al río Gozán, y en las ciudades de los medos, \v 12 porque no atendieron la voz de \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, sino quebrantaron su Pacto. No escucharon ni practicaron todo lo que Moisés esclavo de \nd Yavé\nd* ordenó. \p \v 13 El año 14 del rey Ezequías, Senaquerib, rey de Asiria, subió contra todas las ciudades fortificadas de Judá y las tomó. \v 14 Entonces Ezequías, rey de Judá, envió a decir al rey de Asiria en Laquis: Me equivoqué. Retírate de mí, y aceptaré lo que me impongas. Y el rey de Asiria impuso a Ezequías, rey de Judá, 9.9 toneladas de plata y 990 kilogramos de oro. \v 15 Ezequías entregó toda la plata que había en la Casa de \nd Yavé\nd* y en los tesoros de la casa real. \p \v 16 En aquel tiempo Ezequías, rey de Judá, quitó el oro de las puertas de la Casa de \nd Yavé\nd* y de los soportes que él mismo había recubierto. Entregó todo esto al rey de Asiria. \p \v 17 Después el rey de Asiria envió al \tl Tartán\tl*, al \tl Rabsaces\tl* y al \tl Rabsaces\tl* con un gran ejército desde Laquis a Jerusalén contra el rey Ezequías. Subieron, llegaron a Jerusalén y se detuvieron junto al acueducto del estanque de arriba que está en el camino al Campo del Lavador. \v 18 Llamaron al rey. Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, administrador del palacio, el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf, salieron hacia ellos. \p \v 19 Y el \tl Rabsaces\tl* les dijo: Digan ahora a Ezequías: El gran rey de Asiria dice: ¿Qué confianza es ésta en la cual te apoyas? \v 20 ¿Piensas que la estrategia y el poder para la guerra son cuestión de palabras? ¿En quién confías para rebelarte contra mí? \v 21 ¿Confías en ese bastón de caña quebrada que es Egipto, que al que se apoya en él, se le clava en la mano y la atraviesa? Así es Faraón, rey de Egipto, para todos los que confían en él. \p \v 22 Y si me dicen: Nosotros confiamos en \nd Yavé,\nd* nuestro \nd ʼElohim.\nd* ¿No es el mismo del cual Ezequías quitó los lugares altos y dijo a Judá y a Jerusalén: Delante de este altar adorarán en Jerusalén? \p \v 23 Ahora pues, haz un compromiso con mi \tl ʼadón\tl*, el rey de Asiria, y yo te daré 2.000 caballos, si tienes jinetes para ellos. \v 24 ¿Cómo te atreves a resistir a un oficial, al menor de los esclavos de mi \tl ʼadón\tl*, al confiar en los carruajes y en los jinetes de Egipto? \v 25 ¿Subí para destruir este lugar sin consultar a \nd Yavé\nd*? Pues \nd Yavé\nd* me dijo: \wj ¡Sube contra esta tierra y destrúyela! \wj* \p \v 26 Entonces Eliaquim, hijo de Hilcías, Sebna y Joa, dijeron al \tl Rabsaces\tl*: Te rogamos que hables a tus esclavos en siríaco, porque nosotros lo entendemos. No nos hables en hebreo a oídos de la gente que está sobre el muro. \p \v 27 Pero el \tl Rabsaces\tl* les respondió: ¿Me envió mi \tl ʼadón\tl* a decir estas palabras solo a tu \tl ʼadón\tl* y a ti, y no a los hombres que están sentados en el muro, expuestos a comerse con ustedes sus propios excrementos y beber su propia orina? \p \v 28 Se puso en pie el \tl Rabsaces\tl* y exclamó a gran voz en hebreo: ¡Escuchen palabra del gran rey de Asiria! \v 29 El rey dice: No los engañe Ezequías, porque no podrá librarlos de mi mano. \v 30 Ezequías no los obligue a confiar en \nd Yavé\nd* y diga: Ciertamente \nd Yavé\nd* nos librará, y esta ciudad no será entregada en mano del rey de Asiria. \p \v 31 No escuchen a Ezequías, porque el rey de Asiria dice: Convengan la paz conmigo y salgan a mí. Cada uno comerá de su vid y su higuera, y cada uno beberá el agua de su pozo, \v 32 hasta que yo venga para llevarlos a una tierra como su propia tierra: tierra de grano y mosto, tierra de pan y viñas, tierra de olivos, aceite y miel. Vivirán y no morirán. \p No escuchen a Ezequías, quien los persuade: \nd Yavé\nd* nos librará. \v 33 ¿Alguno de los \tl ʼelohim\tl* de las naciones ha librado su tierra de la mano del rey de Asiria? \v 34 ¿Dónde están los \tl ʼelohim\tl* de Hamat y Arfad? ¿Dónde están los \tl ʼelohim\tl* de Sefarvaim, de Hena y de Iva? ¿Pudieron librar a Samaria de mi mano? \v 35 ¿Cuáles de todos los \tl ʼelohim\tl* de estas naciones libraron sus tierras de mi mano, para \add confiar\add* que \nd Yavé\nd* libre a Jerusalén de mi mano? \p \v 36 Pero el pueblo calló y no le respondió alguna palabra, pues había una consigna del rey: No le respondan. \p \v 37 Eliaquim, hijo de Hilcías, administrador del palacio, el escriba Sebna y el cronista Joa, hijo de Asaf, fueron a Ezequías con sus ropas rasgadas y le declararon las palabras del \tl Rabsaces. \tl* \c 19 \s1 Oración de Ezequías \p \v 1 Aconteció que cuando el rey Ezequías lo oyó, rasgó sus ropas, se cubrió de tela áspera y fue a la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 2 Envió al administrador Eliaquim, al escriba Sebna y a los ancianos de los sacerdotes, cubiertos de tela áspera, al profeta Isaías, hijo de Amoz, \v 3 y le dijeron: Ezequías dijo: ¡Hoy es día de angustia, castigo y blasfemia! ¡Los hijos están por salir del vientre, pero no hay fuerzas para darlos a luz! \v 4 Quizás \nd Yavé\nd* tu \nd ʼElohim\nd* haya escuchado todas las palabras del \tl Rabsaces\tl*, a quien el rey de Asiria, su \tl ʼadón\tl*, envió para vituperar al \nd ʼElohim\nd* viviente y reprenda las palabras que Él oyó. Por tanto, eleva una oración a favor del remanente que aún nos queda. \p \v 5 Los esclavos del rey Ezequías se presentaron ante Isaías. \v 6 Isaías les respondió: Digan a su \tl ʼadon:\tl* \nd Yavé\nd* dice: \wj No temas las palabras que oíste, con las cuales los esclavos del rey de Asiria me blasfemaron.\wj* \v 7 \wj Ciertamente pondré un espíritu sobre él, y oirá un rumor. Se volverá a su tierra y caerá a espada en su propia tierra.\wj* \p \v 8 Cuando el \tl Rabsaces\tl* oyó que el rey de Asiria salió de Laquis, regresó y halló que combatía contra Libna. \p \v 9 Pero cuando oyó decir que Tirhaca, rey de Etiopía, salió a luchar contra él, envió otra vez mensajeros a Ezequías para decirle: \v 10 Digan a Ezequías, rey de Judá: No te engañe tu \nd ʼElohim\nd*, en el cual confías, y dices: Jerusalén no será entregada en mano del rey de Asiria. \v 11 Ciertamente tú oíste lo que los reyes de Asiria hicieron a todas las tierras y las destruyeron. ¿Y tú te librarás? \v 12 ¿Los \tl ʼelohim\tl* de las naciones que mis antepasados destruyeron las pudieron librar de la destrucción, esto es, a Gozán, Harán, Resef y los hijos de Edén que estaban en Telasar? \v 13 ¿Dónde está el rey de Hamat, o Arfad, o de la ciudad de Sefarvaim, o de Hena, o de Iva? \p \v 14 Ezequías recibió la carta de mano de los mensajeros y la leyó. Subió a la Casa de \nd Yavé\nd*, y la desplegó delante de \nd Yavé\nd*. \s1 Oración del rey Ezequías \p \v 15 Ezequías oró a \nd Yavé\nd*: ¡Oh \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, que tienes tu trono entre los querubines! ¡Solo Tú eres el \nd ʼElohim\nd* de todos los reinos de la tierra! Tú hiciste el cielo y la tierra. \v 16 Inclina tu oído, oh \nd Yavé\nd*, y escucha. Abre tus ojos, oh \nd Yavé\nd*, y observa. Escucha las palabras que Senaquerib envió para vituperar al \nd ʼElohim\nd* viviente. \p \v 17 Cierto es, oh \nd Yavé\nd*, que los reyes de Asiria asolaron los pueblos y sus tierras, \v 18 y echaron sus \tl ʼelohim\tl* al fuego. Porque ellos no son \nd ʼElohim\nd*, sino obra de madera y piedra hechas por el hombres. Por eso los destruyeron. \p \v 19 Ahora pues, oh \nd Yavé ʼElohim\nd* nuestro, te ruego que nos salves de su mano, y que todos los reinos de la tierra sepan que solo Tú, oh \nd Yavé\nd*, eres \nd ʼElohim.\nd* \p \v 20 Entonces Isaías, hijo de Amoz, envió a decir a Ezequías: \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel dice: \wj Escuché lo que me rogaste acerca de Senaquerib, rey de Asiria.\wj* \p \v 21 \wj Esta es la Palabra que \+nd Yavé\+nd* dice acerca de él: Te menosprecia, se burla de ti la virgen, hija de Sion. Menea despectivamente la cabeza tras ti, la hija de Jerusalén.\wj* \v 22 \wj ¿A quién vituperaste y blasfemaste? ¿Contra quién levantaste tu voz y elevaste tus ojos con altivez? Contra el Santo de Israel.\wj* \p \v 23 \wj Por medio de tus mensajeros afrentaste a \+nd ʼAdonay\+nd* y dijiste: Con la multitud de mis carruajes yo escalé la cima de las montañas, lo más inaccesible del Líbano. Corté sus más altos cedros y lo mejor de sus cipreses, y entré en su más remoto refugio, en su bosque más frondoso.\wj* \v 24 \wj Cavé pozos, bebí aguas extranjeras y sequé todos los ríos de Egipto con las plantas de mis pies.\wj* \p \v 25 \wj ¿No oíste que hace mucho tiempo lo determiné, y desde tiempos antiguos lo dispuse? Ahora lo ejecuto para reducir ciudades fortificadas a montones de escombros.\wj* \v 26 \wj Sus habitantes, carentes de fuerza, fueron acobardados y avergonzados como la vegetación del campo, la hierba verde, el verdor del pasto, como la hierba de las azoteas que se marchita antes de madurar.\wj* \p \v 27 \wj Pero conozco tu situación, cómo sales y entras, y te enfureces contra Mí.\wj* \v 28 \wj A causa de tu furia contra Mí y porque tu soberbia subió hasta mis oídos, pondré mi argolla en tu nariz y mi freno en tu hocico. Te haré volver por el camino por donde viniste.\wj* \s1 Señal para el rey Ezequías \p \v 29 \wj Ésta será la señal para ti: Este año comerás lo que brote del grano caído, y el segundo año, lo que brote sin sembrar. El tercer año sembrarás y cosecharás, plantarás viñas y comerás su fruto.\wj* \v 30 \wj El remanente que quede de la casa de Judá echará nuevamente raíces hacia abajo, y llevará fruto hacia arriba.\wj* \v 31 \wj Porque saldrá un remanente de Jerusalén, y de la montaña Sion \+add saldrán\+add* los que se salven. ¡El celo de \+nd Yavé\+nd* de las huestes hará esto!\wj* \s1 Profecía de Isaías contra Senaquerib \p \v 32 Por tanto, \nd Yavé\nd* dijo con respecto al rey de Asiria: \wj No entrará en esta ciudad, ni disparará en ella ni una sola flecha, ni vendrá delante de ella con escudo, ni levantará contra ella terraplén.\wj* \v 33 \wj Se devolverá por el mismo camino por el cual vino. Nunca entrará en esta ciudad, Palabra de \+nd Yavé\+nd*,\wj* \v 34 \wj por cuanto Yo defenderé esta ciudad para salvarla a causa de Mí y de mi esclavo David.\wj* \s1 Golpe de \nd Yavé\nd* contra el rey de Asiria \p \v 35 Aconteció que aquella noche el Ángel de \nd Yavé\nd* salió e hirió a 185.000 en el campamento de los asirios. Cuando \add los demás\add* se levantaron de madrugada, ciertamente todos eran cadáveres. \v 36 Entonces Senaquerib, rey de Asiria se retiró a Nínive. \v 37 Aconteció que mientras adoraba en el templo de su \nd ʼelohim,\nd* Nisroc, Adramelec y Sarezer lo mataron a espada. Ellos escaparon a la tierra de Ararat. Su hijo Esar-hadón reinó en su lugar. \c 20 \s1 Enfermedad de Ezequías \p \v 1 En aquellos días Ezequías cayó enfermo de muerte. El profeta Isaías, hijo de Amoz, fue a él y le dijo: \nd Yavé\nd* dice: \wj Ordena tu casa, porque morirás y no vivirás.\wj* \p \v 2 Y él volvió su rostro hacia la pared y oró a \nd Yavé\nd*: \v 3 Te ruego, oh \nd Yavé\nd*, que recuerdes que he andado delante de Ti con verdad y un corazón íntegro, y que hice lo bueno ante Ti. Ezequías lloraba amargamente. \p \v 4 Aconteció que antes que Isaías saliera del patio central, le vino Palabra de \nd Yavé\nd*: \v 5 \wj Vuelve y dí a Ezequías, líder de mi pueblo: \+nd Yavé\+nd*, el \+nd ʼElohim\+nd* de David tu antepasado, dice: Escuché tu oración y vi tus lágrimas. Mira, Yo te sano. Al tercer día irás al Templo de \+nd Yavé\+nd*.\wj* \v 6 \wj Añado a tu vida 15 años. Te libraré a ti y a esta ciudad de mano del rey de Asiria. Ampararé a esta ciudad por amor a Mí y a mi esclavo David.\wj* \p \v 7 Isaías dijo: Tomen masa de higos. La llevaron, la colocaron sobre la úlcera y sanó. \p \v 8 Ezequías preguntó a Isaías: ¿Qué señal tendré de que \nd Yavé\nd* me sanará, y al tercer día iré a la Casa de \nd Yavé\nd*? \p \v 9 Isaías contestó: Esto te será señal de parte de \nd Yavé\nd*, que Él hará lo que te dijo: ¿Avanzará la sombra diez gradas, o retrocederá diez gradas? \p \v 10 Y Ezequías respondió: Fácil cosa es que la sombra avance diez gradas, pero no que la sombra vuelva atrás diez gradas. \p \v 11 Entonces el profeta Isaías invocó a \nd Yavé\nd*, e hizo volver la sombra diez gradas hacia atrás por las gradas que había descendido en la gradería de Acaz. \s1 Un mal procedimiento de Ezequías \p \v 12 En aquel tiempo Berodac-baladán, hijo de Baladán, rey de Babilonia, envió una carta y un presente a Ezequías, porque oyó que Ezequías estuvo enfermo. \p \v 13 Ezequías recibió \add a los mensajeros\add* y les mostró toda la casa de su tesorería, la plata y el oro, las especias y ungüentos preciosos, su casa de armas, y todo lo que había en sus tesoros. No hubo algo que Ezequías no les mostrara, tanto en su casa como en todos sus dominios. \p \v 14 Entonces el profeta Isaías fue al rey Ezequías, y le dijo: ¿Qué dijeron esos hombres y de dónde vinieron? \p Y Ezequías le contestó: Vinieron de una tierra lejana, de Babilonia. \p \v 15 Y él preguntó: ¿Qué vieron en tu casa? \p Y Ezequías respondió: Vieron todo lo que hay en mi casa. No hay algo en mis tesoros que no les mostrara. \p \v 16 Isaías dijo a Ezequías: Escucha Palabra de \nd Yavé\nd*: \v 17 \wj Ciertamente vienen días en los cuales todo lo que está en tu casa y todo lo que tus antepasados atesoraron hasta hoy, será llevado a Babilonia. Nada quedará, dice \+nd Yavé\+nd*.\wj* \v 18 \add Algunos\add* de tus hijos que engendraste serán tomados para que sean esclavos en el palacio del rey de Babilonia. \p \v 19 Ezequías respondió a Isaías: Buena es la Palabra de \nd Yavé\nd* que has pronunciado. Y añadió: Al menos habrá paz y seguridad en mi tiempo. \s1 Muerte de Ezequías \p \v 20 Los demás hechos de Ezequías, todo su valor, y cómo hizo el estanque y el acueducto para llevar el agua a la ciudad, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 21 Ezequías reposó con sus antepasados, y reinó en su lugar su hijo Manasés. \c 21 \s1 Reinado de Manasés en Judá \p \v 1 Manasés tenía 12 años cuando comenzó a reinar, y reinó 55 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Hepsiba. \p \v 2 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, según las repugnancias de las naciones que \nd Yavé\nd* expulsó de delante de los hijos de Israel, \v 3 porque volvió a edificar los lugares altos que su padre Ezequías destruyó, y erigió altares a baal. Hizo una Asera, tal como hizo Acab, rey de Israel. Se postró ante todo el ejército del cielo y les rindió culto. \v 4 Construyó altares en la Casa de \nd Yavé\nd*, de la cual \nd Yavé\nd* dijo: \wj En Jerusalén pondré mi Nombre.\wj* \p \v 5 Levantó altares para todo el ejército del cielo en los dos patios del Templo de \nd Yavé\nd*, \v 6 hizo pasar por fuego a su hijo, practicó la brujería y la magia, designó adivinadores por medio de espíritus de muertos y se empeñó en hacer lo malo ante \nd Yavé\nd* para provocarlo a ira. \p \v 7 Puso la imagen tallada de Asera que él hizo en la Casa. \nd Yavé\nd* dijo a David y a su hijo Salomón acerca de esta Casa: \wj Pondré mi Nombre para siempre en esta Casa y en Jerusalén, la cual escogí de entre todas las tribus de Israel.\wj* \v 8 \wj No volveré a desplazar los pies de Israel de la tierra que di a sus antepasados, con tal que observen todo lo que les ordené, según toda la Ley que mi esclavo Moisés les ordenó.\wj* \p \v 9 Pero no escucharon, pues Manasés los indujo a hacer el mal, más que las otras naciones que \nd Yavé\nd* destruyó delante de los hijos de Israel. \p \v 10 Entonces \nd Yavé\nd* habló por medio de sus esclavos profetas: \v 11 \wj Por cuanto Manasés, rey de Judá, hizo estas repugnancias, produjo más mal que todo el que practicaron los amorreos que lo precedieron y estimuló a pecar a Judá con sus ídolos,\wj* \v 12 \wj por tanto, \+nd Yavé ʼElohim\+nd* de Israel dijo: Ciertamente Yo traigo tal mal sobre Jerusalén y sobre Judá, que al que lo oiga le vibrarán ambos oídos.\wj* \p \v 13 \wj Extenderé sobre Jerusalén el cordel de Samaria y la plomada de la casa de Acab. Escurriré a Jerusalén como se escurre un plato, que se escurre y se voltea boca abajo.\wj* \v 14 \wj Desampararé el resto de mi heredad y la entregaré en mano de sus enemigos. Serán presa y despojo para todos sus adversarios,\wj* \v 15 \wj porque hicieron lo malo delante de Mí y me provocaron a ira desde el día cuando sus antepasados salieron de Egipto hasta hoy.\wj* \p \v 16 También Manasés derramó mucha sangre inocente, hasta llenar de ella a Jerusalén de un extremo a otro, además de su pecado con el cual estimuló a pecar a Judá para que hiciera lo malo ante \nd Yavé\nd*. \p \v 17 Todo lo que hizo Manasés y todo su pecado, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 18 Manasés reposó con sus antepasados, y fue sepultado en el jardín de Uza que era el de su casa. Reinó en su lugar su hijo Amón. \s1 Reinado de Amón en Judá \p \v 19 Amón tenía 22 años cuando comenzó a reinar, y reinó dos años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Mesulemet, hija de Haruz de Jotba. \v 20 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, como hizo su padre Manasés. \v 21 Anduvo en todos los caminos en los cuales estuvo su padre. Sirvió y adoró a los ídolos de su padre. \v 22 Abandonó a \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados y no anduvo en el camino de \nd Yavé\nd*. \p \v 23 Los esclavos de Amón conspiraron contra él, y lo mataron en su casa. \v 24 Pero el pueblo de la tierra mató a todos los que conspiraron contra el rey Amón, y el pueblo de la tierra proclamó a su hijo Josías como rey en su lugar. \p \v 25 Los demás hechos de Amón, ¿no están escritos en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 26 Fue sepultado en su sepulcro en el huerto de Uza, y su hijo Josías reinó en su lugar. \c 22 \s1 Reinado de Josías en Judá \p \v 1 Cuando Josías comenzó a reinar tenía ocho años, y reinó en Jerusalén 31 años. El nombre de su madre fue Jedida, hija de Adaía, de Boscat. \v 2 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, anduvo en todo el camino de David su antepasado y no se apartó ni a la derecha ni a la izquierda. \p \v 3 El año 18 del rey Josías aconteció que el rey envió a Safán, hijo de Azalías, hijo del escriba Mesulam, a la Casa de \nd Yavé\nd* y le dijo: \v 4 Vé al sumo sacerdote Hilcías y dile que recoja el dinero que fue traído a la Casa de \nd Yavé\nd*, que los guardianes de la puerta recogieron del pueblo, \v 5 y lo entreguen en manos de los que supervisan el arreglo de la Casa de \nd Yavé\nd*, a fin de que lo entreguen a los que hacen la obra para reparar las grietas de la Casa, \v 6 es decir, a los carpinteros, constructores y albañiles para comprar madera y piedra labrada a fin de reparar la Casa. \v 7 Que no se les pida cuenta del dinero que entregan en sus manos, porque trabajan con fidelidad. \p \v 8 Entonces el sumo sacerdote Hilcías dijo al escriba Safán: ¡Hallé en la Casa de \nd Yavé\nd* el Rollo de la Ley! Hilcías entregó el Rollo a Safán, quien lo leyó. \v 9 El escriba Safán fue al rey y le llevó respuesta: Tus esclavos sacaron el dinero que se halló en la Casa, y lo entregaron en manos de los supervisores de los trabajos en la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 10 El escriba Safán también informó al rey: El sacerdote Hilcías me entregó un rollo. Y Safán lo leyó delante del rey. \p \v 11 Aconteció que cuando el rey escuchó las palabras del Rollo de la Ley, rasgó sus ropas. \v 12 Luego el rey dio orden al sacerdote Hilcías, a Ahicam, hijo de Safán, a Acbor, hijo de Micaías, al escriba Safán, y a Asaías esclavo del rey, y dijo: \v 13 Vayan y consulten a \nd Yavé\nd* por mí, por el pueblo y por todo Judá, con respecto a las Palabras de este rollo que se halló. Grande es la ira de \nd Yavé\nd* que se encendió contra nosotros, porque nuestros antepasados no escucharon las Palabras de este rollo con el fin de hacer según todo lo que fue escrito para nosotros. \p \v 14 El sacerdote Hilcías y Ahicam, Acbor, Safán y Asaías fueron a la profetisa Hulda, esposa de Salum, hijo de Ticva, hijo de Harhas, guardián de las ropas, quien vivía en el segundo sector de Jerusalén, y hablaron con ella. \p \v 15 Y ella les dijo: \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel dice: \wj Digan al varón que los envió a mí: \wj* \v 16 \wj \+nd Yavé\+nd* dice: Ciertamente Yo traigo el mal sobre este lugar y sobre sus habitantes, como dicen las Palabras del rollo que leyó el rey de Judá, \wj* \v 17 \wj porque me abandonaron y quemaron incienso a otros \+tl ʼelohim\+tl* para provocarme a ira con toda la obra de sus manos. Así pues, mi ira se encendió contra este lugar y no será apagada. \wj* \p \v 18 \wj Pero al rey de Judá, que los envió a consultar a \+nd Yavé\+nd*, le dirán: \+nd Yavé ʼElohim\+nd* de Israel dice: Las Palabras que oíste se cumplirán, \wj* \v 19 \wj \+add pero\+add* porque tu corazón se enterneció, te humillaste delante de \+nd Yavé\+nd* al escuchar lo que hablé contra este lugar y sus habitantes, que ellos serán una desolación y maldición, y tú rasgaste tus ropas y lloraste delante de Mí, Yo también escuché, dice \+nd Yavé\+nd*.\wj* \p \v 20 \wj Por tanto, ciertamente Yo te recogeré con tus antepasados. Serás llevado a tu sepulcro en paz y tus ojos no verán todo el mal que Yo traigo sobre este lugar.\wj* Y ellos llevaron la respuesta al rey. \c 23 \s1 Reformas del rey Josías \p \v 1 Entonces el rey convocó a todos los ancianos de Judá y Jerusalén para que se reunieran con él. \v 2 El rey subió a la Casa de \nd Yavé\nd*, y todo hombre de Judá y todos los habitantes de Jerusalén iban con él, así como los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, desde el menor hasta el mayor. Entonces él leyó a oídos de ellos todas las Palabras del rollo del Pacto que fue hallado en el Templo de \nd Yavé\nd*. \v 3 El rey se colocó en pie junto a la columna. Hizo pacto delante de \nd Yavé\nd* de seguirlo, guardar sus Mandamientos, Testimonios y Preceptos con todo el corazón y toda el alma, y cumplir las Palabras del Pacto escritas en ese rollo. Y todo el pueblo confirmó el Pacto. \p \v 4 El rey ordenó al sumo sacerdote Hilcías, a los sacerdotes de segundo orden y a los guardianes de la entrada, que sacaran del Santuario de \nd Yavé\nd* todos los utensilios hechos para baal, Asera y todo el ejército del cielo. Los quemó fuera de Jerusalén, en los campos del Cedrón, y llevó sus cenizas a Bet-ʼEl. \p \v 5 Destituyó a los sacerdotes idólatras que los reyes de Judá designaron para quemar incienso en los lugares altos, las ciudades de Judá y los alrededores de Jerusalén. También destituyó a los que quemaban incienso a baal, al sol y a la luna, a Mazzalot y a todo el ejército del cielo. \p \v 6 Sacó la Asera de la Casa de \nd Yavé\nd*, y la llevó fuera de Jerusalén, al torrente de Cedrón. Allí la quemó hasta reducirla a cenizas y echó sus cenizas sobre las tumbas del pueblo común. \p \v 7 Derribó además las viviendas de los sodomitas dedicados a la prostitución las cuales estaban en la Casa de \nd Yavé\nd*, donde las mujeres tejían tiendas para la Asera. \p \v 8 Llamó a todos los sacerdotes de las ciudades de Judá, declaró impuros los lugares altos donde los sacerdotes quemaban incienso, desde Geba hasta Beerseba, y destruyó los lugares altos de las puertas que estaban en la entrada del portón de Josué, gobernador de la ciudad, a la izquierda de la entrada a la ciudad. \v 9 Pero a los sacerdotes de los lugares altos no se les permitió subir al altar de \nd Yavé\nd* en Jerusalén, aunque sí comían panes sin levadura entre sus hermanos. \p \v 10 También declaró impuro a Tofet, que está en el valle del hijo de Hinom, para que nadie hiciera pasar por fuego a su hijo o a su hija en honor a Moloc. \v 11 Quitó también los caballos que los reyes de Judá dedicaron al sol en la entrada a la Casa de \nd Yavé\nd*, junto a la cámara de Natán-melec, el funcionario que tenía a su cargo las dependencias, y quemó los carruajes del sol en el fuego. \p \v 12 Asimismo, el rey demolió los altares que los reyes de Judá hicieron en la azotea del aposento superior de Acaz, y los altares que Manasés erigió en los dos patios de la Casa de \nd Yavé\nd*. Los destrozó allí y echó sus cenizas en el torrente de Cedrón. \p \v 13 Del mismo modo el rey declaró impuros los lugares altos que estaban al este de Jerusalén, a la mano derecha de la Montaña de la Destrucción, que Salomón, rey de Israel, dedicó a Astarot, repugnancia de los sidonios, a Quemos, repugnancia de Moab, y a Milcom, repugnancia de los hijos de Amón. \v 14 También destrozó las estatuas, taló las Aseras y llenó aquellos sitios con huesos de hombres. \p \v 15 Además destrozó el altar que estaba en Bet-ʼEl y el lugar alto que hizo Jeroboam, hijo de Nabat, por medio del cual indujo a pecar a Israel. Destrozó tanto ese altar como el lugar alto. Quemó el lugar alto, lo redujo a cenizas y quemó la Asera. \v 16 Al regresar, Josías vio los sepulcros que estaban allí en la montaña y envió a recoger los huesos de los sepulcros. Los quemó sobre el altar y los declaró impuros, según la Palabra de \nd Yavé\nd* que habló el varón de \nd ʼElohim\nd* que anunció estas cosas. \p \v 17 Y preguntó: ¿Qué monumento es éste que veo? \p Y los hombres de la ciudad le respondieron: Es el sepulcro del varón de \nd ʼElohim\nd* que vino de Judá y proclamó estas cosas que hiciste contra el altar de Bet-ʼEl. \v 18 Y él dijo: Déjenlo, que nadie mueva sus huesos. \p \v 19 Josías también quitó todos los santuarios de los lugares altos que había en las ciudades de Samaria, que los reyes de Israel hicieron para provocar a ira a \nd Yavé\nd*. Hizo con ellos como hizo en Bet-ʼEl. \v 20 Además mató sobre los altares a todos los sacerdotes de los lugares altos que estaban allí, quemó sobre ellos huesos humanos y regresó a Jerusalén. \p \v 21 Luego el rey ordenó a todo el pueblo: Celebren la Pascua para \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, según lo escrito en este rollo del Pacto. \v 22 En verdad no fue celebrada una Pascua como ésta desde los días de los jueces que juzgaron a Israel, ni en todos los días de los reyes de Israel y los reyes de Judá. \v 23 El año 18 del rey Josías fue celebrada esta Pascua para \nd Yavé\nd* en Jerusalén. \p \v 24 Josías también eliminó a los médium y los espiritistas, los ídolos domésticos y todos los ídolos repugnantes, y todos los ídolos detestables que se veían en la tierra de Judá y en Jerusalén, para cumplir las Palabras de la Ley escritas en el rollo que el sacerdote Hilcías halló en la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 25 Ningún rey hubo como él antes de él, que se convirtiera a \nd Yavé\nd* con todo su corazón, toda su alma y toda su fuerza, según toda la Ley de Moisés, ni tampoco se levantó otro igual después de él. \p \v 26 Sin embargo, \nd Yavé\nd* no desistió del ardor de su gran ira, pues su ira se encendió contra Judá a causa de todas las provocaciones con las cuales lo provocó Manasés. \v 27 Y \nd Yavé\nd* dijo: \wj Como aparté a Israel de mi Presencia, también apartaré a Judá, y desecharé a esta ciudad que escogí, a Jerusalén, y la Casa de la cual dije: Allí estará mi Nombre.\wj* \p \v 28 Todo lo que hizo Josías, ¿no está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \p \v 29 En aquellos días, Faraón Necao, rey de Egipto, subió hacia el río Éufrates a enfrentarse al rey de Asiria, y el rey Josías salió contra él. Pero cuando \add Faraón Necao\add* lo vio, lo mató en Meguido. \v 30 Sus esclavos lo colocaron en un carruaje, lo llevaron muerto desde Meguido a Jerusalén y lo sepultaron en su sepulcro. \p Después el pueblo de la tierra tomó a Joacaz, hijo de Josías, lo ungieron y lo proclamaron rey en lugar de su padre. \s1 Reinado de Joacaz en Judá \p \v 31 Cuando Joacaz comenzó a reinar tenía 23 años, y reinó tres meses en Jerusalén. El nombre de su madre fue Hamutal, hija de Jeremías de Libna. \v 32 Hizo lo malo ante los ojos de \nd Yavé\nd*, según todo lo que hicieron sus antepasados. \v 33 Faraón Necao lo encarceló en Ribla, en la tierra de Hamat, para que no reinara en Jerusalén, e impuso sobre la tierra un tributo de 3,3 toneladas de plata y 33 kilogramos de oro. \s1 Reinado de Joacim en Judá \p \v 34 Entonces Faraón Necao proclamó rey a Eliaquim, hijo de Josías, en lugar de Josías su padre, y le cambió el nombre por Joacim. Tomó a Joacaz y lo llevó a Egipto, y murió allí. \v 35 Joacim pagó la plata y el oro a Faraón, pero tuvo que establecer un impuesto a la tierra, para entregar el dinero según la orden de Faraón. Exigió a la gente del pueblo que cada uno pagara, según su evaluación, la plata y el oro para entregarlo a Faraón Necao. \p \v 36 Cuando Joacim comenzó a reinar tenía 25 años, y reinó 11 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Zebuda, hija de Pedaías de Ruma. \v 37 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, conforme a todo lo que hicieron sus antepasados. \c 24 \s1 Reinado de Joacim y Joaquín \p \v 1 En su tiempo subió Nabucodonosor, rey de Babilonia, y Joacim fue su vasallo durante tres años. Luego cambió de parecer y se rebeló contra él. \v 2 Entonces \nd Yavé\nd* envió contra él tropas de caldeos, sirios, moabitas y amonitas. Las envió contra Judá para destruirla, según la Palabra que \nd Yavé\nd* habló por medio de sus esclavos profetas. \v 3 Ciertamente por mandato de \nd Yavé\nd* sucedió esto contra Judá para quitarla de su Presencia por los pecados de Manasés, en conformidad con todo lo que él hizo, \v 4 y también por la sangre inocente que derramó, pues llenó a Jerusalén de sangre inocente. Por tanto, \nd Yavé\nd* no quiso perdonar. \p \v 5 Todo lo que hizo Joacim, ¿no está escrito en el rollo de las Crónicas de los reyes de Judá? \v 6 Joacim reposó con sus antepasados, y reinó en su lugar su hijo Joaquín. \p \v 7 El rey de Egipto nunca volvió a salir de su tierra, pues el rey de Babilonia conquistó todo lo que era del rey de Egipto, desde el río de Egipto hasta el río Éufrates. \s1 Reinado de Joaquín en Judá \p \v 8 Joaquín tenía 18 años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén tres meses. El nombre de su madre fue Nehusta, hija de Elnatán de Jerusalén. \v 9 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, conforme a todo lo que hizo su padre. \p \v 10 En aquel tiempo los esclavos de Nabucodonosor, rey de Babilonia, subieron contra Jerusalén, y la ciudad fue sitiada. \v 11 También Nabucodonosor, rey de Babilonia, vino contra la ciudad cuando sus esclavos la sitiaban. \s1 Primera deportación \p \v 12 Joaquín, rey de Judá, salió al rey de Babilonia con su madre, sus esclavos, sus jefes y sus funcionarios. \p Así que el año octavo de su reinado, el rey de Babilonia lo tomó cautivo. \v 13 Sacó de allí todos los tesoros de la Casa de \nd Yavé\nd* y los tesoros de la casa real. Destrozó todos los utensilios de oro que Salomón, rey de Israel, hizo para el Santuario de \nd Yavé\nd*, tal como habló \nd Yavé\nd*. \v 14 Llevó en cautiverio a toda Jerusalén, todos los gobernantes y todos los hombres valientes: 10.000 cautivos y a todos los artesanos y herreros. No quedaron sino los más pobres de la tierra. \p \v 15 También llevó cautivo a Babilonia a Joaquín, la madre del rey, las mujeres del rey, sus funcionarios y los nobles del país. Los llevó cautivos de Jerusalén a Babilonia. \v 16 El rey de Babilonia llevó cautivos a todos los 7.000 hombres de guerra, a los artesanos y herreros, que fueron 1.000, y todos valientes guerreros. \v 17 El rey de Babilonia colocó a Matanías, tío de Joaquín, como rey en lugar de Joaquín y le cambió el nombre por Sedequías. \s1 Reinado de Sedequías en Judá \p \v 18 Cuando Sedequías comenzó a reinar tenía 21 años, y reinó 11 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Hamutal, hija de Jeremías de Libna. \v 19 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, conforme a todo lo que hizo Joacim, \v 20 porque Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia por causa de la ira que \nd Yavé\nd* tenía contra Jerusalén y Judá para echarlas de su Presencia. \c 25 \s1 Segunda deportación \p \v 1 El décimo día del décimo mes del año noveno de su reinado, Nabucodonosor, rey de Babilonia, llegó con todo su ejército contra Jerusalén, acampó contra ella, y construyó una empalizada alrededor de ella. \v 2 Así que la ciudad estuvo sitiada hasta el año 11 del rey Sedequías. \p \v 3 En el noveno día del mes cuarto, el hambre prevalecía en la ciudad, y no había pan para el pueblo de la tierra. \v 4 Entonces se abrió una brecha en el muro de la ciudad, mientras los caldeos estaban alrededor de ella. Huyeron de noche todos los hombres de guerra por el camino de la puerta que estaba entre los dos muros junto al huerto del rey, y salieron por el camino del Arabá. \v 5 Pero el ejército de los caldeos persiguió al rey y lo alcanzó en la llanura de Jericó. Todo su ejército fue dispersado de su lado. \p \v 6 Entonces capturaron al rey, lo llevaron ante el rey de Babilonia en Ribla, y éste dictó sentencia contra él. \v 7 Degollaron a los hijos de Sedequías en su presencia. Luego le sacaron los ojos a Sedequías, lo ataron con cadenas de bronce y lo llevaron a Babilonia. \p \v 8 A los siete días del mes quinto del año 19 de Nabucodonosor, rey de Babilonia, llegó a Jerusalén Nabuzaradán, el capitán de la guardia, esclavo del rey de Babilonia, \v 9 y quemó la Casa de \nd Yavé\nd*, el palacio real, y todas las casas de Jerusalén. También quemó todas las casas de los nobles. \v 10 El ejército de los caldeos que estaba con el capitán de la guardia derribó los muros de alrededor de Jerusalén. \v 11 Al resto del pueblo que quedaba en la ciudad, los desertores que se pasaron al rey de Babilonia y los que quedaban de la gente común, Nabuzaradán, capitán de la guardia los llevó cautivos. \v 12 Pero el capitán de la guardia dejó algunos de los más pobres de la tierra como viñadores y labradores. \p \v 13 Los caldeos destrozaron las columnas de bronce que estaban en la Casa de \nd Yavé\nd*, así como las basas y el mar de bronce que estaba en la Casa de \nd Yavé\nd*, y llevaron el bronce a Babilonia. \v 14 También tomaron los calderos, las paletas, las despabiladeras, las cucharas y todos los utensilios de bronce con los cuales ministraban. \p \v 15 El capitán de la guardia se llevó los incensarios, los tazones, todo lo que era de oro, todo lo que era de plata, \v 16 las dos columnas, el mar y las basas que hizo Salomón para la Casa de \nd Yavé\nd*. No fue posible calcular el peso del bronce de todos esos utensilios. \v 17 La altura de cada columna tenía 18,1 metros. Sobre ella había un capitel de bronce, cuya altura tenía 1,35 metros, con obra de malla y granadas talladas alrededor del capitel, todo de bronce. La segunda columna era igual a ésta, con su obra de malla. \p \v 18 El capitán de la guardia tomó al sumo sacerdote Seraías, a Sofonías, segundo sacerdote, y a tres guardias del portón. \v 19 De la ciudad tomó a cierto funcionario que estaba encargado de los hombres de guerra, a cinco varones de los consejeros del rey que estaban en la ciudad, al escriba principal del ejército que llevaba el registro de la gente de la tierra, y a 60 hombres del pueblo de la tierra que estaban en la ciudad. \v 20 Nabuzaradán, capitán de la guardia, tomó a éstos y los llevó ante el rey de Babilonia en Ribla, \v 21 quien los hirió y los mató en Ribla, en tierra de Hamat. \p Así fue sacado \add el pueblo de\add* Judá de su tierra y llevado cautivo. \p \v 22 Nabucodonosor, rey de Babilonia, designó como gobernador para el pueblo que dejó en tierra de Judá a Gedalías, hijo de Ahicam, hijo de Safán. \v 23 Al oír todos los jefes del ejército y sus hombres que el rey de Babilonia designó como gobernador a Gedalías, fueron a él en Mizpa: Ismael, hijo de Netanías, Johanán, hijo de Carea, Seraías, hijo de Tanhumet netofatita, y Jaazanías, hijo de un maacateo, y sus hombres. \p \v 24 Gedalías les juró a ellos y sus hombres: No teman de los esclavos de los caldeos. Vivan en la tierra y sirvan al rey de Babilonia, y les irá bien. \p \v 25 Pero el mes séptimo aconteció que Ismael, hijo de Netanías, hijo de Elisama, de la descendencia real, fue con diez hombres y atacaron a Gedalías, y murió junto con los judíos y los caldeos que estaban con él en Mizpa. \v 26 Al levantarse todo el pueblo, desde el menor hasta el mayor, con los jefes de las tropas, salieron a Egipto por temor a los caldeos. \p \v 27 Aconteció a los 37 años del cautiverio de Joaquín, rey de Judá, a los 27 días del mes 12, que Evil-merodac, rey de Babilonia, en el primer año de su reinado, libertó a Joaquín, rey de Judá, y lo sacó de la cárcel. \v 28 Le habló con benevolencia y colocó su trono más alto que los tronos de los demás reyes vasallos que estaban en Babilonia. \v 29 Cambió las ropas de su prisión, y comió pan en su presencia todos los días de su vida. \v 30 En cuanto a su alimentación, le fue dada una ración normal de parte del rey, cada cosa en su día, todos los días de su vida.