\id 2CH \ide UTF-8 \h 2 Crónicas \toc3 2 Cr \toc2 2 Crónicas \toc1 Segundo libro de las Crónicas \mt 2 Crónicas \c 1 \s1 Reinado de Salomón en Israel \p \v 1 Salomón, hijo de David, se estableció firmemente en su reino, pues \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* estaba con él y lo exaltó muchísimo. \p \v 2 Salomón habló a todo Israel: a los jefes de millares y centenas, a los jueces y a todos los jefes de todo Israel, jefes de sus casas paternas. \p \v 3 Salomón y toda la congregación fueron al lugar alto que estaba en Gabaón, porque allí estaba el Tabernáculo de Reunión de \nd ʼElohim\nd*, que Moisés, esclavo de \nd Yavé\nd*, hizo en el desierto. \v 4 Pues David subió el Arca de \nd ʼElohim\nd* de Quiriat-jearim al lugar que le preparó, porque le levantó una tienda en Jerusalén. \v 5 El altar de bronce que hizo Bezaleel, hijo de Uri, hijo de Hur, estaba allí delante del Tabernáculo de \nd Yavé\nd*. \p Salomón y la congregación fueron a consultarle. \v 6 Salomón subió allá ante \nd Yavé\nd* al altar de bronce que estaba en el Tabernáculo de Reunión, y ofreció sobre él 1.000 holocaustos. \p \v 7 Aquella noche \nd ʼElohim\nd* se apareció a Salomón y le dijo: \wj Pide lo que quieras que Yo te dé.\wj* \p \v 8 Salomón respondió a \nd ʼElohim\nd*: Tú mostraste gran misericordia a mi padre David y me constituiste rey en su lugar. \v 9 Ahora, oh \nd Yavé ʼElohim\nd*, sea confirmada tu Palabra que diste a David mi padre, pues Tú me designaste rey de un pueblo tan numeroso como el polvo de la tierra. \v 10 Dame sabiduría y conocimiento para que yo salga y entre delante de este pueblo, porque ¿quién puede juzgar a este pueblo tuyo tan grande? \p \v 11 \nd ʼElohim\nd* respondió a Salomón: \wj Porque tuviste esto en mente, y no pediste riquezas, ni posesiones, ni honor, ni la vida de los que te aborrecen, ni siquiera pediste larga vida, sino pediste para ti sabiduría y conocimiento para juzgar a mi pueblo sobre el cual te designé rey,\wj* \v 12 \wj se te dan sabiduría y conocimiento. Te daré riquezas, posesiones y honor, tales como ningún rey los tuvo hasta ahora, ni los tendrá después de ti.\wj* \p \v 13 Salomón regresó a Jerusalén después de estar en el Tabernáculo de Reunión en el lugar alto de Gabaón y comenzó a reinar en Israel. \p \v 14 Salomón reunió carruajes de guerra y jinetes. Tuvo 1.400 carruajes de guerra y 12.000 jinetes que situó en las ciudades de los carruajes y en Jerusalén cerca del rey. \p \v 15 El rey logró que la plata y el oro fueran como las piedras en Jerusalén, y que el cedro fuera tan abundante como los sicómoros de la Sefela.\f + \fr 1.15 \fr*\ft Sefela. Territorio que va descendiendo de la región montañosa de Judea y llega hasta la tierra baja costera del Jordán.\ft*\f* \v 16 Los caballos de Salomón eran de Egipto. Los mercaderes del rey los compraban por manadas. \v 17 Llevaban de Egipto un carruaje por 600 piezas de plata, y un caballo por 150. Por medio de ellos también los adquirían todos los reyes de los hititas y los reyes de Siria. \c 2 \s1 Preparativos para la Casa de \nd ʼElohim\nd* \p \v 1 Salomón se propuso edificar una Casa al Nombre de \nd Yavé\nd* y un palacio real para él. \v 2 Salomón designó 70.000 cargadores y 80.000 canteros para labrar piedras en la región montañosa, y 3.600 supervisores. \p \v 3 Salomón envió a decir a Hiram, rey de Tiro: Haz conmigo como hiciste con mi padre David, al enviarle cedros para que edificara una casa para vivir. \p \v 4 Ciertamente yo voy a edificar una Casa al Nombre de \nd Yavé\nd* mi \nd ʼElohim\nd* para consagrarla a Él y quemar incienso aromático ante Él para la presentación continua de los panes, para los holocaustos de la mañana, la llegada de la noche, los holocaustos de los sábados, las lunas nuevas y las fiestas solemnes de \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd*, lo cual se hará perpetuamente en Israel. \p \v 5 La Casa que voy a edificar es grande, pues nuestro \nd ʼElohim\nd* es más grande que todos los \tl ʼelohim\tl*. \v 6 Pero ¿quién será capaz de edificarle Casa, cuando el cielo y el más alto cielo no lo pueden contener? ¿Quién soy yo para que le edifique Casa, sino solo para quemar incienso ante Él? \p \v 7 Ahora pues, envíame un hombre hábil para trabajar en oro, plata, bronce, hierro, \add tela de\add* púrpura, carmesí y azul, y que sepa cómo hacer grabados para que trabaje con los expertos que están conmigo en Judá y Jerusalén, a quienes mi padre David contrató. \p \v 8 Envíame también cedros, cipreses y sándalos del Líbano. Ciertamente mis esclavos irán con los tuyos porque yo sé que tus esclavos saben talar los árboles del Líbano \v 9 a fin de preparar madera en abundancia, porque la Casa que tengo que edificar será grande y portentosa. \p \v 10 Mira, para el sustento de tus esclavos que cortan y labran la madera doy 4.400.000 litros de trigo, 4.400.000 litros de cebada, 440.000 litros de vino y 440.000 litros de aceite. \p \v 11 Hiram, rey de Tiro, respondió en una carta que envió a Salomón: A causa del amor de \nd Yavé\nd* por su pueblo, te designó rey. \p \v 12 Y Hiram añadió: ¡Bendito sea \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, Quien hizo el cielo y la tierra, Quien dio al rey David un hijo sabio, dotado de discreción y entendimiento, quien edificará una Casa para \nd Yavé\nd* y un palacio real para él! \p \v 13 Yo, pues, te envío a Hiram-abí, hombre hábil dotado de entendimiento, \v 14 hijo de una mujer de las hijas de Dan, y su padre es de Tiro. Él sabe trabajar en oro, plata, bronce, hierro, piedra, madera, y \add tela de\add* púrpura, azul, carmesí y lino fino. Puede hacer toda clase de grabados y ejecutar cualquier proyecto que le sea encomendado, quien se podrá colocar entre tus peritos y los peritos de mi \tl ʼadón\tl* David, tu padre. \p \v 15 En cuanto al trigo, la cebada, el aceite y el vino de los cuales mi \tl ʼadón\tl* habló, entréguelos a sus esclavos, \v 16 y nosotros mismos talaremos árboles del Líbano de acuerdo con todas tus necesidades. Te los llevaremos en balsas por mar a Jope, y tú los subirás a Jerusalén. \p \v 17 Salomón contó todos los extranjeros que estaban en la tierra de Israel, según el censo que hizo su padre David. Se halló que había 153.600. \v 18 Designó a 70.000 de ellos como cargadores, a 80.000 para tallar piedras en la región montañosa y a 3.600 supervisores para vigilar la labor de la gente. \c 3 \s1 Construcción de la Casa de \nd Yavé\nd* \p \v 1 Salomón comenzó a edificar la Casa de \nd Yavé\nd* en Jerusalén, en la montaña Moriah, donde \add Él\add* se apareció a su padre David en el lugar que David preparó en la era de Ornán jebuseo. \v 2 A los dos días del mes segundo, el año cuarto de su reinado, comenzó a edificar. \p \v 3 Estas son las medidas prescritas a Salomón para los cimientos de la Casa de \nd ʼElohim\nd*: La longitud en codos,\f + \fr 3.3 \fr*\ft Codo: 45 centímetros.\ft*\f* según la medida antigua, era de 27 metros, y la anchura, de nueve metros. \v 4 El patio que estaba adelante tenía la longitud según la anchura de la Casa, nueve metros, y la altura, nueve metros. Lo recubrió de oro puro por dentro. \p \v 5 La sala principal la cubrió con madera de ciprés y la recubrió de oro de buena calidad. La realzó con palmeras y cadenas. \v 6 Para adornarla, cubrió la Casa de piedras preciosas. El oro era de Parvaim. \v 7 Recubrió con oro las vigas, las entradas, las paredes y las puertas de la Casa. Talló querubines en las paredes. \p \v 8 Construyó el Lugar Santísimo cuya longitud era de nueve metros, según la anchura de la Casa. Lo recubrió con 19,8 toneladas de oro fino. \v 9 El peso de los clavos fue 550 gramos de oro. También recubrió de oro los aposentos. \p \v 10 Dentro del Lugar Santísimo hizo dos querubines de madera y los recubrió de oro. \v 11 Las alas de los querubines tenían nueve metros de longitud. Cada ala tenía 2,25 metros de longitud. Cada querubín tocaba la pared de la Casa con un ala, y con la otra al otro querubín. \v 12 El otro querubín tenía la misma posición por el otro lado. \v 13 Las alas de estos querubines se extendían nueve metros. Ellos estaban en pie, con sus rostros vueltos hacia el Lugar Santísimo. \p \v 14 Hizo también el velo \add de tela\add* azul, púrpura, carmesí y lino fino. Bordó querubines sobre él. \p \v 15 Delante de la Casa hizo también las dos columnas de 15,75 metros de altura, las cuales tenían arriba capiteles de 2,25 metros. \v 16 Hizo cadenillas como collares y las colocó en la parte superior de las columnas. Hizo 100 granadas y las colocó en las cadenillas. \v 17 Puso las columnas delante del Templo, una a la derecha y otra a la izquierda. Llamó la de la derecha Jaquín y la de la izquierda Boaz. \c 4 \s1 Mobiliario de la Casa \p \v 1 Hizo el altar de bronce de nueve metros de longitud y de anchura, y 4,5 metros de altura. \v 2 Hizo también el mar circular de fundición de 4,5 metros de borde a borde, 2,25 metros de alto y 13,5 metros de circunferencia. \v 3 Debajo del mar había figuras de calabazas, diez por cada 45 centímetros alrededor. Eran dos hileras de calabazas fundidas juntamente con el mar. \p \v 4 Estaba asentado sobre 12 bueyes: tres miraban al norte, tres al occidente, tres al sur, y tres al oriente. El mar estaba asentado sobre ellos, y todas sus ancas estaban hacia adentro. \v 5 El mar tenía 7,5 centímetros de espesor. Su borde tenía la forma como el borde de una copa, como una flor de lirio. Su capacidad era de 66.000 litros. \p \v 6 También hizo diez piletas, cinco al sur y cinco al norte, para lavar y limpiar en ellas lo que se ofrecía en holocausto. Pero el mar era para que los sacerdotes se lavaran en él. \p \v 7 Hizo los diez candelabros de oro, según lo prescrito con respecto a ellos. Los puso en el Santuario, cinco a la derecha y cinco a la izquierda. \p \v 8 Hizo diez mesas y las puso en el Templo, cinco a la derecha y cinco a la izquierda. También hizo 100 tazones de oro. \p \v 9 Además hizo el patio de los sacerdotes y el gran patio con sus puertas. Recubrió las puertas de ambos de bronce. \v 10 Puso el mar en la esquina sureste de la Casa. \p \v 11 También hizo los calderos, las palas y los tazones. \p Hiram terminó de realizar la obra que hizo para el rey Salomón en la Casa de \nd ʼElohim\nd*: \v 12 las dos columnas, y de la parte superior de las columnas, los collares para los dos capiteles y las dos redes que cubrían los dos capiteles, \v 13 y las 400 granadas para las dos redes: dos hileras de granadas por cada red para cubrir las dos esferas de los capiteles que estaban en la parte superior de las columnas. \p \v 14 Hizo también las basas y puso las piletas sobre ellas, \v 15 el mar con los 12 bueyes debajo de él, \v 16 los calderos, las palas y los tenedores. \p Todos estos utensilios destinados a la Casa de \nd Yavé\nd* que Hiram-abí hizo para el rey Salomón eran de bronce abrillantado. \v 17 El rey los fundió en tierra arcillosa en la llanura del Jordán, entre Sucot y Seredata. \v 18 Salomón hizo tan gran cantidad de estos utensilios que nunca pudo ser averiguado el peso del bronce. \p \v 19 El rey hizo todos los utensilios para la Casa de \nd ʼElohim\nd*, el altar de oro, las mesas sobre las cuales se ponían los Panes de la Presencia, \v 20 y los candelabros con sus lámparas de oro puro para que las encendieran delante del Lugar Santísimo de la manera prescrita. \p \v 21 Las flores, las lámparas y las tenazas se hicieron de oro purísimo. \v 22 Las despabiladeras, los tazones para lavar, las cucharas y los incensarios eran de oro puro. La entrada de la Casa, las puertas interiores de acceso al Lugar Santísimo y las puertas de entrada al salón principal del Templo \add también\add* eran de oro. \c 5 \s1 Traslado del Arca \p \v 1 Así se terminó la obra que Salomón hizo para la Casa de \nd Yavé\nd*. Salomón introdujo los objetos que su padre David consagró: la plata, el oro y todos los utensilios. Los depositó en el tesoro de la Casa de \nd ʼElohim\nd*. \p \v 2 Después Salomón reunió en Jerusalén a los ancianos de Israel, todos los jefes de las tribus y los jefes de casas paternas de los hijos de Israel para subir el Arca del Pacto de \nd Yavé\nd* desde la Ciudad de David, la cual es Sion. \v 3 Todos los hombres de Israel se congregaron ante el rey en la solemnidad del mes séptimo. \p \v 4 Cuando todos los ancianos de Israel llegaron, los levitas alzaron el Arca. \v 5 Los sacerdotes levitas subieron el Arca, el Tabernáculo de Reunión y todos los utensilios sagrados que había dentro del Tabernáculo. \v 6 El rey Salomón y toda la congregación de Israel que se reunió con él delante del Arca sacrificaron ovejas y becerros, los cuales, a causa de su gran cantidad no se pudieron contar ni calcular. \p \v 7 Entonces los sacerdotes introdujeron el Arca del Pacto de \nd Yavé\nd* a su puesto en el Lugar Santísimo de la Casa debajo de las alas de los querubines, \v 8 porque los querubines extienden las alas sobre el lugar del Arca, de modo que los querubines cubren el Arca y sus varas por encima. \v 9 Aunque las varas eran tan largas que los extremos de ellas se podían ver desde el Lugar Santo que está frente al Lugar Santísimo, no podían verse desde afuera. Y así están hasta hoy. \p \v 10 Dentro del Arca no había sino las dos tablas que Moisés puso allí en Horeb, donde \nd Yavé\nd* pactó con los hijos de Israel después que salieron de Egipto. \p \v 11 Aconteció que cuando los sacerdotes salían del Santuario (porque todos los sacerdotes presentes se purificaron sin tener en cuenta las clases), \v 12 y todos los levitas cantores, Asaf, Hemán y Jedutún, con sus hijos y hermanos, cubiertos con lino fino, estaban en pie con címbalos, salterios y arpas al oriente del altar, y con ellos 120 sacerdotes que tocaban trompetas, \v 13 los trompetistas y los cantores se unieron para proclamar a una voz. Alababan y daban gracias a \nd Yavé\nd*. \p Al alzar la voz con las trompetas, los címbalos y los otros instrumentos musicales, alababan a \nd Yavé\nd*: Porque es bueno, porque para siempre es su misericordia, una nube llenó la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 14 Los sacerdotes no pudieron continuar ministrando por causa de la nube, porque la gloria de \nd Yavé\nd* llenó la Casa de \nd ʼElohim\nd*. \c 6 \s1 Dedicación del Templo \p \v 1 Entonces Salomón dijo: \nd Yavé\nd* dijo que Él moraría en densa oscuridad. \v 2 Yo te edifiqué una Casa sublime, un lugar donde mores para siempre. \p \v 3 Toda la congregación de Israel se mantenía en pie. El rey volvió su rostro y bendijo a toda la congregación de Israel: \v 4 Bendito sea \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, Quien cumplió con su mano lo que habló con su boca a mi padre David, al decir: \v 5 \wj Desde el día cuando saqué a mi pueblo de la tierra de Egipto, no escogí ninguna ciudad de entre las tribus de Israel para edificar una Casa donde esté mi Nombre, ni escogí a algún hombre para que sea caudillo de mi pueblo Israel. \wj* \v 6 \wj Pero escogí a Jerusalén para que mi Nombre more allí, y escogí a David para que fuera rey de mi pueblo Israel. \wj* \p \v 7 El anhelo de edificar una Casa al Nombre de \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel estuvo en el corazón de mi padre David. \v 8 Pero \nd Yavé\nd* dijo a mi padre David: \wj Bien hiciste al tener en tu corazón edificar Casa a mi Nombre, porque tuviste esto en tu corazón, \wj* \v 9 \wj pero tú no edificarás la Casa, sino tu hijo edificará la Casa a mi Nombre. \wj* \p \v 10 \nd Yavé\nd* cumplió su Palabra, pues yo me levanté en lugar de mi padre David y me senté en el trono de Israel, tal como \nd Yavé\nd* habló, y edifiqué la Casa al Nombre de \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel. \v 11 Puse allí el Arca en la cual está el Pacto que \nd Yavé\nd* hizo con los hijos de Israel. \p \v 12 Entonces Salomón se levantó en pie delante del altar de \nd Yavé\nd* frente a la congregación de Israel y extendió sus manos. \v 13 Salomón había hecho una plataforma de bronce y la puso en medio del patio. Tanto su longitud como su anchura eran de 2,25 metros y su altura 1,35 metros. Se levantó sobre ella, se arrodilló delante de toda la congregación de Israel, extendió sus manos al cielo y dijo: \p \v 14 Oh \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, no hay \nd ʼElohim\nd* como Tú en el cielo ni en la tierra. Tú guardas el Pacto y la misericordia a tus esclavos que andan delante de Ti con todo su corazón. \v 15 Tú cumpliste lo que prometiste a tu esclavo David, mi padre. Cumpliste con tu mano lo que prometiste con tu boca como se ve hoy. \p \v 16 Ahora pues, oh \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, cumple lo que le prometiste a tu esclavo David, mi padre: \wj No te faltará varón que se siente en el trono de Israel delante de Mí, con tal que tus hijos guarden su camino para andar en mi Ley, como tú anduviste delante de Mí.\wj* \p \v 17 Ahora pues, oh \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, te ruego que sea confirmada tu Palabra que hablaste a tu esclavo David. \p \v 18 Pero, ¿en verdad \nd ʼElohim\nd* morará con el hombre en la tierra? Ciertamente el cielo y el más alto cielo no te pueden contener, ¡cuánto menos esta Casa que edifiqué! \v 19 Sin embargo, oh \nd Yavé ʼElohim\nd* mío, Tú prestarás atención a la oración de tu esclavo y su súplica, para oír el clamor y la oración que tu esclavo presenta ante Ti, \v 20 a fin de que tus ojos estén abiertos hacia esta Casa día y noche, hacia el lugar del cual dijiste que pondrías allí tu Nombre para escuchar la oración que tu esclavo haga hacia este lugar. \v 21 Tú escucharás las súplicas de tu esclavo y de tu pueblo Israel cuando oren hacia este lugar. Escucha Tú desde el lugar de tu morada en el cielo, y cuando escuches, perdona. \p \v 22 Cuando un hombre peque contra otro, y se le exija juramento, y entre en esta Casa para jurar ante tu altar, \v 23 escucha Tú desde el cielo, actúa y juzga a tus esclavos, condena al perverso, para que caiga su conducta sobre su propia cabeza y justifica al justo, a fin de retribuirle según su justicia. \p \v 24 Cuando tu pueblo Israel sea derrotado por el enemigo porque pecó contra Ti, si ellos se vuelven a Ti, confiesan tu Nombre, oran y te suplican en esta Casa, \v 25 escucha Tú desde el cielo, perdona el pecado de tu pueblo Israel, y devuélvelos a la tierra que les diste a ellos y a sus antepasados. \p \v 26 Cuando los cielos estén cerrados y no caiga lluvia porque ellos pecaron contra Ti, si oran hacia este lugar, confiesan tu Nombre y se devuelven de su pecado por el cual los afligiste, \v 27 escucha Tú desde el cielo y perdona el pecado de tus esclavos y de tu pueblo Israel. Ciertamente, enséñales el buen camino por el cual deben andar y dales lluvia sobre tu tierra que diste a tu pueblo como herencia. \p \v 28 Cuando venga hambruna en la tierra, cuando haya pestilencia, honguillo o parásito, saltamontes o pulgón, o cuando sus enemigos lo acosen en sus propias puertas, cualquiera que sea la plaga o la enfermedad, \v 29 toda oración o toda súplica que haga cualquier persona de todo tu pueblo Israel, y reconozca cada uno su aflicción y su dolor y extiendan sus manos hacia esta Casa, \v 30 escucha Tú desde el cielo, el lugar de tu morada, y perdona. \p Retribuye conforme a todos sus procedimientos a cada uno cuyo corazón Tú conoces, porque solo Tú conoces el corazón de los hijos de hombres, \v 31 para que te teman y anden en tus caminos todos los días que vivan en la tierra que Tú diste a nuestros antepasados. \p \v 32 También con respecto al extranjero que no es de tu pueblo Israel, cuando venga de una tierra lejana por causa de tu gran Nombre, tu poderosa mano y tu brazo extendido, y venga y ore hacia esta Casa, \v 33 escucha Tú desde el cielo, desde tu morada. Haz según todo lo que el extranjero te pida, para que todos los pueblos de la tierra conozcan tu Nombre, te teman como tu pueblo Israel y sepan que a tu Nombre está consagrada esta Casa. \p \v 34 Cuando tu pueblo salga a la batalla contra sus enemigos, cualquiera que sea el camino en el cual lo envíes, y ore a Ti hacia esta ciudad que escogiste, hacia la Casa que construí a tu Nombre, \v 35 escucha Tú desde el cielo su oración y su súplica, y ampara su causa. \p \v 36 Cuando pequen contra Ti, porque no hay hombre que no peque, y Tú, airado contra ellos, los entregues al enemigo, y sus captores los lleven cautivos a una tierra lejana o cercana, \v 37 si en la tierra adonde sean llevados cautivos ellos recapacitan, y en su cautiverio se arrepienten y te suplican, y dicen: Pecamos, hicimos iniquidad, actuamos perversamente; \v 38 si en la tierra de su cautiverio adonde fueron llevados cautivos, ellos se devuelven a Ti con todo su corazón y toda su alma, y oran a Ti en dirección a la tierra que diste a sus antepasados, hacia la ciudad que Tú escogiste, hacia la Casa que construí a tu Nombre, \v 39 escucha Tú desde el cielo su oración y sus súplicas, el lugar de tu morada, ampara su causa y perdona a tu pueblo que pecó contra Ti. \p \v 40 Ahora pues, oh \nd ʼElohim\nd* mío, te ruego que tus ojos estén abiertos y tus oídos atentos a la oración que se eleva en este lugar. \v 41 Entonces, ¡levántate, oh \nd Yavé ʼElohim\nd*, a morar en tu reposo, Tú y el Arca de tu poder! ¡Vístanse de salvación tus sacerdotes, oh \nd Yavé ʼElohim\nd*, y regocíjense tus santos en tu bondad! \v 42 ¡Oh \nd Yavé ʼElohim\nd*, no rechaces a tu ungido! Acuérdate de tus misericordias hacia tu esclavo David. \c 7 \s1 Solemnidades de la dedicación del Templo \p \v 1 Cuando Salomón terminó de orar, descendió fuego del cielo y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria de \nd Yavé\nd* llenó la Casa. \p \v 2 Los sacerdotes no pudieron entrar en la Casa de \nd Yavé\nd*, porque la gloria de \nd Yavé\nd* la llenó. \v 3 Todos los hijos de Israel, al ver que descendió el fuego y la gloria de \nd Yavé\nd* sobre la Casa, se inclinaron rostro en tierra sobre el pavimento, adoraron y alabaron a \nd Yavé\nd*: ¡Porque Él es bueno, porque para siempre es su misericordia! \p \v 4 Entonces el rey y todo el pueblo ofrecieron sacrificios delante de \nd Yavé\nd*. \v 5 El rey Salomón ofreció en sacrificio 22.000 becerros y 120.000 ovejas. El rey y todo el pueblo dedicaron la Casa de \nd ʼElohim\nd*. \p \v 6 Los sacerdotes estaban en pie en sus puestos. Los levitas tenían los instrumentos de música de \nd Yavé\nd* que el rey David hizo para alabar a \nd Yavé\nd*, porque para siempre es su misericordia. Cada vez que él alababa por medio de ellos, los sacerdotes los acompañaban y tocaban las trompetas, y todo Israel permanecía en pie. \p \v 7 Salomón también consagró el interior del patio que estaba delante de la Casa de \nd Yavé\nd*, por cuanto allí ofreció los holocaustos y la grasa de las ofrendas de paz, porque el altar de bronce que Salomón hizo no podía contener el holocausto, la ofrenda vegetal y la grasa. \p \v 8 Salomón mantuvo la solemnidad durante siete días, y todo Israel con él, una congregación muy grande, procedente desde la entrada de Hamat hasta el torrente de Egipto. \s1 La asamblea solemne del octavo día \p \v 9 Al octavo día hicieron una asamblea solemne, porque celebraron la dedicación del Altar en siete días. Celebraron la solemnidad en siete días. \v 10 El día 23 del mes séptimo envió al pueblo a sus tiendas con regocijo y alegría de corazón por la bondad que \nd Yavé\nd* mostró a David, a Salomón y a su pueblo Israel. \p \v 11 De esta manera Salomón terminó la Casa de \nd Yavé\nd* y el palacio real. En todo lo que vino al corazón de Salomón para hacer en la Casa de \nd Yavé\nd* y su propio palacio, fue prosperado. \s1 Respuesta de \nd Yavé\nd* a la oración de Salomón \p \v 12 \nd Yavé\nd* apareció a Salomón de noche y le dijo: \wj Escuché tu oración y escogí este lugar para Mí como Casa de sacrificio.\wj* \v 13 \wj Si Yo cierro los cielos para que no llueva, si mando el saltamontes a devorar la tierra, o si envío pestilencia entre mi pueblo,\wj* \v 14 \wj y se humilla mi pueblo sobre el cual es invocado mi Nombre, oran, buscan mi rostro y se convierten de sus malos caminos, Yo escucharé desde el cielo, perdonaré sus pecados y sanaré su tierra.\wj* \v 15 \wj Mis ojos estarán abiertos y mis oídos atentos a la oración en este lugar.\wj* \p \v 16 \wj Ahora elegí y santifiqué esta Casa para que mi Nombre esté allí para siempre, y mis ojos y mi corazón estén allí todos los días.\wj* \p \v 17 \wj En cuanto a ti, si andas delante de Mí como anduvo tu padre David, haces según todo lo que te mandé y guardas mis Estatutos y mis Decretos,\wj* \v 18 \wj Yo afirmaré el trono de tu reino como pacté con tu padre David: No te faltará varón que gobierne en Israel.\wj* \p \v 19 \wj Pero si ustedes se apartan y abandonan mis Estatutos y mis Mandamientos que puse ante ustedes, sirven a otros \+tl ʼelohim\+tl* y se postran ante ellos,\wj* \v 20 \wj Yo los arrancaré de mi tierra que les di y echaré de mi Presencia esta Casa que santifiqué a mi Nombre. La colocaré como refrán y escarnio entre todas las naciones.\wj* \p \v 21 \wj Y \+add en cuanto a\+add* esta Casa, que es tan excelsa, todo el que pase cerca de ella quedará asombrado y dirá: ¿Por qué \+nd Yavé\+nd* hizo esto a esta tierra y esta Casa?\wj* \p \v 22 \wj Y responderán: Porque abandonaron a \+nd Yavé\+nd*, el \+nd ʼElohim\+nd* de sus antepasados, Quien los sacó de la tierra de Egipto, se aferraron a otros \+tl ʼelohim\+tl*, se postraron ante ellos, y les sirvieron. Por eso trajo sobre ellos todo este mal.\wj* \c 8 \s1 Otras obras de Salomón \p \v 1 Después de 20 años, durante los cuales Salomón construyó la Casa de \nd Yavé\nd* y su propio palacio, \v 2 Salomón reedificó las ciudades que Hiram le entregó, y estableció en ellas a los hijos de Israel. \p \v 3 Después Salomón fue a Hamat de Soba y se apoderó de ella. \v 4 Reedificó también Tadmor en la región despoblada, y todas las ciudades de almacenamiento que edificó en Hamat. \v 5 Además reedificó la Bet-horón de arriba y la Bet-horón de abajo, ciudades fortificadas, con muros, puertas y barras. \v 6 \add Reedificó\add* Baalat, todas las ciudades de almacenamiento que Salomón tenía, todas las de los carruajes, las de los jinetes, todo lo que Salomón se propuso edificar en Jerusalén, el Líbano y toda la tierra que estaba bajo su dominio. \p \v 7 De todo el pueblo que quedó de los heteos, amorreos, ferezeos, heveos y jebuseos, quienes no eran de Israel, \v 8 cuyos descendientes quedaron después de ellos en la tierra, a quienes los hijos de Israel no expulsaron totalmente, Salomón los sometió a trabajos forzados hasta hoy. \p \v 9 Pero Salomón no sometió a alguno de los hijos de Israel a servidumbre para su obra. Ellos eran hombres de guerra, sus capitanes escogidos, los comandantes de sus carruajes y jinetes. \v 10 Estos eran los principales oficiales del rey Salomón. Eran 250 quienes ejercían autoridad sobre la gente. \p \v 11 Salomón llevó a la hija de Faraón de la Ciudad de David al palacio que construyó para ella, pues dijo: Mi esposa no vivirá en la Casa de David, rey de Israel, porque aquellas habitaciones en las que entró el Arca de \nd Yavé\nd* son sagradas. \p \v 12 Entonces Salomón ofreció holocaustos a \nd Yavé\nd* sobre el altar de \nd Yavé\nd* que edificó en el patio, \v 13 según lo prescrito para cada día por mandato de Moisés, para ofrecerlos los sábados, en las lunas nuevas y los tiempos señalados, y tres veces al año: en la fiesta de los Panes sin Levadura, la fiesta de Las Semanas y la fiesta de Las Cabañas. \p \v 14 También estableció las clases sacerdotales en sus servicios según la ordenanza de su padre David, a los levitas en sus funciones para alabar y ministrar ante los sacerdotes según lo prescrito para cada día, y los porteros para cada puerta según sus grupos, porque así lo ordenó David, varón de \nd ʼElohim\nd*. \v 15 No se apartaron del mandato del rey en cuanto a los sacerdotes y a los levitas en ningún asunto, incluso en el de los tesoros. \p \v 16 Toda la obra de Salomón fue ejecutada desde el día cuando los cimientos de la Casa de \nd Yavé\nd* fueron puestos hasta acabarla. Y quedó terminada la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 17 Entonces Salomón fue a Ezión-geber y Eilat, a la costa del mar en la tierra de Edom, \v 18 porque Hiram envió por medio de sus esclavos naves y marineros diestros en el mar, quienes fueron con los esclavos de Salomón a Ofir. Tomaron de allá 14,8 toneladas de oro y los llevaron al rey Salomón. \c 9 \s1 Una visita de la reina de Sabá a Salomón \p \v 1 Cuando la reina de Sabá oyó la fama de Salomón, fue a Jerusalén para probar a Salomón con preguntas difíciles. Ella llegó con un gran séquito, con camellos cargados de especias, oro en gran abundancia y piedras preciosas. Al llegar ante Salomón, habló con él de todo lo que tenía en su mente. \v 2 Salomón respondió todas sus preguntas. No hubo algo tan difícil que Salomón no pudiera explicarle. \p \v 3 Cuando la reina de Sabá probó la sabiduría de Salomón y vio el palacio que edificó, \v 4 los manjares de su mesa, las habitaciones de sus oficiales y sus ropas, la atención de sus ministros y sus ropas, los holocaustos que ofrecía en la Casa de \nd Yavé\nd* y la escalinata que subía a la Casa de \nd Yavé\nd*, quedó pasmada. \p \v 5 Dijo al rey: ¡Es verdad lo que oí en mi tierra con respecto a tus hechos y a tu sabiduría! \v 6 Sin embargo, yo no creía sus informes, hasta cuando vine y vi con mis propios ojos. Ciertamente no me fue contada ni la mitad de la grandeza de tu sabiduría. ¡Tú excedes a la fama que yo oí! \v 7 ¡Dichosos tus hombres y estos ministros tuyos que de continuo están en tu presencia y oyen tu sabiduría! \v 8 ¡Bendito sea \nd Yavé\nd* tu \nd ʼElohim\nd*, que se agradó de ti para colocarte en su trono como rey por \nd Yavé\nd* tu \nd ʼElohim\nd*! Porque tu \nd ʼElohim\nd* ama a Israel y para afirmarlo perpetuamente, te proclamó como su rey para que practiques justicia y equidad. \p \v 9 Ella obsequió al rey cuatro toneladas de oro y gran cantidad de especias aromáticas y piedras preciosas. Nunca hubo especias aromáticas como las que la reina de Sabá trajo al rey Salomón. \p \v 10 Los esclavos de Hiram y los esclavos de Salomón que llevaban oro de Ofir también llevaban madera de sándalo y piedras preciosas. \v 11 El rey hizo gradas con la madera de sándalo para la Casa de \nd Yavé\nd* y el palacio real, y arpas y salterios para los cantores. Nunca se vio madera como esa en la tierra de Judá. \p \v 12 El rey Salomón obsequió a la reina de Sabá todo cuanto ella quiso y le pidió, más de lo que ella llevó al rey. Después ella regresó a su tierra con sus esclavos. \p \v 13 El oro que le llegaba a Salomón cada año pesaba 22 toneladas, \v 14 aparte de lo que aportaban los mercaderes y los comerciantes. También todos los reyes de Arabia y los gobernadores de la tierra llevaban oro y plata a Salomón. \p \v 15 Además el rey Salomón hizo 200 escudos grandes de oro martillado. Empleó 6,6 kilogramos de oro martillado en cada escudo \v 16 e \add hizo\add* 300 escudos pequeños de oro martillado. En cada uno de éstos emplearon 3,3 kilogramos de oro. El rey colocó los escudos en la casa del bosque del Líbano. \p \v 17 El rey también hizo un gran trono de marfil y lo recubrió con oro puro. \v 18 El trono tenía seis gradas con una tarima pequeña de oro fijada a él para los pies, brazos a uno y otro lado del asiento, y dos leones que estaban junto a los brazos. \v 19 De la misma manera, a ambos lados estaban colocados 12 leones sobre las seis gradas. Jamás se hizo algo semejante para algún otro reino. \p \v 20 Todos los vasos de beber del rey Salomón eran de oro puro, y también todos los objetos de la casa del bosque del Líbano. Nada era de plata, pues en el tiempo de Salomón ésta era considerada como nada. \v 21 Porque el rey poseía naves que iban a Tarsis con los esclavos de Hiram, y una vez cada tres años llegaban las naves de Tarsis con oro, plata, marfil, monos y pavos reales. \p \v 22 Así el rey Salomón se engrandeció más que todos los reyes de la tierra en riqueza y en sabiduría. \p \v 23 Todos los reyes de la tierra procuraban estar en presencia de Salomón para escuchar la sabiduría que \nd ʼElohim\nd* puso en su mente. \v 24 Año tras año cada uno llevaba su presente: objetos de plata, objetos de oro, ropas, armas, especias aromáticas, caballos y mulas. \p \v 25 Salomón poseía caballerizas para 4.000 caballos y carruajes, y 12.000 jinetes, los cuales instaló en las ciudades que tenía para sus carruajes y en Jerusalén cerca del rey. \v 26 Dominaba sobre todos los reyes desde el río Éufrates hasta la tierra de los filisteos y hasta la frontera de Egipto. \p \v 27 El rey acumuló plata en Jerusalén en abundancia como las piedras, y madera de cedro como los sicómoros de la Sefela. \v 28 De Egipto y de todas las tierras se importaban caballos para Salomón. \p \v 29 El resto de los hechos de Salomón, los primeros y los últimos, ¿no están escritos en las crónicas del profeta Natán, en la profecía de Ahías silonita, y en la visión del vidente Iddo contra Jeroboam, hijo de Nabat? \v 30 Salomón reinó 40 años en Jerusalén sobre todo Israel. \v 31 Salomón descansó con sus antepasados, y lo sepultaron en la Ciudad de su padre David. Reinó en su lugar su hijo Roboam. \c 10 \s1 División del reino \p \v 1 Entonces Roboam fue a Siquem, porque todo Israel había ido a Siquem para proclamarlo rey. \p \v 2 Sucedió que cuando lo oyó Jeroboam, hijo de Nabat, quien aún estaba en Egipto, adonde huyó de la presencia del rey Salomón, Jeroboam regresó de Egipto. \p \v 3 Mandaron a llamarlo. Jeroboam llegó con todo Israel para hablar a Roboam y dijo: \v 4 Tu padre agravó nuestro yugo. Ahora pues, busca que la dura servidumbre de tu padre y el pesado yugo que nos impuso sea más llevadero, y te serviremos. \p \v 5 Y les respondió: ¡Vuelvan a mí dentro de tres días! Y el pueblo se retiró. \p \v 6 El rey Roboam consultó a los ancianos que estuvieron delante de su padre Salomón cuando estaba vivo: ¿Cómo aconsejan que responda a este pueblo? \p \v 7 Y le respondieron: Si muestras buena voluntad a este pueblo, los complaces y les hablas buenas palabras, serán tus esclavos todos los días. \p \v 8 Pero \add Roboam\add* despreció el consejo que los ancianos le dieron, y consultó a los jóvenes que crecieron con él y estaban delante de él. \v 9 Y les preguntó: ¿Qué aconsejan ustedes que respondamos a este pueblo que me habló: Alivia el yugo que tu padre impuso sobre nosotros? \p \v 10 Los jóvenes que crecieron con él le respondieron: Dirás al pueblo que te habló: Tu padre hizo pesado nuestro yugo. Tú, pues, alivia nuestro yugo. Les dirás: Mi meñique es más grueso que la cintura de mi padre. \v 11 De modo que, si mi padre les impuso un yugo pesado, yo añadiré a su yugo. Mi padre los castigó con azotes, pero yo, con escorpiones. \p \v 12 Al tercer día Jeroboam y todo el pueblo fueron a Roboam, tal como el rey les habló: Vuelvan a mí al tercer día. \p \v 13 El rey les respondió duramente, pues el rey Roboam menospreció el consejo de los ancianos. \v 14 Les habló de acuerdo con el consejo de los jóvenes: Mi padre hizo pesado su yugo, pero yo añadiré a él. Mi padre los castigó con azotes, pero yo, con escorpiones. \p \v 15 Así que el rey no escuchó al pueblo, porque era designio de \nd ʼElohim\nd*, para que \nd Yavé\nd* cumpliera su Palabra dicha por medio de Ahías silonita a Jeroboam, hijo de Nabat. \p \v 16 Cuando todo Israel vio que el rey no los escucharía ni les pondría atención, respondió al rey: ¿Qué parte tenemos en David? ¡No tenemos herencia con el hijo de Isaí! ¡Israel, cada uno a sus tiendas! ¡David, cuida ahora tu propia casa! \p Y todo Israel se retiró a sus tiendas. \v 17 Pero Roboam reinó sobre los hijos de Israel que vivían en las ciudades de Judá. \p \v 18 Después el rey Roboam envió a Adoram, quien estaba a cargo del tributo laboral. Pero los hijos de Israel lo apedrearon, y murió. Entonces el rey Roboam se apresuró, subió en su carroza y huyó a Jerusalén. \v 19 De esta manera Israel se rebeló contra la casa de David hasta hoy. \c 11 \s1 Reinado de Roboam en Judá \p \v 1 Cuando Roboam llegó a Jerusalén congregó a 180.000 guerreros escogidos de las casas de Judá y de Benjamín para luchar contra Israel y restituir su reino. \p \v 2 Pero la Palabra de \nd Yavé\nd* llegó a Semaías, varón de \nd ʼElohim\nd*: \v 3 \wj Habla a Roboam, hijo de Salomón, rey de Judá, y a todos los israelitas que estén en Judá y Benjamín: \wj* \v 4 \wj \+nd Yavé\+nd* dijo: No suban ni luchen contra sus hermanos. Regrese cada uno a su casa, porque Yo hice esto.\wj* \p Y ellos escucharon la Palabra de \nd Yavé\nd*. Regresaron y no salieron contra Jeroboam. \p \v 5 Roboam vivió en Jerusalén y edificó ciudades para la defensa en Judá. \v 6 Edificó Belén, Etam, Tecoa, \v 7 Bet-sur, Soco, Adulam, \v 8 Gat, Maresa, Zif, \v 9 Adoraim, Laquis, Azeca, \v 10 Zora, Ajalón y Hebrón, ciudades fortificadas que están en Judá y Benjamín. \v 11 También reforzó las fortalezas. Colocó en ellas comandantes, almacenes de alimentos, aceite y vino. \v 12 En cada ciudad puso escudos y lanzas. Las reforzó muchísimo. Así retuvo a Judá y Benjamín. \p \v 13 Los sacerdotes y levitas que estaban en todo Israel se presentaron a \add Roboam\add*, \v 14 porque los levitas abandonaron sus campos y posesiones, y fueron a Judá y a Jerusalén. (Pues Jeroboam y sus hijos los destituyeron del ministerio como sacerdotes de \nd Yavé\nd*, \v 15 por cuanto él nombró sus propios sacerdotes para los lugares altos, los que actuaban como demonios y los becerros que hizo.) \p \v 16 Aquellos de todas las tribus de Israel que dedicaron su corazón a buscar a \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, siguieron a \add los sacerdotes y levitas\add* hasta Jerusalén para ofrecer sacrificios a \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \v 17 Fortalecieron el reino de Judá y apoyaron a Roboam, hijo de Salomón, durante tres años, pues anduvieron en el camino de David y Salomón por tres años. \p \v 18 Roboam tomó como esposa a Mahalata, hija de Jerimot, hijo de David y de Abihaíl, hija de Eliab, hijo de Isaí. \v 19 Ella le dio a luz estos hijos: Jeús, Semarías y Zaham. \v 20 Después de ella tomó a Maaca, hija de Absalón, la cual le dio a luz a Abías, Atai, Ziza y Selomit. \v 21 Roboam amó a Maaca, hija de Absalón, más que a todas sus esposas y concubinas. Tomó 18 esposas y 60 concubinas, y engendró 28 hijos y 60 hijas. \p \v 22 Roboam designó a Abías, hijo de Maaca, como jefe y príncipe entre sus hermanos, a fin de proclamarlo rey. \v 23 Al actuar con astucia, distribuyó a todos sus hijos por todas las tierras de Judá y Benjamín y por todas las ciudades fortificadas. Les dio alimento en abundancia y muchas mujeres. \c 12 \s1 Castigo para Roboam \p \v 1 Cuando el reino de Roboam se había afianzado y fortalecido, él abandonó la Ley de \nd Yavé\nd* y todo el pueblo con él. \p \v 2 Sucedió que en el año quinto del rey Roboam, por cuanto se rebeló contra \nd Yavé\nd*, Sisac, rey de Egipto, subió contra Jerusalén \v 3 con 1.200 carruajes de guerra y 60.000 jinetes. El ejército de libios, suquienos\f + \fr 12.3 \fr*\ft Suquienos: Soldados mercenarios de África Oriental, de la zona occidental del mar rojo.\ft*\f* y etíopes que iban con él desde Egipto era innumerable. \v 4 Tomó las ciudades fortificadas de Judá y llegó hasta Jerusalén. \p \v 5 Entonces el profeta Semaías fue a Roboam y a los jefes de Judá, que se reunieron en Jerusalén a causa de Sisac, y les dijo: \nd Yavé\nd* dice: \wj Ustedes me abandonaron. Yo también los abandono en manos de Sisac.\wj* \p \v 6 Pero los jefes de Israel y el rey se humillaron y dijeron: Justo es \nd Yavé\nd*. \p \v 7 Cuando \nd Yavé\nd* vio que se humillaron, la Palabra de \nd Yavé\nd* vino a Semaías: \wj Se humillaron, Por tanto, no los destruiré, sino les daré algún escape. Mi ira no se derramará contra Jerusalén por medio de Sisac.\wj* \v 8 \wj Pero serán sus esclavos, para que conozcan la diferencia entre servirme a Mí y servir a los reinos de las naciones.\wj* \p \v 9 Sisac, rey de Egipto, subió contra Jerusalén y tomó los tesoros de la Casa de \nd Yavé\nd* y la casa real. Se llevó todo y tomó los escudos de oro que hizo Salomón. \p \v 10 El rey Roboam los reemplazó por escudos de bronce y los entregó a los jefes de la guardia que custodiaba la entrada al palacio real. \v 11 Cuando el rey iba a la Casa de \nd Yavé\nd*, los guardias de la escolta iban y los llevaban, pero después los devolvían a la cámara de la guardia. \p \v 12 Cuando Roboam se humilló, la ira de \nd Yavé\nd* se apartó de él, de manera que no lo destruyó por completo. También en Judá las cosas iban bien. \p \v 13 El rey Roboam tenía 41 años cuando comenzó a reinar. Se fortaleció en Jerusalén, la ciudad que \nd Yavé\nd* escogió de entre todas las tribus de Israel para poner allí su Nombre. Reinó 17 años. El nombre de su madre fue Naama amonita. \v 14 Hizo lo malo, porque no dispuso su corazón para buscar a \nd Yavé\nd*. \p \v 15 Los hechos de Roboam, primeros y últimos, ¿no están escritos en los rollos del profeta Semaías y del vidente Iddo, según el registro genealógico? Todo el tiempo hubo guerra entre Roboam y Jeroboam. \v 16 Roboam descansó con sus antepasados y fue sepultado en la Ciudad de David. Su hijo Abías reinó en su lugar. \c 13 \s1 Reinado de Abías en Judá \p \v 1 El año 18 del rey Jeroboam, Abías comenzó a reinar en Judá. \v 2 Reinó tres años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Micaías, hija de Uriel, de Gabaa. \p Hubo guerra entre Abías y Jeroboam. \v 3 Abías comenzó la batalla con un ejército de 400.000 hombres escogidos, valientes guerreros. Jeroboam dispuso batalla contra él con 800.000 hombres escogidos, fuertes y valientes. \p \v 4 Abías se levantó en la montaña Zemaraim de Efraín y dijo: Escúchenme, Jeroboam y todo Israel: \v 5 ¿No saben ustedes que \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de Israel, dio a David el reino sobre Israel para siempre, a él y a sus hijos con un pacto de sal? \p \v 6 Sin embargo Jeroboam, hijo de Nabat, esclavo de Salomón, hijo de David, se levantó y se rebeló contra su \tl ʼadón\tl*. \v 7 Hombres ociosos perversos se agruparon con él. Se impusieron sobre Roboam, hijo de Salomón, cuando Roboam era joven y tímido, y no los resistió con firmeza. \p \v 8 Ahora ustedes quieren oponerse al reino de \nd Yavé\nd* que está en manos de los descendientes de David, porque son una gran multitud, y los becerros de oro que Jeroboam les hizo como \tl ʼelohim\tl* están con ustedes. \v 9 ¿No expulsaron ustedes a los sacerdotes de \nd Yavé\nd*, los hijos de Aarón y a los levitas, y designaron sacerdotes a la manera de los pueblos de otras tierras, para que cualquiera que sacrifique un becerro y siete carneros sea sacerdote de los que no son \nd ʼElohim\nd*? \p \v 10 En cuanto a nosotros, \nd Yavé\nd* es nuestro \nd ʼElohim\nd*, y no lo abandonamos. Los sacerdotes que ministran delante de \nd Yavé\nd* son hijos de Aarón, y los levitas atienden su obra. \v 11 Ellos ofrecen holocaustos e incienso aromático a \nd Yavé\nd* cada mañana y al llegar cada noche. Ponen los panes sobre la mesa limpia. Cada noche encienden el candelabro de oro con sus lámparas para que ardan, porque nosotros guardamos el mandato de \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd*. Pero ustedes lo abandonaron. \p \v 12 Ciertamente \nd ʼElohim\nd* está como Jefe con nosotros, y sus sacerdotes con las trompetas de júbilo para que resuenen contra ustedes. ¡Oh hijos de Israel, no luchen contra \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados, porque no prosperarán! \p \v 13 Pero Jeroboam dispuso una emboscada para llegar contra ellos por detrás. Así que ellos estaban frente a Judá, pero los de la tropa emboscada estaban por la retaguardia. \p \v 14 Cuando Judá dio vuelta, ciertamente eran atacados por el frente y por la retaguardia. Entonces clamaron a \nd Yavé\nd*, los sacerdotes tocaron las trompetas \v 15 y los hombres de Judá lanzaron el grito de guerra. Sucedió que cuando los hombres de Judá gritaron, \nd ʼElohim\nd* desbarató a Jeroboam y a todo Israel delante de Abías y de Judá. \p \v 16 Los hijos de Israel huyeron, porque \nd ʼElohim\nd* los entregó en mano de Judá. \v 17 Abías y su pueblo hicieron una gran matanza entre ellos. Cayeron en combate 500.000 hombres escogidos de Israel. \p \v 18 De esta manera los descendientes de Israel fueron humillados en aquel tiempo, pero los hijos de Judá prevalecieron porque se apoyaron en \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \p \v 19 Abías persiguió a Jeroboam y le tomó algunas ciudades, a Bet-ʼEl, a Jesana y a Efraín, cada una con sus aldeas. \v 20 Jeroboam no recuperó su poder en el tiempo de Abías. \nd Yavé\nd* lo hirió, y murió. \p \v 21 Abías se fortaleció. Tomó para él 14 esposas, y engendró 22 hijos y 16 hijas. \p \v 22 Los demás hechos de Abías, sus procedimientos y dichos, están escritos en el rollo del profeta Iddo. \c 14 \s1 Reinado de Asa en Judá \p \v 1 Abías descansó con sus antepasados y lo sepultaron en la Ciudad de David. Reinó en su lugar su hijo Asa. En su tiempo la tierra estuvo en paz durante diez años. \p \v 2 Asa hizo lo bueno y lo recto ante \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, \v 3 porque quitó los altares de culto extraño y los lugares altos, quebró las piedras rituales y destruyó los símbolos de Asera. \v 4 Mandó a Judá que buscara a \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados, y que practicara la Ley y sus Mandamientos. \v 5 Además quitó los lugares altos y las imágenes de todas las ciudades de Judá. En su reinado hubo paz. \p \v 6 También edificó ciudades fortificadas en Judá, porque había paz. No hubo guerra contra él en aquellos años, pues \nd Yavé\nd* le dio paz. \p \v 7 Así que \add el rey Asa\add* dijo a Judá: Edifiquemos estas ciudades y rodeémoslas con muros y torres, portones y barras, ya que la tierra aún es nuestra, porque buscamos a \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd*. Lo buscamos, y Él nos dio reposo por todas partes. Así que edificaron y prosperaron. \p \v 8 Asa tuvo un ejército de 300.000 hombres de Judá, quienes llevaban escudos y lanzas, y 280.000 de Benjamín, quienes llevaban escudos y tensaban arcos. Todos eran hombres valientes. \p \v 9 Zera, el etíope, salió contra ellos con un ejército de 1.000.000 de hombres y 300 carruajes, y llegó hasta Maresa. \v 10 Entonces Asa salió contra él. Dispusieron la batalla en el valle de Sefata, junto a Maresa. \p \v 11 Asa invocó a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*: ¡Oh \nd Yavé\nd*, no hay otro como Tú para ayudar, tanto al poderoso como al que no tiene fuerza! ¡Ayúdanos, oh \nd Yavé ʼElohim\nd* nuestro, porque en ti nos apoyamos, y en tu Nombre vamos contra esta multitud! Oh \nd Yavé\nd*, Tú eres nuestro \nd ʼElohim\nd*, no prevalezca el hombre contra Ti. \p \v 12 \nd Yavé\nd* derrotó a los etíopes ante Asa y Judá, y los etíopes huyeron. \v 13 Asa y el ejército que lo acompañaba los persiguieron hasta Gerar. Cayeron tantos de los etíopes que no pudieron recuperarse, porque fueron destrozados ante \nd Yavé\nd* y su ejército. Les tomaron un botín muy grande. \v 14 Atacaron también todas las ciudades alrededor de Gerar, porque el terror de \nd Yavé\nd* estaba sobre ellas. Saquearon todas las ciudades, pues había en ellas un gran botín. \v 15 También atacaron las tiendas de los que tenían ganado. Se llevaron muchas ovejas y camellos y regresaron a Jerusalén. \c 15 \s1 Reformas del rey Asa \p \v 1 Entonces el Espíritu de \nd ʼElohim\nd* vino sobre Azarías, hijo de Oded, \v 2 quien salió al encuentro de Asa y le dijo: \wj Escúchenme, Asa y todo Judá y Benjamín: \+nd Yavé\+nd* está con ustedes, si ustedes están con Él. Si lo buscan, será hallado por ustedes, pero si lo abandonan, Él los abandonará.\wj* \v 3 \wj Mucho tiempo estuvo Israel sin el \+nd ʼElohim\+nd* verdadero, sin sacerdote que enseñara y sin Ley.\wj* \p \v 4 \wj Pero cuando se volvieron a \+nd Yavé\+nd*, el \+nd ʼElohim\+nd* de Israel, en su aflicción y lo buscaron, Él les permitió encontrarlo.\wj* \p \v 5 \wj En aquellos tiempos no había paz para el que salía ni para el que entraba, sino muchas aflicciones para todos los habitantes de las tierras.\wj* \v 6 \wj Así que una nación era destruida por otra nación y una ciudad por otra ciudad, porque \+nd ʼElohim\+nd* las turbaba con toda clase de adversidades.\wj* \p \v 7 \wj Pero esfuércense ustedes y no desmayen sus manos, porque hay recompensa para su labor.\wj* \p \v 8 Cuando Asa oyó estas palabras y la profecía de Azarías, hijo de Oded, se animó y quitó los ídolos repugnantes de toda la tierra de Judá, Benjamín y las ciudades que tomó en la región montañosa de Efraín. Reconstruyó el altar de \nd Yavé\nd* que estaba delante del patio de \nd Yavé\nd*. \p \v 9 Después los de Efraín, Manasés y Simeón, quienes vivían con Judá y Benjamín, se reunieron con ellos. Muchos de Israel se pasaron al \add rey Asa\add* porque veían que \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* estaba con él. \p \v 10 Se reunieron en Jerusalén el mes tercero del año 15 del reinado de Asa. \v 11 Aquel día sacrificaron a \nd Yavé\nd* 700 becerros y 7.000 ovejas del botín que llevaron. \v 12 Hicieron un pacto solemne para buscar a \nd Yavé ʼElohim\nd* de sus antepasados, con todo su corazón y su alma, \v 13 y que todo el que no buscara a \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, muriera, fuera grande o pequeño, hombre o mujer. \v 14 Juraron delante de \nd Yavé\nd* con gran voz, gritos de júbilo, trompetas y cornetas.\f + \fr 15.14 \fr*\ft Lit. cuerno. La palabra corneta viene de cuerno. Una corneta no es una trompeta. Como se usa cuerno para el altar, para el aceite de ungir y otras funciones, usamos la palabra corneta.\ft*\f* \p \v 15 Toda Judá se regocijó a causa del juramento, pues juraron con todo su corazón que lo buscarían con toda su voluntad. Y fue hallado por ellos, y \nd Yavé\nd* les dio paz por todas partes. \p \v 16 El rey Asa aun despojó a su propia madre Maaca de su dignidad real, porque hizo una imagen repugnante de Asera. Asa taló el ídolo repugnante, lo desmenuzó y lo quemó junto al torrente Cedrón. \p \v 17 Sin embargo, los lugares altos no fueron quitados de Israel, aunque el corazón de Asa se mantuvo íntegro todo su tiempo. \v 18 Llevó plata, oro y utensilios a la Casa de \nd ʼElohim,\nd* lo que su padre y él mismo consagraron. \p \v 19 No hubo guerra hasta el año 35 del reinado de Asa. \c 16 \s1 Lucha de Asa contra Israel \p \v 1 El año 36 del reinado de Asa, Baasa, rey de Israel, subió contra Judá y fortificó a Ramá para que nadie tuviera acceso a Asa, rey de Judá. \p \v 2 Entonces Asa sacó la plata y el oro de los tesoros de la Casa de \nd Yavé\nd* y del palacio real, los envió a Ben-adad, rey de Siria, quien estaba en Damasco, y le dijo: \v 3 Haya alianza entre tú y yo, como la hubo entre mi padre y tu padre. Ciertamente te envío plata y oro con el fin de que rompas tu alianza con Baasa, rey de Israel, para que se aparte de mí. \p \v 4 Ben-adad atendió al rey Asa y envió a los jefes de sus ejércitos contra las ciudades de Israel. Atacaron a Ijón, a Dan, a Abel-maim y a todas las ciudades de almacenamiento de Neftalí. \v 5 Aconteció que cuando Baasa oyó esto, dejó de fortificar a Ramá y abandonó su obra. \v 6 Entonces el rey Asa tomó a todo Judá y se llevó las piedras y la madera de Ramá, con las cuales Baasa la fortificaba. Con ellas reedificó Geba y Mizpa. \p \v 7 En aquel tiempo el vidente Hanani fue a Asa, rey de Judá, y le dijo: Por cuanto te apoyaste en el rey de Siria, y no te apoyaste en \nd Yavé\nd* tu \nd ʼElohim\nd*, el ejército del rey de Siria escapó de tu mano. \v 8 ¿Los etíopes y los libios no eran un ejército numerosísimo, con carruajes y muchos jinetes? Sin embargo, porque te apoyaste en \nd Yavé\nd*, Él los entregó en tu mano. \v 9 Porque los ojos de \nd Yavé\nd* contemplan toda la tierra, para ayudar a aquellos cuyo corazón es íntegro ante Él. ¡Locamente actuaste en esto, y de ahora en adelante habrá guerras contra ti! \p \v 10 Entonces Asa se enojó contra el vidente y lo echó en la cárcel, pues se enfureció muchísimo contra él por esto. Y al mismo tiempo, Asa oprimió a algunos del pueblo. \p \v 11 Los hechos de Asa, primeros y últimos, ciertamente están escritos en el rollo de los reyes de Judá y de Israel. \s1 Muerte del rey Asa \p \v 12 El año 39 de su reinado, Asa cayó enfermo de los pies. Su enfermedad era grave, pero aun en su enfermedad no buscó a \nd Yavé\nd*, sino a los médicos. \p \v 13 Asa descansó con sus antepasados. Murió el año 41 de su reinado. \v 14 Lo sepultaron en su sepulcro que excavó en la Ciudad de David. Lo pusieron en un ataúd, el cual llenaron de toda clase de especias aromáticas y perfumes preparados por expertos perfumistas, y encendieron una gran hoguera en su honor. \c 17 \s1 Reinado de Josafat en Judá \p \v 1 Su hijo Josafat reinó en su lugar y se fortaleció contra Israel. \v 2 Destacó tropas en todas las ciudades fortificadas de Judá y colocó guarniciones en la tierra de Judá y en las ciudades de Efraín que su padre Asa capturó. \p \v 3 \nd Yavé\nd* estuvo con Josafat, porque anduvo en los procedimientos de su antepasado David. No acudió a los baales, \v 4 sino acudió al \nd ʼElohim\nd* de su padre. Anduvo en sus Mandamientos y no según las obras de Israel. \v 5 \nd Yavé\nd* confirmó el reino en su mano. Todo Judá dio presentes a Josafat, y tuvo riqueza y honores en abundancia. \v 6 Su corazón se animó en los caminos de \nd Yavé\nd*, y quitó de Judá los lugares altos y las Aseras. \p \v 7 En el tercer año de su reinado, \add el rey Josafat\add* envió a sus magistrados Ben-hail, Abdías, Zacarías, Natanael y Micaías, a enseñar en las ciudades de Judá. \v 8 Envió con ellos a los levitas Semaías, Netanías, Zebadías, Asael, Semiramot, Jonatán, Adonías, Tobías, Tobadonías y a los sacerdotes Elisama y Joram. \v 9 Ellos enseñaron en Judá y llevaban consigo el Rollo de la Ley de \nd Yavé\nd*. Recorrieron todas las ciudades de Judá y enseñaban al pueblo. \p \v 10 El pavor de \nd Yavé\nd* cayó sobre todos los reinos de las tierras que estaban alrededor de Judá, y no hicieron guerra contra Josafat. \v 11 Algunos de los filisteos llevaban a Josafat presentes y plata como tributo. También los árabes le llevaron rebaños: 7.700 carneros y 7.700 machos cabríos. \p \v 12 Josafat llegó a ser muy grande. Edificó en Judá fortalezas y ciudades de almacenamiento. \v 13 Además tuvo muchas provisiones en las ciudades de Judá, y hombres de guerra muy valientes en Jerusalén. \p \v 14 Éste era el número de ellos, según sus casas paternas: de los comandantes de millares de Judá, el jefe era Adnas, con 300.000 guerreros valientes; \v 15 le seguía el jefe Johanán, con 280.000; \v 16 luego Amasías, hijo de Zicri, quien se ofreció voluntariamente a \nd Yavé\nd*, con 200.000 hombres valientes; \v 17 de Benjamín, Eliada, hombre muy valiente, y con él 200.000 que llevaban arco y escudo; \v 18 y a continuación, Jozabad, con 180.000 hombres equipados para la guerra. \p \v 19 Éstos eran los que servían al rey, aparte de los que el rey destacó en las ciudades fortificadas por todo Judá. \c 18 \s1 Batalla de Acab y Josafat contra Ramot de Galaad \p \v 1 Josafat tenía riquezas y honores en abundancia, y emparentó con Acab. \v 2 Después de unos años bajó a Samaria para visitar a Acab. Y Acab ordenó degollar numerosas ovejas y bueyes para él y el ejército que estaba con él. Lo incitó a ir con él contra Ramot de Galaad. \v 3 Acab, rey de Israel, preguntó a Josafat, rey de Judá: ¿Irás conmigo contra Ramot de Galaad? \p Y él respondió: Yo soy como tú, y mi ejército como el tuyo. Iremos contigo a la guerra. \v 4 Además Josafat dijo al rey de Israel: Te ruego que consultes ahora la Palabra de \nd Yavé\nd*. \p \v 5 Entonces el rey de Israel convocó a unos 400 hombres que eran profetas y les preguntó: ¿Iremos a la guerra contra Ramot de Galaad o desistiré? \p Y ellos respondieron: Sube, porque \tl ʼelohim\tl* la entregará en mano del rey. \p \v 6 Pero Josafat preguntó: ¿Hay aún aquí algún profeta de \nd Yavé\nd*, para que consultemos por medio de él? \p \v 7 El rey de Israel respondió a Josafat: Aún queda un hombre por medio de quien podemos consultar a \nd Yavé\nd*, pero yo lo aborrezco, porque nunca me profetiza para bien, sino siempre para mal. Es Micaías, hijo de Imla. \p Y dijo Josafat: No hable así el rey. \p \v 8 Entonces el rey de Israel llamó a un funcionario y le dijo: ¡Trae pronto a Micaías, hijo de Imla! \p \v 9 El rey de Israel y Josafat, rey de Judá, vestidos con ropas reales, estaban sentados cada uno en su trono en una plaza ubicada a la entrada de la puerta de Samaria. Todos los profetas profetizaban ante ellos. \v 10 Sedequías, hijo de Quenaana, hizo unos cuernos de hierro y decía: \nd Yavé\nd* dice: \wj Con éstos acornearás a los sirios hasta que sean consumidos.\wj* \p \v 11 Todos los profetas profetizaban así: ¡Sube a Ramot de Galaad y triunfa, pues \nd Yavé\nd* la entregó en mano del rey! \s1 Profecía de Micaías sobre la muerte de Acab \p \v 12 El mensajero que fue a llamar a Micaías le habló: Mira, las palabras de los profetas declaran a una voz cosas buenas al rey. Sea tu palabra como la de cada uno de ellos, y predice cosa buena. \p \v 13 Pero Micaías replicó: Vive \nd Yavé\nd* que lo que mi \nd ʼElohim\nd* indique, eso hablaré. \p \v 14 Cuando llegó al rey, éste le preguntó: Micaías, ¿iremos a la guerra contra Ramot de Galaad, o desistiré? \p Y le respondió: Suban y prosperen, porque ellos serán entregados en mano de ustedes. \p \v 15 Pero el rey le preguntó: ¿Cuántas veces te haré jurar que no me digas sino la verdad en Nombre de \nd Yavé\nd*? \p \v 16 Entonces respondió: Vi a todo Israel esparcido por las montañas como ovejas que no tienen pastor. Y \nd Yavé\nd* dijo: \wj Éstos no tienen \+tl ʼadón\+tl*. Regrese cada uno a su casa en paz.\wj* \p \v 17 El rey de Israel dijo a Josafat: ¿No te dije que éste nunca profetiza lo bueno acerca de mí, sino lo malo? \p \v 18 Pero Micaías dijo: Por eso oigan la Palabra de \nd Yavé\nd*: \wj Vi a \+nd Yavé\+nd* sentado en su trono. Toda la hueste de los cielos estaba a su derecha y a su izquierda.\wj* \p \v 19 \nd Yavé\nd* dijo: \wj ¿Quién inducirá a Acab, rey de Israel, para que suba y caiga en Ramot de Galaad?\wj* \p Y uno decía de una manera y otro de otra. \p \v 20 Salió un espíritu que se colocó delante de \nd Yavé\nd* y dijo: Yo lo induciré. \p Y \nd Yavé\nd* le preguntó: \wj ¿De cuál modo?\wj* \p \v 21 Le respondió: Saldré y seré espíritu de mentira en la boca de todos sus profetas. \p Y Él dijo: \wj Lo inducirás y ciertamente prevalecerás. ¡Vé y hazlo!\wj* \p \v 22 Ahora, mira, \nd Yavé\nd* puso un espíritu de mentira en la boca de estos profetas tuyos, porque \nd Yavé\nd* decretó el mal contra ti. \p \v 23 Entonces Sedequías, hijo de Quenaana, se acercó, golpeó a Micaías en la mejilla y dijo: ¿Por cuál camino pasó de mí el Espíritu de \nd Yavé\nd* para hablarte a ti? \p \v 24 Micaías respondió: Ciertamente, ¿no lo verás en aquel día cuando vayas a esconderte de aposento en aposento? \p \v 25 Entonces el rey de Israel dijo: Tomen a Micaías y llévenlo a Amón, gobernador de la ciudad, y a Joás, hijo del rey, \v 26 y díganles: El rey dijo: Metan a éste en la cárcel y denle pan y agua de aflicción hasta que yo vuelva en paz. \p \v 27 Entonces Micaías dijo: ¡Si vuelves en paz, \nd Yavé\nd* no habló por medio de mí! Y agregó: ¡Escúchenlo, pueblos todos! \p \v 28 Así que el rey de Israel subió con Josafat, rey de Judá, contra Ramot de Galaad. \v 29 El rey de Israel dijo a Josafat: Me disfrazaré y entraré en la batalla, pero tú cúbrete con tus ropas reales. Y el rey de Israel se disfrazó, y entraron en la batalla. \p \v 30 Pero el rey de Siria ordenó a los jefes de sus carruajes: No luchen contra pequeño ni grande, sino solo contra el rey de Israel. \p \v 31 Cuando los jefes de los carruajes vieron a Josafat, dijeron: ¡Ése es el rey de Israel! Así que lo rodearon para luchar, pero Josafat clamó, y \nd Yavé\nd* lo ayudó. \nd ʼElohim\nd* los apartó de él. \p \v 32 Pues sucedió que cuando los jefes de los carruajes vieron que no era el rey de Israel, se apartaron de perseguirlo. \s1 Una flecha al que pueda interesar \p \v 33 Un hombre disparó con el arco a la ventura, e hirió al rey de Israel entre las junturas de la armadura. Y \add el rey\add* dijo al que manejaba los caballos del carruaje: Vuelve tu mano y sácame del campo porque estoy herido. \p \v 34 Pero la batalla arreció aquel día. Por tanto el rey de Israel fue sostenido en su carroza frente a los sirios hasta llegar la noche, pero murió al ocultarse el sol. \c 19 \s1 Amonestación a Josafat \p \v 1 Josafat, rey de Judá, regresó en paz a su casa en Jerusalén. \p \v 2 Pero el vidente Jehú, hijo de Hanani, salió a encontrarlo y dijo al rey Josafat: ¿Das ayuda al perverso y amas a los que aborrecen a \nd Yavé\nd*? Por esto la ira de \nd Yavé\nd* está sobre ti. \v 3 Sin embargo, se hallaron cosas buenas en ti, pues eliminaste las Aseras de la tierra y dispusiste tu corazón a buscar a \nd ʼElohim\nd*. \p \v 4 Josafat se quedó en Jerusalén, aunque salía a visitar al pueblo desde Beerseba hasta la región montañosa de Efraín, para hacerlos volver a \nd Yavé ʼElohim\nd* de sus antepasados. \p \v 5 Estableció jueces en todas las ciudades fortificadas del territorio de Judá. \v 6 Advirtió a los jueces: Consideren lo que hacen, porque no juzgan con autoridad de hombre, sino con la de \nd Yavé\nd*, Quien estará con ustedes cuando pronuncien sentencia. \v 7 Ahora pues, el terror de \nd Yavé\nd* sea sobre ustedes. Procedan con cuidado, porque con \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd* no hay injusticia, ni acepción de personas, ni admisión de soborno. \p \v 8 Josafat también designó en Jerusalén a algunos levitas y sacerdotes, así como de los jefes de las casas paternas de Israel, para administrar la justicia de \nd Yavé\nd* y juzgar litigios entre los habitantes de Jerusalén. \p \v 9 Les ordenó: Procedan asimismo con temor a \nd Yavé\nd*, fidelidad y corazón íntegro. \v 10 Cuando lleven ante ustedes cualquier pleito entre sus hermanos que viven en las ciudades, en litigios por derramamiento de sangre, o en consultas sobre Ley, Precepto, Estatutos y Decretos, ustedes los amonestarán para que no pequen contra \nd Yavé\nd*, y así no llegue la ira sobre ustedes y sobre sus hermanos. Si actúan de esta manera no tendrán culpa. \p \v 11 Ciertamente, el sumo sacerdote Amarías los presidirá en cualquier asunto de \nd Yavé\nd*. Zebadías, hijo de Ismael, jefe de la casa de Judá, \add los atenderá\add* en cualquier asunto del rey, y los levitas serán oficiales en presencia de ustedes. Esfuércense y actúen, y \nd Yavé\nd* esté con el justo. \c 20 \s1 Victoria contra Moab y Amón \p \v 1 Aconteció después de esto que los hijos de Moab y de Amón, y algunos de los de Seír, salieron a la guerra contra Josafat. \p \v 2 Entonces algunos fueron a informar a Josafat: Una gran multitud viene contra ti de Siria, del otro lado del mar. Ciertamente están en Hazezon-tamar, que es En-gadí. \p \v 3 Josafat tuvo temor, humilló su semblante para buscar a \nd Yavé\nd* y proclamó un ayuno en todo Judá. \v 4 Los de Judá se reunieron para pedir socorro a \nd Yavé\nd*. Acudieron de todas las ciudades de Judá para pedir ayuda a \nd Yavé\nd*. \p \v 5 Entonces Josafat se colocó en pie ante la congregación de Judá y de Jerusalén, delante del patio nuevo en la Casa de \nd Yavé\nd*, \v 6 y dijo: Oh \nd Yavé ʼElohim\nd* de nuestros antepasados, ¿no eres Tú el \nd ʼElohim\nd* del cielo, Quien gobierna todos los reinos de las naciones? ¿No hay en tu mano tal fuerza y poder que nadie puede resistir? \v 7 ¿No echaste Tú, oh \nd ʼElohim\nd* nuestro, a los habitantes de esta tierra delante de tu pueblo Israel, y la diste para siempre a la descendencia de tu amigo Abraham? \v 8 Vivieron en ella, edificaron un Santuario a tu Nombre y dijeron: \v 9 Si nos llega el mal, ya sea con espada, con pestilencia o hambruna, nos congregaremos ante esta Casa y ante Ti, porque tu Nombre está en esta Casa. Clamaremos a Ti en nuestra aflicción, y Tú nos escucharás y nos salvarás. \v 10 Ahora pues, aquí están los hijos de Amón, de Moab y de la región montañosa de Seír, a quienes no permitiste que Israel invadiera cuando venía de la tierra de Egipto. Por eso se desviaron de ellos y no los destruyeron. \v 11 Mira, ellos nos recompensan al venir a echarnos de tu herencia, la cual nos diste en posesión. \v 12 ¡Oh \nd ʼElohim\nd* nuestro! ¿Tú no los castigarás? Porque no hay fuerza en nosotros contra esta gran multitud que viene contra nosotros, ni sabemos qué hacer. Por eso volvemos nuestros ojos a Ti. \p \v 13 Todo Judá permaneció en pie ante \nd Yavé\nd*, con sus pequeños, mujeres e hijos. \p \v 14 Entonces el Espíritu de \nd Yavé\nd* vino en medio de la congregación sobre Jahaziel, hijo de Zacarías, hijo de Benaía, hijo de Jeiel, hijo de Matanías, levita de los hijos de Asaf, \v 15 y dijo: \wj Escuchen todo Judá, ustedes habitantes de Jerusalén y tú, rey Josafat. \+nd Yavé\+nd* les dice: No teman ni se atemoricen a causa de tan gran multitud, porque la batalla no es de ustedes, sino de \+nd ʼElohim\+nd*.\wj* \v 16 \wj Bajen contra ellos mañana. Miren, ellos suben por la cuesta de Sis, así que los encontrarán en el límite del valle, frente al desierto de Jeruel.\wj* \v 17 \wj Pero ustedes no tendrán que luchar en esta ocasión. Resistan y estén quietos. Vean la salvación de \+nd Yavé\+nd* para ustedes. ¡Oh Judá y Jerusalén, no teman ni se aterroricen! Salgan mañana contra ellos, porque \+nd Yavé\+nd* está con ustedes.\wj* \p \v 18 Entonces Josafat se inclinó rostro en tierra. Todo Judá y los habitantes de Jerusalén cayeron ante \nd Yavé\nd* y se postraron delante de \nd Yavé\nd*. \v 19 Se levantaron los levitas de los hijos de Coat y de Coré, y se colocaron en pie para alabar con una voz muy alta a \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de Israel. \p \v 20 Se levantaron de madrugada y salieron al desierto de Tecoa. Cuando avanzaban, Josafat se detuvo y dijo: Escúchenme, oh Judá, y ustedes, habitantes de Jerusalén: ¡Crean en \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* y estarán seguros! ¡Crean a sus profetas y triunfarán! \p \v 21 Después de consultar con el pueblo, designó a algunos que cantaran y alabaran a \nd Yavé,\nd* cubiertos con ropas sagradas, al frente del ejército, y dijeran: ¡Alaben a \nd Yavé\nd*, porque para siempre es su misericordia! \v 22 Cuando comenzaron a elevar los cánticos de alabanza, \nd Yavé\nd* puso emboscadas contra los hijos de Amón, de Moab y de la región montañosa de Seír que subían contra Judá. Fueron derrotados, \v 23 porque los hijos de Amón y de Moab atacaron a los de la región montañosa de Seír hasta que los destruyeron por completo. Tan pronto como destruyeron a los de Seír, cada cual contribuyó para la destrucción de su compañero. \p \v 24 Cuando Judá llegó a la altura desde donde se ve el desierto, miraron hacia la multitud. Ciertamente ellos no eran sino cadáveres que estaban tendidos en la tierra. No escapó alguno. \v 25 Entonces Josafat y su ejército se acercaron para saquear sus despojos. Hallaron entre los cadáveres abundantes riquezas, ropas y objetos valiosos, los cuales despojaron para ellos en tal cantidad que les era imposible llevar. Estuvieron tres días recogiendo despojos, porque eran muchos. \p \v 26 El cuarto día se congregaron en el valle de Berajá, porque allí bendijeron a \nd Yavé\nd*. Por eso llamaron aquel lugar Valle de Berajá hasta hoy. \v 27 Luego cada uno de los de Judá y Jerusalén regresaron con alegría a Jerusalén con Josafat al frente, porque \nd Yavé\nd* les permitió regocijarse sobre sus enemigos. \v 28 Llegaron a la Casa de \nd Yavé\nd* en Jerusalén al son de salterios, arpas y trompetas. \p \v 29 El terror de \nd ʼElohim\nd* cayó sobre todos los reinos de aquella tierra cuando oyeron que \nd Yavé\nd* luchó contra los enemigos de Israel. \v 30 El reino de Josafat tuvo paz porque su \nd ʼElohim\nd* le dio descanso en todos lados. \p \v 31 Así Josafat reinó sobre Judá. Tenía 35 años cuando comenzó a reinar, y reinó 25 años en Jerusalén. El nombre de su madre era Azuba, hija de Silhi. \v 32 Anduvo en el camino de su padre Asa. No se apartó de él e hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*. \v 33 Sin embargo, no fueron quitados los lugares altos, pues el pueblo aún no disponía su corazón hacia el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \p \v 34 Los demás hechos de Josafat, los primeros y los últimos, ciertamente están escritos en las palabras de Jehú, hijo de Hanani, el cual se menciona en el rollo de los Reyes de Israel. \p \v 35 Después de esto, Josafat, rey de Judá, se alió con Ocozías, rey de Israel, quien actuaba muy perversamente. \v 36 Se alió con él a fin de construir naves para ir a Tarsis. Construían las naves en Ezión-geber. \v 37 Entonces Eliezer, hijo de Dodava, de Maresa, profetizó contra Josafat: Porque te aliaste con Ocozías, \nd Yavé\nd* destruirá tus obras. Las naves se destrozaron y no pudieron ir a Tarsis. \c 21 \s1 Reinado de Joram en Judá \p \v 1 Josafat descansó con sus antepasados y fue sepultado en la Ciudad de David. \p Reinó en su lugar su hijo Joram. \v 2 Tuvo como hermanos a Azarías, Jeiel, Zacarías, Azarías, Micael y Sefatías. Todos estos fueron hijos de Josafat, rey de Israel, \v 3 a quienes su padre dio grandes regalos de plata, oro y cosas preciosas, así como ciudades fortificadas en Judá. Pero el reino se lo dio a Joram, porque él era su primogénito. \v 4 Joram fue elevado al reino de su padre. Cuando fue fuerte, mató a espada a todos sus hermanos, y también a algunos de los jefes de Israel. \p \v 5 Joram tenía 32 años cuando comenzó a reinar, y reinó ocho años en Jerusalén. \v 6 Anduvo en el camino de los reyes de Israel, como la casa de Acab, pues una hija de Acab fue su esposa. Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*. \v 7 Pero \nd Yavé\nd* no quiso destruir la casa de David a causa del Pacto que hizo con él según su promesa, según la cual le daría una lámpara a él y a sus hijos para siempre. \p \v 8 En su tiempo Edom se rebeló contra el dominio de Judá, y proclamaron un rey de ellos. \v 9 Entonces Joram fue con sus oficiales y todos sus carruajes. Al levantarse de noche, derrotó a los edomitas, quienes lo habían sitiado a él y a todos los comandantes de sus carruajes. \v 10 Sin embargo, Edom siguió en rebeldía contra el dominio de Judá hasta hoy. \p En aquel tiempo Libna también se rebeló contra su dominio, porque él abandonó a \nd Yavé ʼElohim\nd* de sus antepasados. \v 11 Además construyó lugares altos en la región montañosa de Judá, y fomentó la prostitución entre los habitantes de Jerusalén y Judá. \p \v 12 Entonces le llegó una carta del profeta Elías que decía: \nd Yavé ʼElohim\nd* de David, tu antepasado, dice: \wj Por cuanto no andas en los caminos de tu padre Josafat, ni en los caminos de Asa, rey de Judá,\wj* \v 13 \wj sino en el camino de los reyes de Israel, causaste que Judá y los habitantes de Jerusalén forniquen según la fornicación de la casa de Acab.\wj* \p \wj Por cuanto asesinaste a tus hermanos, a la familia de tu padre, que eran mejores que tú,\wj* \v 14 \wj ciertamente \+nd Yavé\+nd* va a golpear con una gran calamidad a tu pueblo, tus hijos, tus mujeres, todas tus posesiones\wj* \v 15 \wj y a ti con muchas enfermedades, con dolencia de tus intestinos, hasta que salgan tus intestinos por causa de la enfermedad día tras día.\wj* \p \v 16 Entonces \nd Yavé\nd* incitó la ira de los filisteos y los árabes que estaban con los etíopes contra Joram. \v 17 Estos subieron contra Judá y la invadieron. Se llevaron todo que hallaron en la casa del rey, los bienes, sus hijos y sus mujeres. No le quedó algún hijo, excepto Joacaz, el menor de sus hijos. \p \v 18 Después de todo esto, \nd Yavé\nd* lo hirió con una enfermedad incurable en los intestinos. \v 19 Aconteció que en el transcurso del tiempo, después de dos años, se le salieron los intestinos a causa de la enfermedad y murió con gran dolor. Su pueblo no encendió una hoguera para él, como la hoguera que encendieron para sus antepasados. \p \v 20 Tenía 32 años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén ocho años. Desapareció sin que nadie lo lamentara, y lo sepultaron en la Ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes. \c 22 \s1 Reinado de Ocozías en Judá \p \v 1 Los habitantes de Jerusalén proclamaron a Ocozías, el menor de sus hijos, como rey en su lugar, porque unas bandas que llegaron con los árabes al campamento mataron a todos los hijos mayores. Por tanto Ocozías, hijo de Joram, rey de Judá, reinó. \p \v 2 Ocozías tenía 22 años cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalén. El nombre de su madre era Atalía, hija de Omri. \p \v 3 También él anduvo en los caminos de la casa de Acab. Su propia madre fue su consejera para que obrara impíamente. \v 4 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*, como la casa de Acab, porque después de la muerte de su padre, ellos lo aconsejaban para perdición de él. \v 5 Porque al andar según el consejo de ellos, fue con Joram, hijo de Acab, rey de Israel, a la guerra contra Hazael, rey de Siria, en Ramot de Galaad. \p Los sirios hirieron a Joram, \v 6 quien volvió a Jezreel para ser curado de las heridas que le hicieron en Ramot de Galaad cuando combatía contra Hazael, rey de Siria. Azarías, hijo de Joram, rey de Judá, bajó a ver a Joram, hijo de Acab, en Jezreel, pues estaba enfermo. \p \v 7 Pero la derrota de Ocozías era designio de \nd ʼElohim\nd*, porque fue a ver a Joram. Al llegar allí, salió con Joram contra Jehú, hijo de Nimsi, a quien \nd Yavé\nd* ungió para exterminar la casa de Acab. \p \v 8 Cuando Jehú hacía justicia con la casa de Acab, encontró a los jefes de Judá y los hijos de los hermanos de Ocozías quienes estaban al servicio de Ocozías, y los mató. \v 9 También buscó a Ocozías, a quien detuvieron cuando estaba escondido en Samaria. Lo llevaron ante Jehú, y lo mataron. Pero lo sepultaron, porque dijeron: Es el hijo de Josafat, quien buscó a \nd Yavé\nd* con todo su corazón. Y no quedó ninguno de la casa de Ocozías que fuera capaz de retener el reino. \s1 Usurpación del reino por Atalía \p \v 10 Cuando Atalía, madre de Ocozías, vio que su hijo murió, se levantó para exterminar a toda la descendencia real de la casa de Judá. \p \v 11 Pero Josabet, hija del rey tomó a Joás, hijo de Ocozías, y se lo llevó furtivamente de entre los hijos del rey que eran asesinados. Lo escondió juntamente con su madre de crianza en uno de los aposentos. Así Josabet, hija del rey Joram, esposa del sacerdote Joiada, la cual era hermana de Ocozías, lo escondió de Atalía, y ella no pudo matarlo. \v 12 Estuvo con ellos escondido en la Casa de \nd ʼElohim\nd* seis años, mientras Atalía reinaba en la tierra. \c 23 \s1 Gran obra del sumo sacerdote Joiada \p \v 1 El año séptimo Joiada se fortaleció. Hizo un pacto con los jefes de centenas: con Azarías, hijo de Jeroham, Ismael, hijo de Johanán, Azarías, hijo de Obed, Maasías, hijo de Adaía, y Elisafat, hijo de Zicri. \v 2 Recorrieron Judá para convocar a los levitas de todas las ciudades de Judá y a los jefes de las casas paternas de Israel. Fueron a Jerusalén. \p \v 3 Entonces toda la congregación hizo un pacto con respecto al rey en la Casa de \nd ʼElohim\nd*. \p Joiada les dijo: Aquí está el hijo del rey quien reinará, tal como \nd Yavé\nd* habló acerca de los descendientes de David. \p \v 4 Esto es lo que harán: la tercera parte de ustedes, los sacerdotes y los levitas que entran el sábado, estarán de porteros en las puertas. \v 5 Otra tercera parte estará en el palacio real. Otra tercera parte, en la puerta del Fundamento. Todo el pueblo estará en los patios de la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 6 Pero nadie entrará en la Casa de \nd Yavé\nd*, excepto los sacerdotes y los levitas que ministran. Solo éstos podrán entrar, porque están consagrados. Y todo el pueblo guardará la ordenanza de \nd Yavé\nd*. \v 7 Los levitas rodearán al rey por todas partes, cada uno con sus armas en la mano, y cualquiera que entre en la Casa morirá. Estarán con el rey cuando entre y cuando salga. \p \v 8 Los levitas y todo Judá hicieron según todo lo que ordenó el sacerdote Joiada. Tomaron cada uno a sus hombres, a los que entrarían o saldrían el sábado, pues el sacerdote Joiada no dio licencia a los grupos. \p \v 9 Después el sacerdote Joiada entregó a los jefes de centenas las lanzas, los escudos pequeños y los escudos grandes del rey David que estaban en la Casa de \nd ʼElohim\nd*. \v 10 Colocó a todo la gente en orden alrededor del rey, cada uno con su espada en la mano, desde el lado derecho de la Casa hasta el lado izquierdo, delante del altar y la Casa. \p \v 11 Luego sacaron al hijo del rey, lo coronaron, le dieron el Testimonio y lo proclamaron rey. Joiada y sus hijos lo ungieron y dijeron: ¡Viva el rey! \p \v 12 Cuando Atalía oyó el ruido de la gente que corría y aclamaba al rey, se acercó al pueblo en la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 13 Miró, y ahí estaba el rey en pie en su tarima real en la entrada, y los jefes y trompetistas junto al rey. Todo el pueblo de la tierra estaba alborozado y tocaba las trompetas. Los cantores con los instrumentos musicales dirigían las aclamaciones. Entonces Atalía rasgó sus ropas y exclamó: ¡Conspiración! ¡Conspiración! \p \v 14 Pero el sacerdote Joiada sacó a los jefes de centenas que comandaban la tropa y les dijo: ¡Déjenla pasar entre las filas, y cualquiera que la siga, que muera a espada! Pues el sacerdote advirtió: No la maten en la Casa de \nd Yavé\nd*. \s1 Muerte de Atalía \p \v 15 Así que ellos le abrieron paso, y ella fue hacia la puerta de los Caballos en el palacio real. Allí la mataron. \p \v 16 Entonces Joiada hizo un pacto con el rey y todo el pueblo, según el cual serían el pueblo de \nd Yavé\nd*. \v 17 Después todo el pueblo fue al templo de baal y lo destruyó, destrozó sus altares y sus imágenes. Mató a Matán, sacerdote de baal, delante de los altares. \p \v 18 Luego Joiada organizó los ministerios en la Casa de \nd Yavé\nd* bajo la mano de los sacerdotes levitas, a quienes David distribuyó en la Casa de \nd Yavé\nd* para ofrecer los holocaustos a \nd Yavé\nd* con regocijo y cánticos, según lo escrito en la Ley de Moisés, como David ordenó. \v 19 También estableció porteros en las puertas de la Casa de \nd Yavé\nd*, para que ningún impuro entrara por ningún motivo. \p \v 20 Luego tomó a los jefes de centenas, los magistrados, los gobernadores del pueblo y todo el pueblo de la tierra y llevaron al rey desde la Casa de \nd Yavé\nd*, pasaron por la puerta Superior al palacio real y sentaron al rey en el trono del reino. \p \v 21 Todo el pueblo de la tierra se regocijó. La ciudad estaba tranquila, porque mataron a Atalía a filo de espada. \c 24 \s1 Reinado de Joás en Judá \p \v 1 Joás tenía siete años cuando comenzó a reinar, y reinó 40 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Sibia de Beerseba. \v 2 Joás hizo lo recto ante \nd Yavé\nd* todo el tiempo del sacerdote Joiada. \v 3 Joiada tomó para el rey dos esposas, y éste engendró hijos e hijas. \p \v 4 Aconteció después de esto que Joás se propuso restaurar la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 5 Reunió a los sacerdotes y a los levitas, y les dijo: Salgan a las ciudades de Judá y recojan dinero de todo Israel para restaurar anualmente la Casa de su \nd ʼElohim\nd*. Traten de apresurar el asunto. Pero los levitas no se apresuraron. \p \v 6 Entonces el rey llamó al sumo sacerdote Joiada: ¿Por qué no persuadiste a los levitas para que trajeran de Judá y Jerusalén el tributo establecido por Moisés, esclavo de \nd Yavé\nd* a la congregación de Israel, para la obra del Tabernáculo del Testimonio? \p \v 7 Porque los hijos de la perversa Atalía deterioraron la Casa de \nd ʼElohim\nd* y usaron los objetos sagrados de la Casa de \nd Yavé\nd* para los baales. \p \v 8 El rey dispuso entonces que hicieran un cofre. Lo pusieron afuera en la entrada a la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 9 Pregonaron por Judá y Jerusalén que llevaran a \nd Yavé\nd* lo que Moisés, esclavo de \nd ʼElohim\nd*, prescribió a Israel en el desierto. \p \v 10 Todos los jefes y los del pueblo se alegraron. Llevaron y echaron en el cofre hasta llenarlo. \v 11 Cuando llegaba el momento de llevar el cofre a la inspección real por medio de los levitas, si veían que la plata era mucha, el escriba del rey y el secretario del sumo sacerdote vaciaban el cofre y lo volvían a llevar a su lugar. Así hacían diariamente, y recogieron dinero en abundancia. \p \v 12 Luego el rey y Joiada lo entregaban a los que hacían la obra de servicio de la Casa de \nd Yavé\nd*. Contrataron canteros, ebanistas y artífices en hierro y bronce para restaurar la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 13 Los encargados de la obra trabajaron y la restauración progresó en su mano. Le dieron a la Casa de \nd ʼElohim\nd* su antigua condición, y la fortalecieron. \v 14 Cuando terminaron, llevaron lo que quedó del dinero al rey y a Joiada. Con esto hicieron utensilios para la Casa de \nd Yavé\nd*: objetos para el servicio del holocausto, cacerolas y utensilios de oro y de plata. Todo el tiempo de Joiada se ofrecieron holocaustos de continuo en la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 15 Pero Joiada envejeció y murió lleno de días. Tenía 130 años cuando murió. \v 16 Lo sepultaron con los reyes en la Ciudad de David, por cuanto hizo mucho bien a Israel con respecto a \nd ʼElohim\nd* y su Casa. \p \v 17 Pero después de la muerte de Joiada, los jefes de Judá fueron y se inclinaron ante el rey, y el rey los escuchó. \v 18 Abandonaron la Casa de \nd Yavé ʼElohim\nd* de sus antepasados, y sirvieron a los símbolos de Asera y a las imágenes talladas. La ira de \nd Yavé\nd* cayó sobre Judá y Jerusalén a causa de su culpa. \v 19 Sin embargo, \nd Yavé\nd* les envió profetas para que volvieran a \nd Yavé\nd*, quienes los amonestaron, pero no escucharon. \p \v 20 Entonces el Espíritu de \nd ʼElohim\nd* revistió a Zacarías, hijo del sacerdote Joiada, quien se presentó ante el pueblo y les dijo: \wj \+nd ʼElohim\+nd* dice: ¿Por qué traspasan ustedes los Mandamientos de \+nd Yavé\+nd*? No prosperarán, porque por abandonar a \+nd Yavé\+nd*, Él también los abandonará.\wj* \p \v 21 Pero conspiraron contra él y lo lapidaron en el patio de la Casa de \nd Yavé\nd* por mandato del rey. \v 22 El rey Joás no se acordó de la misericordia que Joiada, padre de Zacarías, tuvo con él, sino asesinó a su hijo, quien al morir exclamó: ¡\nd Yavé\nd* lo vea y lo demande! \p \v 23 Sucedió que después de un año el ejército de Siria subió contra él y llegaron a Judá y Jerusalén. Exterminaron a todos los magistrados del pueblo y enviaron todo su despojo al rey de Damasco. \v 24 Aunque el ejército de Siria subió con pocos hombres, \nd Yavé\nd* entregó a un gran ejército en su mano, porque abandonaron a \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. De esta manera ejecutaron juicio contra Joás. \p \v 25 Cuando los sirios se apartaron de él, lo dejaron agobiado por sus dolencias. Sus esclavos conspiraron contra él a causa de la sangre de los hijos del sacerdote Joiada. Lo hirieron en su lecho, y murió. Lo sepultaron en la Ciudad de David, pero no en los sepulcros de los reyes. \p \v 26 Éstos fueron los que conspiraron contra él: Zabad, hijo de Simbad, la amonita, y Jozabad, hijo de Simrit, la moabita. \v 27 En cuanto a los hijos de Joás, las numerosas profecías contra él y la restauración de la Casa de \nd ʼElohim\nd*, ciertamente están escritos en el relato del rollo de los Reyes. Reinó en su lugar su hijo Amasías. \c 25 \s1 Reinado de Amasías en Judá \p \v 1 Amasías tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó 29 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Joadán de Jerusalén. \v 2 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, aunque no con un corazón íntegro. \p \v 3 Cuando el reino fue firmemente establecido, mató a sus esclavos que mataron a su padre el rey. \v 4 Pero no mató a los hijos de ellos, según lo escrito en la Ley, en el rollo de Moisés, donde \nd Yavé\nd* ordenó: No morirán los padres por los hijos, ni los hijos por los padres, sino cada uno morirá por su pecado. \p \v 5 Después Amasías reunió a los de Judá y los organizó según sus casas paternas por todo Judá y Benjamín como jefes de millares y jefes de centenas. E hizo un censo de ellos, de 20 años arriba, de los cuales había 300.000 escogidos que tenían lanza y escudo para salir a la guerra. \v 6 Además tomó a sueldo a 100.000 hombres valientes de Israel por 3,3 toneladas de plata. \p \v 7 Pero un varón de \nd ʼElohim\nd* fue a él y le dijo: Oh rey, no vaya el ejército de Israel contigo, porque \nd Yavé\nd* no está con Israel ni con los hijos de Efraín. \v 8 Pero si vas, vé. Sé fuerte en la batalla. Sin embargo, \nd ʼElohim\nd* te derribará delante del enemigo, porque \nd ʼElohim\nd* tiene el poder para ayudar y para derribar. \p \v 9 Amasías preguntó al varón de \nd ʼElohim\nd*: ¿Qué haremos en cuanto a las 3,3 toneladas de plata que pagué al ejército de Israel? Y el varón de \nd ʼElohim\nd* le respondió: \nd Yavé\nd* puede darte mucho más que eso. \p \v 10 Entonces Amasías apartó las tropas de Efraín que le llegaron, para que fueran a sus casas. Por tanto, ellos se enojaron muchísimo contra Judá y regresaron a sus casas enfurecidos. \p \v 11 Pero Amasías se esforzó y guió a su pueblo. Fue al valle de la Sal y mató a 10.000 de los hijos de Seír. \v 12 Los hijos de Judá capturaron vivos a otros 10.000, y los llevaron a la cumbre de un peñasco. Allí los despeñaron, y todos se volvieron pedazos. \p \v 13 Pero las tropas que Amasías despidió para que no fueran con él a la batalla, saquearon las ciudades de Judá, desde Samaria hasta Bet-horón. Mataron a 3.000 de ellos y tomaron un gran despojo. \p \v 14 Aconteció que, cuando Amasías regresó de la matanza de los edomitas, se llevó consigo los \tl ʼelohim\tl* de los hijos de Seír. Los puso para que fueran sus \tl ʼelohim\tl*, se postró ante ellos y les quemó incienso. \p \v 15 Entonces la ira de \nd Yavé\nd* se encendió contra Amasías, y le envió a un profeta quien le dijo: ¿Por qué fuiste tras los \tl ʼelohim\tl* de un pueblo que no pudo ser librado de tu mano? \p \v 16 Cuando \add el profeta\add* le hablaba estas cosas, él respondió: ¿Te designamos a ti como consejero del rey? Déjate de eso. ¿Por qué quieres que te maten? \p Entonces el profeta desistió, pero agregó: Yo sé que \nd ʼElohim\nd* determinó destruirte, porque hiciste esto y no atendiste mi consejo. \p \v 17 Después de tomar consejo Amasías, rey de Judá, envió a decir a Joás, hijo de Joacaz, hijo de Jehú, rey de Israel: ¡Ven, enfrentémonos el uno al otro! \p \v 18 Joás, rey de Israel, envió a decir a Amasías, rey de Judá: El cardo del Líbano envió a decir al cedro del Líbano: Da tu hija como esposa a mi hijo. Y pasó una fiera del Líbano y pisoteó el cardo. \v 19 Tú dices: Ciertamente derroté a Edom, y con eso tu corazón se enaltece para ufanarte. Quédate ahora en tu casa. ¿Por qué provocas un mal en el cual puedes caer tú y Judá contigo? \p \v 20 Pero Amasías no escuchó, porque esto estaba determinado por \nd ʼElohim\nd*, Quien los quería entregar en su mano por haber ido tras los \tl ʼelohim\tl* de Edom. \p \v 21 Joás, rey de Israel, subió y se enfrentó a Amasías, rey de Judá, en Bet-semes, que pertenece a Judá. \v 22 Judá fue derrotado por Israel, y huyeron cada uno a sus tiendas. \v 23 Joás, rey de Israel, capturó a Amasías, rey de Judá, hijo de Joás, hijo de Joacaz, en Bet-semes, y lo llevó a Jerusalén. Abrió una brecha de 180 metros en el muro de Jerusalén, desde la puerta de Efraín hasta la puerta de la Esquina. \v 24 Tomó todo el oro, la plata y todos los utensilios que fueron hallados en la Casa de \nd ʼElohim\nd* a cargo de Obed-edom, y también los tesoros del palacio real. Tomó rehenes y volvió a Samaria. \p \v 25 Amasías, hijo de Joás, rey de Judá, vivió 15 años después de la muerte de Joás, hijo de Joacaz, rey de Israel. \v 26 Los demás hechos de Amasías, primeros y últimos, ciertamente ¿no están escritos en el rollo de los Reyes de Judá y de Israel? \p \v 27 Desde el tiempo cuando Amasías se apartó de \nd Yavé\nd*, tramaron una conjura contra él en Jerusalén. Él huyó a Laquis, pero enviaron tras él a Laquis, y allá lo mataron. \v 28 Lo llevaron sobre caballos y lo sepultaron con sus antepasados en la ciudad de Judá. \c 26 \s1 Reinado de Uzías en Judá \p \v 1 Entonces todo el pueblo de Judá tomó a Uzías, que tenía 16 años, y lo proclamaron rey en lugar de su padre Amasías. \v 2 Él reconstruyó Eilat y la restituyó a Judá, después que el rey reposó con sus antepasados. \p \v 3 Uzías tenía 16 años cuando comenzó a reinar, y reinó 52 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Jecolías de Jerusalén. \v 4 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, según todo lo que hizo su padre Amasías. \v 5 Persistió en buscar a \nd ʼElohim\nd* en el tiempo de Zacarías, entendido en visiones de \nd ʼElohim\nd*. Y en el tiempo cuando buscó a \nd Yavé, ʼElohim\nd* lo prosperó. \p \v 6 Salió a combatir contra los filisteos y derribó el muro de Gat, el de Jabnia y el de Asdod. Edificó ciudades en la región de Asdod, entre los filisteos. \v 7 \nd ʼElohim\nd* lo ayudó contra los filisteos, contra los árabes que vivían en Gur-baal, y contra los meunitas. \v 8 Los amonitas pagaron tributo a Uzías. Su fama se extendió hasta la entrada a Egipto, pues fue muy poderoso. \p \v 9 Uzías también edificó torres en Jerusalén junto a la puerta de la Esquina, en la entrada del Valle y junto al ángulo. Las fortificó. \v 10 También edificó torres en la región despoblada. Excavó muchas cisternas, pues tenía mucho ganado, tanto en la Sefela como en las vegas. Tenía además agricultores y viñadores en las montañas y en los campos fértiles, pues amaba la agricultura. \p \v 11 Uzías tuvo un ejército de guerreros que salían a la guerra por divisiones, según la lista elaborada por el escriba Jeiel, y el magistrado Maasías, dirigidos por Hananías, uno de los jefes del rey. \v 12 El número total de jefes de casas paternas, hombres valientes, era 2.600, \v 13 bajo cuya dirección estaba un ejército de 307.500 valientes guerreros, para ayudar al rey contra los enemigos. \p \v 14 Uzías preparó para todo el ejército, escudos, lanzas, cascos, corazas y arcos, y hondas para lanzar piedras. \v 15 Hizo artefactos para lanzar flechas y grandes piedras, inventados por hombres ingeniosos. Los ubicó en las torres y esquinas de Jerusalén. Su fama se extendió lejos, porque fue milagrosamente ayudado para ser fuerte. \p \v 16 Sin embargo, cuando fue fuerte, su corazón se enalteció hasta corromperse. Fue infiel a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, pues entró en la Casa de \nd Yavé\nd* para quemar incienso sobre el altar del incienso. \p \v 17 Tras el \add rey Uzías\add* entró el sacerdote Azarías junto con 80 sacerdotes de \nd Yavé\nd*, hombres valientes. \v 18 Ellos se enfrentaron al rey Uzías y le dijeron: ¡Oh Uzías, no te corresponde a ti quemar incienso a \nd Yavé\nd*, sino a los sacerdotes, hijos de Aarón, que están consagrados para quemar incienso! Sal del Santuario, porque fuiste infiel. No tendrás honra de parte de \nd Yavé ʼElohim\nd*. \p \v 19 Pero Uzías, quien tenía un incensario en su mano para quemar incienso, se llenó de ira. Cuando se airó contra los sacerdotes, le brotó lepra en su frente, delante de los sacerdotes en la Casa de \nd Yavé\nd* junto al altar del incienso. \v 20 Cuando el sumo sacerdote Azarías y todos los sacerdotes se volvieron hacia él, ciertamente tenía la frente leprosa. Entonces lo hicieron salir de prisa de allí, y él mismo se dio prisa para salir, porque \nd Yavé\nd* lo hirió. \p \v 21 El rey Uzías fue leproso hasta el día de su muerte. Vivió leproso en una casa aislada, pues fue excluido de la Casa de \nd Yavé\nd*. Su hijo Jotam quedó a cargo del palacio real y juzgaba al pueblo de la tierra. \p \v 22 Los demás hechos de Uzías, los primeros y los últimos, los escribió el profeta Isaías, hijo de Amoz. \v 23 Uzías descansó con sus antepasados, y lo sepultaron en un campo de sepultura de reyes, \add no en los sepulcros reales\add*, porque dijeron: Es leproso. En su lugar reinó su hijo Jotam. \c 27 \s1 Reinado de Jotam en Judá \p \v 1 Jotam tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó en Jerusalén 16 años. El nombre de su madre fue Jerusa, hija de Sadoc. \v 2 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, según todo lo que hizo su padre Uzías, excepto que no entró en el Santuario de \nd Yavé\nd*. Sin embargo, el pueblo seguía su acción hacia la corrupción. \p \v 3 Él edificó la puerta superior de la Casa de \nd Yavé\nd*, y construyó extensamente el muro de Ofel. \v 4 También edificó ciudades en la región montañosa de Judá y construyó fortalezas y torres en los bosques. \p \v 5 También tuvo guerra contra el rey de los hijos de Amón, a quienes derrotó. En aquel año los amonitas le dieron 3,3 toneladas de plata, 2.200.000 litros de trigo y 2.200.000 litros de cebada. Los amonitas le pagaron también esto en el segundo y en el tercer año. \p \v 6 Jotam se fortaleció, porque dispuso sus procedimientos delante de \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. \p \v 7 Los demás hechos de Jotam, todas sus guerras y sus procedimientos, ciertamente están escritos en el rollo de los Reyes de Israel y de Judá. \v 8 Tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó 16 años en Jerusalén. \v 9 Jotam reposó con sus antepasados, y lo sepultaron en la Ciudad de David. Reinó en su lugar su hijo Acaz. \c 28 \s1 Reinado de Acaz en Judá \p \v 1 Acaz tenía 20 años cuando comenzó a reinar, y reinó 16 años en Jerusalén, pero no hizo lo recto ante \nd Yavé\nd* como David su antepasado. \v 2 Anduvo en los caminos de los reyes de Israel e hizo imágenes de fundición de los baales. \v 3 Quemó incienso en el valle del hijo de Hinom y pasó a sus hijos por fuego, según las repugnancias de los pueblos que \nd Yavé\nd* expulsó de delante de los hijos de Israel. \v 4 También sacrificó y quemó incienso en los lugares altos, en las colinas y debajo de todo árbol frondoso. \p \v 5 Por tanto, \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* lo entregó en manos del rey de los sirios, quienes lo derrotaron y le tomaron gran número de prisioneros que llevaron a Damasco. \p Fue también entregado en manos del rey de Israel, quien lo derrotó con gran matanza. \v 6 Porque Peca, hijo de Remalías mató a 120.000 hombres en un solo día en Judá, todos ellos hombres valientes, por cuanto abandonaron a \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \v 7 También Zicri, un valiente de Efraín, mató a Maasías, hijo del rey, a Azricam, mayordomo del palacio, y a Elcana, segundo después del rey. \p \v 8 Los hijos de Israel tomaron cautivos a 200.000 de sus hermanos, mujeres, hijo e hijas. También tomaron de ellos un gran botín y se lo llevaron a Samaria. \p \v 9 Pero había allí un profeta de \nd Yavé\nd* llamado Oded, quien salió al encuentro del ejército que regresaba a Samaria y les dijo: Ciertamente a causa de que \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de los antepasados de ustedes estaba airado contra Judá, los entregó en su mano, pero ustedes los mataron con una ira que llegó hasta los cielos. \p \v 10 Ahora se proponen someter a ustedes mismos al pueblo de Judá y de Jerusalén como esclavos y esclavas. ¿Ciertamente no practican ustedes transgresiones contra \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*? \v 11 Ahora pues, escúchenme, y devuelvan a los cautivos que tomaron de sus hermanos, pues el ardor de la ira de \nd Yavé\nd* está contra ustedes. \p \v 12 Entonces algunos de los jefes de los hijos de Efraín: Azarías, hijo de Hohanam, Berequías y Ezequías, hijo de Meshillemoth, Jehizhiah, hijo de Salum y Amasa, hijo de Hadlai, se levantaron contra los que llegaban de la batalla \v 13 y les dijeron: No traigan acá a los cautivos, porque el pecado contra \nd Yavé\nd* caerá sobre nosotros. Ustedes tratan de añadir a nuestros pecados y culpas, pues es muy grande nuestro delito. El ardor de su ira está contra Israel. \p \v 14 Entonces el ejército dejó a los cautivos y el botín delante de los jefes y de toda la congregación. \v 15 Se levantaron unos varones que fueron designados por nombre y tomaron a los cautivos. Con los despojos vistieron a todos los que estaban desnudos entre ellos y los calzaron. Les dieron de comer y beber, y los ungieron. Llevaron a los débiles en asnos y los condujeron a Jericó, la ciudad de las palmeras, cerca de sus hermanos. Y ellos regresaron a Samaria. \p \v 16 En aquel tiempo el rey Acaz envió a pedir ayuda al rey de Asiria, \v 17 porque los edomitas llegaron otra vez, atacaron a Judá y llevaron cautivos. \p \v 18 También los filisteos hicieron una incursión en las ciudades de la Sefela y del Neguev de Judá. Tomaron Bet-semes, Ajalón, Gederot y Socó con sus aldeas, Timná con sus aldeas, y Gimzo con sus aldeas, y se establecieron allí, \v 19 por cuanto \nd Yavé\nd* humilló a Judá a causa de Acaz, rey de Judá, quien promovió el desenfreno en Judá y fue muy infiel a \nd Yavé\nd*. \p \v 20 Tiglat-Pileser, rey de Asiria, fue a él, pero lo redujo en lugar de fortalecerlo. \v 21 Aunque Acaz despojó la Casa de \nd Yavé\nd*, el palacio real y las casas de los jefes para pagar al rey de Asiria, eso no le ayudó. \p \v 22 En el tiempo de su aflicción, el rey Acaz aumentó su infidelidad a \nd Yavé\nd*, \v 23 pues ofreció sacrificios a los \tl ʼelohim\tl* de los damascenos que lo vencieron. Decía: Ya que los \tl ʼelohim\tl* de los reyes de Siria los ayudaron, yo también ofreceré sacrificios a ellos para que me ayuden. Pero éstos fueron su ruina y la de todo Israel. \p \v 24 Además de esto, Acaz recogió los utensilios de la Casa de \nd ʼElohim\nd* y los despedazó. Cerró las puertas de la Casa de \nd Yavé\nd* e hizo altares en cada esquina de Jerusalén. \v 25 Hizo también lugares altos en todas las ciudades de Judá para quemar incienso a otros \tl ʼelohim\tl*. Así provocó la ira de \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \p \v 26 Los demás hechos \add de Acaz\add* y todos sus procedimientos, los primeros y los últimos, ciertamente están escritos en el rollo de los Reyes de Judá y de Israel. \v 27 Acaz reposó con sus antepasados y lo sepultaron en la ciudad de Jerusalén, pero no en los sepulcros de los reyes de Israel. Reinó en su lugar su hijo Ezequías. \c 29 \s1 Reinado de Ezequías en Judá \p \v 1 Ezequías tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó 29 años en Jerusalén. El nombre de su madre fue Abías, hija de Zacarías. \v 2 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd*, según todo lo que hizo su antepasado David. \p \v 3 El primer año de su reinado, el mes primero, él abrió las puertas de la Casa de \nd Yavé\nd* y las reparó. \v 4 Acercó a los sacerdotes y levitas, los reunió en la plaza oriental \v 5 y les dijo: Escúchenme, levitas. Santifíquense, santifiquen la Casa de \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados y quiten la impureza del Santuario. \v 6 Porque nuestros antepasados fueron infieles e hicieron lo malo ante \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd*. Lo abandonaron, voltearon sus caras del Tabernáculo de \nd Yavé\nd* y le dieron la espalda. \v 7 También cerraron las puertas del patio, apagaron las lámparas y no quemaron incienso ni ofrecieron holocaustos en el Santuario al \nd ʼElohim\nd* de Israel. \v 8 Por eso la ira de \nd Yavé\nd* cayó sobre Judá y Jerusalén. Él los convirtió en un objeto de terror, horror y escarnio como lo ven sus propios ojos. \v 9 Ciertamente por esto nuestros antepasados cayeron a espada, y nuestros hijos, hijas y mujeres están cautivos. \p \v 10 Ahora pues, decidí hacer un pacto con \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, para que el ardor de su ira se aparte de nosotros. \v 11 Por tanto, hijos míos, no sean negligentes, porque \nd Yavé\nd* los escogió para que estén ante Él y le sirvan, a fin de que le ministren y le quemen incienso. \p \v 12 Entonces se levantaron los levitas: Mahat, hijo de Amasai, y Joel, hijo de Azarías, de los hijos de Coat; y de los hijos de Merari, Cis, hijo de Abdi, y Azarías, hijo de Jehalelel; y de los gersonitas, Joa, hijo de Zima, y Edén, hijo de Joa; \v 13 y de los hijos de Elizafán, Simri y Jeiel; y de los hijos de Asaf, Zacarías y Matanías; \v 14 y de los hijos de Hemán, Jehiel y Simei; y de los hijos de Jedutún, Semaías y Uziel. \p \v 15 Éstos reunieron a sus hermanos. Se santificaron y entraron para limpiar la Casa de \nd Yavé\nd*, según el mandamiento del rey y según las Palabras de \nd Yavé\nd*. \v 16 Entraron los sacerdotes en la Casa de \nd Yavé\nd* para limpiarla. Sacaron al patio de la Casa toda la impureza que hallaron en el Santuario de \nd Yavé\nd*, y los levitas la tomaron para sacarla al torrente Cedrón. \p \v 17 Comenzaron la limpieza el primero día del mes primero, y el octavo día llegaron al patio de \add la Casa de\add* \nd Yavé\nd*. Continuaron limpiando otros ocho días. Terminaron el día 16 del mes primero. \p \v 18 Entonces fueron al rey Ezequías y le dijeron: Limpiamos toda la Casa de \nd Yavé\nd*, el altar del holocausto, todos sus utensilios, la mesa de la Presentación y todos sus utensilios. \v 19 También preparamos y consagramos todos los utensilios que el rey Acaz desechó durante su reinado a causa de su infidelidad. Ahí están delante del altar de \nd Yavé\nd*. \p \v 20 El rey Ezequías madrugó, reunió a los jefes de la ciudad y subió a la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 21 Llevaron siete becerros, siete carneros, siete corderos y siete machos cabríos como ofrenda por el pecado, a favor del reino, del Santuario y a favor de todo Judá. Mandó a los sacerdotes descendientes de Aarón ofrecerlos sobre el altar de \nd Yavé\nd*. \p \v 22 Degollaron los becerros. Los sacerdotes recogieron la sangre y la rociaron hacia el altar. Hicieron lo mismo con los carneros y los corderos. \v 23 Después acercaron los machos cabríos ante el rey y la congregación para la ofrenda que apacigua. Colocaron sus manos sobre ellos. \v 24 Los sacerdotes los degollaron e hicieron una ofrenda que apacigua con su sangre sobre el altar, para hacer ofrenda que apacigua por todo Israel, porque el rey ordenó que el holocausto y la ofrenda se hicieran a favor de todo Israel. \p \v 25 Colocó a los levitas en la Casa de \nd Yavé\nd* con címbalos, salterios y arpas, según el mandamiento de David, de Gad, vidente del rey, y del profeta Natán, pues ese mandamiento llegó de \nd Yavé\nd* por medio de sus profetas. \v 26 Se pusieron en pie los levitas con los instrumentos de David y los sacerdotes con las trompetas. \p \v 27 Entonces Ezequías ordenó que se ofreciera el holocausto sobre el altar. Cuando comenzó el holocausto, también comenzó el cántico de \nd Yavé\nd*, el sonido de las trompetas y los instrumentos de David, rey de Israel. \v 28 Toda la congregación se postró mientras elevaban cánticos y tocaban las trompetas, todo hasta cuando el holocausto fue consumido. \p \v 29 Cuando se consumió el holocausto, el rey y todos los que estaban con él se inclinaron y se postraron. \v 30 Entonces el rey Ezequías y los jefes ordenaron a los levitas que alabaran a \nd Yavé\nd* con las palabras de David y del vidente Asaf. Ellos elevaron alabanzas con gran júbilo, se inclinaron y se postraron. \p \v 31 Ezequías tomó la palabra: Ahora ustedes se consagraron a \nd Yavé\nd*. Acérquense y ofrezcan sacrificios y ofrendas de acción de gracias en la Casa de \nd Yavé\nd*. Y la congregación ofreció sacrificios y ofrendas de acción de gracias. Todos los generosos de corazón ofrecieron holocaustos. \p \v 32 La congregación llevó 70 becerros, 100 carneros y 200 corderos como holocausto a \nd Yavé\nd*. \v 33 Las ofrendas consagradas fueron 600 becerros y 3.000 ovejas. \v 34 Pero los sacerdotes eran muy pocos y no bastaban para desollar los holocaustos. Sus hermanos levitas les ayudaron hasta terminar la labor, y hasta cuando los demás sacerdotes se santificaron, porque los levitas fueron más rectos de corazón para santificarse que los sacerdotes. \v 35 Hubo holocaustos en abundancia, grasa de las ofrendas de paz y las libaciones para cada holocausto. De esta manera el servicio en la Casa de \nd Yavé\nd* quedó restablecido. \p \v 36 Ezequías se regocijó con todo el pueblo porque \nd ʼElohim\nd* lo preparó, pues la celebración ocurrió de manera tan repentina. \c 30 \s1 Celebración extraordinaria de la Pascua \p \v 1 Ezequías envió \add aviso\add* por todo Israel y Judá, y también escribió cartas a Efraín y a Manasés para que fueran a Jerusalén, a la Casa de \nd Yavé\nd* a celebrar la Pascua de \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel. \v 2 El rey tomó consejo con sus jefes y toda la congregación en Jerusalén para celebrar la Pascua el mes segundo, \v 3 porque no la pudieron celebrar a su debido tiempo, pues no había suficientes sacerdotes santificados, ni el pueblo pudo reunirse en Jerusalén. \v 4 Esto les pareció bien al rey y a la congregación. \p \v 5 Resolvieron hacer una proclama por todo Israel, desde Beerseba hasta Dan, para que fueran a celebrar en Jerusalén la Pascua de \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de Israel, porque en mucho tiempo no la habían celebrado como estaba escrito. \p \v 6 Los mensajeros recorrieron todo Israel y Judá. Llevaban las cartas del rey y sus magistrados. Proclamaron como mandó el rey: Hijos de Israel, regresen a \nd Yavé\nd*, al \nd ʼElohim\nd* de Abraham, Isaac e Israel. Y Él se volverá al remanente que quedó de la mano de los reyes de Asiria. \p \v 7 No sean como sus antepasados y como sus hermanos que fueron infieles a \nd Yavé ʼElohim\nd* de sus antepasados, Quien los entregó a desolación, como ustedes ven. \p \v 8 Ahora pues, no sean indómitos como sus antepasados. Sométanse a \nd Yavé\nd* y vengan a su Santuario que Él santificó para siempre. Sirvan a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, y el ardor de su ira se apartará de ustedes. \p \v 9 Porque si regresan a \nd Yavé\nd*, sus hermanos e hijos hallarán misericordia ante sus captores y regresarán a esta tierra. \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* es clemente y misericordioso. Si regresan a Él, no apartará de ustedes su Presencia. \p \v 10 Los mensajeros pasaron de ciudad en ciudad por la tierra de Efraín y Manasés, hasta la región de Zabulón, pero se reían y se burlaban de ellos. \v 11 Sin embargo, algunos hombres de Aser, Manasés y Zabulón se humillaron y fueron a Jerusalén. \v 12 La mano de \nd ʼElohim\nd* también estuvo en Judá para darles un corazón dispuesto a cumplir el mensaje del rey y los magistrados, según la Palabra de \nd Yavé\nd*. \p \v 13 Una congregación muy grande se reunió en Jerusalén para celebrar la fiesta solemne de los Panes sin Levadura el mes segundo. \v 14 Se levantaron y quitaron los altares que había en Jerusalén. Quitaron también todos los altares donde se quemaba incienso y los echaron al torrente Cedrón. \p \v 15 Sacrificaron la pascua el 14 del mes segundo. Los sacerdotes y los levitas que aún estaban impuros, se avergonzaron y se santificaron. Llevaron holocaustos a la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 16 Ocuparon su lugar en los turnos de costumbre, según la Ley de Moisés, esclavo de \nd ʼElohim\nd*. \p Los sacerdotes rociaban la sangre que recibían de manos de los levitas, \v 17 porque había muchos no santificados en la congregación. Por eso los levitas degollaban el cordero pascual por los que estaban impuros, a fin de santificarlos para \nd Yavé\nd*. \p \v 18 Sin embargo había en la congregación muchos de Efraín, Manasés, Isacar y Zabulón que no se purificaron. No obstante comieron la pascua sin guardar lo prescrito. \p \v 19 Pero Ezequías oró por ellos: \nd Yavé\nd*, Quien es bueno, haga sacrificio que apacigua por todo aquel que dispuso su corazón para buscar a \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados, aunque no lo haga según la norma de purificación del Santuario. \v 20 \nd Yavé\nd* escuchó a Ezequías y sanó al pueblo. \p \v 21 Los hijos de Israel que estaban presentes en Jerusalén celebraron la solemnidad de los Panes sin Levadura con gran alegría durante siete días. Los levitas y los sacerdotes alababan a \nd Yavé\nd* día tras día y cantaban a \nd Yavé\nd* con instrumentos resonantes. \p \v 22 Ezequías habló al corazón de todos los levitas que mostraron tener buen entendimiento en el servicio de \nd Yavé\nd*. Comieron de lo sacrificado en la fiesta solemne durante siete días, ofrecieron sacrificios de paz y dieron gracias a \nd Yavé\nd* el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \p \v 23 Toda la congregación decidió que se celebrara otros siete días. La celebraron otros siete días con gran júbilo \v 24 porque Ezequías, rey de Judá, ofreció a la congregación 1.000 becerros y 7.000 ovejas. Los jefes ofrecieron a la congregación 1.000 becerros y 10.000 ovejas. Gran número de sacerdotes ya se habían santificado. \p \v 25 Toda la congregación de Judá se regocijó, y también los sacerdotes, los levitas, y toda la gente que llegó de Israel, tanto los peregrinos procedentes de la tierra de Israel como los residentes de Judá. \v 26 Hubo gran alegría en Jerusalén, pues desde los días de Salomón, hijo de David, rey de Israel, no hubo algo semejante en Jerusalén. \p \v 27 Después los sacerdotes y los levitas se levantaron y bendijeron al pueblo. Fue escuchada su voz. Su oración llegó hasta la morada de su Santuario en el cielo. \c 31 \s1 Reorganización del servicio levítico \p \v 1 Cuando hicieron todas estas cosas, todos los de Israel que estaban presentes salieron por las ciudades de Judá y quebraron las piedras sagradas. Talaron las Aseras y destruyeron los lugares altos y los altares hasta acabarlos en todo Judá y Benjamín, Efraín y Manasés. Después todos los hijos de Israel regresaron a sus ciudades, cada uno a su posesión. \p \v 2 Ezequías instituyó la función de los sacerdotes y levitas según sus divisiones, cada una según el servicio de cada grupo, para los holocaustos y las ofrendas de paz a fin de que ministraran, dieran gracias y alabaran en las puertas del campamento de \nd Yavé\nd*. \v 3 También señaló la contribución del rey de su propia hacienda para los holocaustos de la mañana y cuando llega la noche, los sábados, las lunas nuevas y los tiempos señalados, según lo escrito en la Ley de \nd Yavé\nd*. \v 4 Mandó también a la gente de Jerusalén que diera la porción correspondiente a los sacerdotes y levitas a fin de que se dedicaran a la Ley de \nd Yavé\nd*. \p \v 5 Cuando se divulgó la orden, los hijos de Israel dieron muchas primicias de grano, mosto, aceite y miel, y de todo fruto del campo. Llevaron el diezmo de todo en abundancia. \v 6 Los hijos de Israel y de Judá que vivían en las ciudades de Judá llevaron los diezmos de becerros y ovejas. También \add llevaron\add* el diezmo de las cosas santas consagradas a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* y lo apilaron en montones. \p \v 7 El mes tercero comenzaron a hacer aquellos montones y los terminaron el mes séptimo. \v 8 Cuando Ezequías y los jefes fueron a ver los montones bendijeron a \nd Yavé\nd* y a su pueblo Israel. \p \v 9 Entonces Ezequías preguntó a los sacerdotes y a los levitas acerca de los montones. \v 10 El sumo sacerdote Azarías, de la casa de Sadoc, le respondió: Desde cuando comenzaron a traer las ofrendas a la Casa de \nd Yavé\nd*, comimos, nos saciamos y sobró mucho, porque \nd Yavé\nd* bendijo a su pueblo. Sobró esta gran cantidad. \p \v 11 Ezequías mandó que prepararan cámaras en la Casa de \nd Yavé\nd*, y fueron preparadas. \v 12 Llevaban fielmente las ofrendas, los diezmos y las cosas consagradas. \p Encargaron al levita Conanías como jefe de esto, y como segundo, a su hermano Simei. \v 13 Jeiel, Azazías, Nahat, Asael, Jerimot, Jozabad, Eliel, Ismaquías, Mahat, y Benaía eran supervisores bajo la dirección de Conanías y su hermano Simei, por orden del rey Ezequías y Azarías, jefe de la Casa de \nd ʼElohim\nd*. \p \v 14 El levita Coré, hijo de Imna, portero de la puerta oriental, tenía a su cargo las ofrendas voluntarias para \nd ʼElohim\nd*, y la distribución de las ofrendas dedicadas a \nd Yavé\nd* y las cosas santísimas. \v 15 Edén, Miniamín, Jesúa, Semaías, Amarías y Secanías estaban a su servicio en las ciudades de los sacerdotes para repartir fielmente a sus hermanos, según lo que les correspondía, tanto al grande como al pequeño. \p \v 16 Además estaban los varones anotados por su genealogía masculina, de tres años arriba, y de todo el que entraba a la Casa de \nd Yavé\nd* a realizar su tarea diaria en su ministerio según sus oficios y clases. \p \v 17 También estaban los que eran contados entre los sacerdotes según sus casas paternas, y a los levitas de 20 años arriba según su oficio y por sus clases. \v 18 Ellos fueron contados con todos sus pequeños, sus esposas, sus hijos y sus hijas, toda la multitud, porque se consagraban fielmente en santidad. \p \v 19 También para los sacerdotes hijos de Aarón, los cuales vivían en los campos alrededor de sus ciudades, los varones designados tenían el encargo de darles sus porciones a todos los hombres de los sacerdotes, y a todos los que eran de las familias de los levitas. \p \v 20 Ezequías hizo de esta manera en todo Judá y obró lo bueno, recto y verdadero ante \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. \v 21 Buscó a su \nd ʼElohim\nd* con todo su corazón en lo que emprendió en el servicio de la Casa de \nd ʼElohim\nd*, según la Ley y los Mandamientos. Fue prosperado. \c 32 \s1 Invasión de Senaquerib \p \v 1 Después de estas cosas y de esta fidelidad, Senaquerib, rey de Asiria, llegó e invadió Judá. Sitió las ciudades fortificadas y se propuso dominarlas. \v 2 Al ver Ezequías que Senaquerib llegó con intención de combatir contra Jerusalén, \v 3 resolvió con sus jefes y sus valientes cegar los manantiales que estaban fuera de la ciudad, y ellos lo apoyaron. \v 4 Mucho pueblo se juntó y cegaron todos los manantiales, y también el arroyo que fluía a través del territorio, pues dijeron: ¿Por qué los reyes de Asiria deben hallar agua cuando vengan? \p \v 5 Ezequías se animó, reconstruyó todo el muro que estaba derribado y levantó torres sobre él. Levantó otro muro por fuera, fortificó el terraplén de la Ciudad de David e hizo muchas espadas y escudos. \p \v 6 Designó jefes sobre el pueblo. Los reunió ante él en la plaza de la puerta de la ciudad y les habló al corazón: \v 7 ¡Esfuércense y sean valientes! No teman ni desmayen a causa del rey de Asiria y de la multitud que está con él, porque más son los que están con nosotros que los que están con él. \v 8 Con él está un brazo de carne, pero con nosotros está \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd* para ayudarnos y pelear nuestras batallas. Y el pueblo tuvo confianza en las palabras de Ezequías, rey de Judá. \p \v 9 Después de esto, Senaquerib, rey de Asiria, quien había sitiado Laquis con todas sus fuerzas, envió a sus esclavos a Jerusalén, a Ezequías, rey de Judá, y a todos los de Judá que estaban en Jerusalén, y dijeron: \p \v 10 Senaquerib, rey de Asiria, dice: ¿En qué confían ustedes quienes se quedan sitiados en Jerusalén? \v 11 ¿No los engaña Ezequías para entregarlos a morir de hambre y de sed, al decir: \nd Yavé\nd* nuestro \nd ʼElohim\nd* nos librará de mano del rey de Asiria? \v 12 ¿No es este Ezequías el mismo que quitó sus lugares altos y sus altares, y ordenó a Judá y a Jerusalén: Ante este único altar se postrarán, y sobre él quemarán incienso? \v 13 ¿No saben lo que yo y mis antepasados hicimos a todos los pueblos de la tierra? ¿Pudieron los \tl ʼelohim\tl* de naciones librar su tierra de mi mano? \v 14 ¿Cuál de todos los \tl ʼelohim\tl* de las naciones que mis antepasados destruyeron completamente, pudo librar a su pueblo de mi mano, para que su \nd ʼElohim\nd* pueda librarlos a ustedes de mi mano? \p \v 15 Ahora pues, no los engañe Ezequías ni los persuada de esta manera, ni le crean porque ningún \tl ʼelohim\tl* de todas aquellas naciones o reinos pudo librar a su pueblo de mi mano, ni de la mano de mis antepasados. ¡Cuánto menos su \nd ʼElohim\nd* podrá librarlos de mi mano! \p \v 16 Sus esclavos hablaron muchas otras cosas contra \nd Yavé ʼElohim\nd* y su esclavo Ezequías. \v 17 También escribió cartas en las cuales blasfemaba contra \nd Yavé, ʼElohim\nd* de Israel, y hablaba contra Él de este modo: Así como los \tl ʼelohim\tl* de otras naciones no libraron a sus pueblos de mi mano, tampoco el \nd ʼElohim\nd* de Ezequías librará a su pueblo de mi mano. \v 18 Clamaban a gran voz en la lengua de Judá al pueblo de Jerusalén que estaba en el muro, para intimidarlos y aterrorizarlos a fin de tomar la ciudad. \v 19 Hablaron del \nd ʼElohim\nd* de Jerusalén como de los que son \tl ʼelohim\tl* de los pueblos de la tierra, obra de manos de hombres. \p \v 20 Pero el rey Ezequías y el profeta Isaías, hijo de Amoz, oraron acerca de esto y clamaron al cielo. \v 21 \nd Yavé\nd* envió un ángel, el cual hirió a todos los guerreros esforzados, oficiales y jefes en el campamento del rey de Asiria, quien regresó a su tierra avergonzado. Cuando entraba en el templo de su \tl ʼelohim\tl*, algunos de sus propios hijos lo mataron allí a espada. \p \v 22 De este modo \nd Yavé\nd* salvó a Ezequías y a los habitantes de Jerusalén de la mano de Senaquerib, rey de Asiria, y de la mano de todos. Los guió por todos lados. \v 23 Muchos llevaron ofrendas para \nd Yavé\nd* a Jerusalén y magníficos presentes para Ezequías, rey de Judá. A partir de ese tiempo su nombre fue exaltado ante todas las naciones. \p \v 24 En aquellos días Ezequías enfermó de muerte, pero oró a \nd Yavé\nd*. Él le respondió y le dio una señal. \v 25 Pero Ezequías no correspondió al bien que recibió. Más bien su corazón se enalteció, y la ira \add de \add*\nd Yavé\nd* llegó sobre él, sobre Judá y Jerusalén. \v 26 Sin embargo Ezequías se humilló junto con los habitantes de Jerusalén, de modo que la ira de \nd Yavé\nd* no recayó sobre ellos en los días de Ezequías. \p \v 27 Ezequías tuvo muchas riquezas y esplendor. Acumuló grandes tesoros de plata, oro, piedras preciosas, perfumes, escudos y toda clase de joyas deseables. \v 28 Hizo almacenes para el grano, el mosto y el aceite, establos para toda clase de bestias y apriscos para los rebaños. \v 29 También adquirió ciudades, pues tenía numerosos rebaños de ovejas y hatos de ganado vacuno en abundancia, porque \nd ʼElohim\nd* le dio muchas riquezas. \p \v 30 El mismo Ezequías cegó la salida superior de las aguas del Gihón y las dirigió hacia el occidente de la Ciudad de David. Y Ezequías prosperó en todo lo que hizo. \v 31 Sin embargo, en el asunto de los embajadores de los gobernantes de Babilonia que fueron enviados a él para investigar el prodigio que aconteció en el país, \nd ʼElohim\nd* lo dejó para probarlo, a fin de conocer todo lo que había en su corazón. \p \v 32 Los demás hechos de Ezequías y sus obras piadosas ciertamente están escritos en la visión del profeta Isaías, hijo de Amoz, en el rollo de los Reyes de Judá y de Israel. \v 33 Ezequías reposó con sus antepasados, y lo sepultaron en el sector superior de los sepulcros de los descendientes de David. Todo Judá y los habitantes de Jerusalén le rindieron honores en su muerte. Su hijo Manasés reinó en su lugar. \c 33 \s1 Reinados de Manasés en Judá \p \v 1 Manasés tenía 12 años cuando comenzó a reinar, y reinó 55 años en Jerusalén. \v 2 Hizo lo malo ante los ojos de \nd Yavé\nd*, en conformidad con las repugnancias de las naciones que \nd Yavé\nd* expulsó de delante de los hijos de Israel. \v 3 Pues él reedificó los lugares altos que su padre Ezequías destruyó, levantó altares a los baales, hizo Aseras, se postró ante toda la hueste del cielo y les sirvió. \v 4 Edificó altares en la Casa de \nd Yavé\nd*, de la cual \nd Yavé\nd* dijo: \wj En Jerusalén permanecerá mi Nombre para siempre. \wj* \v 5 También edificó altares a toda la hueste del cielo en los dos patios de la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 6 Ordenó pasar a sus hijos por el fuego en el valle del hijo de Hinom. Practicó la magia, la brujería y la hechicería, evocó a espíritus de muertos y practicó el espiritismo. Abundó en hacer lo malo ante \nd Yavé\nd* y lo provocó a ira. \p \v 7 Además puso la imagen tallada del ídolo que hizo en la Casa de \nd ʼElohim\nd*, de la cual \nd ʼElohim\nd* dijo a David y su hijo Salomón: \wj En esta Casa y en Jerusalén, la cual Yo escogí entre todas las tribus de Israel, estará mi Nombre para siempre. \wj* \v 8 \wj No volveré a quitar el pie de Israel de la tierra que di a sus antepasados, con tal que se cuiden de practicar todo lo que les ordené por medio de Moisés con respecto a toda la Ley, los Estatutos y las Ordenanzas.\wj* \p \v 9 Pero Manasés indujo a Judá y a los habitantes de Jerusalén a proceder peor que las naciones que \nd Yavé\nd* destruyó ante los hijos de Israel. \p \v 10 \nd Yavé\nd* habló a Manasés y a su pueblo, pero ellos no escucharon. \v 11 Por tanto, \nd Yavé\nd* llevó contra ellos a los jefes del ejército del rey de Asiria, quienes encadenaron con grillos de bronce a Manasés y lo llevaron a Babilonia. \v 12 Cuando estaba en angustia, oró a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* y se humilló grandemente ante el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \v 13 Cuando \add Manasés\add* oró, Él fue movido por la súplica, escuchó su clamor y lo devolvió a Jerusalén, a su reino. Y Manasés reconoció que solo \nd Yavé\nd* es \nd ʼElohim\nd*. \p \v 14 Después de esto, construyó el muro exterior de la Ciudad de David, en el valle al occidente de Gihón, y hasta la entrada de la puerta de los Peces, alrededor de Ofel. Elevó el muro a gran altura y colocó jefes del ejército en todas las ciudades fortificadas de Judá. \p \v 15 Quitó los \tl ʼelohim\tl* extraños, el ídolo de la Casa de \nd Yavé\nd* y todos los altares que construyó en la Montaña de la Casa de \nd Yavé\nd* y en Jerusalén. Los echó fuera de la ciudad. \v 16 Después reconstruyó el altar de \nd Yavé\nd* y ofreció en él sacrificios de paz y de gratitud. Ordenó a Judá que sirviera a \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de Israel. \v 17 Sin embargo, el pueblo siguió ofreciendo sacrificios en los lugares altos, aunque solo a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. \p \v 18 Los demás hechos de Manasés, sus súplicas a su \nd ʼElohim\nd* y las Palabras de los videntes que le hablaron en Nombre de \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel, ciertamente están escritos en las crónicas de los Reyes de Israel. \v 19 Su oración y cómo fue atendido, todo su pecado, su infidelidad y los sitios donde edificó lugares altos y erigió Aseras y otras imágenes talladas antes de humillarse, ciertamente están escritos en las crónicas de los videntes. \v 20 Manasés descansó con sus antepasados y lo sepultaron en su propia casa. Su hijo Amón reinó en su lugar. \s1 Reinado de Amón en Judá \p \v 21 Amón tenía 22 años cuando comenzó a reinar, y reinó dos años en Jerusalén. \v 22 Practicó lo malo ante \nd Yavé\nd*, como su padre Manasés, pues Amón ofreció sacrificios a todos los ídolos de talla que su padre Manasés estableció, y les sirvió. \v 23 Pero no se humilló delante de \nd Yavé\nd* como se humilló su padre Manasés, sino Amón aumentó su culpa. \p \v 24 Sus esclavos conspiraron contra él y lo asesinaron en su propia casa. \v 25 Pero el pueblo de la tierra mató a todos los que conspiraron contra el rey Amón y proclamó a su hijo Josías como rey. \c 34 \s1 Reinado de Josías en Judá \p \v 1 Josías tenía ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó 31 años en Jerusalén. \v 2 Hizo lo recto ante \nd Yavé\nd* y anduvo en los caminos de David su antepasado, sin apartarse ni a la derecha ni a la izquierda. \p \v 3 El año octavo de su reinado, cuando era todavía muchacho, comenzó a buscar al \nd ʼElohim\nd* de David su antepasado. El año 12 empezó a purificar a Judá y Jerusalén de los lugares altos, las Aseras, los ídolos de talla y las imágenes de fundición. \v 4 Demolieron en su presencia los altares de los baales y destrozó las imágenes del sol que había en ellos. Quebró las Aseras, los ídolos de talla y las imágenes de fundición. Las redujo a polvo, el cual esparció sobre los sepulcros de los que ofrecieron sacrificios a ellas. \v 5 Además quemó los huesos de los sacerdotes sobre sus altares y purificó así a Judá y a Jerusalén. \v 6 En las ciudades de Manasés, Efraín, Simeón y Neftalí y sus alrededores, \v 7 destruyó los altares, destrozó las Aseras y los ídolos de talla y los redujo a polvo. Taló todos las imágenes del sol por toda la tierra de Israel y regresó a Jerusalén. \p \v 8 El año 18 de su reinado, después que limpió la tierra y la Casa, envió a Safán, hijo de Azalía, a Maasías, gobernador de la ciudad, y a Joa, hijo de Joacaz, cronista, que repararan la Casa de \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. \p \v 9 Fueron al sumo sacerdote Hilcías y le dieron el dinero recaudado en la Casa de \nd Yavé\nd* que los levitas porteros de la entrada recibieron de mano de los de Manasés, Efraín, todo el resto de Israel, todo Judá y Benjamín y los habitantes de Jerusalén. \v 10 Lo entregaron en manos de los que hacían la obra, los encargados de la Casa de \nd Yavé\nd*, quienes lo daban a los obreros que trabajaban en la Casa de \nd Yavé\nd* para reparar y restaurar la Casa. \v 11 También daban a los ebanistas y los constructores para que compraran piedra de cantería y madera, para las armazones y las vigas de los edificios destruidos por los reyes de Judá. \p \v 12 Estos hombres procedían con fidelidad en la obra. Fueron designados para dirigirlos Jahat y Abdías, levitas de los hijos de Merari, y Zacarías y Mesulam, de los hijos de los coatitas, y todos los levitas expertos en instrumentos musicales. \v 13 Supervisaban también a los cargadores y dirigían a todos los que hacían la obra en cualquier aspecto. De los levitas había escribas, funcionarios y porteros. \p \v 14 Al sacar el dinero que era llevado a la Casa de \nd Yavé\nd*, el sacerdote Hilcías halló el Rollo de la Ley de \nd Yavé\nd* dada por medio de Moisés. \v 15 Hilcías habló al escriba Safán: ¡Hallé el Rollo de la Ley de \nd Yavé\nd* dada por medio de Moisés! \p \v 16 Safán llevó el Rollo al rey y le informó: Tus esclavos hicieron todo lo que les fue encomendado. \v 17 Sacaron el dinero que se halló en la Casa de \nd Yavé\nd* y lo entregaron en mano de los encargados y los que hacían la obra. \v 18 El escriba Safán informó también al rey: El sacerdote Hilcías me entregó un rollo. Y Safán leyó en él delante del rey. \p \v 19 Aconteció que cuando el rey escuchó las Palabras de la Ley, rasgó sus ropas. \v 20 El rey ordenó a Hilcías, a Ahicam, hijo de Safán, a Abdón, hijo de Micaía, al escriba Safán y a Asaías, esclavo del rey: \v 21 Vayan y consulten a \nd Yavé\nd* por mí y el remanente de Israel y Judá, acerca de las Palabras del rollo que fue hallado. Porque grande es la ira de \nd Yavé\nd* que fue derramada sobre nosotros, porque nuestros antepasados no guardaron la Palabra de \nd Yavé\nd* para vivir según todo lo escrito en este rollo. \p \v 22 Entonces Hilcías y los del rey fueron a la profetisa Hulda, esposa de Salum, hijo de Ticva, hijo de Hasrá, guardián del vestuario, quien vivía en el segundo sector de Jerusalén, y hablaron de esto con ella. \v 23 Ella les respondió: \nd Yavé ʼElohim\nd* de Israel dice: \wj Digan al varón que los envió a mí: \wj* \v 24 \wj \+nd Yavé\+nd* dice: Ciertamente Yo traigo el mal sobre este lugar y sus habitantes, todas las maldiciones escritas en el rollo que fue leído ante el rey de Judá,\wj* \v 25 \wj por cuanto me abandonaron y quemaron incienso a otros \+tl ʼelohim\+tl*, para provocarme a ira con todas las obras de sus manos. Por eso mi ira se derramará contra este lugar, y no será extinguida.\wj* \v 26 \wj Pero al rey de Judá, quien los envió a consultar a \+nd Yavé\+nd*, le dirán: \+nd Yavé ʼElohim\+nd* de Israel dice esto con respecto a las Palabras que escuchaste: \wj* \v 27 \wj Yo ciertamente te escuché por cuanto tu corazón se conmovió, te humillaste ante \+nd ʼElohim\+nd* al escuchar sus Palabras contra este lugar y sus habitantes. Te humillaste ante Mí, rasgaste tus ropas y lloraste ante Mí, dice \+nd Yavé\+nd*.\wj* \v 28 \wj Ciertamente te reuniré con tus antepasados y serás recogido en tu sepulcro en paz. Tus ojos no verán el mal que Yo traeré contra este lugar y sus habitantes.\wj* \p Y ellos dieron la respuesta al rey. \p \v 29 Entonces el rey ordenó que se reunieran todos los ancianos de Judá y Jerusalén. \v 30 El rey subió a la Casa de \nd Yavé\nd* con todos los hombres de Judá, los habitantes de Jerusalén, los sacerdotes, los levitas y todo el pueblo, desde el más grande hasta el más pequeño. Leyó a oídos de ellos todas las Palabras del rollo del Pacto que fue hallado en la Casa de \nd Yavé\nd*. \v 31 El rey se puso en pie en su sitio e hizo un pacto ante \nd Yavé\nd* para andar tras \nd Yavé\nd* y guardar sus Mandamientos, Testimonios y Estatutos con todo su corazón y toda su alma, y practicar las Palabras del Pacto escritas en el rollo. \p \v 32 Promovió que se comprometieran todos los que estaban en Jerusalén y Benjamín y que los habitantes de Jerusalén hicieran según el Pacto de \nd ʼElohim\nd*, del \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \p \v 33 Josías quitó todas las repugnancias de todas las tierras que pertenecían a los hijos de Israel y buscó que todos los que se hallaban en Israel sirvieran a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. En todo el tiempo que vivió Josías no se apartaron de seguir a \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados. \c 35 \s1 Celebración extraordinaria de la Pascua \p \v 1 Josías celebró la Pascua de \nd Yavé\nd* en Jerusalén. El 14 del mes primero degollaron el cordero pascual. \v 2 Restableció a los sacerdotes según sus funciones. Los animó a dedicarse al servicio de la Casa de \nd Yavé\nd*. \p \v 3 Y dijo a los levitas que enseñaban en todo Israel, los que estaban santificados para \nd Yavé\nd*: Pongan el Arca del Santuario en la Casa que edificó Salomón, hijo de David, rey de Israel. Ya no la cargarán en hombros. Sirvan a \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* y a su pueblo Israel. \v 4 Prepárense según el orden de sus casas paternas y sus clases, según lo escrito por David, rey de Israel, y su hijo Salomón. \p \v 5 Ocupen su lugar en el Santuario en conformidad con las divisiones de las casas paternas de sus hermanos, los hijos del pueblo, y haya una sección de los levitas por cada casa paterna del pueblo. \v 6 Cuando estén santificados, degüellen el cordero pascual y hagan los preparativos para sus hermanos según la Palabra de \nd Yavé\nd* dada por medio de Moisés. \p \v 7 El rey Josías ofreció a los hijos del pueblo todo para las ofrendas pascuales: 30.000 ovejas, corderos, cabritos y 3.000 becerros, los cuales eran de la hacienda del rey. \p \v 8 También sus jefes dieron ofrendas voluntarias al pueblo, a los sacerdotes y a los levitas. Hilcías, Zacarías y Jehiel, administradores de la Casa de \nd ʼElohim\nd*, dieron 2.600 corderos y 300 becerros a los sacerdotes para celebrar la Pascua. \v 9 Asimismo Conanías y sus hermanos Semaías y Natanael, Hasabías, Jeiel y Josabad, jefes de los levitas, ofrecieron a los levitas 5.000 corderos y 500 becerros para los sacrificios pascuales. \p \v 10 De este modo fue preparado el servicio. Los sacerdotes y los levitas se colocaron en su puesto según sus turnos, según el mandato del rey. \v 11 Degollaron la pascua, y los sacerdotes rociaban la sangre que recibían de mano de los levitas, mientras los levitas los desollaban. \v 12 Luego quitaban los holocaustos para distribuirlos según las casas paternas, para que ellos los ofrecieran a \nd Yavé\nd*, como está escrito en el rollo de Moisés. También hacían así con los becerros. \v 13 Asaron la pascua al fuego según la ordenanza. Cocieron las ofrendas santas en ollas, calderos y sartenes, y las repartieron rápidamente a todo el pueblo. \v 14 Después prepararon para ellos mismos y para los sacerdotes, porque los sacerdotes hijos de Aarón ofrecían los holocaustos y las grasas hasta llegar la noche. Por tanto, los levitas tuvieron que preparar para ellos mismos y para los sacerdotes, hijos de Aarón. \p \v 15 Los cantores, hijos de Asaf, estaban en sus puestos según el mandato de David, Asaf, Hemán y Jedutún, vidente del rey, mientras los porteros cuidaban todas las puertas. No era necesario que se apartaran del servicio, porque sus hermanos levitas hicieron los preparativos para ellos. \p \v 16 Así quedó preparado todo el servicio de \nd Yavé\nd* en aquel día para celebrar la Pascua y ofrecer holocaustos sobre el altar de \nd Yavé\nd*, según el mandato del rey Josías. \v 17 En aquel tiempo los hijos de Israel que estaban presentes celebraron la Pascua, y la solemnidad de los Panes sin Levadura durante siete días. \p \v 18 No se observó una Pascua como ésa en Israel desde los días del profeta Samuel. Ninguno de los reyes de Israel celebró una Pascua como la que Josías celebró con los sacerdotes, los levitas y todos los de Judá e Israel que estaban presentes junto con los habitantes de Jerusalén. \v 19 Esta Pascua se celebró el año 18 del reinado de Josías. \p \v 20 Después de todas estas cosas, cuando Josías reparó la Casa, Necao, rey de Egipto, subió a combatir en Carquemis, junto al Éufrates. Josías salió contra él. \v 21 Entonces \add el rey Necao\add* le envió mensajeros que dijeron: ¿Qué tengo que ver contigo, oh rey de Judá? No vengo contra ti hoy, sino contra la casa con la cual estoy en guerra, y \nd ʼElohim\nd* me dijo que me apresure. Deja de oponerte a \nd ʼElohim\nd*, Quien está conmigo, para que Él no te destruya. \p \v 22 Pero Josías no se retiró, sino se disfrazó para luchar contra él, sin atender las palabras de Necao, que eran de la boca de \nd ʼElohim\nd*, y fue a combatir en el valle de Meguido. \p \v 23 Los arqueros atacaron al rey Josías. Él les dijo a sus esclavos: ¡Sáquenme de aquí porque estoy gravemente herido! \v 24 Entonces sus esclavos lo sacaron de aquel carruaje y lo pusieron en el otro carruaje que tenía. Lo llevaron a Jerusalén, donde murió. Y fue sepultado en los sepulcros de sus antepasados. Todo Judá y Jerusalén hizo duelo por Josías. \p \v 25 Jeremías levantó una endecha sobre Josías. Todos los cantores y cantoras aluden a Josías en sus cánticos de lamentación hasta hoy. Lo establecieron como costumbre en Israel, y ciertamente están escritas en los Lamentos. \p \v 26 Los demás hechos de Josías, sus obras piadosas según lo escrito en la Ley de \nd Yavé\nd*, \v 27 y sus hechos, primeros y últimos, ciertamente están escritos en el rollo de los Reyes de Israel y Judá. \c 36 \s1 Reinado de Joacaz en Judá \p \v 1 El pueblo de la tierra tomó a Joacaz, hijo de Josías, y lo proclamó rey en Jerusalén en lugar de su padre. \v 2 Joacaz tenía 23 años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses en Jerusalén. \v 3 El rey de Egipto lo destituyó en Jerusalén, e impuso al país un tributo de 3,3 toneladas de plata y 33 kilogramos de oro. \s1 Reinado de Joacim en Judá \p \v 4 Después el rey de Egipto proclamó a Eliaquim, hermano de Joacaz, como rey de Judá y Jerusalén, y cambió su nombre por Joacim. Y \add el rey\add* Necao tomó a su hermano Joacaz y lo llevó a Egipto. \s1 Reinado de Joacim en Judá \p \v 5 Joacim tenía 25 años cuando comenzó a reinar, y reinó 11 años en Jerusalén. Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*. \v 6 Nabucodonosor, rey de Babilonia, subió contra él. Lo ató con grillos de bronce y lo llevó a Babilonia. \v 7 Además, Nabucodonosor llevó a Babilonia parte de los utensilios de la Casa de \nd Yavé\nd* y los depositó en su templo en Babilonia. \p \v 8 Los demás hechos de Joacim, las repugnancias que cometió y lo que fue hallado contra él, ciertamente están escritos en el rollo de los reyes de Israel y de Judá. Su hijo Joaquín reinó en su lugar. \s1 Reinado de Joaquín en Judá \p \v 9 Joaquín tenía ocho años cuando comenzó a reinar, y reinó tres meses y diez días en Jerusalén. Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd*. \v 10 Después del año el rey Nabucodonosor lo detuvo y lo llevó a Babilonia juntamente con los utensilios preciosos de la Casa de \nd Yavé\nd*. Proclamó a su hermano Sedequías como rey de Judá y Jerusalén. \s1 Reinado de Sedequías en Judá \p \v 11 Sedequías tenía 21 años cuando comenzó a reinar, y reinó 11 años en Jerusalén. \v 12 Hizo lo malo ante \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd*, y no se humilló delante del profeta Jeremías, quien le hablaba de parte de \nd Yavé\nd*. También se rebeló contra el rey Nabucodonosor, ante el cual juró por \nd ʼElohim\nd*. \v 13 Se volvió indómito y obstinó su corazón para no regresar a \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de Israel. \v 14 También todos los jefes de los sacerdotes y el pueblo aumentaron la infidelidad al actuar según las repugnancias de las naciones y profanar la Casa de \nd Yavé\nd* que Él santificó en Jerusalén. \p \v 15 \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* de sus antepasados, les envió sus mensajeros, porque Él se compadecía de su pueblo y de su vivienda. \v 16 Pero ellos se burlaron de los mensajeros de \nd ʼElohim\nd* y despreciaron la Palabra de Él. Se burlaban de sus profetas hasta que la ira de \nd Yavé\nd* se encendió contra su pueblo y no hubo remedio. \v 17 Entonces el rey de los caldeos subió contra ellos y mató a espada a sus jóvenes en la Casa de su Santuario. No tuvo compasión del joven, la doncella, el anciano ni el débil. A todos los entregó en su mano. \v 18 Llevó a Babilonia todos los utensilios de la Casa de \nd ʼElohim\nd*, grandes y pequeños, y los tesoros de la Casa de \nd Yavé\nd* y los del rey y de sus jefes. \v 19 Quemaron la Casa de \nd ʼElohim\nd* y destruyeron el muro de Jerusalén. Incendiaron todos los edificios fortificados y destruyeron todos los objetos valiosos que había en ella. \p \v 20 A los que escaparon de la espada los llevó cautivos a Babilonia, y fueron esclavos de él y sus hijos hasta cuando se impuso el reino de Persia, \v 21 para que se cumpliera la Palabra de \nd Yavé\nd* por boca de Jeremías, hasta cuando la tierra disfrutó sus sábados. Guardó sábado todo el tiempo de la desolación hasta cumplirse 70 años. \p \v 22 En el primer año de Ciro, rey de Persia, para que se cumpliera la Palabra de \nd Yavé\nd* pronunciada por boca de Jeremías, \nd Yavé\nd* despertó el espíritu de Ciro, rey de Persia, quien hizo pregonar por escrito en todo su reino: \p \v 23 Ciro, rey de Persia, dice: \nd Yavé\nd*, el \nd ʼElohim\nd* del cielo, me dio todos los reinos de la tierra y me designó para que le construya una Casa en Jerusalén, que está en Judá. El que de ustedes sea de su pueblo, que \nd Yavé\nd* su \nd ʼElohim\nd* sea con él, y suba.